El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, sostuvo que no se puede ir a ciegas a un debate entre los candidatos presidenciales, sin conocer las reglas de juego, pues termina siendo una batalla campal verbal. Agregó que tampoco es momento, en medio de un proceso electoral, proponer una ley sobre dichos debates.
En diálogo con los periodistas, a su ingreso a Casa Rosada aclaró que no habla en nombre de Daniel Scioli, quién no participaría de un debate. “No soy su exégeta”. Además, sostuvo que los debates de los candidatos se deben desarrollar “en el marco de algo serio. Tiene que haber una definición clara de un lugar neutral, con periodistas neutrales”.
Asimismo, consideró que se debe “garantizar que uno pueda exponer respecto de cada una de las preguntas con seriedad, que no termine siendo una suerte de batalla campal verbal que perjudica a todo el mundo. Yo no me sometería desde ningún punto de vista; hablo de mí, con lo cual supongo que este marco Scioli dice esto con mucha claridad”.
Seguidamente, agregó que está de acuerdo en debatir una ley sobre este tema, pero “no llevar a una discusión donde me quieren llevar a jugar un juego que no es el que yo juego, con un reglamento que me imponen. No estoy de acuerdo yo tampoco. Si no hay un marco claro yo no debato en ningún lado, no hablo por Scioli porque, no soy su exégeta”. El funcionario recordó que fue el primero que instaló este tema, con una iniciativa que presentó junto al senador (Eduardo) Aguilar del Chaco; no daban los tiempos porque comenzaba el proceso electoral y hacer una ley en medio del proceso electoral no es serio”.
“Acá hay una discusión por los proyectos políticos si hubiera las garantías de que esto se desarrolle en un determinado lugar, con un tiempo determinado, con una cantidad de preguntas determinadas, el tiempo para que cada uno exponga, el otro no opina mientras que está exponiendo el que está exponiendo y se respetan las reglas de juego, debato con cualquiera; yo no tengo inconvenientes, pero esas reglas de juego no están en ningún lado. Es un juego que no se conoce, en una cancha que no se conoce, con una pelota que no se conoce, con un reglamento que se conoce y hay que ir a ciegas a una cosa de esa característica, yo no estoy dispuesto”, resumió Fernández.
Luego, el jefe de ministros manifestó que “si estas reglas de juego estuvieran instaladas un año antes y se pudiera saber exactamente cuáles son, uno se va preparando en el tiempo para hacer una propuesta inteligente que se conozca claramente”.
Por último, el ministro coordinador cerró: “lo que Scioli hizo en el Teatro Opera fue presentar una propuesta de presidente, bien clara, contundente. Si quieren debatir sobre cualquier de esos términos muchos gusto pero con las reglas ya preestablecidas, hoy es todo a ciegas, hay que ir y no se sabe ni como es el lugar ni como son las formas ni quiénes son los periodistas ni cuál es el reglamento, sería imprudente”.
Hospital Garrahan
"No puede ser que seamos la rueda de auxilio de personajes que no quieren resolver el tema y que dicen que pagan lo que dice el presupuesto cuando en realidad el presupuesto dice lo que ellos mandan a decir", explicó Fernández, y los comparó con el tero que "grita en un lado y pone los huevos en otro”.
Al ser consultado por el desfinanciamiento que sufre del Hospital Garrahan, situación a la que calificó como “muy seria”, el funcionario se explayó: “el Estado nacional intervino toda la vida, por eso funciona el Garrahan y no vive de los papeles que juntan, ni de las tapitas de Coca-Cola ni de las donaciones de chatarras de los barcos que estaban hundidos en el Riachuelo, que fueron muchos”, explicó el jefe de ministros.
A continuación, Fernández especificó el financiamiento que le corresponde al Gobierno de la Ciudad: “no tiene que pagar lo que dice la legislatura porteña, tiene que pagar lo que expresa la ley que creó ese centro asistencial y que es el 50 por ciento y el otro cincuenta por el Estado nacional", dijo el ministro.
En ese sentido, subrayó que “todo es mercantilismo puro, el pibe no sufre ni llora y no les importa un comino y dice que el 13 por ciento son chicos de la ciudad y el 37 restante son de otros lugares. Y para ser atendido un niño tiene que venir con el documento que vive en la ciudad de Buenos Aires”, denunció el jefe de Gabinete.
El funcionario nacional reiteró que “es muy seria (la situación financiera del hospital) y mucho más por los gestos del jefe de Gabinete de la ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, que sostuvo que el gobierno porteño hace ocho años que viene pagando lo que dice la Legislatura de la ciudad en el presupuesto”.
Seguidamente, Fernández consideró que la explicación que ofrece Rodríguez Larreta “es un sofisma, son los campeones mundiales en no cumplir los contratos, salvo los de (Fernando) Niembro, (Eduardo) Amadeo y (Avelino) Tamargo”, un ex legislador del PRO, dedicado en los últimos años a la organización de eventos culturales y deportivos con fondos de la Ciudad.
Asimismo, destacó que la política de derechos humanos para Macri “es un curro" y sus seguidores “pretenden una amnistía para los genocidas”. Al respecto, indicó que uno de “sus economistas estrella, José Luis Espert, dijo que tendría que haber un nuevo derecho humano que es el derecho a la evasión impositiva”. "¿Les parece serio que estos tipos pueden gobernar un país y esconden a los economistas para que no digan más burradas”, se preguntó el funcionario.
Por último, Fernández señaló que el gobierno porteño “siempre ésta en la búsqueda” de un recorte al presupuesto al nosocomio pediátrico, finalizando que “hay demostraciones que se han registrado y además han dejado de pagar miles de veces y lo van a seguir haciendo".