Entrevista al Presidente de la Nación, Alberto Fernández, para el programa: "Toma y Daca", que conduce Mariano Martín, por AM 750
PERIODISTA.- Ahora es un momento muy importante para nosotros, porque podemos saludar al Presidente de la Nación, Alberto Fernández, que está en comunicación con la 750. Buen día, Presidente, acá el equipo de “Toma y Daca”, de Mariano Martín, lo saluda, ¿cómo le va?
PRESIDENTE.- Hola, ¿están bien?
PERIODISTA.- Bien, Presidente, que bueno escucharlo y que bueno escucharlo con una voz intensa, pocas horas después de haber confirmado que se ha contagiado de coronavirus, ¿cómo se siente?
PRESIDENTE.- La verdad que me siento bien, me siento bien. Lo mío fue casi preventivo, porque ayer fue mi cumpleaños, estuve tocando guitarra, almorzando con mi hijo y Fabiola, pasé un día de lo más bien y a la noche – cuando llegué al cuarto – tuve un dolor de cabeza medio raro, no era un dolor intenso, pero era molesto y sentí que estaba como medio acalorado. Me tomé al fiebre y tenía 37,3 y llamé a mi médico y le dije lo que me pasaba y me dijo que por precaución hacer un test. Me hicieron un test rápido, que es un test, cuando a uno lo hisopan y es como si fuera un test de embarazo y ese test dio positivo, y mandamos a hacer un test de PCR, que es el test más lento, pero más seguro y hasta ahora no tengo los resultados, hay que esperar esos resultados para tener certeza de que lo que dio el test rápido es correcto.
PERIODISTA.- ¿Cuándo calcula que estarán esos resultados, presidente?
PRESIDENTE.- Calculo que en el día de hoy porque yo además recién me hisoparon para llevar al Malbrán muestras de mi fosas nasales y de mi boca, porque me hisoparon en la boca y en mis fosas nasales para que el Malbrán trate de verificar cuál es la cepa eventualmente, si efectivamente se termina confirmando el positivo del test rápido, para ver cuáles cuál pudo haber sido la cepa que me atacó, pero yo supongo que en el transcurso de la tarde tendremos un resultado definitivo. Si el test rápido es correcto y se confirma y si finalmente se confirmara el diagnóstico veremos cómo seguir adelante, pero la verdad que me siento bien. Recién se fue el médico, me revisó íntegramente, me revisó los pulmones, la saturación de oxígeno, no tengo ningún síntoma preocupante.
PERIODISTA.- De confirmarse ¿tiene algún indicio de cómo fue que se contagió?
PRESIDENTE.- No tengo la menor idea, no tengo la menor idea, sinceramente, sé que hubo en la Quinta, acá, algún caso en la cocina, pero lo llamé al Intendente de la Quinta y me dijo que dónde ocurrió el contagio no tenía contacto conmigo, reviso para atrás a ver, si en los últimos quince días, alguien con quien yo haya estado cayó contagiado y tampoco lo encuentro, así es que nada, habrá que ver. Creo que esto, en todo caso, debe servirnos para que todos entendamos el riesgo que corremos. El virus aparece del modo más inesperado y nos ataca a todos, porque más allá de que lo que a veces se escribe, que si abrazo a alguien, la verdad que soy de quienes se cuidan mucho, cuido la distancia, trato de estar en lugares cuidados, pero bueno.. y me pasó, como a muchos otros, lo que tenemos que entender en las gravedad del momento que vivimos y la necesidad de cuidarnos, simplemente.
PERIODISTA.- Le pregunto esto, Presidente, porque usted habrá visto que a partir de la confirmación de su condición de contagiados de coronavirus, han surgido algunos comunicadores y dirigentes poniendo en duda la efectividad de la vacuna, Sputnik V, en particular y del proceso de vacunación, en general, más allá de que nosotros hemos tratado de escuchar opiniones más calificadas al respecto me gustaría que nos hable del tema, me parece que es importante su palabra, en ese sentido.
