Muy buenos días a todas y a todos los trabajadores de prensa de mi país, también a los franceses y a los de la prensa extranjera.
En principio quiero agradecer en la persona del señor presidente de Francia, la invitación que la República Argentina tuviera para ser la invitada de honor en el Salón del Libro de París, un evento literario de los más importantes del mundo. En un momento también muy particular, se cumple este año el centenario del nacimiento de un escritor argentino que vivió gran parte de su vida aquí, en París, Julio Cortázar, y mañana junto al Primer Ministro francés, como lo indicó el señor Presidente, vamos a inaugurar ese salón literario, donde el pabellón argentino también cuenta con la presencia de muchísimos escritores argentinos.
Es cierto lo de la intensa relación cultural, social, política, comercial e histórica entre Argentina y Francia. Ayer cuando se me homenajeó, no a mí sino a mi país a través de mi persona, frente al lugar donde guardan los restos de Napoleón Bonaparte y se entonaban las estrofas del Himno Nacional Argentino y de La Marsellesa, yo le comentaba al Presidente que sentía que La Marsellesa debe ser tal vez el único himno universal, tan vinculado siempre con ideas libertarias y que marcó en cierta manera la Revolución Francesa, el inicio de la modernidad y que tanta influencias tuviera en las luchas independentistas y libertarias de toda la América del Sur. Por eso es una relación que no solamente data de la actualidad, sino que data de la historia misma y de los ideales libertarios de la región.
También hablamos obviamente de lo que es la relación comercial entre ambos países. Yo le comentaba al señor Presidente que en el año 2003 la relación comercial entre Argentina y Francia era de apenas 300 millones de dólares y era superavitaria para la Argentina. ¿Por qué? Por una razón muy sencilla, la Argentina acababa de salir o estaba en default todavía, no había consumo, había una muy mala situación económica, por lo tanto el comercio era mínimo y era superavitario para la Argentina.
Hoy, luego de más de 10 años de crecimiento económico sostenido, hemos crecido a un comercio bilateral de más de 2.600 millones de dólares, con un superávit comercial para Francia de más de 1.600 millones de dólares, lo que significa que es importante para los países desarrollados que los países emergentes, y sobre todo aquellos que hemos tenido graves problemas de endeudamiento, podamos salir de esos problemas de endeudamiento para poder crecer, fortalecer el comercio bilateral y multilateral y también honrar nuestras deudas.
En este sentido, quiero agradecer muy especialmente la decisión del gobierno de la República de Francia de concurrir como amicus curiae frente a la Corte de los Estados Unidos, en el reclamo de un pequeñísimo grupo de deudores denominados holdouts, que se los conoce también con el nombre de fondos buitres, que intenta tumbar el acuerdo del 93 por ciento de los acreedores de la Argentina, logrado entre los dos acuerdos de canje deuda, uno en el 2005 por el presidente Kirchner y otro por el gobierno de quien habla en el año 2010, y que involucran al 93 por ciento de los acreedores. Una mínima parte que no representa más de 1.300 millones de dólares, pretende precisamente tumbar el acuerdo de deuda soberana más importante del mundo, que no es importante solamente para los argentinos sino para el mundo entero.
Uno de los principales problemas que tienen los países es el endeudamiento, y esto constituye un verdadero leading case. Charlábamos con el Presidente, por ejemplo, del caso de Ucrania, que tiene un 99 por ciento de su PBI comprometido en deuda. ¿Qué pasaría con Ucrania o con cualquier otro país del mundo que tienen altísimos niveles de endeudamiento, si realmente triunfara la postura de un pequeño grupo de capitales financieros radicados en paraísos fiscales y que además ni siquiera tributan impuestos en sus países de orígen. Estaríamos ante una verdadera debacle internacional y ante un verdadero escándalo moral y político.
Por eso agradecemos la decisión que ha tomado el gobierno francés; también agradecemos la decisión de apoyar firmemente nuestras negociaciones con el Club de París, que han sido ya comunicadas al gobierno argentino y se iniciarán el día 28 de mayo. Esto va a ser muy beneficioso no solamente para la Argentina sino también para todas las empresas europeas. ¿Por qué? Porque si se logra acordar en el Club de París nuevamente las empresas europeas, o sea aquellas que generan trabajo para los europeos, van a volver a tener crédito en sus agencias nacionales para poder invertir, generar trabajo y por lo tanto aportar al crecimiento de sus economías nacionales y al crecimiento de la actividad económica mundial.
