El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, afirmó que los funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI) "no tienen derecho a ningún monitoreo" de la situación económica del país. En este punto manifestó que el gobierno argentino "toma sus propias decisiones y las lleva a la práctica". Además, con respecto al último informe del FMI, el funcionario planteó que sigan "diciendo tantas cosas como quieran y como han dicho y gracias a Dios nunca acertaron en sus pronósticos.
Al ingresar a Casa Rosada, cuando fue consultado por el último informe del FMI en relación a la Argentina, sobre el pronóstico de recesión para 2016, Fernández respondió: "¿Qué anuncian, pero qué anuncian? Si nunca acertaron. ¿Con qué datos los van a sacar, con qué cálculos lo van a hacer?". "Me parece mucho más hábil que alguien se siente en un escritorio con un (lápiz) Faber y una calculadora de un teléfono y haga números más sensatos de los que hacen desde el FMI, ¿por qué van a acertar estos señores ahora?", completó.
Al respecto como contrapartida a este informe, indicó "hoy, hasta la CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe) dice que la Argentina es el único país de Sudamérica que va a estar creciendo como ya lo está haciendo. Pero ellos ( FMI) revolean los números que se les antoja y que sabe Dios qué cosas es la que están midiendo".
A continuación, Fernández puntualizó en relación a la relevancia de este informe: “que digan y pidan lo que quieran. Nosotros somos socios del FMI desde 1956, Juan Perón nunca quiso ser socio del FMI, (un organismo) propio de los acuerdos de Bretton Woods; es la revolución fusiladora la que se asocia al Fondo Monetario Internacional". En ese sentido, el jefe de ministros detalló que "en todo caso cuando Néstor Kirchner toma la decisión de poner los pagos al FMI para que definitivamente no incidieran sobre nuestras decisiones, morigera la responsabilidad desde el artículo cuarto, que es el que dice que tienen derecho al monitoreo".
"La verdad es que el FMI no tiene derecho a ningún monitoreo. La Argentina toma sus propias decisiones y las lleva a la práctica. Ellos (pueden) seguir diciendo tantas cosas como quieran y como han dicho y gracias a Dios nunca acertaron en sus pronósticos, con lo cual ahora uno tiene que creer que vamos por el mismo camino", manifestó el funcioanario. Sobre este punto, sostuvo que “ lo que están haciendo es tratar de preparar un terreno para un supuesto futuro, donde suponen que un presidente nuevo que venga le prestará un poco más de atención de la que le vienen prestando los presidentes argentinos, pero eso no va suceder porque todos tenemos en claro adónde vamos”.
“El FMI en ese caso no ha tenido gestiones que hayan sido muy acertadas en ese tema, las premoniciones han sido de fracaso fenomenal”, dijo Aníbal Fernández e invitó a ver “cualquiera de los videos de los periodistas del establishment, que cobran del exterior, sosteniendo en el año 2001 que las cosas eran impecables, que el sistema financiero era indestructible”.
Por último, el funcionario recordó la historia reciente de nuestro país y en particular la tragedia económica y social del año 2001 en que “algunos de los economistas de (Mauricio) Macri, como (Carlos) Melconian decían, anunciaban que se iba a exportar el sistema argentino de aquella época". "Por Dios –concluyó Fernández -, por Dios no exporten ese modelo. ¡No hagan sufrir a tantos millones de personas, por favor!. Así que si ese es el pensamiento de estos funcionarios del FMI y de estos economistas de nuestro país, bueno, por suerte le erraron tanto y nosotros nunca les prestamos atención".
Malvinas
Por otra parte, Aníbal Fernández afirmó que cualquier soldado que haya sido movilizado durante la guerra de Malvinas, en 1982, para acceder al beneficio de una pensión "tiene que haber participado de la acción bélica", pues así lo estableció un fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en el fallo del demandante Víctor Hugo Arfinetti contra el Estado Nacional, del 7 de julio de 2015.
“Yo soy un malvinero, pero en esto hay que ceñirse a la situación en la que estamos”, dijo el ministro coordinador, En ese sentido, explicó que Arfinetti “se presenta contra el Estado Nacional, reclamando los beneficios de la pensión” y el fallo de la Corte agrega que “cualquier soldado que haya sido movilizado si no participó de la acción bélica no tiene derecho” a la pensión.
“Los únicos que quedan con derecho al beneficio conforme a este fallo son solamente los que tuvieron una participación, los que fueron específicamente actores de la guerra en forma directa”, remarcó el funcionario.
Asimismo, el jefe de Gabinete dejó en claro que, en el caso de la construcción que intentaron realizar ayer ex soldados en la Plaza de Mayo, la responsabilidad de resolver la situación es la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. “La Plaza de Mayo es un bien del dominio público, con lo cual no puede ser utilizado de ninguna manera por el dominio privado, y la Ciudad de Buenos Aires en este caso tiene todo el derecho, sin ni siquiera recurrir a la Justicia, de resolver ese tema porque tiene la tutela de ese bien del dominio público”, afirmó.
Al respecto, Fernández consideró que la Ciudad actuó con “comodidad”, al “tirarle el caso a la justicia para que la justicia disponga y en todo caso echarle la culpa a la Policía Federal”.
Fernández sostuvo que la Policía Metropolitana “es hábil” para intervenir en un caso de narcotráfico en Bragado (Provincia de Buenos Aires) donde fue a pedido del juez (Claudio) Bonadío o también ir a Rio Gallegas, Santa Cruz, a realizar allanamientos “y no son hábiles para responder a la tutela de un bien público como la Plaza de Mayo y resolver ese tema per se; suena a comodidad, y a oportunismo”, dijo Aníbal Fernández.
Por último, recordó que el 25 de mayo “Mauricio Macri puso el grito en el cielo porque dijo que el gobierno nacional no pidió autorización para hacer los actos” de esa fecha patria “y ahora que le toca a él, como jefe de la Ciudad Autónoma hacerse cargo de poner en orden la situación de un bien de orden público, como es la Plaza de Mayo”, concluyó el funcionario nacional.