Entrevista al presidente Mauricio Macri en CNN en Español

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ENTREVISTA AL PRESIDENTE DE LA NACIÓN MAURICIO MACRI, REALIZADA POR EL PERIODISTA MARCELO LONGOBARDI, PARA CNN, EN ESPAÑOL

LONGOBARDI.- Hola, bienvenidos, aquí estamos en la quinta presidencial de Olivos, lo que está a mis espaldas es la residencia oficial del Presidente de la República Argentina, obviamente es Mauricio Macri en diálogo con CNN.

LOCUTOR.- Mauricio Macri nación el 8 de febrero de 1959 en Tandil, Provincia de Buenos Aires. Su padre, Franco Macri, se erigió en uno de los empresarios más importantes de Argentina y él siguió sus pasos. A través de los negocios inmobiliarios, Macri padre estableció una relación con Donald Trump, que hoy se prolonga en cierto modo en el vínculo entre Mauricio Macri y el Presidente de Estados Unidos. Mauricio Macri inició su actividad como figura pública al alcanzar la presidencia del popular Club Atlético Boca Juniors, pronto halló en la política su lugar, fue diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires por la Alianza Propuesta Republicana, nombre que adoptó su partido más adelante, posteriormente fue elegido Alcalde de la Capital por dos períodos consecutivos. En 2015, Macri se postuló como el Presidente de Argentina por el frente Cambiemos y salió victorioso en segunda vuelta con el 51,34 por ciento de los votos. El mandatario busca ahora su reelección para un segundo período, como candidato de la coalición Juntos por el Cambio. Esta fue la bio CNN de Mauricio Macri.

LONGOBARDI.- Presidente Macri, muchas gracias por recibirnos este mediodía en su casa en Olivos.

PRESIDENTE.- Gracias por visitarnos.

LONGOBARDI.- Un placer ¿Qué se juega en esta elección presidencial en la Argentina? ¿Qué es lo que está en juego, Presidente Macri?

MACRI.- Está en juego confirmar el nivel de madurez que ha adquirido el pueblo argentino, el nivel de entendimiento del momento histórico, que nos va a marcar -creo yo- las décadas de mayor crecimiento en nuestra historia. El mundo está sorprendido por lo que hemos hecho en estos tres años y medio, yo estoy muy orgulloso porque sé el esfuerzo que ha costado estos tres años y medio, lo sé, positivamente, pero también me doy cuenta que todos vamos creciendo y convenciéndonos que lo más importante que hemos hecho es demoler barreras, como decía esta mañana inaugurando el viaducto San Martín, barreras morales, de valores con los cuales no queremos convivir más, cosas que ya no queremos más en nuestra vida; la mentira, la estafa, la corrupción, el engaño, la improvisación, la ventajita corta, esa viveza criolla mal entendida. Poniendo los valores de la verdad, el trabajo en equipo, la transparencia, el federalismo, la institucionalización de la Argentina y apostando a una democracia más fuerte, la Argentina emprende un camino de crecimiento que va a confirmarlo en esta elección, así que para mí es el comienzo de una etapa muy pero muy positiva para los argentinos.

LONGOBARDI.- Se lo pregunté porque hace pocos días en un artículo publicado por el Diario Perfil, uno de sus asesores más importantes, el señor Jaime Durán Barba dijo al final de un artículo muy interesante que él creía que lo que estaba en juego en esta elección era la mismísima democracia.

PRESIDENTE.- Por supuesto, los argentinos no vamos a volver atrás porque estuvimos en un estado pre-democrático y hoy justamente en esta elección lo que confirmamos es que todo lo que vamos a construir es a partir de la libertad, que nos da un sistema democrático con instituciones equilibras, poderes independientes, libertad de prensa, información fidedigna, porque nos manejamos durante una década sin información , sin datos reales de la pobreza, del delito, de la economía; cosas gravísimas que ya casi en ningún país del mundo sucede. Entonces, creo que lo que estamos confirmando es que el futuro es por acá, es un futuro donde apostamos a nuestra creatividad, nuestra capacidad, a nuestra capacidad de mejorar la competitividad del país, o sea la verdad que hay un lindo ejemplo, Jaguares. La Argentina tenía buenos jugadores rugby, cada tanto ganábamos un partido importante, pero al no competir sistemáticamente con los mejores no podíamos salir del lugar donde estábamos. Acá se armó un equipo, aceptó competir, los primeros años no nos fue bien, y de golpe, al cuarto año creo, ya estamos compitiendo con los mejores, estamos en la final. Eso somos los argentinos, si nosotros nos proponemos mejorar y hacer las cosas de una manera diferente y apostando al trabajo, apostando al aporte de cada uno, insiste, no a hace atajo, a esa ventajita corta, que no nos lleva a ningún lado. La argentina no estaba en el lugar donde le corresponde, los argentinos merecemos vivir mucho mejor de cómo estamos viviendo.

LONGOBARDI.- Presidente, le pregunto, hay ciertas preguntas que están relaciones y la primera con una parte del reportaje que viene más tarde sobre el tema de la política exterior de Argentina y el tema del MERCOSUR, y Venezuela, y Estados Unidos, y demás ¿Usted encuentra, Presidente, que tiene un reconocimiento mucho mayor en el mundo que en su propio país?

