Gracias, muchas gracias, muchas gracias a todos y a todas.
Querido Mariano, no Moreno sino West, Intendente de esta querida localidad de Moreno, a la que tantas veces vinimos con Néstor y que tantas veces lo recibieron con tanto afecto; querido gobernador de la provincia de Buenos Aires, querido Daniel; querido Martín, tenés un ángel, Martín, en serio, eh, muy especial; querida Estela, con vos tengo algo muy particular: recién cuando me entregaban la mantita y los escarpines....sí, yo soy abuela ¿pero sabés cuál es la diferencia? Que lo puedo tener en mis brazos y Estela todavía no. Esta es la gran diferencia y esta es la deuda que todavía tenemos pendiente con muchos argentinos. Por eso recién cuando me mandaban los escarpines, la mantita, el gorrito, el conjuntito, yo pensaba qué afortunada pese a todas las cosas que me han pasado y la pérdida de mi compañero de toda la vida. Qué afortunada que soy de poder tener a mi nieto en brazos y qué afortunada soy también, qué honor inmenso de haber venido hoy a Moreno a inaugurar la "Maternidad Estela Barnes de Carlotto", maternidad que firmamos convenio a fines del 2008 y que hoy estamos inaugurando y que va a permitir que esta localidad de Moreno ,que crece 20 por ciento por año, Mariano, por cada 10 años, pero igual es un montonazo, medio millón de personas, casi 10.500 partos públicos por año y con esta maternidad vamos a agregar la posibilidad de 3.000 partos para que en el corto plazo podamos llegar a cubrir la totalidad de partos públicos, todos aquí en Moreno.
Me cuenta la directora de la maternidad, la doctora Patricia Rosemberg, que en el año 2001, aquí en Moreno y como en tantísimas otras localidades del Conurbano de la provincia de Buenos Aires, llegaron a tener 2 parturientas en una cama porque no había lugar para una sola. Y hoy estamos inaugurando una maternidad modelo, donde cada madre va a tener su propia habitación y una cama para el acompañante, con baño privado y mirando a un jardín hermoso, donde además, el ciento por ciento de las ecografías, de las pruebas de laboratorio, de los seguimientos autoreferenciales de todas las mamás de Moreno, se van a poder hacer aquí en Moreno. Siento un gran orgullo.
Me decía Mariano cuando llegué, que no se agregaban camas desde...¿desde cuándo Mariano? Desde siempre. ¡Dios mío!, desde siempre, qué palabra que puede ser maravillosa pero que puede ser terrible cuando se refiere a las carencias. Qué palabra maravillosa si se refiere al amor, al cariño y al afecto. Pero qué palabra tan terrible cuando revela carencias, necesidades insatisfechas.
Por eso, esta década ganada. Hoy, al incorporar esta maternidad modelo, que va a permitir más de 3.000 partos públicos aquí, le estamos agregando algo más a esta década ganada, le estamos agregando calidad de vida también.
Es que no solamente fue aquí en Moreno la inauguración, también allá en el Norte argentino, muy lejos, a 15 kilómetros apenas de la frontera con el Paraguay, sé que hay una comunidad paraguaya muy importante, allá veo banderas del Paraguay también al fondo, porque muchos hermanos de la Patria Grande hoy también están en el Conurbano agachando el lomo en las huertas y en todo lo que es la cultura periurbano en materia de agricultura.
Les decía que en Formosa, en Laguna Blanca, a 15 kilómetros de la frontera con el Paraguay, a más de 200 kilómetros de la Capital de Formosa, inauguramos el Hospital de El Espinillo, un hospital rural que va a permitir también que en una provincia que hasta hace 10 años no formaba parte de esta Argentina, hoy sea una provincia que está comunicada con más de 1.700 metros de fibra óptica, con miles y miles de kilómetros de ruta, con más de 42 hospitales y centros de atención, con cientos de escuelas.
También, aquí cerca hoy, parece ser que hoy es un día de la salud argentina, qué bueno, "sábados de salud", había un programa de Sábados de la Bondad, bueno...hoy es un sábado de la salud aquí en la provincia de Buenos Aires en el Conurbano bonaerense.
En Berazategui, junto con José Mussi y Patricio, el Intendente, estábamos inaugurando un centro odontológico gratuito, moderno que va a permitir que se hagan ortodoncias gratuitas. ¿Cuándo escucharon que en la República Argentina alguno se pudiera hacer una ortodoncia gratuita? Si nacías pobre te quedabas para toda la vida con los dientes torcidos, y vamos a llegar a todos y cada uno de los lugares del país con equidad, con igualdad, como lo hacemos en educación.
En Morón, también inaugurando un moderno centro de vías respiratorias y Juliana, nuestra presidenta de bloque, aguerrida como somos las mujeres, nos contaba que además de estar en la inauguración de este Instituto de vías respiratorias, venía de recorrer, junto a Lucas Ghi, el Intendente de Morón, las nuevas obras del Hospital Posadas, emblemático para la provincia, emblemático para el país. Vamos a dejar un Posadas totalmente refaccionado a nuevo, un hospital emblemático de la zona Oeste de la provincia de Buenos Aires, del Conurbano, que además fue emblemático porque allí la represión fue formidable y también se llevaron profesionales, enfermeros que aún hoy continúan desaparecidos.
