EXPOSISIÓN DEL PRESIDENTE DE LA NACIÓN, MAURICIO MACRI, EN EL 51ª CUMBRE DEL MERCOSUR Y PAÍSES ASOCIADOS
Quiero felicitarlo, Michel, por la gran labor y el gran trabajo hecho durante su presidencia pro tempore.
Una vez más deseo reafirmar el compromiso absoluto de la Argentina (salto de audio). En este año -como relató el canciller brasileño- hemos hecho grandes esfuerzos para profundizar y dar pasos concretos en nuestros proyectos de integración, coordinando el trabajo de las presidencias de Argentina y Brasil y dando una muestra del enorme valor del trabajo en equipo entre los cuatro países -hemos hecho cosas inéditas en años-
Todavía queda mucho trabajo por delante. Es necesario hacer más para que los beneficios de integrarnos lleguen a nuestra gente. Sin discutir sus objetivos estratégicos originales necesitamos una puesta al día del Mercosur, necesitamos un Mercosur para el siglo XXI. Necesitamos que nuestro proyecto de integración sea un instrumento de vanguardia donde las decisiones que tomemos tengan en cuenta la dinámica de cambios regionales y globales.
Hoy más que nunca es importante contar con una visión renovada del regionalismo, y así evitar que se diluyan los esfuerzos y el tiempo que nuestros gobiernos invierten en algunos ámbitos de cooperación regional que van perdiendo vigencia.
Nuestra visión del Mercosur es la de un espacio económico integrado al mundo; un ámbito para que los emprendedores inviertan y desarrollen todo el potencial de nuestra región; una zona donde la creatividad y el talento sean motor de crecimiento inclusivo y desarrollo; una región focalizada en la atracción de inversiones y las participación de las pymes en las cadenas globales de valor, ya que estas cumplen -y lo sabemos- un rol central para generar más y mejores empleos, el único camino genuino para reducir la pobreza. Estamos frente a una oportunidad histórica, y por eso quiero invitarlos a que nos comprometamos a construir juntos ese futuro.
El Mercosur necesita más y mejor infraestructura, más redes de comunicación confiables, mejores y más simples procedimientos aduaneros; necesita seguir creciendo hacia adentro para poder crecer hacia afuera; y necesita crecer hacia afuera para continuar creciendo hacia adentro.
Desde sus inicios el Mercosur tuvo una dimensión interna entre sus socios y una dimensión externa con terceros países, pero estas dos dimensiones no han ido siempre de la mano. Tenemos que buscar las mejores sinergias y modos de complementación entre estas dos dimensiones. Debemos profundizar la negociación de acuerdos que nos permitan insertarnos mejor en la economía global, mejorando la competitividad de nuestras economías y nuestra participación en los flujos de comercio e inversiones. Estamos convencidos que a través de acuerdos de este tipo fortaleceremos al Mercosur como proceso de integración.
Como compartí con ustedes en la última Cumbre de Mendoza, el compromiso y la propuesta de la Argentina es que el MERCOSUR sirva no solo para integrarnos cada día más entre nosotros, sino también para ampliar y distribuir los beneficios de la globalización. No se trata de si la globalización es buena o mala sino de qué tipo de globalización queremos, una globalización que genere condiciones para un comercio justo mientras protege a los sectores más vulnerables; una globalización que sea un instrumento para reducir la pobreza y generar desarrollo equitativo y sostenible.
La negociación con la Unión Europea es particularmente relevante y me alegra que todos hayamos coincidido en eso. Somos dos regiones complementarias y la Unión Europea es un destino natural para nuestras exportaciones. Nos permitirá impulsar no solo el comercio sino que también atraerá inversiones, tecnología y generará múltiples oportunidades de negocios favoreciendo la creación de empleo en nuestros países.
Con la Alianza del Pacífico estamos avanzando en áreas concretas. El horizonte es la convergencia hacia una región productiva con costas sobre los dos océanos, que está destinada a ser uno de los polos de crecimiento más dinámicos del mundo.
Quiero aprovechar la oportunidad para agradecerles el apoyo recibido en la 11° Conferencia Ministerial de la OMC, su presencia en Buenos Aires permitió renovar el compromiso del MERCOSUR -como decía el presidente Temer- con el sistema multilateral de comercio, hablándole al mundo con una sola voz en defensa del comercio basado en reglas y que persigue como objetivo mejorar la calidad de vida de la gente.
Recientemente Argentina asumió la presidencia del G-20, y en el 2018 se celebrará por primera vez la cumbre de líderes en Sudamérica. Con una visión desde el sur buscaremos ser la expresión de una región, no solo de un país. Para ello vamos a necesitar de su apoyo y acompañamiento para llevar al corazón del G-20 las aspiraciones y preocupaciones de nuestra región.
Antes de finalizar no querría dejar de enviar un mensaje de solidaridad y acompañamiento al pueblo venezolano. Desde el MERCOSUR reiteramos nuestro llamado a respetar los derechos humanos, a la libertad de los presos políticos y a la pronta adopción de un calendario electoral que sea capaz de garantizar un proceso abierto y transparente.
Finalmente quiero desearle el mayor de los éxitos a Paraguay, querido Horacio, que ejercerá la presidencia pro tempore durante la mitad del 2018, para que cuenten con el apoyo y la voluntad de la Argentina en todo lo que necesiten.
Muchas gracias por su atención. (APLAUSOS)