El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, se refirió a la medida gremial en el ferrocarril Sarmiento que - dijo - afecta a "cientos de miles de usuarios". El funcionario recordó que cuando las formaciones eran centenarias los sindicalistas "lo toleraban con normalidad" e indicó que ahora que son nuevas "paran porque no quieren seguridad en los vagones".
"La verdad es que me suena más a un pretexto para buscar generar un conflicto, que el conflicto en sí", añadió Fernández. No obstante, prefirió que "sea el Ministerio de Trabajo el que encabece la cita a los sindicatos y a los responsables de la empresa para una eventual conciliación obligatoria, más que hacer declaraciones a priori, metiéndome en un tema que no debiera meterme".
En declaraciones antes de ingresar a Casa Rosada, al ser consultado sobre la medida - que comenzó en el primer minuto de hoy- , el jefe de Gabinete dijo que "es absolutamente banal" la excusa puesta en nombre de la seguridad por el líder sindical.
En ese sentido, el funcionario objetó la decisión de ese sector sindical de protestar contra la incorporación de brigadas de seguridad compuestas por vigiladores privados a bordo de los trenes, dispuesta por el Ministerio de Interior y Transporte de la Nación.
"No es una expresión o una razón criteriosa y responsable respecto del funcionamiento de un servicio que antes toleraban mansamente funcionando con trenes que tenían entre 30 y 40 siglos y ahora resulta ser que todos los trenes nuevos que compró el gobierno nacional tienen alguna complicación", analizó el ministro coordinador.
Debates
Por otra parte, Aníbal Fernández expresó que está a favor de la realización de debates entre los candidatos, con vista a las elecciones del 25 de octubre,. Al respecto, el funcionario planteó: "creo que es saludable que los debates se lleven a la práctica porque permiten decir a la sociedad argentina qué está proponiendo cada uno para nuestro país y nuestra provincia, en el caso mío".
Consultado sobre el anuncio sobre un primer debate presidencial, Fernández consideró que es importante porque "se está hablando de políticas macro y en el caso de Buenos Aires también porque es una provincia que en realidad es un país, con 308.000 kilómetros cuadrados y con sus 16,6 millones de habitantes". "Hay que pensar (la provincia) como un país y hacer conocer las políticas que se proponen, que nos importan. Me parece algo más que saludable", destacó el funcionario.
Reunión después de las PASO
En otro momento, consultado en su diálogo con la prensa sobre la reunión que mantuvo ayer con su ex contrincante en las PASO, el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, el jefe de Gabinete respondió que fue "muy buena" y "muy agradable".
Sobre el tema, el jefe de ministros recordó que con el presidente de la Cámara de Diputados y el intendente de La Matanza "somos amigos desde hace muchos años y el solo mero hecho de participar de la política en las PASO se debía a que cada uno pueda estar en un espacio y definir sus virtudes".
En ese sentido, Fernández afirmó : "Si cometí algún error que pudo lastimar al otro, lo mejor fue pedir perdón y hacer las cosas juntos, sin facturar, sino termina siempre mal. Me llamó Domínguez y luego Fernando (Espinoza), así que nos juntamos". Seguidamente, detalló que " con la Presidenta me vi luego, a las siete de la tarde, así que eso no tuvo nada que ver".
Por último, Fernández parafraseó al compositor de tango Celedonio Flores cuando dijo que “el hombre es como el caballo: cuando ha llegado a la meta afloja el tren de carrera y se hace manso y sobón”. Luego, añadió que “en este caso paso lo mismo: terminó la carrera y no hay nada para seguir tironeando de estas cosas. Llegó el momento de juntarnos”.