Es realmente un placer estar acá en la comuna de Colina, al pie del Monumento de la Batalla de Chacabuco que fue fundamental para lograr la independencia de medio continente.
Muchas gracias, presidenta Michelle Bachelet, por haberme invitado a compartir esta conmemoración tan importante. Muchas gracias a todas las autoridades de la hermana República de Chile, a las autoridades de la Argentina, a los chilenos y argentinos que nos acompañan. Quiero también felicitar a aquellos que despedí el 24 de enero en Mendoza -que emprendieron el mismo recorrido, por los mismos pasos-, todos deben estar pensando cómo pudieron en aquella época animarse a tamaña hazaña logística, porque no sólo era venir a batallar por la Independencia con los realistas, sino vencer semejantes complicaciones de la geografía, y lo hicieron. Por eso, hoy es tan importante que recordemos la memoria no sólo del General San Martín y del General O'Higgins, sino de todos aquellos que los acompañaron y se animaron a pensar que se podía.
Creo que en este momento -hablábamos en la reunión anterior con la Presidenta- el mundo presenta desafíos enormes, tan grandes como las cordilleras que nos separan. Más que nunca tenemos que pensar de qué manera vamos a ser exitosos frente a estos desafíos y transformarlos en oportunidades para nuestros pueblos. Y, sin duda, es por el mismo camino que decidieron recorrer San Martín y O'Higgins: nuestros pueblos juntos, trabajando, buscando que en esa complementación, encontremos mejores oportunidades de progreso para todos aquellos que habitan nuestros países.
En este año hemos hecho grandes progresos: nos hemos puesto a trabajar en la integración física, en los pasos fronterizos, en acuerdos económicos nuevos que permitan una mejor complementación, en el intercambio cultural, militar. Y ahora se presenta algo que puede ser maravilloso, un campo maravilloso demostrando que esta integración viene por más y que es un salto hacia adelante sin precedentes, que es integrar y coordinar las fuerzas que combaten las crisis de estos problemas de la naturaleza que tenemos hoy, producto del cambio climático.
Hoy tenemos cosas que nos sorprenden diariamente: decíamos con la Presidenta que lamentablemente vivimos diciendo “la peor inundación, la peor sequía, el peor incendio de la historia” y esto parece que no va a parar. Entonces, qué mejor que estar preparados y juntos para complementarnos, ya que compartimos a lo largo del territorio ambos problemas. Creo que esto es un campo más y tenemos que seguir pensando en otros para integrar nuestras comunidades.
Son 200 años de historia, 200 años de encuentros, a veces de desencuentros; pero hoy, creo que lo que nos mueve a todos los que habitamos en ambos países es conciliación, armonía, paz y trabajo en conjunto, con una profunda admiración desde Argentina y desde mi Gobierno por lo que ha logrado el pueblo chileno en las últimas décadas, trabajando en convicción de futuro.
Así que gracias y espero que sigamos trabajando juntos por ese futuro que todos nos merecemos. ¡Viva Chile y viva Argentina!