Por ejemplo, numerosas empresas francesas están radicadas en la Argentina. Luego de aquí me iré a entrevistar con el señor presidente de Total, una importante empresa francesa en materia de gas y petróleo, que tiene inversiones en mi país y que ha decidido incrementar las inversiones en la Argentina en materia de perforación off shore, también asociada con YPF, la empresa que hemos recuperado y que afortunadamente hemos llegado a un acuerdo con Repsol hace muy pocos días, que va a ser sometido a una asamblea de accionistas y está siendo sometido a tratamiento en nuestro parlamento. Ustedes saben que esto significa que Argentina se ha convertido ya en un país petrolero, tenemos la segunda reserva de gas shale del mundo y la cuarta de petróleo shale en el mundo, certificadas por la agencia de Estados Unidos, lo cual también nos convierte en un actor importante en materia energética, lo que sumado a cuestiones de potencia alimentaria y como lo señalara el señor Presidente, en materia de ciencia y tecnología, nos convierte en un socio importante.
Estamos también muy esperanzados en alcanzar las negociaciones entre la Unión Europea y el Mercosur, hemos charlado con nuestros pares brasileros, hemos comentado los avances realizados con el señor Presidente y con su equipo y creo que podemos llegar a buen término, a un muy buen acuerdo.
Así que creo que si bien el motivo de este encuentro es la cultura, en definitiva es profundizar la relación, hemos también invitado a presidente de Francia, Francois Hollande a que visite la Argentina para profundizar este lazo bilateral.
Hemos hablado también de cuestiones internacionales como Ucrania, nos preocupa y esta es una postura de la Argentina como un país de paz, como un país que siempre ha sido participe de misiones de paz, somos actores principalísimos por ejemplo en todas las misiones que tiene Naciones Unidas en el mundo, en Chipre, en Haití. Creemos que la cuestión de Ucrania debe resolverse en un clima de negociación política y en el marco de paz. Le comentaba al señor presidente de Francia que resultaría una trágica paradoja que en este año 2014, cuando se cumple el triste centenario de la Primera Guerra Mundial, Europa o el mundo deba enfrentar situaciones de conflictividad armada. En ese sentido confío en que la madurez, la serenidad y la responsabilidad van a primar en todos.
Es cierto lo que señala el señor Presidente respecto a la integridad territorial, pero también reclamamos a las potencias que cuando se habla de integridad territorial sea aplicable para todos. Porque mi país sufre el cercenamiento territorial, por parte del Reino Unido, de las islas Malvinas, y sin embargo las grandes potencias, fundamentalmente el Reino Unido y Estados Unidos, se han manifestado a favor del referéndum que los kelpers han hecho hace pocos días y que carece de todo valor, porque bueno, si carece de valor el que ha hecho Crimea, a escasos kilómetros de Rusia, mucho menos puede tener valor uno de una colonia de ultramar a más de 13.000 kilómetros de distancia.
Algo que es fundamental para preservar la paz en el mundo, algo que es fundamental para el respeto al derecho internacional es no tener doble estándar a la hora de tomar decisiones. No se puede estar de acuerdo con la integridad territorial en Crimea y estar en desacuerdo con la integridad territorial con las Malvinas en Argentina. O estamos de acuerdo con todas las integraciones territoriales y el respeto a la soberanía de todos los países y a la historia de los países -porque en definitiva las Malvinas siempre pertenecieron a la Argentina, Crimea hasta el 19 de febrero de 1954 pertenecía a la Unión Soviética y le fue obsequiada por Nikita Kruschev a Ucrania-, respetamos los mismos principios para todos o realmente vivimos en un mundo donde no hay derechos, donde no hay respeto a lo que decimos, donde fundamentalmente prima la relación del más fuerte. Creo que precisamente por hacer las cosas que más les convienen a los más fuertes es que el mundo está como está y debemos cambiarlo.
Por eso apoyamos la integridad territorial, por eso votamos como votamos en el Consejo de Seguridad, pero reclamamos también que todos sean coherentes y hagan exactamente lo mismo.
Mañana nos vamos a encontrar con el Primer Ministro para inaugurar el Salón del Libro, que estoy segura va a ser un acontecimiento formidable, donde vamos compartir nuestro gusto por la cultura francesa, por la cultura argentina. Le comentaba al Presidente que soy una gran cinéfila y Truffaut, Vadim, Jean Luc Godard, son íconos no solamente en Francia y en el mundo sino también en la Argentina. Tengo una hija cineasta además que ama el cine francés porque dice que es un cine de culto realmente. Así que muchas gracias a todos los franceses, muchas gracias a Francia y muchas gracias señor Presidente por recibirnos con tanta cordialidad.