PRESIDENTE.- Sin dudas, en un aspecto sí, pero también hay muchos argentinos que siento que me apoyan, siento que me transmiten afecto, siempre es “por favor no afloje, Presidente”, “por favor no aflojés, Mauricio”, “esta es la oportunidad”. El mundo lo ve con mayor contundencia porque a la distancia se veía un país que iba en la dirección del desastre final, el desastre final sería un Venezuela, un país totalmente aislado del mundo, sin energía, sin servicios, con una crisis humanitaria bestial donde enfermedades que ya habían desaparecido como un peligro, vuelven, a un país que giró en la dirección correcto y que ve que, claramente, ha tenido aguantar muchos chubascos porque la herencia era muy pesada, pero lo ve persistir. Y ahora el mundo está diciendo, si la Argentina persiste en esta dirección que tomó y realmente confirma lo que nos dice el Presidente cada vez que nos visita, es un país donde vamos a apostar, un país donde vamos a apostar fuerte, porque primero el mundo tiene que estar seguro de nuestra solidez institucional porque cuando alguien viene e invierte en una fábrica, después no se la puede llevar. Entonces, si acá la gente percibe que lo nuestro es otro veranito y después volvemos a caer en lo mismo, por ejemplo ya ningún país del mundo nacionaliza compañías por la fuerza, eso no existe más, ya está descartado, penalizado, eliminado, estos papelones que hizo la Argentina con Aerolíneas y con Repsol encima que los hizo mal, porque está gente lo hizo mal, no lo hizo legalmente como correspondía, terminó… (Salto de Audio). Porque Aerolíneas Argentinas era un desastre cómo estaba administrada por los concesionarios, había que haberle rescindido la concesión por mala gestión pero hacerlo bien, no que después pagar más de 10 mil millones de pesos, que hemos tenido que pagar, a los anteriores nuestro cuando lo salvamos sacándoles la empresa, porque estaban haciendo todo mal. Entonces digo, lo mismo con YPF que la nacionalizamos de una manera que la pagamos el doble que lo que lo que valía después.

LONGOBARDI.- Presidente, le escuché decir alguna vez, incluso creo que públicamente, que este era el suyo, no el mío, “el peor trabajo del mundo”. Si sigue pensando eso, primero, y segundo en ese caso por qué quiere ser reelecto.

PRESIDENTE.- Es un trabajo muy duro, sobre todo en esta época donde el poder se ha ido “horizontalizándose”, con el tema del mundo digital todo se opina, todo se debate, hay mucha más ansiedad, hay mucha más inestabilidad, y uno tiene que hacerse cargo de todas esas locuras que genera esta híper-comunicación, producto de la revolución tecnológica. Pero yo amo a este país y sigo sintiendo las mismas cosas por las cuales me metí en política, que merecemos vivir mejor, que tenemos las capacidades para hacerlo y siento lo que hemos hecho en estos tres años y medio es muy valioso, y perderlo nos condenaría a perder tal vez -y no voy a exagerar- 25 años en nuestra historia, porque una vuelta atrás generaría un rechazo universal del mundo, sería aislarnos de vuelta. Y hoy sin comercio no hay desarrollo, sin relaciones con el mundo no hay intercambio tecnológico, no hay paz porque también el comercio genera paz. Entonces, hoy tenemos una oportunidad única y yo siento de corazón que estamos en el comienzo de una gran época, de una gran época, y que tengo que terminar de cruzar el río, este que los argentinos decidieron cruzar, porque no fui yo, este cambio proviene de que los argentinos decidimos cambiar la historia, los argentinos decidimos terminar de buscar responsables por lo que nos pasa y hacernos cargo de nuestro futuro. Este es el gran cambio, no le echamos más la culpa ni a poderes ocultos, ni a un sótano de Nueva York de unos señores decidiendo que la Argentina no crezca, la Argentina no creció, no se desarrolló, producto de nuestros errores y de nuestra falta de protagonismo, de no habernos hecho cargo cada uno de decir “qué pongo yo”, ¿y poner qué? El esfuerzo justo.

LONGOBARDI.- Presidente, usted ha elegido un Vicepresidente, en todo caso un compañero de fórmula para la elección presidencial que enfrenta Argentina ahora, que proviene del epicentro del peronismo, un tipo…

PRESIDENTE.- Buena palabra.

LONGOBARDI.- Epicentro, ahí está, ahí estaba el senador Miguel Ángel Pichetto, que estuvo con el presidente Menem, que estuvo con el presidente Kirchner, que estuvo con la señora Cristina Kirchner muy cerca de ella obviamente durante sus dos mandatos y que ocupa inclusive en este momento, hasta hora, la jefatura de la banca de senadores del peronismo en la Cámara de Senadores, en lo que pareció ser una violación, si cabe la palabra violación, a la noción de la identidad de su espacio político que se mantuvo siempre al margen de acuerdos con sectores sobre todo del propio peronismo ¿Nos puede explicar esa decisión?

PRESIDENTE.- Sí, primero, nosotros somos un espacio que por más que nos hemos digamos fundado desde una identidad distinta y de un compromiso distinto hacia la política con una fuerte conciencia de servir y no de que la política sea un medio para salvarse uno mismo, hemos desde el primer día producto de que creemos en eso y además porque estamos en minoría en el Congreso, en minoría dentro de un sistema que viene de años, hemos propiciado el diálogo como herramienta fundamental, que este país la había descartado especialmente después de la década kirchnerista donde era sometimiento a bifes. El diálogo, el federalismo y la búsqueda de acuerdo que propusimos pongámosle para resumir diez y conseguimos dos o tres, en estos tres años en el Congreso que nos permitieron ir avanzando en desarmar esa bomba que heredamos, pero ese mismo diálogo lo llevamos a la lucha contra el narcotráfico, la mejora de la educación, a la mejora del transporte, a Vaca Muerta, al Campo y al desarrollo futuro del campo. Entonces digo primero rescatamos fuertemente el tema del diálogo y este cambio es decir convoquemos, primero Miguel Ángel Pichetto, un punto y aparte, una persona que conocí en estos tres años y medio, cuatro encuentros personales antes de que por teléfono invitarlo a acompañarme en este desafío, pero salvarlo mucho públicamente, que es lo que vale, las personas pública valen por lo que dicen públicamente, no en forma privada. Felipe González destocó como algo malo de la Argentina y coincido con él, que las personas públicas en este país dicen 90 por ciento de cosas distintas en privado que en público, eso no sirve, eso no sirve, no sirve nada en la vida no ser genuino. El señor Pichetto, primero, es un hombre genuino, él expresa el 90 por ciento de las mismas cosas en público que en privado, tiene convicciones y yo se las vi ejercer contra su propio partido. En estos tres años y medio, él apoyó muchísimas de estas cosas contra la opinión de su partido, ni que hablar del kirchnerismo. Entonces eso vale muchísimo, ¿por qué? ¿Por qué lo hizo? Yo lo fui mirando y observando, no había especulación, había un profundo compromiso con nuestro país, el mismo que tengo yo con los argentinos.

