Entrevista al presidente de la Nación, Alberto Fernández, para el programa "Modo Fontevecchia", en Net TV
FONTEVECCHIA.- Tenemos en este momento a Alberto Fernández en línea, que está en camino a tomarse un avión e ir a saludar a Lula. Muy buenos días, Alberto Fernández, Jorge Fontevecchia lo saluda. Gracias por compartir este momento de viaje con nosotros, cuéntenos sus primeras reflexiones sobre lo que le pasó anoche al ver a Lula presidente; al mismo Lula que usted visitó cuando nadie imaginaba no solo que podía ser presidente, sino que podía estar libre, usted lo visitó en la cárcel de Curitiba.
PRESIDENTE.- Buen día, Jorge. ¿Cómo le va? La verdad una profunda alegría; alegría por lo que representó políticamente Lula, alegría por lo que representa el liderazgo de Lula en la región y alegría intima, personal por haber hecho lo que yo creía que correspondía, en aquel momento. Yo fui a visitar siendo candidato a presidente, yo ya era parte del Comité Pro libertad de Lula; un comité que conformaban parte otras figuras (INAUDIBLE) de Brasil. Yo fui a ver al papa para pedirle que me ayude con la libertad de Lula. Y la verdad que aquella vez que fui muchos me dijeron que no era conveniente, que no era oportuno, claro, son esas cosas de convicción que tiene uno…, hay cuestiones sobre las que no se especulan. Así que fui muy convencido de verlo a Lula, creyendo que de eso modo podía llamar la atención de mundo sobre lo que estaba viviendo injustamente un hombre; así que tenía esa doble sensación, la sensación de tenerlo con alegría en libertad, de verlo recuperar su lugar en Brasil, y al mismo tiempo la felicidad como Latinoamericano de estar con un hombre de la capacidad de liderazgo que Lula tiene en la región.
FONTEVECCHIA.- Presidente, no solamente con Lula, ¿no? usted también lo hizo con Evo Morales.
PRESIDENTE.- Son esas situaciones donde, como le decía recién, Jorge, uno no debe especular, hay momentos en donde la especulación queda de lado, la especulación política debe quedar de lado, (INAUDIBLE) sobre lo que conviene o no conviene. Cuando Evo estaba en medio del monte escondido y hablaba por teléfono escondido aquel mediodía, que era un sábado, sino me equivoco. Y me decía que lo tenían acorralado y que estaba escondido en medio de ese campo. Lo primero que se me ocurrió es hablar con Manuel López Obrador porque yo no era presidente y no tenía posibilidades de hacer algo por Evo. Hablé con el presidente de entonces, con Mauricio Macri, y él me dijo que no podía darle asilo a Evo Morales. Entonces me acuerdo que, Andrés Manuel, ordenó que un avión vaya a buscarlo, después todas las (INAUDIBLE) ya conocidas para poder llegar primero a México y después a la Argentina; en donde yo le dije a Evo que se viniera el 11 de diciembre que Argentina lo iba a recibir bien. Y después ver el proceso que vivió Bolivia también, que volvió a poner las cosas en su lugar, ¿no? lo que fue un golpe de Estado contra Evo Morales, también duró apenas un año y al año la democracia estaba recompuesta en Bolivia. Pero, insisto, son esas cosas en las que un hombre de bien no debe dudar.
FONTEVECCHIA.- sabe porque le traigo lo de Evo en un contexto de Lula, ¿no? Ayer cuando ganó Lula también se celebra el momento que ganó Raúl Alfonsín, alguien que usted cita mucho. Y uno de los efectos que tuvo el triunfo de Alfonsín, que –desgraciadamente- su economía no funcionó, pero desde el punto de vista político su éxito no fue solamente la instauración de la democracia, en la Argentina, sino –además- haber ayudado que se generara en los países limítrofes, por ejemplo, la democracia en Brasil comenzó dos años después de la democracia en la Argentina. Podríamos decir que Chile el plebiscito de Pinochet fue el resultado del propio plebiscito Alfonsín en su momento por los (INAUDIBLE) limítrofes lo que generó e irradio sobre Chile, podríamos decir, la discusión democrática y la votación, nuevamente, porque se votaba también para un plebiscito, es decir, hay algo del orden general que se irradia de un país al otro y, en este caso, podríamos decir que el regreso de Lula a la presidencia de Brasil; Brasil representa dos tercio del producto bruto de toda América Latina y probablemente más del 50 por ciento de su territorio y su población puede tener también un efecto de irradiación sobre el resto de América Latina. Si quería pedirle su reflexión sobre qué significa, así como en su momento lo de Alfonsín significó la consolidación de la democracia en la mayoría de los países de la región después de la su propia consolidación en la Argentina, que significa el regreso de Lula al frente de Brasil para el resto de América Latina.
