Declaración a la prensa del presidente de la nación, Alberto Fernández, y su par francés, Emmanuel Macron, desde París, Francia.
Macron.- Un abrazo señor presidente, estimado Alberto. Muchísimas gracias por estar hoy aquí, de nuevo en París. Es para mí muy grato volver a verlo a usted aquí, un amigo, un actor importante del escenario internacional en un momento tan tormentoso. En un momento que estamos haciendo frente al retorno de la guerra en el continente europeo, me es grato recibirlo de nuevo en París. Usted encarna y defiende una amistad histórica entre los pueblos argentino y francés. Una amistad basada en una fascinación reciproca y adhesión profunda a la defensa de los Derechos Humanos y los valores democráticos por los cuales tenemos ese objetivo compartido. Y también generalmente este compromiso común en favor de los principios fundamentales de estas democracias. Abordaremos esa situación trágica de Ucrania y las consecuencias reales de la invasión rusa. Me gustaría dar gracias al apoyo de la Argentina en los foros internacionales al denunciar esta agresión. Además de las cuestiones energéticas tendremos que responder colectivamente a las consecuencias a esta guerra y en particular en el mercado agrícola con el riesgo a una hipotética crisis alimentaria particular en África y Oriente Medio. Y en Francia hemos lazado esta responsabilidad emblemática que ha sido apoyada por la Unión Europea y por la Unión Africana, vamos a poder hablar de ella. Se trata de la iniciativa FARM. Creo que la relación de nuestros países, también en el marco de la G20, puede ser muy importante en el futuro. Y en esta visitita bilateral después del acuerdo concluido con el FMI y me gustaría acoger (INAUDIBLE) ese acuerdo, lo felicito por ello. Tenemos la gran ocasión de construir juntos nuevos proyectos en el sector de la defensa de los minerales críticos, la transición energética, las energías limpias y también en los ámbitos culturales y educativos para estrechar los lazos entre los dos países. Y me gustaría decirle que Francia no faltara a esta cita tal como hemos abocado en otras situaciones. La presidencia francesa del concejo de la Unión Europea coincide con la presidencia de Argentina de la CELAC, y por ello tenemos la ocasión de impulsar juntos la ambición de una relación cada vez más estrecha entre los dos continentes. Esta acción común incluye una fuerte movilización en favor de la emergencia climática, la conservación de la biodiversidad es un punto esencial de la estructuración de los intercambios comerciales. Usted conoce mi compromiso en pro de las cuestiones medio ambientales de la que dependen nuestras generaciones futuras. También tendremos que dar un impulso a la movilidad de los estudiantes, los artistas, los investigadores, los emprendedores, los hombres y las mujeres que son los artífices de la relación entre los dos continentes. Celebraremos dentro de 15 días la semana de la América Latina y entre los países que sean protagonistas de centenares de eventos (INAUDIBLE) en Francia, Argentina tendrá un lugar especifico y especial. Y me gustaría referirme a uno amigo en común que has venido varias veces al museo, al escultor Pablo Reinoso, que expone en el château de Chambord. Y eso es lo que yo quería decirle a usted señor presidente acogiéndole hoy y a todos estos amigos. Y antes de finalizar me gustaría trasmitir mis más sentido pesame a la familia y de los allegados de Lwana Bichet, que era una estudiante francesa de Angouleme y que era apasionada de la Argentina y que falleció en un accidente trágico hace unos días en Buenos Aires. Y decir a sus amigos y familias que al celebrar la amistad entre ambos países también pensamos en ella. Y seguiremos movilizándonos para que se sepa la verdad de esta circunstancia. Y recibimos aquí toda nuestra solidaridad. Muchísimas gracias al presidente, estimado Alberto por estar hoy aquí con nosotros en Paris.
PRESIDENTE.- Presidente para mí es una gran alegría volver estar aquí con usted en Francia. Hemos realizado una gira muy breve que ha tenido el propósito de llevar a Europa la preocupación que tenemos en América Latina con lo que está sucediendo en Ucrania. Que como es sabido no es algo que solo repercute en los países en conflicto, ni siquiera solo en Europa es una acción bélica que ha generado consecuencias negativas en todo el mundo y también de nuestra América Latina. Y para mí es muy importante hablar con usted. Es sabido, es público del afecto personal que guardo con el presidente Macron y del respeto enorme que siento. Y estoy seguro de que estoy hablando con un líder de Europa que podrá recoger la opinión, la mirada, la preocupación de actual presidente de la CELAC, ese soy yo. Y que traigo un poco la preocupación del continente. La verdad tengo la convicción de que tal como lo hablé con el presidente Sánchez, lo hablé con el Canciller Scholz, nosotros no podemos seguir poniendo en riesgo después de la pandemia la seguridad alimentaria y la seguridad energética. Por eso quiero ver si puedo encontrar en el presidente Macron, que hombre con quien nos une la visión humanista de la política, una visión integradora de la sociedad. Si algo podemos hacer para poner fin al ataque ruso para recuperar la paz en Ucrania y para ayudar a recuperar la paz en el mundo. Soy de los que está convencido que lo que el mundo necesita hoy es más proteínas, más alimentos, no más misiles. Estoy convencido que lo que más necesitamos es que la economía después de todo el daño que la pandemia ha causado vuelva a producir, vuelva crecer, vuelva a integrar sus necesidades y lo que menos necesita es una recesión producto de la suba de tasas de intereses en el mundo central. El mundo, de verdad, no soporta más muertes, la paz es urgente. Y yo quería hablar con mi amigo presidente de Francia para decirle que venimos a ponernos a disposición para ver en lo que podemos ayudar desde América Latina a que el mundo recupere la paz. Francia y Argentina tienen una historia muy larga que une, no solo hay muchas empresas que invierten en Argentina desde hace muchos años, sino que muchas otras nuevas empresas que siguen invirtiendo. Y tenemos, además, enormes lasos culturales. El presidente Macron es un admirador de Borges como pocos se conocieron y lo celebro. Y hoy le traje aguafuertes de Antonio Seguí, un pintor cordobés que vivió muchos años en Francia y que se distinguió por su estilo. Y aún guardo y toco la guitarra que me regaló la última vez que nos vimos. Así que verme con el presidente es una gran alegría, también para mí es una gran alegría, y lo digo públicamente, lo hablamos días atrás con Lula, nosotros celebramos su éxito en el electoral porque su éxito electoral en Francia trajo tranquilidad, mucha tranquilidad al mundo, así que lo celebramos. Y como siempre y digo estamos para trabajar mucho más de lo mucho que trabajamos. Convencidos de que tenemos que hacer un mundo más igualitario, la pandemia ha generado enorme desequilibrio económicos, ha profundizado la desigualdad y nosotros tenemos que volver a recuperar un modelo económico que integre, no que desplace. La cultura del descarte, que alguna vez habló el papa Francisco, es una cultura que tenemos que erradicar para siempre y lo que tenemos que lograr es una cultura que integre absolutamente a todos. Nosotros prestamos mucha atención somos un país que respeta y promueve el multilateralismo. En ese sentido, respetamos la decisión del Consejo de Seguridad que le ha encomendado al secretario general de Naciones Unidas llevar adelante acciones para que cese cuanto antes el fuego en Ucrania. Y en lo que podamos aportar allí queremos estar presentes. Por lo demás esta es la segunda o tercera visita, espero que pronto estes en Buenos Aires, querido presidente. Y pueda retribuirle tanta cordialidad al recibirnos. Le doy las gracias, gracias a