PRESIDENTE.- Yo ahí puedo decir lo que me dicen mis médicos; lo que me dicen es que – evidentemente – la vacuna generó una cantidad importante de anticuerpos como para que yo, en este momento, no la esté pasando una persona, de 62 años, que se contagia y expresa los primeros días su dolencia. Yo pongo siempre el mismo ejemplo, yo me vacuné el 21 de enero, y junto conmigo se vacunó Alejandro Collia, un subsecretario de salud y Alejandro, al tercer día de vacunado, cayó. Él, evidentemente, se vacunó ya contagiado, sin saberlo. Y Alejandro, hasta el día de hoy, está internado y la verdad es que yo tuve tres líneas de fiebre, un poquito de dolor de cabeza, hoy dormí como un lirón, la verdad que dormí bien y de hecho le pregunté recién al médico, porque estoy acá, aislado, en la casa de huéspedes, como loco malo- digo yo – no vienen ni los perros a verme, estoy acá sólo y le decía al médico si podía salir a caminar y si puedo hacer algo. Y él me contestó: “si te sentí con fuerza hacelo, ponte un barbijo y hacelo, no hay problemas”. Yo creo que si no fuera por la vacuna – evidentemente – la estaría pasando muy mal, es lo que me dicen, que es cómo ataca el virus a una persona de mi edad. Siempre supimos que podía darse el caso de que los anticuerpos creados no fueron suficientes, pero sí lo que siempre se afirmó, es que, en esos casos, la gravedad de la enfermedad decrecía mucho y ese parece ser el diagnóstico mío. Tenemos que esperar aún que se confirme el diagnóstico del PCR, yo insisto en eso, porque el PCR todavía no lo tengo.
PERIODISTA.- Entonces vamos a estar todos atentos a ese diagnóstico del PCR, que es el que en definitiva nos va a dar ese diagnóstico, ese último indicio. Presidente, antes de avanzar con algunos temas, cerrando un poco o avanzando un poco sobre la vacunación general del proceso de vacunación, en la Argentina ¿ qué horizonte ve usted de los acuerdos alcanzados con distintos laboratorios, esta idea de que Pfizer hubiera sido la gran salvación y no lo es y a partir del ritmo de llegada a la Argentina, de vacunas, en particular la Sputnik V y la Sinopharm, cuando podemos ver la luz al final del túnel, cuando estará la inmunidad del rebaño presente, en nuestro país.
PRESIDENTE.- Mi mayor preocupación es que cuanto antes podamos vacunar a los mayores de 60 años y estamos tratando de garantizarnos semanalmente una cantidad de vacunas suficiente como para ir acelerando poco a poco el ritmo de vacunación. Yo siento que eso, poco a poco, se va moviendo y siento que vamos mejor, que antes, en un mundo donde el tema vacunas es un problema. El miércoles la OMS sacó un comunicado quejándose por la lentitud de la llegada de vacunas, a Europa, a Europa estoy hablando, entonces allí somos una suerte de país, yo digo, privilegiado, que recibe semanalmente una cantidad de dosis de vacunas que se siguen dando tratando de preservar a nuestro mayores adultos. Tenemos que entender que la pandemia todavía no ha terminado y que por lo tanto debemos cuidarnos, justamente, tenemos que ser cuidadosos y entender que estamos ante un virus realmente difícil, que además va mutando y generando nuevas características en su capacidad de infección y no podemos descuidarnos. Yo en esto hago mucho hincapié porque uno de algún modo confía en la sociedad y llama a la disciplina social, pero no le va bien, esa es la verdad, porque muchos sectores no nos escuchan y el problema sigue existiendo. Y termino con esto: para aquellos que hablan de que la solución hubiera sido Pfizer la verdad que a mí me hubiera encantado la vacuna de Pfizer, pero Pfizer no nos la quiso vender, por exigencias contractuales, que ponía; ahora los que cedieron a esas exigencias contractuales tampoco recibieron esas vacunas de Pfizer, porque Chile – si no me equivoco – compró 10 millones de dosis de vacunas de Pfizer y le dieron cien mil creo, un poquito y eso se repite en muchos países de Europa y de América, y esa es una discusión inútil porque el que no quiso vender la vacuna fue Pfizer y no es que no nos la quiso vender a nosotros, terminó no vendiéndoselas a nadie y concentrando toda su producción, en los Estados Unidos.
