La presidenta Cristina Fernández de Kirchner expuso ante la 39ª Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), donde recibió una distinción para la Argentina por haber disminuido en los últimos años los índices de desnutrición, uno de los objetivos del milenio previstos para 2015."No podemos esperar a que algunos acumulen granos, mientras otros se mueren de hambre para intervenir", afirmó allí la mandataria.
"Argentina es gran productora de alimentos"
La jefa de Estadi en su discurso destacó que la Argentina es gran productora de alimentos: "tenemos la capacidad para abastecer a más de 400 millones de personas. Al respecto, aseveró: "ustedes saben, la Argentina es gran productora de alimentos. Tenemos la capacidad para abastecer a más de 400 millones de personas. Este año, vamos a batir un récord: de las 115 millones de toneladas de granos proyectadas, vamos a obtener 119 millones".
Especulación/regulación
En su disertación, la mandataria resaltó la importancia de la participación activa del Estado para combatir el hambre. Asimismo, planteó que “debería haber regulaciones mundiales” a ser cumplidas por los países de las Naciones Unidas contra la especulación. “No podemos esperar a que algunos acumulen granos, mientras otros se mueren de hambre para intervenir", señaló.
Al respecto, la Presidenta afirmó que no se trata de “quitarle nada a nadie, no para socializar, pero otra cosa es especular con el hambre, con la deuda de los pueblos”. En este punto, la mandataria presentó la necesidad de que la ONU debata una regulación para evitar la especulación en los mercados alimentarios, e indicó el problema que los países en desarrollo mantiene con las barreras para-arancelarias. Puso como ejemplo las trabas a la carne y los limones argentinos para ingresar en los Estados Unidos.
“Creo que los subsidios y las barreras para-arancelarias, son otro de los problemas, porque no permiten la libre competencia en materia alimentaria, y los alimentos se vuelven tema de especulación económica. Es inconcebible que haya mercados a futuro en materia de granos y que se especule”, afirmó la jefa del Estado. “Debería en materia alimentaria haber regulaciones globales que todos los países signatarios de la Carta de San Francisco deban cumplir”, dijo la jefa del Estado.
“Hoy en la ONU, a propuesta de la Argentina y del G77 más China, se está debatiendo una regulación sobre la reestructuración de las deudas financieras, porque estamos viendo que la situación que hizo que la Argentina casi volara por los aires en 2001, hoy se extiende en otros países”, recordó la Presidenta y señaló que de la misma forma se debe avanzar en una regulación para los mercados alimentarios.
“¿Qué vamos a esperar a que el mundo tenga problemas de granos, que algunos acumulen granos mientras otros se mueren de hambre para intervenir en los mercados? No para socializar nada. Una cosa es socializar y la otra es especular con el hambre”, remarcó la mandataria.
La jefa del Estado señaló, además, que “las deudas (externa) de los pueblos y de los gobiernos terminan con el hambre de la gente”. En ese sentido, pidió que desde espacios como la FAO se impulsen las regulaciones necesarias para impedirlo. “Me avergüenza que haya mercados a futuro de granos, en la que se pregunten ‘¿vendo o no vendo?’ porque se especula con algo que tiene que ver con la pos de que la gente en el mundo pueda comer arroz y amasar su pan”, subrayó en su discurso Cristina Fernández.
“Debemos hablar de seguridad alimentaria en serio, a través de normas, articulando la producción. No hay que ahogar al interés privado en la ganancia, nadie pide que los productores pierdan dinero, sino que la especulación debe tener regulación en el mundo”, insistió en su planteo la mandataria.
En ese sentido, remarcó la necesidad de finalizar con las barreras para arancelarias y dijo que es necesario aumentar la productividad, pero que es necesario que haya mejor distribución de la riqueza para que se termine con el hambre. Asimismo, la Presidenta dijo que la lucha contra el hambre se da con “más distribución, con equidad, y que tiene como elemento central el asegurar trabajo bueno y decente, con un Estado presente cuando todavía falta para que se cristalice una economía de crecimiento”.
“La articulación entre el sector público y el privado debe existir, pero el Estado es insustituible”, remarcó Cristina Fernández. A continuación, señaló que cuando en 2008 con la crisis financiera internacional provocada por la caída de Lehman Brothers “los privados desaparecieron y el Estado se tuvo que hacer cargo de de los desocupados, de los que no tenían educación y salud”.
