PALABRAS DEL VICEPRESIDENTE DE LA NACIÓN, A CARGO DEL PODER EJECUTIVO, LIC AMADO BOUDOU, EN EL ACTO POR EL BICENTENARIO DEL REGIMIENTO DE GRANADEROS A CABALLO “ GENERAL JOSÉ DE SAN MARTÍN”, EN LA PLAZA COLÓN.
Muy buenos días a todos y a todas: en esta fecha tan especial y tan cargada de simbolismos, de los simbolismos que tienen que ver con los tiempos de transición. Es innegable que el General San Martín y sus granaderos a caballo fueron protagonistas principales en un verdadero tiempo de transición, que fue del colonialismo a la independencia de nuestro país y no sólo de nuestro país, sino la independencia regional.
Y en estos tiempos que nos tocan transitar hoy, donde – sin dudas – emerge la figura de Néstor Kirchner y de Cristina Fernández de Kirchner, también como protagonistas principales de tiempos de transición, me parece que el correlato de los dos momentos bien vale la pena estar celebrando con toda fuerza y con toda alegría estos 200 años de la creación del Regimiento de Granaderos a Caballo. Porque también hoy, en estos tiempos de transición es importante interpretar que la lucha contra el colonialismo, la cual ustedes - los herederos del General San Martín, de Baigorria y de Cabral – forman parte también tiene que ver con la lucha definitiva contra colonialismo cultural y económico, en la cual estamos imbuidos los argentinos y los latinoamericanos.
Esa lucha que fue del colonialismo a la independencia territorial hoy es de las democracias tuteladas a la independencia de la voluntad popular. Y esa lucha contra el colonialismo también nos muestra la cara más feroz que tienen y tuvieron los colonialismos, como hacen y hacía lo que mejor supieron hacer: aquello que tiene que ver con expoliar las economías, con aprovecharse de las poblaciones, con saquear los recursos naturales, cobra hoy -sin duda - un significado muy fuerte.
Y este Cuerpo, este Regimiento, del cual hoy celebramos el Bicentenario sin duda es un símbolo en tal sentido. De las 20 campañas militares sólo 1, pero muy trascendente fue en nuestro país, donde terminó con el saqueo a las costas de nuestro litoral, allí en la famosa Batalla de San Lorenzo; las 19 restantes tuvieron que ver con la lucha contra el colonialismo en la América latina, en nuestras hermanas repúblicas de Chile, de Perú y de Ecuador, entre 1812 y 1824 y al regreso de las mismas guardar las armas hasta el año 1913, en el cual fue reorganizado el regimiento para en el año 1907 convertirse, en definitiva, en el regimiento a cargo de la seguridad presidencial, aquí en la Casa de Gobierno y en la Quinta Presidencial de Olivos.
Y me parece que haciendo este correlato es fundamental hacer eje en el rol que ustedes tienen como custodia de la seguridad presidencia, porque no se trata de personas, no se trata solamente de Presidentes y Presidentas, es mucho más importante la tarea que ustedes, como fue muy importante la tarea que tuvieron en su creación y es el eje común que debe guiar a este fuerza, a este Regimiento: ser los custodios de la figura presidencia es ni más ni menos que ser los custodios de la voluntad popular, ser los custodios de la decisión soberana del conjunto de los argentinos es ser los custodios de que quien lleve sus funciones en este edificio pueda hacerlo en base a sus convicciones y a lo que ha expresado el pueblo de la Nación que lo ha elegido. Me parece que es muy importante en este momento recordar esa función y esa tarea y ser parte - en definitiva - de esta verdadera recuperación de las decisiones en la Casa Rosa y no en otros lugares.
Por eso en estos tiempos, que no son casualidad, en los cuales uno de los ejes – sin duda – tiene que ver con verdad, memoria y justicia quisiera compartir con todos ustedes una expresión del General Don José de San Martín, para finalizar esta reflexión. Decía el General Don San Martín: “la Patria no hace al soldado para que la deshonre con sus crímenes, ni le da armas para que cometa la bajeza de abusar de esas ventajas ofendiendo a los ciudadanos con cuyos sacrificios se sostiene; la tropa debe ser tanto más virtuosa y honesta cuanto es creada para conservar el orden, afianzar el poder de las leyes y dar fuerza al gobierno para ejecutarlas y hacer respetar de los malvados que serían más insolentes con el mal ejemplo de los militares. La Patria no es abrigadora de crímenes”. Esto nos decía el General Don José de San Martín, me parece muy importante recordarlo hoy.
Por eso compartir con ustedes el orgullo de formar parte de este Regimiento y compartir con todos los argentinos el orgullo de estar en un país con transformaciones, que tienen tanta significación, como la Gesta entre 1810 en adelante.
Por eso quiero decirles: ¡Viva el Regimiento de los Granaderos! ¡Viva la Patria! ¡Viva Argentina!
Muchas gracias. (APLAUSOS).