La presidenta Cristina Fernández encabezó esta noche el acto conmemorativo del 74° Aniversario del Día de la Industria Argentina en Tecnópolis. Allí remarcó que el proyecto político iniciado en 2003 puso a la industria como eje fundamental para el crecimiento del país, y pidió sostener ese camino en futuras administraciones.
Para la Mandataria, además de los importantes números de crecimiento industrial obtenidos en estos años, el logro más significativo estuvo dado por “el cambio cultural que hemos logrado instalar en la sociedad argentina, que la industria es fundamental y que sin ella no hay país, no hay nación y no hay futuro”. “Hay una clara conciencia social que la industria es el eje fundamental de crecimiento y bienestar de la sociedad”, abundó.
Asimismo, sostuvo que un segundo cambio cultural del período 2003 – 2015 está dado por el lugar en donde se conmemora el Día de la Industria: Tecnópolis. “Este lugar no es mío, ni de este Gobierno, Tecnópolis es de los argentinos y, fundamentalmente, de sus empresarios, trabajadores, científicos y docentes” y “es el símbolo físico de ese cambio cultural del que hablábamos”.
Luego, recordó que las tapas de los diarios de los días 1 y 2 de septiembre de 2001 mostraban una Argentina signada por la crisis, con titulares que hablaban de recortes en jubilaciones y envíos a las provincias. “Qué distinto 2 de septiembre vamos a tener hoy en Tecnópolis”, expresó, para agregar en seguida: “Sin industria no hay futuro, y en 2003 parecía que el futuro estaba cerrado; pero, por eso, nosotros fuimos por la reconstrucción de la industria”, manifestó.
En ese marco, indicó que el PBI industrial del país es el más alto de la región, alcanzando el 92% del PBI global, el más alto de toda la historia argentina. “Esto lo hemos logrado merced a la perseverancia y la continuidad de una política que hemos tenido contra viento y marea, con viento de cola y viento de frente, con escenario internacional favorable y con escenario internacional desfavorable”, remarcó, tras lo cual pidió “a todos los argentinos seguir con estas políticas que han hecho de la industria el eje central del crecimiento”. “No queremos volver para atrás, queremos seguir hacia adelante”, dijo.
Para la Jefa de Estado, “esta reindustrialización requiere que comencemos cadena por cadena a estudiar los eslabones productivos para perfeccionar lo que falta”. “Ahora viene la etapa en la que tenemos que comenzar con los bienes intermedios y de capital, para que este proceso continúe”.
Cristina Fernández remarcó que todo este crecimiento “no fue magia”, sino producto de “generar demanda interna y externa, consumo y exportaciones”. Pero hoy – señaló – el escenario internacional es desfavorable, por lo cual “estamos en un momento en que además de sustituir importaciones, tenemos sustituir exportaciones, y lo tenemos que hacer con mercado interno”.
La Presidenta puntualizó que en el primer semestre de 2015, Argentina tuvo una caída de su producción industrial de 1,2%, mientras que en Brasil el descenso alcanzó el 8,3%. Enfatizó que “no solamente se ha caído el mundo sino que se han caídos nuestros principales socios comerciales”.
Remarcó que se debe hacer “un doble trabajo” para recuperar las ventas a los socios comerciales y para abrir nuevos mercados. Sostuvo que “es un desafío maravilloso: si lo hicimos cuando no teníamos nada, como no lo vamos a poder hacer ahora, con todo lo que crecimos en estos doce años”.
La Jefa de Estado señaló que “nuestro movimiento político y a nuestra organización nunca las cosas le resultaron fáciles”. “Hemos vuelto de proscripciones, de derrotas políticas, y hemos aprendido de la historia. Por eso estamos convencidos de que necesitamos seguir en este camino”, resaltó. Respecto a la demanda que se viene a partir de 2016, se preguntó: “¿Ustedes creen que quienes han sido partícipes de este proyecto, van a tirar todo por la borda? Todos quieren ser parte de esta historia de crecimiento”.
Impulso a la demanda
La Primera Mandataria comparó el impulso a la demanda agregada, respecto a la década anterior. Señaló que mientras que en el periodo 1993-2002, el consumo privado fue 0,6% negativo y hubo un -5,7% de inversión, en el periodo 2003-14 aumentó 6,6% el consumo privado y creció 11,2% la inversión.
