Tras la ceremonia de jura de los ministros de su gabinete en el Museo del Bicentenario, la presidenta Cristina Fernández subió al escenario emplazado frente a la Casa de Gobierno. Allí el músico Charly García entonó su versión del Himno nacional argentino, que fue coreado por la multitud que se convocó en la Plaza de Mayo.
A continuación, la Presidenta se dirigió al público, para agradecer “a todos los jóvenes, de todas las agrupaciones y movimientos sociales de la patria que han sido la verdadera vanguardia de este gobierno en sus momentos más difíciles”. También agradeció a “los trabajadores de la patria, porque no hay diferencia entre jóvenes y trabajadores, todos luchan por una país más justo, más libre y más igualitario”.
Destacó que muchos jóvenes “gracias a este proyecto nacional, popular y democrático, han podido conseguir su primer trabajo”. Afirmó que lo ve en cada lugar que visita, porque remarcó: “No soy una presidenta de escritorio, recorro barrios, fábricas y provincias”.
Asimismo, Cristina Fernández resaltó las diferencias entre su época y la juventud actual: “Hoy esta maravillosa nación tiene la inmensa suerte que a diferencia de lo que ocurría en otras épocas y de lo que pasa en otros lugares del mundo, los jóvenes se convocan a las plazas con alegría y agradecimiento”. “Que maravilloso volver a ver esta plaza llena de banderas, de consignas y de cánticos”, consideró.
La jefa de Estado dijo haber estado en otras plazas “donde no podíamos gritar consignas, porque mucha gente venía nada más o tal vez la traían”. “Yo siento que cada uno de los hombres y mujeres, de los jóvenes que están hoy aquí, están por que quieren. Ustedes no saben el valor que tiene eso para la construcción democrática”, enfatizó.
Más adelante, recordó emocionada al ex presidente Néstor Kirchner: “Yo estoy segura, él vive en cada uno de los jóvenes, de los trabajadores, de las mujeres, de los docentes, de los estudiantes, de los científicos que han vuelto a creer que la construcción social en la Argentina es posible”.
“Quiero decirles y agradecerles todo el acompañamiento en los momentos difíciles de nuestro gobierno”, expresó la Presidenta. Y remarcó: “Lo quise hacer en esta plaza, donde convocamos en momentos difíciles, y ustedes respondieron”.
Sostuvo que muchos concurrieron en ese momento a “apoyar un proyecto que aún aquellos que creen en él, miraban escepticos. Parecía imposible recuperarse de tanta derrota. Pero aquí estamos. Somos la demostración de que las convicciones, las ideas y el coraje político son las herramientas de un proyecto político para recuperar las banderas de un pueblo”.
Cristina Fernández se dirigió a continuación a “a los 40 millones de argentinos”: “Mi compromiso con la patria, con él (por Néstor Kirchner) y conmigo misma, es gobernar para los 40 millones de argentinos, porque estoy convencido que debemos dar vuelta la página del desencuentro, de la confrontación”, enfatizó.
Por último, remarcó que el país se mantiene “en un mundo difícil, con nuestro modelo nacional, popular y democrático, de pie, dando testimonio que es posible un modelo distinto”, centrado en la producción y el trabajo, y que proponga “la distribución de la palabra, la distribución del conocimiento y la distribución de la riqueza”. “Pídanle a él, en nombre de todos, que nos ayude a no equivocarnos. Gracias, fuerza, y a seguir trabajando como todos los días”, concluyó la Presidenta, acompañada por sus hijos Máximo y Florencia Kirchner, el vicepresidente Amado Boudou, y parte de los funcionarios del gabinete.