PRESIDENTE.- Usted tenía previsto, hoy, una reunión con el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, para evaluar cómo es la situación, qué va a pasar con las restricciones de circulación, si es que las habrá. En función de lo que todos estamos viendo que es un aumento considerable de casos, para los próximos días, ¿qué imagina para los próximos días o qué tiene previsto el gobierno, para esos días que vendrán, se va a reeditar esta serie de reuniones que tenía usted con Larreta y Kicillof?
PRESIDENTE.- A ver, ¿qué es lo que estamos viendo nosotros? Estamos viendo, una vez más, que estamos enfrentando un incremento de casos muy grandes, a una velocidad de contagio mayor, que en el primer momento, en el Área Metropolitana de la Ciudad de Buenos Aires. Como yo soy de los que dicen que la diferencia entre el ser humano y el animal tiene el don de la experiencia, yo esto ya lo viví y esto siempre fue así, empiezan el Área Metropolitana y empieza a contaminar al resto del país, lo que yo quisiera es que hagamos algo para frenar esto en el Área Metropolitana, yo también sé que la sociedad, en cualquier orden (hombres, mujeres, niños, jóvenes, adultos mayores), en cualquiera de sus grupos tiene muchas dificultades para volver a soportar un encierro, ahora cuando uno mira el mundo eso es lo que está ocurriendo, el mundo se clausura, el mundo vuelve a poner toque de queda, hay 21 países con toque de queda, en este momento y prácticamente hay muchos ciudades de Europa, donde a partir de las seis de la tarde deja de funcionar, y en muchos de esos lugares cerraron las clases. Yo viendo todo eso, lo que me parece oportuno es volver a hablar con Horacio, con Axel, con quien ya hablé, quería hablar con Horacio y quería que diseñemos algo juntos. La primera vez salió bien, pues de algún modo nosotros logramos controlar el tema de las camas, el tema de las terapias intensivas y controlar el ritmo de contagio para que a nadie le falte la atención sanitaria. Ahora estamos viendo un ritmo de incremento, una velocidad de los casos realmente preocupante y tenemos que volver a juntarnos para encarar el tema. Ahora lo voy a volver a llamar, a Horacio, debo confesar, no voy a mentirles, yo tengo una suerte de reloj biológico que a las siete de la mañana, me despierta y hoy me desperté 7 y media de la mañana y cuando vi la cantidad de mensajes que había me dio deseos de irme a seguir durmiendo y seguí durmiendo y me desperté a las 10 y media de la mañana y estaba desayunando ahora y voy a llamar a Horacio para hablar un rato con él.
PERIODISTA. Pero usted, Presidente, piensa en algo similar a lo que sucede en Europa.
PRESIDENTE.- No, yo lo que quiero es que pensemos juntos, lo que quiero es llamarlo a Horacio, pensar juntos; llamarlo a Axel y pensar juntos. Ellos conocen tan bien sus territorios y los pueblos que gobiernan, ellos conocen tan bien las condiciones de cada lugar, no es un tema este que pueda resolverse así manu militari, sino que tenemos que conversar. Lo que sí creo es que tenemos que hacer algo, de eso estoy convencido porque los datos dan cuenta de que está pasando algo y que no es bueno, así que vamos a ver. Como yo siempre digo mi único objetivo es preservar la salud de los argentinos, es la única preocupación que realmente tengo y quiero que lo hablemos juntos y juntos veamos cómo hacerlo.
PERIODISTA.- Usted lo sabe muy bien, hay muchas presiones desde los sectores productivos, para evitar que si hay medidas evitar que se pueda dañar la recuperación que se está viendo desde los sectores productivos, siempre puso el énfasis en salud, pero esta vez cómo juega lo economía, sabiendo que el Estado no tiene el mismo margen fiscal, que tuvo el año pasado, con el IFE o con el ATP.