Resaltó que para ello fue fundamental “la primera política que tomó Néstor Kirchner: convocar a paritarias libres y hacer funcionar el consejo del salario mínimo”. Indicó que en estos doce años el PBI per cápita aumentó el 96 %. Subrayó que el consumo aumentó 84% y aseguró que “el aumento de ese consumo, explica el aumento del 80% del PBI argentino”. “Nosotros sostenemos que, salvo que inventes algo que genere demanda, como Steve Jobs o Henry Ford, la demanda es la que guía la inversión”, enfatizó.
Cristina Fernández comentó que “dada la inversión que el gobierno ha hecho, necesitamos que el sector privado invierta más, para tener el mismo rango de inversión que el Estado ha tenido”. Puntualizó que “somos el 23 consumidor mundial de autos: 1 auto cada 3,4 habitantes. 7.300.000 autos se han vendido en estos años”.
Comercio exterior
“Hemos sustituido importaciones por más de 71 mil millones de dólares”, aseveró la Presidenta de la Nación. Graficó que la sustitución de importaciones representa “el trabajo que tenés vos, la casa que te compraste, el auto que estás usando, la escuela para tu hijo”. “Los economistas les dan números, pero hay que corporizar esos números: es trabajo que tienen los argentinos, mejores salarios, mejores jubilaciones, mejores ingresos en general”, afirmó.
Señaló que “en el año 1992 importábamos el 21.8, en 2014 el 10,2. La media de la década del 90 era 18%, ahora estamos en 11,4%. Seguimos trabajando para aumentar la sustitución de importaciones”. Respecto al reclamo de “muchos candidatos y economistas” sobre la necesidad de “abrir la economía”, indicó que la suma de las importaciones y las exportaciones “en los años 90 representaban el 17,2 del PBI”. “Hoy en 2014 las expo+impo representan el 25,3%. Por lo tanto estamos en una economía mucho más abierta”, resaltó.
También destacó que en los 90 sólo se exportaba por más de 500 millones de dólares a 11 países, mientras que hoy son 35 países. “Eso es producto de una correcta administración del comercio exterior”, afirmó y resaltó la tarea en misiones comerciales a distintos países, a las cuales acompaña la propia Mandataria.
Inversión estatal y crecimiento de la economía
La Jefa de Estado subrayó que 9,1% es el promedio de inversión en estos años. Remarcó que la inversión social es de 14,8% del PBI. Afirmó también que se ha llevado adelante “el plan de infraestructura más importante del que se tenga memoria. Esto es infraestructura económica y social”.
Al respecto, comentó que “llevamos mas de 189 mil construcciones hechas con PROCREAR”. “Hemos crecido un 50% en generación eléctrica. Este proceso de reindustrialización necesita energía. Hay gente que dice que en los 90 exportábamos energía, y lo dice como algo positivo. Exportábamos porque la gente no tenía nada para enchufar, los industriales no tenían nada para producir, entonces no era necesaria la energía”, consideró.
Transformación educativa
La Presidenta aseguró que en los últimos doce años también se vivió “una transformación cultural y educativa”. Comentó que “se habían cerrado las escuelas técnicas en Argentina. Todavía tenemos demanda insatisfecha en muchos rubros propios de escuelas técnicas”. “Hoy, luego de haber recuperado las escuelas técnicas, tenemos una inversión de 7.500 millones de pesos y tenemos 1.530 escuelas técnicas en todo el país”, señaló.
Indicó que en la educación técnica “se duplicó la matrícula femenina, vamos a tener mujeres torneras, carpinteras, matriceras”. “En 2003 uno de cada cinco alumnos eran mujeres; hoy uno de cada tres son mujeres”.
Cristina Fernández destacó también “el plan estratégico de formación de ingenieros”, lanzado en 2012. “El país necesita ingenieros. No nos va mal con la política. La meta a alcanzar eran 10 mil graduados por año, en 2014 se graduaron 10.614 ingenieros”, puntualizó. Y enfatizó que “por primera vez en la UBA tenemos más inscriptios en la Facultad de Ingeniería, que en la de Ciencias Sociales”.
La Presidenta destacó que en el período 2003 – 2014 se instalaron 30 mil kilómetros de fibra óptica, se entregaron 5 millones de netbooks a estudiantes primarios y secundarios, se invirtieron 15 millones de pesos en el Plan Satelital y de TV abierta, se generó una importantísima industria cultural con exportación de contenidos y se conectaron 300 mil hogares a la red de gas.
También remarco la inclusión de 700 mil jóvenes al plan Progresar, en contraposición con el sistema de pasantías que se anunciaba en 2001, y que no era más que un eufemismo para ocultar la explotación de los estudiantes, señaló.
