PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN CRISTINA FERNANDEZ DE KIRCHNER, EN EL CALAFATE, PROVINCIA DE SANTA CRUZ.
Muy buenos días a todos y a todas. Señor Vicegobernador; señor Intendente de la localidad de El Calafate, la verdad que darme un decreto de bienvenida acá… (riendo) yo no sé si se lo tengo que dar a él el decreto de bienvenida. Gracias Aníbal por acompañarnos, sé que viniste a dar unas charlas, a los intendentes, al senador nacional, a los diputados nacionales, a María Esther, a todos, son caras entrañables, son historias entrañables. También el intendente de Río Gallegos, no te noté porque tenés el pelo más blanco, mirá qué mala que soy: la verdad que son caras que tienen historias, historias maravillosas que vivimos en esta provincia.
Hoy estamos inaugurando este centro cultural, al lado, pegadito a la terminal de ómnibus. Cuando llegó Néstor llegó de gobernador a la provincia en 1991, 10 de diciembre, me acuerdo además la época en que nos tocó gobernar, porque él hablaba de ahora de todo lo que recibió la Nación, y esto lo pueden decir, bueno, estábamos escuchando al intendente de San Martín de los Andes, escuchábamos la evolución que nos mostraba el intendente de Las Parejas, provincia de Santa Fe, lo de Piedrabuena. Pero cuando Néstor gobernó, cuando Néstor fue primero intendente de 1987 a 1991 y después gobernador por tres períodos consecutivos, el país era terrible, no se recibía coparticipación, esto lo saben todos los que han sido gobernadores o intendentes en esa época, porque no había los ingresos que teníamos en materia de coparticipación porque la convertibilidad realmente no permitía tener un país muy floreciente, al contrario. Como intendente le tocó una hiperinflación y como gobernador le tocó otra hiperinflación, además de discusiones grandes con las entonces autoridades nacionales pero no por cuestiones de rentas como digo yo y menores, sino por cuestiones de modelo de país.
Y teníamos razón nosotros, queríamos un modelo de país diferente, que él comenzó a implementar cuando le tocó ser Presidente con apenas 22% de los votos el 25 mayo del 2003 aquel inolvidable. Administró primero el municipio y yo digo que le tocó siempre bailar con la más fea; la única vez que bailó con la más linda -y mirá lo que me van a decir mañana, acordarte mañana la tapa de Clarín “dijo que es la más linda”; la única vez que le tocó bailar con la más linda fue conmigo, porque todas las otras veces siempre tuvo que bailar con la más fea. Y no me van a dejar mentir, vos Cantín como buen galleguense y vos González, como buen galleguense –bueno, vos eras más chico pero no me vas a dejar mentir-, cuando llegó como intendente, aparte de no haber un mango, nada -vos te acordás Zannini, eras asesor legal y te tenías que encargar de resolver los líos legales- la ciudad de Río Gallegos parecía Kosovo. Porque había habido un programa de cloacas que se había visto interrumpido, no habían pagado las obras, teníamos toda la ciudad abierta. Ese que está allí iba segundo conmigo en la lista en el año 89 cuando fui por primera vez diputada provincial y nos habíamos sacado un afiche, yo era más joven, estaba más linda, él también era bastante pasable, y nos cargaban, la oposición decía que parecía un afiche de fotonovela y no un afiche político. Pero les ganamos con ese afiche de fotonovela y todo, allá en el 89, con nuestro debut como diputados.