PRESIDENTE.- A ver, Patricia, si nosotros necesitamos auxiliar a sectores lo vamos a auxiliar, porque efectivamente nuestro margen es menor pero lo vamos a auxiliar.
PERIODISTA.- ¿Puede volver a haber un IFE?
PRESIDENTE.- Si fuera necesario para mí lo primero es que la gente no padezca más, ya bastante padecimiento tiene, que padezca lo menos posible. Nosotros ya estamos haciendo alguna suerte de ATP focalizados y de IFE focalizados, que no se llaman ni ATP ni IFE, pero de algún modo donde vemos problemas vamos en auxilio del Estado con diferentes planes sobre esas empresas y sobre esa gente. Lo que te decía es que quiero ser sincero también, lo que uno observa es que los problemas de los contagios no se dan en las fábricas, no se dan en los lugares de trabajo, los problemas se dan en el relajamiento social, en las reuniones sociales, en los encuentros sociales, y ahí está el problema. Nosotros tuvimos toda la agroindustria, toda la industria de laboratorios, todo el transporte, todo funcionó en el medio de la pandemia tomaron los protocolos y no tuvimos problemas de contagio. Los problemas de contagio ocurren cuando la gente se relaja y se junta. Ayer fue mi cumpleaños, y mi hijo, Fabiola, todos decían juntémonos, y yo no quise hacerlo, para evitar precisamente ese relajamiento, todos naturalmente tendemos a eso. Por eso yo entiendo a todos, entiendo a todos, lo que les digo a todos es que no son las fábricas, yo veo cómo funcionan las automotrices, los cuidados que tienen las automotrices, son enormes, ahí no está el problema. El problema está en la salida nocturna, en el encuentro con amigos, en la guitarreada en la casa de uno, en el asado que hace el domingo el otro, ahí está el problema.
PERIODISTA.- Le comento Presidente, que si se despertó a las diez y media se perdió parte de la entrevista con Martín Soria, que tuvimos en el arranque de este programa, no se la voy a expoliar pero le voy a decir que hablamos mucho sobre las visitas a la Quinta de Olivos, a la Casa de Gobierno de algunos jueces, en estas últimas horas hubo revelaciones respecto del Juez de Casación Mariano Borinsky, en quince ocasiones visitando la Quinta de Olivos. Usted se ha referido en varias ocasiones a la cuestión judicial, pero qué reflexión le merece a la luz de estas nuevas revelaciones.
PRESIDENTE.- Si no me equivoco, en marzo o abril del año 2018, yo ni pensaba ser candidato a nada, en esa época lo condenaron a Lula en Brasil, por un caso vergonzoso, donde el juez Moro y un grupo de fiscales inventaron un caso para involucrarlo a Lula. Yo escribí en aquel momento un artículo que se llamaba Argen-Lula, contaba el caso Lula y mostraba las similitudes de lo que pasaba en la Argentina en el sistema judicial argentino. Digo esto porque, y aclaro que no era la primera nota, porque venía desde el año 2017 hablando de esto. Yo lo escribí y advertí en esa nota -que publicó Infobae si alguno quiere buscarla- las similitudes entre lo que pasaba en el caso del juicio a Lula con lo que ha pasado o con lo que pasaba en aquel momento en Argentina. De verdad es que yo no tengo ninguna duda que acá pasó algo que nunca había pasado en la Argentina, y es que el Poder Ejecutivo utilizó a la Justicia para perseguir a sus opositores, de eso no tengo ninguna, pero no tenía ninguna duda en el abril o marzo- no me acuerdo cuando fue-del 2018, no tengo ninguna duda. Y no tengo ninguna duda que hubo muchos jueces que se prestaron a eso, no quiero hacer más nombres, porque la verdad lo que quisiera ahora, que así como pasó con Lula, y está pasando ahora, y así como con Lula se encontraron los emails que se intercambiaban el juez Moro con los fiscales, donde el juez Moro los apuraba a los fiscales que lo acusen para poder impedir que Lula sea candidato, del mismo modo en la Argentina ahora están apareciendo cosas como esa, y están apareciendo llamados telefónicos y cruces telefónicos, y empiezan a aparecer