"Nosotros decidimos volcar el vaso para el lado del conjunto de la sociedad"
Más adelante, Cristina Fernández aseguró que en Argentina se decidió, al contrario de lo que se planteaba en los años 90, con la preponderancia de las políticas neoliberales, "derramar el vaso para el lado del conjunto de la sociedad". "Nosotros decidimos volcar ese vaso para el lado del conjunto de la sociedad, porque sabíamos que de esa manera se iba a dinamizar la economía", dijo la mandataria durante su exposición, haciendo un contrapunto con lo que pasaba en los 90.
En este marco, mencionó las políticas implementadas por el Gobierno para pasar de "un cuadro de pobreza extrema, endeudamiento y multiplicidad de monedas", producto de la crisis del 2001. En ese punto, la mandataria estacó el plan alimentario nacional, que el ex presidente Néstor Kirchner impulsó en 2003 con un "plan alimentario nacional".
A continuación, destacó la "reindustrialización del país" que generó "más de seis millones de puestos de trabajo" y un "salario mínimo, vital y móvil que crece año a año por encima de la inflación". También, resaltó la existencia de negociaciones paritarias libres y la puesta en marcha de la Asignación Universal por Hijo (AUH).
También, la jefa de Estado pidió “regulación” sobre estructuración de deudas financieras, y recordó que Argentina casi “voló por los aires en 2001” por su deuda y que “hoy otros países están viviendo la misma situación”. “Tenemos confianza que exista regulación financiera que permita que, por ejemplo, habiendo Argentina arreglado con el 93 por ciento de sus acreedores, no sea extorsionada por fondos buitres, algo que es inconcebible desde lo más lógico y equitativo”, consignó la mandataria.
La mandatria dijo que “cuando alguien le presta algo a alguien a tasas usurarias, debe saber que lo más probable es que no se lo pueda devolver”, porque “nadie puede pagar más de lo que ingresa”. “No sólo hay que cuidar de los países, para que no hagan políticas populistas, sino también para que no se endeuden de manera exhorbitante y pongan en peligro la seguridad alimentaria e institucional”, manifestó. En este contexto, recordó que en los noventa las políticas neoliberales ponderaban el mercado como “un vaso que se derramaba” solo, y dijo: “Nosotros decidimos volcar ese vaso para el lado del conjunto de la sociedad, porque sabíamos que de esa manera se iba a dinamizar la economía”.
En este punto, señaló que la distinción recibida por la Argentina hoy en la FAO es por sus resultados en la lucha contra el hambre a partir de su programa alimentario implementado en 2005, en el que el país ha tenido “un proyecto de país, y un modelo de sociedad más justa e igualitaria, que es el mejor antídoto en la lucha contra el hambre y la pobreza”.
Pobreza e indigencia
En otro momento de su alocución, la jefa de Estado destacó:"Como ustedes pueden ver es una combinación de políticas muy fuertes, muy activas, que nos han permitido hoy tener un índice de pobreza por debajo del 5% y de indigencia del 1,27%, si mal no recuerdo, y convertirnos en uno de los países más igualitarios".
Asimismo, agregó que estos avances van de la mano de planes de mejoras estructurales que son vitales para la salud de la población, como es "el agua potable y la red cloacal".
Distinción de la FAO para la Argentina
La Presidenta realizó esas declaraciones luego de recibir, en Roma, una distinción para la Argentina del organismo dependiente de Naciones Unidas por haber disminuido en los últimos años los índices de desnutrición, uno de los objetivos del milenio previstos para 2015.
El premio fue entregado por el titular del organismo, el brasilero José Graziano da Silva, en la sede central de la FAO, en la capital italiana.
Previamente, a las 6.30 (hora argentina) la Presidenta mantuvo una reunión bilateral con el Titular de la FAO, José Graziano da Silva, quien fue reelecto el sábado pasado en su cargo con el número más alto de votos en la historia del organismo multialteral.
La Presidenta estuvo acompañada por el canciller Héctor Timerman, el ministro de Agricultura Carlos Casamiquela, el embajador argentino ante la FAO, Claudio Rozencwaig, el embajador ante el Vaticano, Eduardo Valdés y el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, entre otros funcionarios.