Pero me acuerdo que en la ciudad se caían autos y gente dentro de las zanjas, teníamos demandas, no había un peso, año 87, año difícil, el gobierno nacional acababa de perder las elecciones, el presidente Alfonsín, venía la inflación, en fin, mal, lo que se dice mal. Y además por si todo fuera poco para postre, como dice un amigo mío, huelga municipal durante un mes. Un mes de huelga municipal que me acuerdo que los funcionarios, Alicia, todos -yo no, debo reconocer que no- salían a recoger la basura de las calles. Los funcionarios, yo cuando veía la basura el otro día en la ciudad de Buenos Aires, está bien que la Ciudad de Buenos Aires es grande y nadie pretende que salgan los funcionarios a recogerla, pero la ciudad de Río Gallegos era grande, los funcionarios no eran tantos y se recogía la basura. Había un compromiso, unas ganas de laburar, unas ganas de hacer contra viento y marea que impresionaba. Y él con esa cosa que era una locomotora, porque realmente era una locomotora que arrastraba a todos los vagones que éramos nosotros. Y empezó a hacer obras, empezó a juntar pesito por pesito, a cobrar impuestos, porque también todos tenemos que saber que para que el Estado municipal, provincial o nacional pueda hacer cosas, los que tienen capacidad contributiva tienen que pagar impuestos, porque si no hay impuestos no se puede hacer nada sin recursos, y transformó la ciudad.
Me acuerdo cuando hicimos la primera rotonda. Ustedes no saben lo que el ingreso a Río Gallegos, era horrible, además había un semáforo que había que estar parado cinco minutos y era la Ruta 3, que era una calle que entrabas y tenías que estar cinco minutos en el semáforo. Hasta que hicimos la primera rotonda que hoy es el ingreso. En realidad hoy el ingreso a la ciudad de Río Gallegos está antes, a la altura del aeropuerto, con todo lo que se hizo, pero transformó la ciudad. Tanto transformó la ciudad que pudo con el triunfo en Río Gallegos y el triunfo en 28 de Noviembre, los únicos dos municipios que ganamos las elecciones en 1991, el resto los perdimos con Puricelli, lo digo con cariño. Me acuerdo que perdimos por poca diferencia y Néstor con la gestión brutal que hizo en Río Gallegos y que el pueblo de Santa Cruz pudo ver, pudo acceder a la gobernación.
Pero hete aquí que habíamos dejado la municipalidad fantástica, divina, organizada, sin deuda, y llegamos a la provincia que estaba peor que la municipalidad cuando llegamos en el 87. Me acuerdo que los chicos habían pasado de grado por otra huelga docente que duró 100 días en aquella oportunidad y tuvieron que pasar los chicos por decreto, los sueldos se debían de hacía dos meses, se debía el aguinaldo, se había interrumpido el pago de la obra social, la caja de servicios sociales no funcionaba, no pagaban a los prestadores y no había salud pública. No había hospitales, eran todos muy viejos, el de Río Gallegos databa desde principios de siglo, todos los hospitales eran viejos y en 12 años, con una economía donde el mundo se derrumbaba, no solamente hizo el aeropuerto de El Calafate, que le cambió la cara a El Calafate, el puerto de Caleta Olivia. Cuando vine a Gallegos por primera vez en 1975 escuchaba hablar del puerto de Caleta Paula, que iba a permitir que Caleta Olivia no solamente tuviera actividad petrolera sino que pudiera mirar al mar. Era casi un mito aquel famoso puerto y lo hizo, y todo con recursos propios.
Llevó el gas también a Río Turbio, a 28 de Noviembre, que era una nube de carbón. Uno cuando llegaba Río Turbio o a 28 de Noviembre lo primero que veía era una nube negra y después recién veía los pueblos abajo de esa nube negra, porque la gente se calefaccionaba con carbón. En esta provincia donde le dábamos a todos los argentinos petróleo y gas para calefaccionarse con gas, muchos de nuestros pueblos, todos los de la cordillera prácticamente, no tenían acceso al gas. Y él les dio gas y después más tarde en la presidencia el gasoducto para El Calafate y la ruta los glaciar, esa ruta que muchos no querían porque decían que lo iba afectar ecológicamente, pero ustedes vieron lo que es hoy ir al glaciar, donde al no levantar tierra el bosque está mucho más lindo, más sano.
