El funcionario señaló que "estamos constituidos como equipo de trabajo frente a una emergencia climática de las más graves de la historia. Hay que remontarse a 1906 para encontrar un fenómeno de esta naturaleza, una ola extendida con altas temperaturas como ésta, lo cual trajo una demanda superalativa de electricidad para los equipos de refrigeración".
Citó como ejemplo lo que ocurre en el río Paraná donde la temperatura llegó a los 31 grados y registró fenómenos excepcionales, como los ataques de las pirañas en Rosario y Misiones.
“Con los Ministerios de Salud, Desarrollo Social, Seguridad, Planificación, conformamos un sistema de atención de emergencia climática. Está funcionando desde hace 13 días por las tormentas y ráfagas viento que hubo el 2 de diciembre”, sostuvo el Jefe de Gabinete.
Enumeró que se dispone de 500 patrulleros, 17 mil efectivos, médicos, enfermeros, asistentes sociales, 200 equipos trabajando en el territorio. Asimismo, manifestó la convocatoria a la Ciudad de Buenos Aires para sumarse a este comando que “funciona desde que la emergencia entró en esta instancia de profundidad".
Capitanich reiteró que se trata de una sumatoria de esfuerzos para enfrentar estos problemas, si bien aclaró que “la responsabilidad primaria de prestar servicios le corresponde a las empresas”. “Toda la acción la hacemos para resolver la seguridad de las personas y ayudar a la gente necesitada: ancianos, embarazadas, mujeres, niños”, sostuvo.
El Jefe de Gabinete remarcó la instrucción presidencial para que se trabaje “en todas las áreas para la comunidad, haciendo lo que a cada una compete” y celebró que “la ciudad de Buenos Aires se sume a este esfuerzo”.
“La emergencia climática requiere una acción sin precedentes para resolver los problemas de la comunidad”, afirmó el funcionario. Y agregó que con un helicóptero se rastrean permanentemente los focos para resolver los problemas.