LONGOBARDI.- ¿Nos puede contar, Presidente, cómo fue esa conversación entre usted el senador Pichetto?

PRESIDENTE.- Sí, sí, fue muy genial porque ahí encontré que tenía otra característica que yo no sabía que compartimos: la ansiedad. Entonces si lo convocábamos, hablando con Marcos le digo “¿Lo llamo? No, si viene para acá ya se va hacer un revuelo, hagámoslo por teléfono”. Entonces lo llamé por teléfono y le digo “Miguel, ¿cómo le va? Lo llamo para pedirle y ofrecerle que me acompañe por un nuevo” y me dijo “acepto”, o sea no me dejó terminar, no me dejó terminar porque se ve que ya estaba muy hablado, a través de amigos comunes. Y me dijo “esto lo hago por mi país, porque amo a la Argentina, porque creo que hace falta consolidar la democracia, acá se discute democracia o autoritarismo y por ese camino no hay futuro”, y la verdad que eso el porqué de Miguel Pichetto, lo que él representa, y además siempre esto va a fortalecer esta vocación de generar más acuerdos. La Argentina necesita entrar en una época de acuerdismo permanente porque el mundo está así, el mundo trabaja en equipo, el sector público, el sector privado, y en el sector público se trata de sacar la mayor cantidad de cosas fuera de la discusión del día a día para fortalecer ese esquema de empleo, desarrollo, crecimiento. Y bueno, y discutir para ver quién es el que conduce en las cosas digamos no tan centrales al desarrollo de una comunidad.

LONGOBARDI.- Usted entonces ahí coincide con el senador Pichetto y también con el señor Duran Barba respecto de que en Argentina está en juego un sistema donde de otro lado está el autoritarismo.

PRESIDENTE.- Absolutamente, absolutamente.

LONGOBARDI.- Usted le introdujo en la conversación al candidato que la señora de Kirchner eligió para acompañarla en su fórmula a la inversa, él candidato a Presidente y ella como vice, que es Alberto Fernández ¿Usted cree que Alberto Fernández podría poner a la Argentina en ese riesgo, en un riesgo de un formato, un sistema o una inclinación de carácter autoritario?     

PRESIDENTE.- Es que Cristina Kirchner ve la política de esa manera, ella la ve así, ella la ve como una imposición y una negación, porque no sólo se niega la realidad de todos los días, la realidad económica, la realidad social, se niega la violación sistemática de las instituciones democráticas y se plantean cosas como que la Justicia deje de ser un poder independiente, se plantea que hay libertad de prensa cuando se intenta de todos los medios y de todas las maneras presionar y ejercer un control de los contenidos. Nosotros hemos demostrado que se puede convivir con medios totalmente opositores, como hemos tenido nosotros en C5N, Página 12 y no sé cuántos más. Es convivir, aceptar que tengan una visión distinta de la realidad, a veces a uno le duele porque no se reconoce ni siquiera lo que es obvio que está bien pero, bueno, es una forma de ver la realidad. El camino que ellos propones genera un rechazo absoluto en el mundo entero y una destrucción de futuro para los argentinos.

LONGOBARDI.- Presidente, ¿va a haber un debate presidencial entre Alberto Fernández y usted? Porque él dijo que no, lo leí en un diario, bajo el argumento que usted era un mentiroso y por tanto no pensaba discutir en un debate con usted ¿Usted está dispuesto a un debate con él?

PRESIDENTE.- Hay una ley, hay una ley, yo voy a cumplir la ley como corresponde.

LONGOBARDI.- Le pido Presidente un balance de estos casi cuatro años de mandato presidencial, que tuvo obviamente altibajos importantes, problemas económicos severos, ¿cuál es su impresión? ¿Qué fue lo positivo? ¿Qué fue lo muy negativo?

PRESIDENTE.- Yo diría que para lo muy negativo dejemos a los opositores que ven todo muy negativo…