Transformamos la provincia y la transformamos tanto que bueno, eso más la ayuda que tuvimos con alianzas que hicimos en Buenos Aires, le permitió ser Presidente de todos los argentinos. Y otra vez, dejó la provincia como decía como decía Javier recién, con 650 millones de dólares. ¿Por qué? Porque con las regalías hidrocarburíferas que cobramos por lo que nos debían desde la época de Alfonsín, donde no nos liquidaban bien las regalías, ¿él que hizo? las depositó, con los intereses hacía las obras, dejaba siempre el capital y administraba, porque era un gestionador, un transformador, si le digo administrador me parece que lo bajo mucho, era un transformador, a él le gustaba el progreso, le gustaba ver calles pavimentadas, calles asfaltadas, gente trabajando, no sólo en la administración pública sino en la obra pública, en el comercio, porque todo necesita ser movido. Para que haya comercio tiene que haber obviamente gente que tenga pueda comprar pero tiene que haber una distribución del ingreso entre todos los sectores y las actividades económicas de una provincia, que no sea sólo un sector el que se chupe los recursos porque termina implosionando e imposibilitando crecer la economía. El no era economista, era un político que entendía a la economía como una ciencia social. Después se puso a estudiar, pero era un gran transformador y dejó la provincia con 650 millones de dólares, con hospitales maravillosos. Recuerdo cuando él se tuvo que operar en Río Gallegos y cuando tuvo aquel episodio de salud en el 2004 también se atendió en un hospital público y yo diego siempre que cuando un presidente o un gobernador van al hospital público es porque hay salud pública en ese lugar. Dejó hospitales modelo en toda la provincia y como si fuera poco también en El Calafate fue uno de los que impulsó que se esté construyendo el nuevo hospital de El Calafate, que va a ser un modelo también para todos los calafateños y para todo el país.
Dios mío. Y todo eso lo hacía mientras tenía grandes diferencias con el gobierno nacional, donde no nos mandaban un mango, porque además no había un mango en todo el país, tampoco podían mandar mucho, y mientras que en el país la desocupación era de dos dígitos aquí en la provincia de Santa Cruz, aún en los peores momentos, nunca pasó el 2 ó 3%. Ese era Néstor Kirchner gobernando. Ese era el hombre que salió de este sur y cuando nos dicen que somos poquitos, seremos poquitos pero ya les pusimos dos presidentes. Seremos poquitos pero no es una cuestión de muchos, hay cosas que tienen que ver con lo cualitativo y gobernar no es una cuestión de cantidades. Te pueden apoyar muchos o todos, pero si al cabo del tiempo no gobernás correctamente terminás perjudicando a todos. Por eso no hay que sentirse menos porque seamos poquitos ni hay que sentirse más porque seamos muchos. Debemos tener la exacta dimensión de lo que cada uno necesita y tiene y debe brindarle a su país.
Por eso los recuerdos, vamos a seguir ayudando siempre a Santa Cruz. El otro día cuando Río Gallegos tuvo problemas de luz -todavía los sigue teniendo-, los 20 megas, lo llamé a Julio y le dije “la ciudad de Gallegos está sin luz”. Hace dos o tres meses atrás, lo llamé a Julio que enseguida mandó generadores hoy los 20 megas que están cubriendo para que Río Gallegos pueda seguir teniendo luz, los tiene gracias a la colaboración de la Nación. Y es una suerte tener un gobierno que ayude cuando hay problemas y podamos colaborar, pero también debemos saber que tenemos que tener un modelo de gestión y administración que permita que esa ayuda no sea vista como un privilegio por otros. Yo tengo un refrán, no es mío por supuesto, pero dice ayúdate –es muy viejo el refrán- que el cielo te ayudará. ¿Qué significa esto? No se le puede pedir a Dios todo, le debemos pedir a Dios y darle gracias pero si nosotros no laburamos, no nos movemos y no ponemos lo que hay que poner, Dios solo no puede hacer las cosas, esto es fundamental.
Yo la verdad que estoy tan orgullosa con estas antenas de la televisión digital, con la televisión digital abierta, con estos 200 decoders que hemos entregado hoy en Piedrabuena para que la gente pueda acceder a todas las señales de televisión que tiene la TVA, que tiene una definición, una calidad tecnológica espectacular, tiene un montón de señales y lo que es más importante: gratuita. Vamos a cubrir el 100 por 100 del país, estamos cubriendo primero los centros más densamente poblados y finalmente vamos a tener cubierto el 100 cien 100 del país para que todos los argentinos puedan acceder gratuitamente a todas las voces y vamos a seguir incorporando señales.