los emails donde convocaban a la mesa judicial, mesa judicial que el expresidente ha reconocido que existía. Yo lo que quisiera francamente es que más allá de los nombres, si alguien vino o no vino a Olivos, porque yo también no voy a mentir, que un juez hable con un Presidente tampoco es un delito, el delito es, o el problema es, que un presidente llame a un juez para decirle lo que tiene que hacer o que el juez venga a rendirle cuentas al presidente de que ha hecho lo que el presidente le pidió, eso sí es muy grave. Ahora, en la institucionalidad uno puede hablar con un juez. Yo de lo que he visto, Martín ha seguido el caso mucho porque él fue uno de los primeros que se metió de lleno en el tema de la mesa judicial, pero yo lo que veo es que hay casos muy llamativos, el caso del juez Hornos yendo a la Casa de Gobierno a anunciar la medida que va a tomar al día siguiente, y al día siguiente es la tapa de los diarios, eso sí me parece gravísimo. Si ustedes hacen memoria, yo en campaña expliqué que había un circuito en la Justicia Penal, en un programa de Tenembaun y María O’Donell, que se llamaba Corea del Centro, y expliqué que había un circuito en la Justicia Penal que empezaba en primera instancia en los fallos de Bonadío y Ercolini, seguían en la segunda instancia en los fallos de Irurzun y Bruglia, y terminaban, en la tercera instancia, en los fallos de Hornos y Gemignani, y cuando uno revisa los casos era un circuito perfectamente urdido, perfectamente cuidado. Entonces cuando uno habla de esto que pasó, y cuando habla de la necesidad de corregir lo que pasa en la Justicia, la verdad lo que yo quiero es que nunca más nadie use la Justicia para perjudicar a otro, malamente, maliciosamente, que nadie use la Justicia para perseguir a nadie que no deba ser perseguido porque ha violado la ley, eso es lo que quiero; la verdad que nadie quiere más el estado de derecho que yo, el otro día en una clase no sé qué tema tocábamos y estaba hablando de tipicidad, y la tipicidad es la necesidad de que la conducta por la que a uno lo persiguen previamente haya sido calificada como delito, y es una exigencia para que el delito ocurra. Y entonces hablaba que la tipicidad era una gran garantía, porque no nos pueden perseguir por cosas que no son consideradas delitos, y les hablaba, les decía que yo sigo creyendo en la necesidad de una Justicia independiente, y aunque a veces a mí me dicen que son ingenuo y que soy un naif, la verdad es que los que estudiamos Derecho estudiamos cómo debe ser el mundo del debe ser, cómo deben ser las cosas, y yo no me conformo en el cómo son las cosas, si las cosas son así debo cambiarlas, y debo hacer lo que debe ser. Por eso yo no me resigno a decir la verdad para qué enseño Derecho si total después llegan la influencia, el lobby que les puede hacer decir a los jueces cualquier cosa, yo no me resigno a eso, a que eso siga ocurriendo.
PERIODISTA.- Presidente, estamos sobre el horario de nuestro querido Carlos Ulanovsky, por eso no quiero avanzar mucho más, pero sí queremos preguntarle para este programa algo muy importante, que tiene que ver con las cifras que se han dado a conocer en los últimos días, que son realmente mu y dramáticas, tanto de desempleo como de pobreza, a continuación, las reveló el INDEC. La pregunta tiene que ver con algo que usted acaba de decir: “no me puedo resignar a que sucedan determinadas cosas a pesar de que me digan que son inevitables”, y uno percibe que en otras ocasiones en la Argentina ha habido servirás crisis de las cuales el rebote dio como resultado un crecimiento fuerte de la economía. ¿Qué está pasando en esta etapa en la Argentina en que después de la crisis que deja el macrismo y que produce la pandemia, por ejemplo no se está creando el empleo que se necesita para que esa gente salga de la situación de la pobreza, o que incluso sucede que aquellos que tienen trabajo no pueden salir de la pobreza?