LONGOBARDI.- Se lo digo yo ahora…

PRESIDENTE.- Yo veo, yo siento que nadie viene a hacer lo que nos tocó hacer nosotros, todos queremos crecer, todos queremos desarrollar el país, pero sin bases el país no tenía futuro, un país en default, un país sin información, un país sin crédito, sin infraestructura, sin energía, no tenía futuro, o sea no había manera de construir sobre eso. Así que hubo que hace resto, hubo que ponerse a hacer como los palotes, y en un contexto donde veníamos de una década donde se había generado una seminconsciencia equivocada de que se podía vivir de arriba, y que se podía vivir eternamente sin pagar la boleta de luz y de gas sin que nos fuese a pasar lo que le pasó a Venezuela, que se apagó todo. Entonces, digo, fue muy duro, fue muy duro para nosotros como Gobierno pero también para cada argentino que tuvo que tomar consciencia que habíamos estado en una gran borrachera, nos habían querido engañar que era así, no había que apostar como nos dijeron nuestros abuelos al trabajo. Entonces, creo que eso es lo que hay que valorar, es duro decir que el mayor éxito económico es que no haya explotado la bomba del todo y que la hayamos ido pudiendo desarmar de a poco y haber generado bases que te permiten crecer a futuro, porque hoy estamos frente a una revolución energética, no sólo Vaca Muerta sino renovable. Hoy hablo con el presidente Piñera de que van a integrar su matriz energética con nosotros, eso es hablar de 40 millones de metros cúbicos día de exportación de gas, eso es una revolución de empleo acá, de ingreso de divisas, estamos hablando de exportar medio millón de barriles de petróleo al mundo, otra soja. Entonces, estamos hablando de una revolución en el turismo porque ahora de aislarnos, para justificar ideológicamente Aerolíneas Argentinas, tenemos cada vez más líneas aéreas que llegan de todas partes del mundo, trayendo turistas y generan empleo en Jujuy. Este fin de semana estuvo casi todo cubierto el país con el turismo local y el poco extranjero que vino, y cada mes vienen más extranjeros a visitarnos. Entonces, digo, todo eso fue un proceso que lleva tiempo, entonces hubo que ir haciéndolo y es como que son como bases en muchos casos invisibles que te generan el crecimiento a futuro, y ese ha sido el proceso que hemos hecho, y que ha sido duro, claro que sí, qué te parece. Pero ahora siento que en esta estabilidad que hemos logrado, que lo único que nos falta es resolver la incertidumbre política, que sacada la incertidumbre la Argentina arranca más fuerte todavía, pero de esta estabilidad ya empezamos a sentir bases más sólidas y que lentamente, ahora esta vez sin vivir del crédito externo ilimitado, estamos empezando a vivir de nuestros recursos.

LONGOBARDI.- Presidente, sobrevuela todo el tiempo sobre Argentina la noción de un default, será por antecedentes, por la historia de la Argentina, porque estamos complicados con la deuda, por lo que sea, pero la idea de que la Argentina puede ir a un default, usted sabrá muy bien, que está siempre presente ¿cuál es su reacción ante esta hipótesis?

PRESIDENTE.- Muy negativa, la Argentina defaulteó ocho veces, la última vez fue el mayor default de la historia de la humanidad. Defaultear, ¿qué significa? Incumplir, mentir, engañar y de ahí es donde tenemos que salir, ese es el cambio que tomamos hace tres años y medio.

LONGOBARDI.- Usted diría que Argentina no tiene, digamos viendo a los inversores, los que tienen bonos argentinos, o los que siguen la economía argentina al mismo tiempo que el proceso político ¿usted despeja este riesgo?

PRESIDENTE.- Sin dudas, la Argentina no va a defaultear, la Argentina tiene una deuda baja respecto a su PBI, hay países que están muchísimo más endeudados que nosotros, y no tienen riesgo de default. La discusión de la Argentina es si vamos a seguir por este camino, si nos vamos a comprometer a respetar la ley, y si nosotros comprometemos eso y reafirmamos eso en esta elección, la Argentina no tiene problemas de financiamiento, va a tener financiamiento. La Argentina necesita tener un presupuesto cada vez más sano, con menos impuestos -algo que le obsesiona al señor Longobardi mucho y tiene razón- menos impuestos que le saquen la pata de encima a la gente que quiere crecer, menos gastos y que la política se administre como administra cada argentino en su casa: con cuidado el dinero, no despilfarrando el dinero, y un sistema de ingresos al mercado laboral inteligente que permita que haya trabajo y que no la gente termine trabajando en negro porque en blanco es un riesgo, una contingencia litigiosa. Que ya resolvimos con una gran revolución del tema ART, es el Riesgo de Accidente de Trabajo está resuelto, salvo Santa Fe que todavía no adhirió, en todos lados esas mafias que se habían instalado de hacer juicio por un delito por un caso que no había sucedido, que fundía a las pymes argentinos, ahora hay que lograr sacar la litigiosidad de todo el mundo. Si una persona no cumple su trabajo, roba, que el empleador lo pueda sacar, así como también la ley tiene que cuidar al trabajador que hace las cosas bien.

LONGOBARDI.- Presidente, ¿cuántas mafias encontró en este período de Gobierno enquistadas en diversos lugares del Estado o de la vida pública argentina?

PRESIDENTE.- Yo diría que un comportamiento mafioso muy extendido, muy extendido, producto también del no respeto a la democracia, al no respetar la democracia no respetar la ley y todo es opinable. Un señor pudo tomar una comisaría, ¿y cuántos años pasaron para que lo juzguen? Entonces ese tipo de cosas se contagia, así como hoy en la Argentina -y es algo positivo- se está contagiando el crear, el hacer, el emprender, el innovar, y todo el mundo empieza a engancharse con cómo mejoro lo que hago. Hubo muchos años que venía de antes, y en la década kirchnerista se profundizó, de cómo profundizo el estafar al otro, el apropiarme el trabajo del otro, porque finalmente, ¿qué es lo que hacía ese señor que le cobraba 100 dólares por contenedor a cada uno de los que entraba al puerto? Se apropiaba de parte del trabajo del productor que estaba en el Chaco, ¿y qué pasaba cuando el practicaje en cada puerto valía mucho más caro? Se apropiaba ese trabajo o lo dejaba sin trabajo, que es la discusión que también tengo con el señor Moyano. Cuando el cobra las cosas que cobra para su gremio por izquierda, por derecha, lo que hace es dejar a mucha gente sin trabajo.

LONGOBARDI.- Les contamos a los televidentes que están fuera de la Argentina que el señor Moyano es el dirigente sindical más importante de la Argentina, que maneja el gremio de los Camioneros.

PRESIDENTE.- No sé si es el más importante, es el más conflictivo, el más prepotente, pero no sé si es el más importante. Hay muchos dirigentes sindicales que tienen consciencia de país, que se sienten orgullosos de su trabajo, que tratan de mejorar, que se hacen parte de esta revolución que la Argentina ha emprendido a favor de la competitividad, porque más competitividad que trae, más empleo.