El tema de la basura, que es importante y vamos a tratar en todas las localidades porque la basura es el tercer problema sanitario que tenemos que encarar después del agua potable y el saneamiento cloacal. El tercer tema que se viene con todo y que ya está aquí entre nosotros es la basura. ¿Además por qué? Porque como consumimos más, producimos más, porque gastamos más, por suerte que consumimos más porque la cantidad de basura mide la calidad de vida de las sociedades, las sociedades que mejor nivel de consumo tienen mayor producción de basura tienen. La basura entre 600 y 700 gramos está considerada pero estamos produciendo más de un kilo de basura por ejemplo en la ciudad de Buenos Aires, lo cual revela el nivel de consumo que tenemos y por eso tenemos que trabajar en proyectos como el de San Martín de los Andes. Está el ministro de Turismo porque San Martín, junto a El Calafate, Bariloche y todo el corredor de la ruta 40, de los lagos, es nuestros orgullos turísticos y vamos a seguir trabajando con todo.
Y Las Parejas, que cuando Néstor era candidato a presidente en el 2002 la visitó con un 30% de desocupación y hoy es capital de las pequeñas y medianas empresas dedicadas a la maquinaria agrícola y un orgullo para todos los argentinos y ese joven intendente de 31 años acaba de ganar las elecciones con un 75% de los votos. El hablaba de una situación difícil porque su papá era el anterior intendente y falleció, el Bocha, un saludo para todos y como vos decís, debe estar con Néstor. A no ponernos tristes.
Y esto que tengo puesto es de acá de El Calafate, porque estas cosas de telar se hacen aquí. Mañana me matan acordate, van decir “anda mostrando la ropa”. Pero es toda hecha en El Calafate, en Telares Andinos, un lugar sensacional que está sobre la avenida Libertador, pero además revela la integración nacional porque es lana de llama del Norte que la traen las chicas de Telares Andinos, que por supuesto tejen la lana de oveja que sí es nuestra, de acá, y esta flor es de lana de oveja patagónica tejida, armada y teñida por ellas. Así que a los que no saben, pueden pasar por Telares Andinos que tiene unas cosas fantásticas. Ojo que yo las pago, no me las regalan, nadie crea que es propaganda a cambio.
Es un día muy especial y yo quiero terminar acá, pero de acá quiero contarle a todos los argentinos - los calafateños ya lo saben- que vamos a inaugurar un lugar maravilloso sobre la avenida Libertador, que es la avenida principal del pueblo, de la villa, y que es el Mundo del Juguete. Es la obra de un coleccionista que hace más de 30 años que colecciona juguetes nacionales e importados, que realmente les puedo decir que es maravillosa porque yo fui cuando estaban armándola y las cosas que tienen no se pueden creer. Juguetes de fines del siglo XIX, del siglo XX todos, una sección dedicada exclusivamente a todo lo que era la producción de la Fundación Eva Perón. Las cosas que tienen, desde camisetas de la Fundación Eva Perón, desde juguetes, desde libros, me regalaron un libro que yo digo debe ser un incunable. Un libro que se llama “Cuentos del 17 Octubre” hecho en el 48 y que viene con una estampillita, porque todo venía con una estampillita con la foto de Perón y Evita que decía “para nuestros queridos descamisaditos y descamisaditas”. Imagínese si alguien hiciera algo así hoy habría juicio político o fusilamiento en el paredón público lo menos. La verdad es que yo tengo esta estampillita hecha en un cuadrito, pero por Dios, los que critican a Perón y Evita por esas cosas de ellos no se va acordar nunca nadie, en cambio Perón y Evita están en la memoria del pueblo hasta el día del juicio final. Olvídense, les dieron y los castigaron por lo que decían que era personalismo, que era esto o lo otro, pero mirá querido, si todos los que hacen personalismo se ocuparan del pueblo como lo hicieron Perón y Eva bienvenidos los personalistas, porque la verdad por ahí hay algunos que no son tan personalistas pero han hecho cada cosa con nosotros los argentinos, terribles. Por eso hay ese ADN de nuestro pueblo transmitido de generación en generación de agradecimiento a lo que hicieron. Y fundamentalmente -y esto también me va a valer una crítica- lo de ella, que fue puro sentimiento y pasión. Perón era el estratega, el estadista, pero si al estadista no le ponés pasión y corazón creo que queda incompleto, yo creo que ellos pasaron a la historia por ese complemento perfecto.