Asimismo, puso en especial relieve las políticas sociales como la Asignación Familiar por Hijo, la asignación por embarazo, el plan Progresar, las asignaciones familiares, las pensiones contributivas y no contributivas, dado que, afirmó, “son las que han sostenido la demanda agregada”.
Y también destacó las políticas de impulso al consumo y la producción como Precios Cuidados, Ahora 12, Renovate y SUBEneficio, que representan “un impulso formidable al comercio y la producción”. Lo mismo que los planes para la compra de 0KM, indicó.
Financiamiento a empresas
En tanto que para las empresas, la Presidenta destacó las políticas de financiamiento directo como los Créditos del Bicentenario, las Líneas de Crédito para la Inversión Productiva (LICIP), el Fondo de Garantía del Bicentenario del ANSES, los planes Fondear y Procrear. Este último plan, dijo, “se ha convertido en la primera fuente de crédito hipotecario”, que “hoy est fundamentalmente sostenido desde el Estado, que no solamente activa la industria, sino que apunta al reconocimiento y sostenimiento de la familia”.
En cuanto al segmento laboral, consideró como el dato más importante la fuerte caída del índice de desempleo, que pasó de 24,3% en 2003 a 6,6% en el segundo trimestre de 2015.
Estas políticas, dijo, son las que generan legitimidad, al tiempo que lamentó “las maniobras desesperadas” de sectores de la oposición que intentan deslegitimar procesos democráticos con denuncias de irregulares en elecciones provinciales. “No tenemos que ponernos nerviosos, tenemos que seguir haciendo lo que hacemos hace 12 años: trabajar todos los días como si el gobierno hubiera comenzado ayer”, manifestó.
Para la Mandataria, uno de los datos trascendentales de este período histórico lo da el Coeficiente de Gini, que pasó de 0,47 en 2003 a 0,37 en 2015. “Es inédito, el de Gini es un índice muy rígido, y nosotros hemos mejorado un 22,3% en las redistribución del ingreso”. Todo esto, en un contexto internacional desfavorable dado que se ha desacelerado el comercio internacional, ha caído el precio de las materias primas y se registra una fuerte desaceleración en la actividad de nuestros principales socios comerciales.
Pese a todo esto, remarcó la Mandataria, la Argentina ocupa el tercer en materia de crecimiento en el periodo 2003 a 2014 superado únicamente por China y la India. En tanto que en el plano del desendeudamiento, el país es el líder en el mismo período, “lo que nos permite decirle a las próximas generaciones que esta generación, la generación del bicentenario, ha desendeudo a todos los argentinos como nunca nadie lo había hecho”. “Y al mismo tiempo industrializábamos sin recurrir al mercado internacional”, remarcó.
En otro tramo del discurso, la Presidenta remarcó que se evitó la reprimarización de las exportaciones. Explicó que las exportaciones del país crecieron en materia de manufacturas de origen industrial y en manufacturas de origen agropecuario, mientras que decreció en productos primarios y en combustibles y energía. “Significó esto que evitamos que se nos cayeran los productos industriales”, enfatizó y agregó que en la región Argentina es el único país “en el cual las exportaciones de origen industrial van por encima de los productos primarios”.
Crecimiento de la industria
Destacó que en los últimos años “se crearon miles de empresas”. “De 1996 a 2002 cerraron más de 9 mil empresas. Desde 2003 a 2014 se crearon 14.621”, de las cuales más de 6 mil son pequeñas y medianas. También resaltó que se pasó de 80 parques industriales en 2003 a 330 en 2014. “Tenemos que llegar en 2020 a 660 parques industriales. Y si seguimos con estas políticas lo vamos a hacer”, remarcó.
La Jefa de Estado subrayo que “en julio la industria creció por segundo mes consecutivo, tras 22 meses de caída ininterrumpida”. Indicó que la caída de la producción automotriz es “un tema complejo. No es una cosa que afecte estructuralmente a toda la industria automotriz, tiene que ver con las condiciones del mercado, con la inversión”. Puso como ejemplo, el caso de Toyota que en agosto de 2015 “batió su record histórico de ventas en el mercado interno con 7 mil unidades”.
También resaltó las inversiones realizadas por grandes empresas multinacionales, entre las que destacó las anunciadas y llevadas a cabo por compañías como Chevron, Toyota, Renova, UnitecBlue, General Motors, Axion, Quilmes, Dow, Gerdau, Renault, Ford, Nestlé, Unilever, Nidera. Sostuvo que de ellas, “solo dos son con socios argentinos. El resto son todas de capitales extranjeros: quiere decir que hay confianza en la República Argentina, que sería bueno que se hiciera extensiva a todo el empresariado nacional”.