LONGOBARDI.- Bueno, en este momento hay una ofensiva sindical del gremio de los bancarios sobre la compañía más innovadora que tiene Argentina que se llama Mercado Libre, que es un empresa que es la compañía más valiosa de la Argentina, que vale más que nuestras compañías petroleras y que es una compañía de comercio electrónico, se llama Mercado Libre, y hay un conflicto muy severo entre los sindicatos y esa compañía ¿Tiene una visión de este problema?

PRESIDENTE.- Sí, ese señor también es otro prepotente, este hombre también otro prepotente.

LONGOBARDI.- Está hablando de Sergio Palazzo.

PRESIDENTE.- Sí, un hombre prepotente, la verdad que no suma, que ha cargado el sistema de ineficiencias, ¿y en qué termina eso? Redundando en una mayor tasa de interés para todos los argentinos, y ahora quiere avanzar sobre un sistema que desde la tecnología le mejora el servicio a la gente, porque hoy hay gente que en estas plataformas digitales nuevas puede colocar su dinero a interés por día, y vamos todos rumbo a pagar en forma electrónica.

LONGOBARDI.- Con el teléfono.

PRESIDENTE.- Con el teléfono, la Argentina va a ir en meses a que todos paguemos con el teléfono, y eso trae seguridad y aparte mejora el sistema financiero, porque tiene más dinero el sistema financiero, mientras nosotros manejamos electrónicamente, para prestarle a la pyme que quiere crecer. Y la verdad que el Estado va a estar y el Gobierno va a estar apoyando a esos desarrollos contra este tipo de actitudes prepotentes, patoteras que tiene esta persona, Palazzo, como tantos otros que la puedan llegar a tener.

LONGOBARDI.- ¿Y qué diría de los brutales y salvajes paros aeronáuticos que hay en la Argentina todo el tiempo? Hubo alguno la semana pasada.

PRESIDENTE.- Lo mismo, lo mismo, la verdad que ese señor Biró, creo que se llama…

LONGOBARDI.- Pablo Biró.

PRESIDENTE.- En vez de darle vergüenza que el noventa y pico de los argentinos que aún todavía no vuela, a pesar que ya han volado medio millón de argentinos que nunca habían volado, con toda esta revolución de los aviones, el noventa por ciento de los argentinos no vuela con frecuencia, ¿y por qué tienen que pagarle a Biró todos sus privilegios y todas sus ineficiencias que cuestan todos los meses miles de millones de pesos? ¡Una locura! Las nuevas líneas aéreas vuelan, llevan a la gente de un lado para el otro, de destinos que nunca se habían volado, entre ciudades del interior, porque la Argentina se está empezando a conectar, o alguien e Córdoba puede ir a pasar el fin de semana a las Cataratas del Iguazú sin tener que venir a Buenos Aires, antes no lo hacía por el fin de semana, eran seis, siete horas, no existía, ahora se toma un avión en la Ciudad de Córdoba y se va o a Neuquén, o a Tucumán, o a donde quiera de visita por el fin de semana, y no le cobran nada a los argentinos que no vuelan. Aerolíneas Argentinas hoy le sigue costando a los argentinos que no vuelan más de 2 mil millones de pesos por mes, y este señor no solo no se pone a ayudar para que no tengamos los argentinos que poner ese dinero que necesitamos para mejorar la educación, llevar más cloacas, llevar más agua potable a gente que no la tiene, sino que además se opone al desarrollo de otras líneas aéreas, es una cosa disparatada, cuando él se supone que debería estar contento que a más líneas aéreas más pilotos van a volver, como el de mecánicos más mecánicos va a tener, como personal de abordo. Entonces son gente, insisto, que no entiende el cambio que ha tenido la Argentina, donde exige que todos tiremos del carro en la misma dirección, y la misma dirección es yo hago mi trabajo lo mejor posible para ayudarte a vos a que tengas un mejor trabajo.

LONGOBARDI.- Presidente, el kirchnerismo ha postulado en diversas oportunidades que son víctimas de una percusión judicial impulsada por su Gobierno; Alberto Fernández, el candidato del kirchnerismo, ha planteado que deben ser revisados los fallos que han enviado a la cárcel a lo que supongo yo ellos creen que son presos políticos; el Papa Francisco se ha referido al tema de manera indirecta, hablando de esta noción “lawfare”, que hay una guerra judicial que tiene como propósito zanjar cuestiones políticas, e inclusive se ha dicho que lo peor que ustedes han hecho ha sido perseguir a la hija de la señora de la señora de Kirchner, que está en Cuba en este momento, se supone que alejada de la posibilidad de ir presa como consecuencia de esa persecución que ustedes han emprendido. Le pido también una reacción sobre estas nociones, que he comentado brevemente, pero que son obviamente una discusión cotidiana aquí en la Argentina.

PRESIDENTE.- No es nada nuevo, Cristina Kirchner viene diciendo eso cuando era presidenta y desde que es expresidenta en forma permanente. La verdad que si hay algo de lo cual estoy orgulloso que ha hecho Cambiemos es de fortalecer la independencia de poderes y decirle a la Justicia “por favor investigue y en tiempo real”, por eso por primera vez en la historia, a meses de haber asumido, y tuve que pasar por una investigación, por la famosa denuncia de esos Panamá Papers, una denuncia trasnochada, del momento uno dije “esto es un disparate”, pero dije tengo que dar el ejemplo, no tengo que andar quejándome, descalificando al fiscal, vamos a contestarle al fiscal todo lo que requiere, y se le contestó y se demostró que no había nada en esa denuncia, que era una denuncia falsa. Esta es la misma actitud que deberían tener ellos, si ellos están convencidos de que no han hecho nada, tienen que presentarse a la Justicia, no buscar chicanas y explicar. Pasa que hay cosas que desde la tribuna, uno mirando, son difíciles de explicar: hoteles que no tenían, que se llenan con contratistas del Estado que no usan las habitaciones. La verdad que hay muchas difícil de explicar, ¿por qué todo valía el doble y el triple de lo que estamos pagando nosotros, o cuarenta por ciento el kilómetro de lo que pagamos por las rutas que estamos haciendo. Hay cosas que son difíciles de explicar, pero claramente ellos tienen una concepción de la verdad y de la realidad totalmente distinta de la que tengo yo como ingeniero, para mí dos más dos son cuatro, no son cinco u ocho o lo que a vos te parezca.

