El Jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, explicó que la FAO –la organización de las Naciones Unidas para la alimentación- dice que la Argentina cumplió los objetivos del milenio, por eso otorgó el premio que recibió la presidenta Cristina Fernández. Al respecto, indicó que el organismo internacional reconoce que los índices de hambre en el país están por debajo del 5% cuando los países en desarrollos está por encima dl 13%.
En el contacto con los periodistas, antes de ingresar a la Casa Rosada, el funcionario afirmó que “es la FAO, no el Indec”, la que da el índice del 5%. La FAO, agregó Fernández, “reconoce a la Argentina haber cumplido con las metas 1C, lo que se conoce como los objetivos del milenio, en el cual lo que se busca reducir a más de la mitad las personas subalimentadas”.
En ese sentido, el funcionario precisó que de los 129 miembros de la FAO “más o menos la mitad cumplió con las metas, la otra parte no pudo cumplir con esas metas. En el informe de los objetivos del milenio, página 17, dice con toda claridad FAO, no Indec, que los índices de hambre en la Argentina están por debajo del 5%, cuando el promedio de los países en desarrollo es del 13%, con lo cual muestra a la Argentina en un lugar de privilegio por razones obvias”. Esas razones, -detalló Aníbal Fernández- es “porque se trabajó muchos, con políticas públicas claras, serias, para poder llevarlo a ese lugar”.
El jefe de Gabinete volvió a hablar sobre el cambio de técnica para las mediciones, entre ellas sobre la pobreza. Señaló que “la Argentina ya abandonó el método de fijarlo en función del ingreso lisa y llanamente porque eso fue inventado por los organismos internacionales, entre ellos la Cepal, en los ’90, para tapar, para que no impactaba la pobreza cuando los estados desertaban de las inversiones públicos, salud, que no impactara en la línea de pobreza”.
“Hoy el mundo trabaja con índices multidimensionales, que también toma el ingreso, las cloacas, agua, educación, elementos para la construcción de las casas, lo que da un índice multidimensional”, explicó Fernández.
Sobre esta medición, el funcionario agregó, “la Argentina está en su transición. Acabamos de transformar nuestro Índice de Precios al Consumidor (IPC) en un Índice de Precios al Consumidor Nacional Urbano (IPCU), que contempla a todo el país por completo. Estamos en pleno proceso y transición”. Respecto de la frase que él utilizó ayer, en declaraciones a un medio periodístico, sobre que ‘en Alemania hay más pobreza que en la Argentina’, Aníbal Fernández dijo que utilizó datos que publicó el diario Clarín (Uno de cada cuatro europeos es pobre).
Al respecto, el jefe de ministros explicó que dicho país “ya calcula la pobreza con un índice multidimensional y hoy ha fijado la pobreza en el 60% del ingreso medio que es de 850 euros; el 60% quiere decir que son 510 euros. Aquel que percibe menos de 510 euros es el que se considera pobre en Alemania. Hay mucha gente que está por debajo de los 510, y 510 euros que en Argentina es mucha plata en Alemania son tres monedas”.
En la Argentina “estamos llegando a todos aquellos que lo necesitan. Todas las políticas son inclusivas y de leyes laborales se votaron 48 ninguna le hizo bajar la frente a ningún legislador porque nunca le sacó nada a nadie, se han hecho gestos y acciones en beneficio de los trabajadores y por eso FAO reconoce que los índices de hambre en la Argentina están por debajo del 5% cuando los países en desarrollos está por encima dl 13%”, expresó.
El paro de ayer "no sirvió para nada"
Ante una consulta, el jefe de Gabinete afirmó que el paro nacional de ayer convocado por el sindicalismo opositor "fue un espanto" y "no sirvió para nada". "La realidad es que el paro analizado, como se quiera mirar, fue un espanto. No hay forma que se pueda sostener que haya habido una ausencia mayor al 20 por ciento en muchos de los lugares de trabajo y que se quiera sostener como un buen paro. Es una cosa que no tiene pies ni cabeza", dijo el funcionario en declaraciones formuladas a la prensa antes de ingresar a Casa Rosada.
