Buenas tardes, iba a ser buenos días, pero el tiempo no nos dejó. Le pido disculpas a aquellos que vinieron a la mañana también
Qué alegría. Uno se pone a repasar, son tantas horas, tantos sueños, tantas ganas de hacer cosas que nos ayuden a mejorar, que nos ayuden a progresar. Parece que fue ayer cuando Hugo describía esa primera vez que entramos a FADEEAC, con “Pancho” -no sé cuántos más estuvieron ese día-, con la cara de desconfianza que nos miraban, la cara que nos pusieron todos cuando les dijimos que teníamos esta idea de que se muden al Sur
Y llevó tiempo de diálogo, tiempo de convencimiento, primero con FADEEAC, después con el gremio, con el barrio, con la política; y poco a poco fue tomando cuerpo, claramente, después hubo que seguir convenciendo a uno por uno, con infinita paciencia y compromiso
Pero valió la pena porque esto que hemos hecho en un Centro de Transferencia de Carga, un centro logístico de nivel mundial, existe en muy pocas ciudades del mundo. Y no sólo es maravilloso -como decía bien Horacio- para el movimiento de la ciudad, porque son menos camiones grandes en la ciudad, esos camiones enormes que cuando uno los veía en la ruta de chico se impresionaba, sino que además son mejoras en el tránsito, más seguridad, menos accidentes, menos roturas de calles, cuidando lo nuestro, menos contaminación del medioambiente, menos energía derrochada. Tenemos que ahorrar, tenemos que preocuparnos por cuidar el planeta, son muchas cosas
Después, es un ámbito de trabajo de calidad para el trabajador: solamente este lugar va a tener 300 puestos de trabajo nuevos, más los 1.500 que se reunirán acá, y la oportunidad de que, compartiendo este lugar, haya sinergias que ni siquiera imaginamos, porque es estar todos reunidos pensando cómo transportar mejor, cómo conectar esta ciudad tan importante con todo el aparato productivo del país y con todo el aparato comercial, porque vienen productos que se venden en la ciudad y salen productos que se fabrican acá para que se consuman en otras partes del país; y transportando mejor logramos que la gente consiga su producto a un menor costo. Son muchas cosas que se reúnen hoy acá: estas primeras 62 empresas, que esperemos que completen rápidamente más de 120, que era el proyecto original. Estoy seguro de que viendo el resultado de lo que hemos obtenido, como decía Horacio, nadie va a dudar que hay que hacerlo, que hay que venir, que hay que sumar
Y tal vez lo más importante es volver a demostrarnos de qué somos capaces de hacer los argentinos cuando nos proponemos trabajar en conjunto sector público y sector privado, cuando nos ponemos a pensar, diseñar, programar y comprometernos, somos capaces de hacer cosas de calidad máxima, de calidad internacional, y esto es el valor de lo que estamos discutiendo hoy.
Por eso decidimos un cambio, lo decidimos porque honestamente creemos que estamos para más, que podemos más, que merecemos vivir mejor, que somos capaces de hacer grandes cosas, grandes proyectos, que creemos en el valor del esfuerzo –y ahí te corrijo Hugo, no es el sacrificio- porque cada uno de los que construyó acá hizo un esfuerzo porque creyó; y eso es lo que te dignifica, es lo que te acerca a ser feliz: poner esfuerzo en algo y verlo realizado, eso te hace sentir, cuando volvés a tu casa, ancho como estás hoy Hugo, como están todos tus colegas, que se sienten orgullosos de haber sido parte de un proyecto de esta magnitud. Y para todos ustedes pido que se den un gran aplauso.
Pero esto mismo, agradeciendo a los amigos de la prensa, desde donde nos estén mirando, esto mismo lo tenemos que poder hacer y lo vamos a hacer en todo el país y en todas las actividades.
Y en eso voy a compartir que ahí en China donde me tocó ir a representarlos a todos ustedes frente a los países más importantes del mundo, los organismos más importantes del mundo, una vez más, desde el presidente Xi Jinping de China, al de Japón, de Corea, de la India, de Australia, de Egipto, de Indonesia, de Rusia, más todos los que nos han visitado ya, todos me dijeron una sola frase: “queremos trabajar con los argentinos”. El mundo está interesado en nuestra capacidad de hacer, en nuestra capacidad de aportar a ser parte de la solución en el mundo, no de los problemas del mundo.
Depende de nosotros, depende de que entendamos definitivamente que no va más el atajo, la viveza criolla mal entendida, hacerle trampa a la tarea perjudicando al conjunto de la sociedad; porque cuando ustedes con uno de sus camiones llegan tarde, o no cumplen la cantidad o la calidad del servicio, están perjudicando a muchísima gente más, y así sucesivamente.
El entender que el mundo entero confía en que nosotros podemos comprometernos responsablemente a cada uno hacer su trabajo cada día mejor es lo que nos va a llevar a esa Argentina que soñamos y que merecemos.
Así que felicitaciones de verdad, espero que me inviten cuando se complete todo el proyecto, que realmente lo llevo en el corazón, como también Horacio, que sigas adelante con la enorme tarea que estás haciendo para que el sur definitivamente exista, que esté cada día más habitado, que cada día tenga más actividades, y que se demuestre que puede haber igualdad de oportunidades para todos los argentinos hayan nacido o vivan donde vivan.
Gracias a todos y felicitaciones