LONGOBARDI.- ¿Usted conoce personalmente a su rival, a Alberto Fernández?

PRESIDENTE.- Sí, tuve dos reuniones, una peor que la otra, todas las cosas que me dijo eran falsas, en todo lo que se comprometió era mentira.

LONGOBARDI.- ¿En qué circunstancias?

PRESIDENTE.- Como Jefe de Gobierno.

LONGOBARDI.- Usted Jefe de Gobierno, y él Jefe de Gabinete de Cristina Kirchner.    

PRESIDENTE.- Así es, y no fueron reuniones felices.

LONGOBARDI.- ¿Y qué opina o qué reacción o qué impresión le causó la vuelta de Sergio Massa -que en algún momento estuvo ciertamente conectado con su Gobierno, viajó con usted a Davos en el año 2016- de su vuelta como candidato del kirchnerismo?      

PRESIDENTE.- Habiendo hecho los esfuerzos para convencerlo de por dónde iba el mundo, y habiendo visto cómo se comportó, no me sorprendió, y alguna ventajita debe haber sacado.

LONGOBARDI.- Lo cambio de tema. El MERCOSUR acaba de firmar un acuerdo o de llegar a un acuerdo con la Unión Europea, un acuerdo de libre comercio, que es una noción obviamente muy genial, pero que está también al mismo tiempo sometida o ajustada a un debate muy complejo en el mundo, los beneficios o no que genera el libre comercio. Le pedimos algún detalle sobre ese acuerdo y me gustaría escucharlo, si nos puede contar algo, de cómo fueron las conversaciones especialmente entre usted y el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.

PRESIDENTE.- Lo primero fu restablecer relaciones en el MERCOSUR, con Uruguay, después de las pasteras, era un desastre, por eso lo primero que hice fue tomarme el helicóptero de acá la Residencia de Anchorena y comer un asadito con el presidente Tabaré y en cinco minutos decirle perdón, perdón, perdón, todo esto lo arreglamos, lo del puerto, lo de las pasteras.

LONGOBARDI.- Le recordamos a los televidentes que llegó a cortar, impulsado por el gobierno del señor Néstor Kirchner en su oportunidad, los puentes que unen a Argentina con Uruguay en reclamo por unas compañías de producción de papel finlandesas que instalaron en Uruguay después de una política de Estado uruguaya muy consistente al respecto.

PRESIDENTE.- Y después con Brasil y con Paraguay, a Paraguay lo habíamos querido expulsar del MERCOSUR, Brasil por más que había afinidad política, en la gestión los “Moreno” de la vida generaban conflictos permanentes con Brasil, con lo cual pusimos mucho énfasis en restablecer relaciones, puse mucho tiempo personal en restablecer confianza, y eso me permitió ayudar y liderar la dirección de este acuerdo, que era el primero que venía en la lista, y después por supuesto la muy buena relación que trabé con Macron, con Merkel, con España, que ahí uno ve cuando es una política de Estado, porque mi relación con Rajoy era maravillosa, afecto personal, pero Sánchez el primer día dijo “para nosotros Argentina es fundamental, yo me quiero llevar bien con vos, apostemos al MERCOSUR-Unión Europea también. Y después en el G20 en Osaka había un corto circuito entre algunos planteos públicos que había hecho Jair Bolsonaro acerca el acuerdo de París, y Macrón, lo llamé en un momento un aparte a los dos y les dije: “este es mi amigo, él es mi amigo, si son mis amigos tienen que ser amigos entre ustedes, siéntense a dialogar y a encontrar una solución al tema del cómo salvaguardar el tema cambio climático y el Acuerdo de París, y se sentaron e hizo que fluya todo y logremos esto que hace veinte años no debíamos, ¿no?, porque para mí -que es lo importante para que los argentinos sepan- esto es como una autopista, una autopista hacia el crecimiento, porque ten genera flujo de comercio, flujo de inversiones, flujo de relaciones.

LONGOBARDI.- Horas después el presidente Macron declaró públicamente, o por lo menos su vocero, en rigor de verdad, no él, que para Francia era muy complicado avanzar, que no estaban listos para el acuerdo.

PRESIDENTE.- Eso demuestra que no es fácil para nadie, siempre hay miedos internos, siempre hay preocupaciones, y yo digo para los miedos argentinos que tuvimos en cuenta eso, y algo más importante, cuando hablo de que falta un año y medio o dos para que todos los congresos lo aprueben y entre en rigor, y diez años para algunos sectores y quince para otros, y los más sensibles luchamos porque hay más tiempo, porque también yo entiendo -y vos lo entendés muy bien Marcelo- que esto es un trabajo en equipo, si tenés un gobierno que te cobra impuestos distorsivos, que te presta malos servicios, que no genera un mercado competitivo para que la logística sea competitiva, ¿vos cómo vas a competir desde tu fábrica?, si un gobierno te deja sin energía y la energía se importa y es cara, ¿cómo vas a competir desde tu fábrica? Podés hacer todo bien y el sobrecosto que te pone el Estado te mata. Si es un gobierno que tiene todo en trámites digitales, como estamos teniendo ahora, y Ventanilla Única de Comercio Exterior, que todo lo hacés desde tu oficina y en una computadora, y tenés que ir a hacer peregrinación de coimas y burocracias, vos no podés competir. Dije: “si vamos a hacerlo los dos juntos, estamos haciendo un montón de cosas, tenemos que seguir bajando impuestos, tenemos que seguir mejorando la logística, el tren tiene que llegar a más lugares, el camión tiene que bajar de costo, los puertos tienen que funcionar mejor, los aeropuertos tienen que estar cada vez más potentes para que haya carga también que sale por los aviones. Entonces todas esas cosas son simultáneas, pero tomémonos estos diez años y sepamos, estamos todos a entrenarnos, todos a mejorar, todos como los Jaguares, ¿vamos a entrar en una competencia? Bueno, todos a trabajar juntos para que esto todos los días mejore. Y lo maravilloso es que cuando vos mejorás, cuando vos está en un ambiente competitivo, sos feliz, te sentís vital. Yo les digo a todos: Vayan la Vaca Muerta, vaya a ver lo que pasa en Vaca Muerta, esos es un sistema competitivo, a ver quién fractura más, quién saca más metros cúbicos de gas, más barriles de petróleo, está todo el mundo entusiasmado, porque ven que crecen, que eso se desarrolla, y eso mismo hay que hacerlo en cada sector en el país.