Al respecto, el funcionario agregó con respecto al paro “ lo que hay que hacer es sentarse y seguir discutiendo salarios en una mesa en forma racional". Asimismo, consideró que "el paro fue muy flojo en muchos lugares del país y es porque hay muchos gremios como la UOM, Comercio, encargados de edificios, estatales, UOCRA, bancarios, cerealeros y otros muchos que ya terminaron con las convenciones colectivas de trabajo (paritarias) y se han puesto de acuerdo en una misma mesa como corresponde y como habilita la legislación argentina, y creo que habría que haber seguido por esa vía".
"Yo dije ayer que el tema (la huelga) es un tema electoral, lo sostengo y es un tema más más profundo. Este fue un paro politiquero, que lo que busca es enturbiar, hacer un gesto de mala manera. Una medida que no se ha cumplido en la mayoría de los barrios del país", afirmó el jefe de Gabinete.
Los dichos de Barrionuevo son "imperdonables"
A continuación, Aníbal Fernández dijo que el secretario general del gremio gastronómico, Luis Barrionuevo, "es una bestia". También, afirmó que sus declaraciones vinculadas al "dialogo" de algunos sindicalistas con los integrantes de la última dictadura militar "es algo realmente imperdonable" y lo consideró "colaboracionista". El jefe de Gabinete habló esta mañana con la prensa, minutos antes de ingresar a su despacho de la Casa de Gobierno. Allí, Fernández repudió de esta forma las declaraciones de ayer de Barrionuevo, quien en declaraciones a la prensa aseguró que "se negociaba, se hablaba mejor con los militares que con este Gobierno".
En ese marco, el ministro coordinador se preguntó: "a mí me gustaría saber ¿en qué condiciones negociaba él (Barrionuevo) con la dictadura, en qué términos negociaba él este tema? ¿Qué me están queriendo decir? ¿Que en ese momento (durante el proceso militar) se podía hablar y discutir las condiciones laborales de los trabajadores? ¿Que en ese momento se podía hablar y discutir del valor del trabajo del hombre y la mujer común? ¿Que estaban dadas las condiciones? No, definitivamente no, señores".
"Habría que preguntarse también, ¿quiénes podían hablar en todo caso en esa época?: los que hacían algún tipo de concesiones y por eso tenían acceso a las bestias que usurpaban el poder en ese momento de la historia. Entonces, no acepto bajo ningún punto de vista la comparación. Porque los hombres de bien que cometían el horrible pecado de defender los intereses de sus compañeros trabajadores, muchos de ellos engrosan las listas de los detenidos-desaparecidos en la Argentina".
"Yo miro eso con mucho detenimiento. Si uno dice que (Barrionuevo) es una bestia parece que fuera un reduccionismo porque no estoy diciendo nada nuevo, es una verdad de perogrullo; pero reduccionismo o no reduccionismo, es algo imperdonable lo que ha dicho", afirmó Fernández.
El funcionario nacional agregó que "son casi un escupitajo en la cara de aquellos que hoy siguen siendo detenidos-desaparecidos por haber tenido la horrible decisión de defender los derechos de los trabajadores". El jefe de Gabinete recordó: "Esto no es nuevo de este momento, en cada uno de los momentos en que la historia ha dado oportunidades de tener un golpe de Estado en la Argentina, ha habido quienes siempre han tenido siempre ese gesto colaboracionista con las bestias ursurpadoras de turno, usurpadoras del poder en la Argentina". En ese sentido, el funcionario dijo que prefiere pensar en dirigentes como Saúl Ubaldini, que realizaron una huelga contra la dictadura el 30 de marzo de 1982 y no en “estos tipos que se jactan de haber sido colaboracionista de la dictadura”, a quienes los tildó de “alcahuetes de la dictadura”.