PRESIDENTE.- Ahí hay diferentes temas como para tener en cuenta. Primero, la economía está reaccionando mucho más que bien, se están creando empleos a un ritmo realmente llamativo. El otro día me decía Caló, el Secretario General de la Unión Obrera Metalúrgica, que él tiene hoy quince mil afiliados más que los que tenía en diciembre del 2019. Hay claramente una recuperación de la economía, hay claramente una recuperación del empleo. También es cierto que durante los años del macrismo se flexibilizó mucho el tema laboral a través del mecanismo del monotributo, y el monotributo realmente se terminó convirtiendo en un sistema de trabajo informal, de trabajo no registrado, y eso creció mucho. Macri decía no, no hay más desempleo, y computaba a los monotributistas como gente empleada, pero la realidad es que los monotributistas no la están pasando bien muchos de ellos. Nosotros tenemos un ritmo de crecimiento de la economía muy fuerte, y tenemos una recuperación del empleo muy fuerte, fundamentalmente en diciembre del último año y a partir de allí en adelante, el ritmo del crecimiento del empleo formal es muy fuerte. Y también la economía está creciendo a un ritmo sostenido. Lo que es verdad es que eso no llega a la gente rápidamente, es como que tarda en llegar a la gente, y el esfuerzo nuestro es que eso llegue lo antes posible a los sectores más postergados, esa es una gran preocupación que tenemos, en eso tampoco puedo dejar de lado la preocupación que tenemos con el tema de la inflación, siendo que hemos logrado finalmente que el Fondo Monetario entienda que la inflación no tiene una sola causa, que son múltiples las causas que la determinan, algo que parecía imposible lograr que dijera el Fondo Monetario, pero la verdad que hay una cuestión multicausal en la inflación, y la inflación la verdad que le genera un gran problema a los que viven de un sueldo y a los que tienen pocos ingresos. Nosotros ahí tenemos que dar una lucha muy frontal, porque hay un problema inflacionario en el mundo entero, el mundo entero está sufriendo una inflación en los alimentos, producto que la pandemia demanda alimentos, ha crecido la demanda y de algún modo los alimentos empiezan a escasear. Pero lo que nos pasa a nosotros es que estamos aumentando la exportación de alimentos, los precios internacionales crecieron mucho, y los que producen esos alimentos quieren que los argentinos paguemos los precios internacionales, y esa es la disputa que tenemos hoy en día.
PERIODISTA.- Lo tenemos que despedir Presidente, pero simplemente como cierre, el Gobierno tiene resortes para atender esta situación….
PRESIDENTE.- Eso es lo que estuvimos hablando el día martes o miércoles, ni me acuerdo qué día fue, con Kulfas y con Basterra y con Paula Español.
PERIODISTA.- ¿Va a haber medidas?
PRESIDENTE.- Estamos trabajando en eso, sí, por supuesto. Yo lo que digo es que yo puedo entender todos, todo lo puedo entender, lo que no puedo entender es que rían de los argentinos, y lo que no puedo entender es que no se den cuenta que ellos ganan, pero no tienen por qué cobrarles a los argentinos un kilo de carne lo que la pagan en Francia o en China, no puedo entender eso, porque no hay ningún argumento que lo justifique.
PERIODISTA.- Hablo por mí y creo que por muchos del otro lado, esperamos con mucha ansia esas medidas sobre todo para que se cristalice en la mesa de los argentinos. Le agradecemos muchísimo, queremos desearle una muy pronta recuperación y agradecerle este tiempo con nosotros aquí en Toma y Daca.
PRESIDENTE.- Gracias Mariano, gracias a todos ustedes, un abrazo muy grande y un abrazo grande a Carlos Ulanovsky, que es alguien a quien admiro mucho, y que ha escrito uno de los más maravillosos libros sobre la radio, y les agradezco mucho, gracias por la preocupación.