LONGOBARDI.- No sé de dónde salió, probablemente de este mismo acuerdo MERCOSUR-Unión Europea, la noción de un acuerdo MERCOSUR-Estados Unidos, no sé si lo dijo Bolsonaro o lo confirmó usted, pero de hecho fue noticia hace una semana. ¿Hay algo de esto?

PRESIDENTE.- No, digamos que en el camino, después de este viene el EFTA, que es el que lidera Suiza, son otros países de la región de Europa; después viene Canadá, que ese está muy avanzado, uno puede ser en septiembre y el otro puede ser antes de fin de año; y después viene Corea. Pero con Estados Unidos lo que hay es una excelente cooperación, ya hay un nivel de diálogo y cooperación complejos como la lucha contra el narcotráfico, temas complejos como el lavado de dinero, Estados Unidos está en una excelente relación, como la hay con China, como la hemos querido tener con todo el mundo, porque todo el mundo es una oportunidad para nosotros.

LONGOBARDI.- En el próximo bloque le vamos a preguntar al presidente Macri por su relación aparentemente tan personal con el presidente norteamericano Donald Trump, y obviamente por Venezuela.

Presidente, usted parece ser uno de los pocos presidentes del mundo que tiene muy buena relación con Trump, de hecho acaba de ocurrir algo bastante escandaloso entre Estados Unidos y Gran Bretaña, él descalificó como una “tonta” a la señora Theresa May, insultó al embajador. ¿Cómo es esa relación Macri-Trump?

PRESIDENTE.- Yo tengo la suerte que nos conocimos cuando yo tenía 24 años, que mi padre tenía un negocio en Nueva York muy importante, que se lo vendió a Donald Trump a mí me tocó hacer el cierre definitivo, y de aquella época nos quedó esa relación, ambos compartimos una pasión por el deporte, especialmente él por el golf, igual que yo, no es una pasión tan grande como la que tengo por el futbol, pero me gusta mucho el golf también. Y ahí quedó esa relación, la verdad que ha sido muy lindo rencontrarnos, en un rol totalmente distinto, y permitir acercar a nuestros países.

LONGOBARDI.- De hecho ninguno de los dos suponía que ambos iban a ser presidentes de sus respectivos países allá por los ´80.

PRESIDENTE.- Ni la menor idea, ni una pista en ese momento de que esto iba a venir para acá, así fue una sorpresa muy grande volver a rencontrarnos, y por supuesto las relaciones humanas cuentan.

LONGOBARDI.- De hecho puede ser que usted haya sido el único presidente del mundo que conocía a Trump de antes, hasta el momento que él se vuelve presidente.

PRESIDENTE.- Absolutamente, el único, y eso me generó claramente una oportunidad, porque las cuestiones humanas son importantes.

LONGOBARDI.- Juegan un papel.

PRESIDENTE.- Obviamente.

LONGOBARDI.- ¿Cuánto jugó eso en favor de la Argentina al momento súper complicado el año pasado, cuando Argentina tiene que recurrir al Fondo Monetario, en una instancia financiera bien compleja? ¿Jugó un papel Trump?

PRESIDENTE.- Absolutamente, totalmente, sin el apoyo de Estados Unidos primero, que es el principal accionista, y sin el apoyo de Alemania, Francia, Italia, España, China, aunque tenga un papel no tan relevante, hubiese sido imposible recibir la ayuda más grande de la historia que ha dado el Fondo Monetario Internacional, nunca el Fondo en tan poco tiempo puso tanto dinero, cuando uno ve la torta del Fondo de préstamos, la Argentina tiene hoy la mayor parte de la cartera, eso ha sido algo inédito producto de un apoyo político. Por eso yo le explicaba a la gente, ¿pero por qué los mercados nos castigaron tanto? Porque el mercado es algo distinto, el Fondo es una decisión política, los principales líderes del mundo decidieron apoyar a la Argentina en esta etapa de salir del populismo, decidieron apoyarme en este camino de marcar un rumbo distinto para la región. El mercado solamente mira fríamente en una computadora qué le conviene, y si hay más riesgo o menos riesgo, por eso en la medida que las encuestas van marcando que hay mayor posibilidad de continuidad de lo que estamos haciendo todas las cosas van mejorando: los precios de las acciones, los bonos argentinos suben, porque el mundo está esperando a ver si continuamos, si continuamos se viene una etapa muy buena para la Argentina, si no nos creemos que ya hemos hecho todo, que no tenemos que hacer más nada.

LONGOBARDI.- Se me ocurre que no puede haber personajes más contrapuestos que el presidente Trump, Jair Bolsonaro y usted. ¿Cómo hace para llevarse con ellos?