Escuchaba a Juliana, que como buena diputada, sabe lo que ha sido el aumento de la inversión que hemos hecho en materia de salud pública. Antes la llamaban gasto en el 2003; nosotros les decimos inversión y creció 10 veces en el Presupuesto Nacional la inversión en salud pública.
Hoy tenemos un sistema de vacunas obligatorio de 16 vacunas nunca visto en la historia. De esas 16 vacunas, 10 son de esta década, una por año que les valga, de vacunas que ni siquiera en muchos países desarrollados se dan, como el Papiloma para las chicas de 11 años, para que las mujeres no se mueran de cáncer de útero; 3.500 mujeres se nos mueren por año de cáncer de útero, o el gneumococo o la hepatitis, esa que puso Néstor y que permitió erradicar los transplantes de hígado y la hizo cuando apenas asumió como presidente allá por el año 2005, cuando todavía no teníamos ni un mango, pero les dábamos aumentos a los jubilados también; cuando no habíamos recuperado las AFJP, pero le empezamos a reconocer la dignidad a todos y a cada uno de los jubilados, de los más de 2 millones y pico de jubilados que hemos logrado incorporar, convirtiéndonos en el país con mayor cobertura para nuestros viejos, perdón, para nuestros mayores, viejos son los trapos, decía mi abuela, para nuestros mayores.
Yo quiero decirles a todos y a todas que estoy muy orgullosa de todo lo que estamos haciendo, de los hospitales que estamos inaugurando. Hace poco en Tucumán, la provincia del ministro de Salud, inauguramos también otra moderna maternidad. Esto es cuidar la vida, la vida no se cuida ni se valora únicamente con discursos. Se valora, primero, consiguiendo trabajo para que la gente pueda formar familia; luego, casa para que puedan vivir; después, hospitales para que tengan salud; después educación para que los pibes que nazcan, no nazcan condenados a la miseria, sino condenados a tener un porvenir, porque los estamos preparando, les estamos dando recursos educativos como nunca en la República Argentina.
Las netbooks, el presupuesto educativo, las 48 universidades nacionales, la Universidad Nacional de Moreno, que el año que viene, aprobada y creada durante nuestra gestión, una de las 9 universidades que creamos en esta década ganada.
Con orgullo me decía Mariano, no, Mariano no, un periodista que me corría con el micrófono al lado del auto y me decía: "¿Qué opina que el año que viene los morenenses vamos a tener por primera vez la promoción de universitarios morenenses?" Y qué querés que opine, pibe, si la hicimos nosotros, nosotros la construimos, qué querés que opine, qué se puede opinar.
Nosotros no opinamos, muchachos, nosotros hacemos; opinar, opinan los otros, nosotros hacemos. Los otros opinan, los otros pontifican, los otros dicen lo que van a hacer, nosotros contamos lo que hicimos, lo que estamos haciendo y todo lo que todavía nos falta hacer.
¿Y saben qué? ¿Saben por qué nos tiene confianza la gente? Porque nunca le prometimos nada, nos arremangamos. Cuando Néstor asumió, no había un mango en este país, no encontramos un Banco Central lleno de guita. Al contrario, vacío. Lo que encontramos fueron deudas, encontramos gente sin trabajo, estudiantes sin porvenir, científicos que se habían ido. Nos arremangamos y empezamos a traer a todo el mundo y ayudamos a todos y cada uno de los gobernadores e intendentes de esta provincia de Buenos Aires también.
Jamás se podrían haber hecho las cosas que se hicieron sin un proyecto nacional y sino, que me cuenten los que antes de que venga Néstor también eran funcionarios, por qué no habían hecho las cosas. No era porque no tuvieron capacidad, sino porque para hacerlo, se requiere un proyecto de país que decida favorecer a todos los argentinos, a los más débiles, a los que más necesitan. Y para eso, mis queridos amigos y compañeros, vecinos de Moreno, para eso, muchas veces hay que plantarse frente a los que históricamente mandaron en la Argentina.
Porque esta Argentina no estuvo así hasta el año 2003 por obra de la magia o por fenómenos de la naturaleza; estuvo porque la expoliaron, estuvo porque se llevaron todo, porque se quedaron con los ahorros de los argentinos, porque se quedaron con el trabajo de los argentinos, porque no había fábricas, porque se necesitaba gente que ganara poco y que hubiera muchos desocupados. Porque cuando hay muchos desocupados, ¿saben qué? Es más fácil conseguir gente que trabaje por 2 mangos.
Cuando yo veo que aquí en Moreno tenemos un 65 por ciento sin cobertura de obra social, me doy cuenta que hay trabajo, pero que hay trabajo que todavía no está registrado, que necesitamos todavía seguir luchando contra todo eso.