Así que vamos a ir a ver ese Mundo del Juguete donde además hay juguetes de todo tipo, de origen inglés, francés, soldaditos, es una maravilla, va a ser -estoy segura- un lugar donde la gente vaya y lo visite como visita el glaciar, el museo del hielo o tantísimos lugares tan lindos. De aquí no se vayan que después nos vamos al Museo del Juguete.
Quería terminar diciendo anoche vi la película que mañana, Día del Militante, se va a estrenar en el Luna Park, en honor a Néstor Kirchner mi compañero. La vi con Natalia mi sobrina y con el marido que me acompañaron y quiero en este acto publico agradecerle personalmente a la directora, a Paula Luque, esa directora fantástica que también filmó la película Juan y Eva que mereció el premio en el festival de Bogotá, Colombia, a la mejor dirección y a la mejor película. Los medios lo pasaron por altito, si hubiera sido algún otro nombre, Victoria y Jorge Luis seguramente hubiera recibido alguna otra mención, pero como era Juan y Eva que recibió el premio en Bogotá a la mejor película y dirección... Realmente es muy buena película.
Quiero agradecerle a Paula dos cosas: primero, como cinéfila debo decir que está muy lograda, pudo captarlo, pudo expresarlo, pudo contarlo, no solamente a través de testimonios sino a través de imágenes. Sin golpes bajos, yo tenía mucho miedo, no vi nada y no quise participar en nada porque me parecía que los artistas deben tratar las cosas con absoluta independencia y como ellos lo miran, lo creen y lo ven. Pero tenía mis temores de cómo iba a ser tratado el momento de su partida y la verdad que debo decirlo que lo hizo de una manera no solamente artística, por la poesía del momento, si no ajustada a la verdad histórica de cómo fue pero también a lo que él era. Y cuando vean la película se van a dar cuenta porque hay un ruido de una locomotora, una vía y la imagen de Mariano Ferreira. La película tiene blancos y negros, con mucho color por supuesto, blancos y negros de la época de los 70 también, que no está desacertado, era una generación en blanco y negro como digo yo la generación de los 70, una generación al todo o nada.
Pero quiero agradecerle primero por el tratamiento con tanto respeto, pero no respeto porque diga que era lindo, bueno y de ojos celestes, respeto para no incurrir en ningún golpe bajo para ganarse al espectador, una cosa que muchas veces hacen y realmente es malo, se te escapa la lágrima pero artísticamente se pierde. Pudo lograr reflejarlo como era, las cosas que hacía, lo vi trepándose por una reja como un mono, no sé dónde fue eso pero increíble. Y lo vi jurando como Gobernador, no me registraron a mí en esa toma, me toman mucho más cuando jura como Presidente. Si hubieran conseguido el registro de cuando él jura como Gobernador –a lo mejor lo tenían, decidieron no ponerlo, no sé- me hubieran visto llorar como una Magdalena. Yo no lloré nunca tanto en ningún acto institucional como cuando Néstor juró como Gobernador, cuando juró como Presidente no lloré, es más lo hice terminar con ese juego, que andaba haciendo con el bastón, porque un poquito estaba bien, pero él seguía y le dije: “córtala”, desde mi banca porque siempre estuve cuando él hablo los primeros días de marzo.