El Estado como impulsor de la industria
La Primera Mandataria afirmó que “los que dicen que tiene que haber menos Estado en un momento de crisis como el que se vive, no saben de qué se habla. Es el momento en que más tiene que estar presente el Estado”, para sustituir el mercado mundial que se cae.
Entre los sectores que más crecimiento exhiben, destacó la industria argentina de frontera tecnológica. Señaló que en dicho sector “pasamos de 19 mil a 77 mil empleados. Tenemos una demanda laboral insatisfecha en la industria del software”. Indicó que ese crecimiento se dio “debido a una fuerte política del Estado, beneficios por más de 778 millones de dólares”. Tambièn resaltó los casos de otras industrias, como la biotecnología o la microelectrónica, en las que se consiguió un importante avance.
Cristina Fernández sostuvo que “el poder de compra del Estado genera escala e incorporación de tecnología” en rubros como la energía, donde se invirtieron 24.000 millones de dólares. “Este viernes en Río Turbio vamos a inaugurar la primera etapa de 120 megavatios a carbón en la Rep. Argentina. Es todo lo que consume la provincia de Santa Cruz. Con una tecnología similar a la que tiene Alemania, totalmente no contaminante”, remarcó.
Asimismo, resaltó la inversión en materia de ferrocarriles. “La política ferroviaria no solo implica que la gente viaje más cómoda y rápida: va a generar un movimiento industrial relacionado con el material rodante”, aseguró. Indicó que “además de generar industria ferroviaria, va a generar en logística una mejor conectividad, porque el transporte ferroviario y el fluvial son más económicos que el terrestre”. “En estos días hemos suspendido la operación de la línea General Roca, porque queremos terminar la electrificación, y el traslado de toda la gente que vive en zona sur, ya no sea en una hora y media, sino que sea en 55 minutos”, anunció.
La Presidenta subrayó la recuperación de “la industria de la defensa, en la que nuestras fuerzas armadas tienen excelentes profesionales”. En el sector petrolero, estimó que “Vaca Muerta no nos tiene que servir únicamente para subsanar el déficit energético”, sino que consideró que tiene que formarse “un cluster de empresas proveedoras de toda la industria petrolera”.
Al respecto, se preguntó: “¿Como no vamos a desarrollar maquinaria pesada, si somos el segundo yacimiento no convencional del mundo?”. “Tenemos más de 490 empresas nacionales proveedoras, por este yacimiento y fundamentalmente por la recuperación que el Estado nacional ha hecho de YPF”, señaló. Y remarcó: “Recuperar soberanía energética para el desarrollo nacional es uno de los logros más importantes que podemos mostrar todos los argentinos”.
Queda mucho por hacer
La Presidenta de la Nación afirmó que “quedan muchísimas cosas por hacer, porque hemos tenido décadas y décadas de ir para atrás”. “Esto es lo que le pido a los argentinos: no volvamos para atrás como el cangrejo. Los argentinos sigamos caminando para adelante, en este camino de la reindustrialización de agregarle ciencia e innovación a nuestras empresas”, resaltó.
Sostuvo que “el pueblo argentino y las cosas logradas en estos doce años, son las garantías de que vamos a seguir adelante, agregando las cosas que faltan, suprimiendo las que están mal y asegurándole a todos los argentinos que no hay marcha atrás en las cosas positivas que se han dado”.
La Jefa de Estado señaló que “tenemos que seguir en este camino de reindustrialización del país, para que haya más ciencia, mas tecnología, mas trabajo, paritarias, mejores salarios”. “Somos nosotros los argentinos los que somos artífices de nuestro crecimiento”, aseguró. Dijo que no se debe renegar de las inversiones exteriores, pero sostuvo que “todas las inversiones que vinieron, vinieron porque les dimos un marco institucional, de infraestructura, para que vinieran a invertir”.
Por último, agradeció a los empresarios presentes y pidió a las flamantes autoridades de la Unión Industrial Argentina que “no se olviden que el motor del desarrollo argentino han sido las pymes”. “Voy a brindar no solo por la industria, sino además por las pymes argentinas, verdaderas artífices del crecimiento argentino”, remarcó y concluyó: “Vamos a seguir trabajando para que la crisis internacional pegue lo menos posible en la República Argentina”.