Y yo les pido a mis compañeros trabajadores, a mis compañeros de los sindicatos, a los que tienen la suerte de que sus trabajadores estén registrados, que reciban aportes, que tengan obra social y que lo han logrado también en estos años. Que cuente cada uno de los sindicatos cuántos cotizantes y cuántos afiliados tenían en el 2003 y que cuenten también los que tenían los sindicatos en el año 2003 y que cuenten lo que tienen hoy.
Por eso les pido solidaridad para los millones de argentinos que todavía siguen sin poder tener un trabajo registrado.
Lo hemos bajado mucho, ingresamos a la Argentina con un 50 por ciento, la mitad de los trabajadores argentinos estaban en negro, ilegales; hoy, lo hemos reducido al 32 por ciento. Pero necesitamos seguir trabajando y para ello es imprescindible que comprendan que debemos seguir colaborando con los que menos tienen.
Por eso, muchas veces hablo de la solidaridad, hablo de entendernos, hablo de ver las conquistas, porque por ahí, cuando uno, como decíamos en mi casa "pelecha un poco", viste, pelechar es progresar, se cree que ya está, bueno, ya está en otro lado. No, guarda hermano, guarda hermano que las políticas no son eternas; guarda hermana que en la taba, como la cambiaron en el 55, como la cambiaron en el 76, como la cambiaron también cuando nos venía a decir que venían a hacer otra cosa y terminaron peor, no quiero recordar lo que todos ustedes saben: los que se unieron para después huir, se unen pero después huyen cuando las papas queman y, entonces...
Por eso también, como Presidenta, porque sola no puedo, la necesidad, la necesidad del apoyo, de contar con gente que no nos ponga palos en la rueda.
¿Porque saben qué? Vos Martín, vas a tener el orgullo de ser un diputado de que nunca tu gobierno te va a pedir que le rebajes el sueldo a nadie; vas a tener el orgullo de ser diputado de un gobierno en el que alguien tenga que presentar proyectos de indulto para aquellos que han cometido genocidio; vas a tener el orgullo de ser un diputado de una Cámara que aprobó la Ley de Movilidad Jubilatoria con 2 veces al año para los jubilados; vas a tener el orgullo de ser un diputado que cada vez que se construye un presupuesto, es para infraestructura, para agua potable, para vivienda; vas a ser un diputado de una Cámara que con nuestro proyecto recuperó las AFJP, el dinero que otros se llevaban para acciones que cotizaban en la Bolsa a 30 cuando las compraban las AFJP y que después valían cero mango y que todavía tienen el tupé de hablar de los demás.
Pero bueno, yo quiero terminar mi discurso porque hoy tuve una emoción muy grande, no solo fue compartir con Estela, esta gran mujer argentina, la inauguración de la maternidad, junto a Martín, junto a Daniel, junto a Juliana, que estaba junto a todos ustedes que me acompañan en este hermoso medio día soleado de Moreno.
Quiero decirles, por ahí les parece tonto, pero la emoción más grande me la dio hoy una médica ginecóloga de la maternidad que acabamos de inaugurar. No sé si estará aquí entre nosotros o se habrá quedado, como corresponde, en la maternidad, se quedó en la maternidad como corresponde, trabajando. Quiero decirles algo: estaba recorriendo los distintos lugares, las camitas con sus mantitas lindas al crochet, el lugar donde se hacen las ecografías, el ecógrafo, y paradita, una chica muy linda, de pelo largo, me hizo acordar a mí cuando era jovencita, pelo largo, morocha, me dijo: "Gracias, doctora –quiero recordar el nombre de ella, Soledad...no, me lo acuerdo, olvidate, qué me la voy a olvidar, no me la olvido nunca más, Soledad Rapaport, me acuerdo de ella-"
Quiero contarles que Soledad, que a lo mejor va a atender a alguna de ustedes cuando vayan a tener familia, sepan que Soledad, que estaba paradita en la puerta del consultorio, muy emocionada, muy llorando, me dio las gracias, "Gracias por mi papá", me dijo. "Pero por qué". "Porque mi papá, mi papá es un desaparecido, lo fusilaron en la U9 de La Plata y los que lo hicieron hoy están condenados por la política de derechos humanos que usted y su marido llevaron adelante".
Y Soledad, que agradece con afecto y con cariño, Soledad, médica ginecóloga, que va a ayudar a dar vida a millones o a miles de mujeres morenenses, es el símbolo de esta nueva Argentina que pudo reconstruirse de sus cenizas y de sus tragedias, sin odio, sino simplemente con el reconocimiento y ayudando al prójimo.
Por eso, hoy me emocioné tanto y hoy es un día de tanta emoción en este querido Moreno.
Quiero que sepan que voy a seguir trabajando desde todos los lugares porque soy, sobre todas las cosas, lo que fueron tantos otros que ya no están, hombres y mujeres que siempre creyeron en la política. No eran épocas de marketing aquellas, no eran épocas de mercado, nadie nos decía cómo teníamos que sonreír o cómo teníamos que pararnos, simplemente sabíamos cómo teníamos que estar parados frente a la vida, frente al pueblo y frente a la Nación, con la frente erguida para defender a la patria como siempre.
Gracias, Moreno; gracias a todos, los quiero mucho. (APLAUSOS)