PRESIDENTE.- (RISAS) Siempre hay un lugar desde el cual conectarse, podemos tener distintas personalidades, unos más…

LONGOBARDI.- Diferentes visiones políticas, digamos, Trump promueve no al acuerdo del libre comercio, no es una persona amigable con la prensa.

PRESIDENTE.- Digamos, sobre la prensa sí, podemos tener una diferencia, en términos de la tolerancia de cada uno, pero no en el libre comercio. Ese es un reduccionismo, Estados Unidos es el país más abierto, creo yo solamente superado puede ser por Australia y Chile, pero Estados Unidos es el país que más comercia con el mundo entero, tiene un altísimo déficit comercial, pero lo que él plantea es que – desde ese lugar – siente que hay algunos que le hacen trampa al libre comercio, con respecto a Estados Unidos. El suele decir: “mucho libre comercio y al final es para que Estados Unidos les compre y Estados Unidos no les pueda vender”, yo creo que hay más el lugar desde dónde él lo plantea.

LONGOBARDI.- Chile acaba de poner visa a los venezolanos que en muchos casos se van poco menos que caminando.

PRESIDENTE.- Así me dijo el Presidente, caminando.

LONGOBARDI.- Exactamente. ¿Argentina va a ser algo semejante, siendo que aquí estamos obviamente, vienen muchos venezolanos de este éxodo brutal que vive Venezuela?

PRESIDENTE.- No está en la agenda de corto plazo, claramente la crisis humanitaria inédita en la historia de nuestra región que está viviendo Venezuela, comienza a afectar a todo el mundo, especialmente a Colombia, que se habla de millones de venezolanos emigrando de a pie, es complejo, pero también tenemos una enorme solidaridad con el pueblo venezolano, que la tuvo con nosotros en épocas donde también hubo gente se tuvo que exiliar. Y la verdad que aparte hasta ahora son toda gente que viene con la mejor intención de trabajar, de aportar, agradecida de la oportunidad que se les da, y lo que tenemos que hacer todos es seguir en esta batalla, como el Grupo Lima lo está haciendo, de reclamar por la vuelta a la democracia, reclamar por una salida electoral rápida, que pare este desastre que está viviendo el pueblo venezolano.

LONGOBARDI.- ¿Mantiene usted relación habitual con Juan Guaidó?

PRESIDENTE.-. Sí, la mantengo y lo reconozco a él como presidente interino, lo hemos reconocido a su embajador acá, y la verdad que me cuesta entender cómo el kirchnerismo, con Cristina Kirchner a la cabeza, sigue ratificando su apoyo a Maduro, ya me costó entender cuando lo condecoraron, me pareció una vergüenza, porque ya Chávez había llevado a Venezuela a un estado pre-democrático, Maduro lo profundizó enormemente, pero ya en la época de Chávez se veía este tema de no respeto de las libertades y la independencia de poderes.

LONGOBARDI.- Presidente, estamos a horas de que se cumplan 25 años del atentado que sufrió la AMIA aquí en la Argentina, que fue un atentado obviamente que impactó a nivel mundial, el segundo que tuvo Argentina, y se han dado, de hecho esta semana fue tapa de los diarios, la posibilidad de que Argentina declare a Hezbollah formalmente, como ha hecho Canadá, Gran Bretaña, Estados Unidos y otros países, como grupo terrorista. ¿Es así?

PRESIDENTE.- Estamos avanzando para declarar al grupo armado del Hezbollah como una organización terrorista, reiterando nuestra posición ya que es muy clara desde que asumimos el Gobierno de Argentina, de rechazo al terrorismo, a cualquier organización, como se quiera disfrazar, que ejerza la violencia en estos términos.

LONGOBARDI.- ¿Cómo le cayó lo de Messi contra la Conmenbol?

PRESIDENTE.- Me pareció extraño, entiendo claramente que los dos penales pueden haber sido penales, que merecimos ganar ese partido, que jugamos igual o mejor que Brasil, no tuvimos suerte, soy un defensor de Messi incondicional, un agradecido de tenerlo vistiendo la camiseta argentina, siempre creo que sin él no hubiésemos tenido ni siquiera esas tres finales, que no suerte, hay un punto en el que hay que tener un poco de suerte al fútbol, lo digo yo que gané muchas Copas Libertadores por penales, y a veces no se te da. Pero la verdad que me parece que el fútbol es así, te pasan estas cosas.

LONGOBARDI.- Por último presidente Macri, ¿se le ocurrió que pueda no ser relecto?

PRESIDENTE.- Siempre es una posibilidad, pero en este caso no me preocupa mí persona, me preocupa el futuro de los argentinos, y creo que así como tenemos la posibilidad de entrar en una época única de desarrollo para el país, porque hemos puesto en demostración o puesto en evidencia que en cada cosa que hemos emprendido hay futuro, con esta nueva Ley de la Economía del Conocimiento, los Galperín de la vida, los Migoya de la vida van a multiplicarse, porque hay talento, con el turismo se va seguir multiplicando porque la Argentina es un lugar increíble, la cantidad de lugares que uno tiene que conocer, y les digo a los argentinos primero antes de viajar conozcan nuestro país, porque yo desde la política tuve la suerte de conocerlo y me enamoro cada día más, con la energía, con el campo ni hablar, ese gran motor del país, la minería, al industria, realmente hoy podemos exportar lo que se nos ocurra: tenemos todo para generar un futuro inédito en la historia. Si creemos de vuelta que el futuro pasa por la arbitrariedad, por la negación de la realidad, por la intolerancia, ahí sí vamos a perder, insisto, 25 años, con lo cual descarto que eso vaya a ser nuestro futuro, la verdad toca a los argentinos, trabajando, sin que nadie nos regale nada, pero trabajando nos toca a los argentinos vivir mejor y ser todos parte de una historia de superación.

LONGOBARDI.- Gracias por recibirnos.