PRESIDENTE.- Alfonsín, definitivamente, fue un hombre que al que los argentinos le debemos la institucionalidad, la institucionalidad democrática. Y que más allá de los problemas económicos que debió enfrentar, que fueron muchos, por la enorme deuda que le había dejado el proceso militar, el Gobierno de facto, él siempre con enorme esfuerzo y en un contexto muy diferente al que tenemos hoy, hizo todo lo necesario por institucionalizar el país y por preservar el orden constitucional. En un momento, insisto, donde la democracia seguía amenazada, no era un momento exactamente como el de hoy, estaba amenazada por los Carapintada, por los hijos, aquel proceso nefasto. Y efectivamente irradio sobre América Latina un tiempo de revalorización de la democracia. Lula es un líder, como yo no he conocido antes, esto quiero aclararlo; lo conozco a Lula desde el año 2002 y lo he tratado muchas veces y lo he tratado en funciones como jefe de Gabinete y lo he tratado como un compañero. Y Lula tiene una enorme peculiaridad que tiene el liderazgo que los auténticos líderes deben (INAUDIBLE). Ayer le decía a Sergio que soñé con… a Sergio Massa, ayer a la noche, le decía yo me imagino que Perón debe haber sido parecido a Lula en el sentido que son esos liderazgos que no los tiene que declarar, no los tiene que proclamar, sino que uno se da cuenta que ahí está el líder, que ahí está el que manda, el jefe, el que lidera. Y nunca eso él lo hace sentir, al contrario, él se pone siempre en el lugar de un militante más. Llega en un tiempo donde la región ya ha hecho muchos cambios, cambiamos en la Argentina, cambió Brasil, cambió Chile, cambió Bolivia, cambió Colombia, Ecuador cambió en otro sentido, cambió Perú. Acá lo que creo que la llegada de Lula puede ayudar y mucho es en ese trabajo que iniciamos con Andrés Manuel López Obrador que logró unir al continente, en un tiempo en que la globalización está puesta en tela de juicio, y las regiones adquieren otro valor, otro significado, y así sí creo que Lula puede ayudar y mucho, y mucho. Creo que el trabajo que hicimos en la CELAC, primero en México y después en Argentina, ha ido poniendo en valor la importancia de la unidad regional, ¿y justamente es CELAC quién faltaba? Faltaba nada más y nada menos que Brasil, porque Bolsonaro negaba la importancia de la CELAC, pero después estaban todos, CELAC- yo siempre digo- fue una creación del año 2010, y tuvo como primer presidente a Piñera de Chile y cuando Piñera entregó la…pudimos convivir gobiernos con ideologías tan distintas, pensando en la unidad de la región. Eso que hemos empezado con Andrés Manuel yo quiero que se perfeccione y mucho con la llegada de Lula, y me parece que en eso sí Lula puede ayudar mucho.
FONTEVECCHIA. - Usted le colocó ayer un mensaje a Lula que le decía “felicitaciones, Lula, tu victoria abre un nuevo tiempo para la historia de América Latina, un tiempo de esperanza y de futuro que empieza hoy mismo, acá tenés un compañero para trabajar y soñar a lograr el buen vivir en nuestros pueblos”. Lula asume el 1° de enero del mismo año que se acaba su primer mandato presidencial, ¿de alguna manera también este compañero para trabajar y soñar juntos está pensando en su relección?
PERIODISTA. - Yo estoy pensando en la región, yo la verdad Jorge que la discusión que hay en la Argentina no es si soy relecto o si no soy relecto, me parece que es un tema que debe ocuparme a mí menos que deber ocupar a los argentinos, de lo que los argentinos tienen que preocuparse y preguntare es cómo queremos construir el país del futuro, si queremos construir un país donde los empresarios son intimados a entregar el uno por ciento de su patrimonio para que alguien pueda ser gobierno, o si los empresarios tienen que soportar pagar coimas para acceder a la obra pública, y los empresarios tienen que soportar ser perseguidos por los servicios de inteligencia, o mismo las causas judiciales inventadas, o si tienen que soportar que la AFIP se les meta en sus negocios cuando se vuelven (inaudible), o si tienen que soportar que el déficit fiscal que se crea se tiene que resolver tomando deuda, o si tienen que soportar que Aerolíneas Argentinas deje de existir y todo quede en manos de privados, rompiendo la conectividad de muchos argentinos que necesitan de esas aerolíneas para poder seguir adelante con el desarrollo de sus regiones, todas estas preguntas que yo me hago son las cosas que propone Macril, en verdad lo que tiene que resolver la Argentina es si quiere ese país del que acabo de hablar, que es el país que Macri hizo, el que pedía el uno por ciento del patrimonio a los empresarios, que con las PPP cobraba un 70 por ciento más de lo que las obras efectivamente costaban, el que creaba causa judiciales, el que puso el aparato de Inteligencia para seguir a opositores, el que usó a la AFIP para cerrar un canal de noticias que a él le molestaba, el que tomó la deuda que tomó, con acreedores privados y con el Fondo Monetario condicionando a la Argentina durante muchos años, o si quiere un país con autonomía, que crezca, que genere empleo, que se desarrolle, que también termine con la inflación, que es un problema que yo tengo muy en claro que existe y que debemos resolver, pero que también Macri nos lo dejó 54 por ciento de piso.
Así que yo creo que el verdadero debate es ese, yo cuando escribo lo que escribo, y cuando pongo que con Lula podamos concretar los sueños de una región donde la democracia funciona en pleno, donde las reglas de la democracia no se cancelen, no se cambien, donde podamos alternarnos en el poder respetando reglas básicas que deben ser políticas de Estado, que tienen que ver con el desarrollo, con la generación de empleo, con el desarrollo de la educación, con el desarrollo de la salud pública, con el desarrollo de la ciencia y la tecnología, eso es lo que francamente creo, y en ese sentido tengo en Lula una referencia personal importante, porque sé cómo actúa, sé lo que cree, sé en lo que piensa, y por lo tanto creo que con él podemos hacer mucho de lo que estoy diciendo.
FONTEVECCHIA. –Presidente, nuestro compromiso con su Vocera, usted está viajando y tomando el avión, está a punto de tomarlo, en diez minutos, si queremos ser responsables con el tiempo. Lo vamos a despedir con una canción de Litto Nebbia, en su caso, lo mejor para usted, y mucho más aun para todo el pueblo brasileño argentino.
PRESIDENTE. - Muchas gracias Jorge, un abrazo muy grande.