Por eso era también la primera vez que yo asistía al discurso de un Presidente, yo había sido legisladora nacional, desde 1995, pero los primeros de marzo o los primeros de mayo, cuando hablaban los Gobernadores y los Presidentes yo siempre me quedaba en la provincia porque hablaba Néstor. Así que esa era también la primera vez que asistí como legisladora nacional, desde 1995, al discurso de una sesión inaugural de un Presidente fue cuando él ocupó ese cargo y no fue a propósito sino que la historia que se dio así. Y registré algo que no me había dado cuenta nunca, todo lo demás lo había visto en algún momento, pero registré que como yo me adelanté un poco, salí caminando adelante y saludando, yo creo que no me daba cuenta que él era Presidente y él quedaba atrás, con Florencia, entonces muy chiquita, tenía 12 años ella y vi cosas que no había podido ver, fue un Néstor que no había visto nunca. Era un Néstor que tomaba a mi hija y la besaba permanentemente, pero le vi una sensación de conmoción que tenía. Yo digo que la conmoción es la sumatoria de emoción más la angustias y lo vi de la misma manera. Eso sí, ya lo sabía porque ya lo había visto, el 24 marzo 200, ahí en la ESMA.
Entonces ahí me di cuenta, yo que iba saludando que parecía que iba saludando por la red carpet…claro para mí el Congreso no era un lugar extraño, yo estaba desde el 95 en el Congreso, ingresar al Congreso para mí era un acto casi diario, cotidiano, y yo iba delante saludando y me saludaban y él quedó atrás y los filman y hay dos o tres gestos de él, que se lo ve como con un rictus conmocionado, que es el mismo que después yo sabía que iba a tener, el 24 de marzo de 2004, porque lo conocía. Pero no lo había visto en ese momento, cuando iba a jurar como Presidente y ahí me di cuenta que él sabía - una vez más - la que se le venía.
Yo me di cuenta un poco después, cuando quedé disfònica, no sé si recordarán que durante tres meses aproximadamente estuve que no podían hablar, se me iba la voz, me revisaban y nadie sabía por qué, y era precisamente por el impacto. Porque yo creo que la ficha me cayó cuando ingresé a Olivos, que fue el 29, nosotros no fuimos el 25 mayo a vivir a Olivos, sino cuatro días después y ahí me cayó la ficha, cuando ingresé a Olivos que Néstor era Presidente y ahí quedé muda. Tuve tres meses con severas dificultades para poder hablar, pero me di cuenta que cuando ingresé, ese 25 mayo 2003, no me di cuenta que él era Presidente y él sí se había dado cuenta, lo vi anoche. Así que gracias Paula, si me estás escuchando por haber tomado esa imagen, gracias por la película y gracias a todos lo que colaboraron porque realmente pudieron atrapar su espíritu patagónico.
Hay una escena monumental, en la nevada grande, del 95 – y con esto termino – yo creo que ahí, en esa escena, está él, en toda su dimensión y tiene que ver con lo que hizo. Ustedes recordarán, en el 95, cuando tuvimos la gran nevada. Yo no recuerdo una nevada más importante que esa, fuimos tapados – literalmente – por la nieve. Fue en el mes de julio y al día siguiente, o a los dos días después del 26 julio, del aniversario de la muerte de Evita y me acuerdo porque salimos de la iglesia, con Jorge Cepernich – otro gran santacruceño - y Jorge, viejo conocedor del clima, miró para arriba y dijo: “uh, me parece que se viene una nevada”. Y yo no sé si fue ese día, o al otro día que la nevada se vino y fue una cosa impresionante, pero les cuento la anécdota. Él fue a recorrer los barrios, con su campera cacique y con borcegos y demás, y se enterró en la nieve, se cayó, y en un momento se para un auto porque no podía seguir andando y él con otro grupo de gente, de ahí, de vecinos del barrio, de gente que lo acompañaba, se pone a empujar en la auto. Él era Gobernador, y no significa que un Gobernador no pueden empujar en auto, pero yo la verdad es que no vi a muchos gobernadores ante una dificultad de otro, empujando ni un camión ni un auto y él iba empujando – con tres o cuatro más - hasta que arranca el auto, enterrado en la nieve, en medio del temporal de nieve, en la adversidad que sabemos que muchas veces el clima de esta, nuestra querida Patagonia, ese ser era él contra todo, a toda costa y jugando por todo: empujando autos, administrando un municipio, gestionando una provincia o conduciendo un país… ese era Néstor Kirchner. (Aplausos).
Gracias Paula Luque porque lo hiciste muy bien. Muchas gracias a todos y a todas, muchas gracias. (Aplausos).