PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA NACIÓN, MAURICIO MACRI EN EL PLENARIO DE APERTURA DE LA CLINTON GLOBAL INITIATIVE, EN EL HOTEL SHERATON TIMES SQUARE, DE NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS.
Gracias Presidente por invitarme, nuevamente: nosotros – con Matteo – vinimos siendo Intendentes, así que cuidado, señor Intendente, las cosas se pueden poner mucho más complicadas. (APLAUSOS Y RISAS).
Argentina – como sabe, señor Presidente – ha sufrido décadas de populismo, las cosas empeoraron en los últimos cinco a diez años, íbamos en dirección a otra enorme crisis, como la que padecimos en el 2001, pero – afortunadamente - los argentinos, todos juntos, decidimos ir por un cambio.
Creemos que nos merecemos vivir mejor; queríamos volver a ser parte del mundo; queríamos terminar con el aislamiento; pasamos por elecciones muy complejas, pero nos fue bien y ahí uno siente eso, cuando viaja a Argentina, uno siente un enorme optimismo, muchísimo entusiasmo, uno siente una convicción profunda, grande; una comprensión de lo que tenemos que pasar para volver a ser, nuevamente, un país competitivo y desarrollado.
Al principio – como Gobierno – tuvimos que tomar decisiones muy difíciles, tuvimos que unificar el tipo de cambio, eliminar barreras comerciales; tuvimos que liberar el pago de los dividendos al exterior; tuvimos que llegar a un tipo de acuerdo con los bonistas, pero todas esas decisiones las tomamos siempre pensando en el sector más vulnerable de la sociedad. Nos sentimos muy cerca de los ciudadanos que necesitaron ayuda para pasar por este proceso y los compromisos fueron tres los principales.
Voy a tratar de poner el foco en el primero, sin dudas, el más importante, que es llevar a la Argentina a pobreza cero. Hoy, Argentina tiene un 30 por ciento de ciudadanos por debajo de la línea de pobreza, pero todos sabemos que para eliminar la pobreza hay que crear empleos, buenos empleos, empleos de calidad y para eso hace falta generar un entorno de confianza. Hay que asegurarle al inversor que nos vamos a ceñir al imperio de la ley; que vamos a ser predecibles, confiables, porque todo el mundo sabe que Argentina tiene fantásticos recursos humanos y muchísimos recursos naturales.
De modo que el desafío es organizarnos, ser confiables y en eso venimos trabajando. Desde el principio le devolvimos la autonomía necesaria al Banco Central para terminar con la inflación, uno de los peores flagelos que afectan a la gente de menores recursos. También le dimos autonomía al INDEC, para que las cifras que produjera fueran transparentes, confiables.
Dicho sea de paso, la semana pasada, después de 10 años, el Fondo Monetario Internacional visitó la Argentina. Porque nosotros queremos cumplir con el artículo 4, como cualquier país normal del mundo.
De modo que ahora realmente creemos que estamos generando las condiciones y que estoy contento de decirles que hemos tenido mucho éxito.
Dos eventos: la semana pasada organizamos nuestro primer Foro de Negocios e Inversiones, más de 3.000 empresarios de 68 países presentes buscando oportunidades de inversión en la Argentina. Esa misma semana recibimos la primer oferta de renovables, veíamos los primeros mil megavatios en un programa de 20 mil megavatios y recibimos siete veces más de lo que pedíamos. De modo que hay empresas del mundo entero dispuestas y listas a invertir en contratos a un plazo de 20 años para proveer energía. Y eso nos muestra que vamos en el camino correcto. (APLAUSOS)
Pero, permítanme terminar esta primera intervención, diciendo que Argentina es un país con un enorme futuro, un gran futuro gracias a la capacidad de producir alimentos. Estamos produciendo alimentos para 400 millones de personas, de modo que podemos ser un gran jugador en cuanto a seguridad alimentaria en los próximos años.
El pronóstico es duplicar esa producción en los próximos 5 años. Podemos también crear 40 veces más de productos de minería en forma sustentable obviamente.
Podemos ser un gran jugador en renovables, pero también en energía no convencional. Tenemos enormes de shale oil y shale gas, petróleo y gas y podemos ser y somos, excelentes proveedores de servicios con valor agregado.
De modo que creemos que hay lugar para nuevos socios; necesitamos que las empresas del mundo vengan a la Argentina, de Estados Unidos, del mundo entero.
Vengan a ayudarnos a desarrollar el país, a reducir la pobreza y a lograr lo que queremos para nuestro pueblo. (APLAUSOS)