PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACION CRISTINA FERNÁNDEZ EN EL ACTO DE CIERRE DE RONDA DE NEGOCIOS “ARGENTINA EXPORTA AUDIOVISUAL”, MUSEO DEL BICENTENARIO, CASA DE GOBIERNO.
Muchas gracias, muy buenas tardes a todos y a todas: hoy acá la verdad que estoy en mi salsa, no puedo decirlo de otra manera, porque esto sí que me encanta. Yo – ustedes saben – soy una cinéfila terrible, extrema, la verdad que cuando el secretario de Comercio y la titular del INCCA me hablaron de esta ronda de negocios para elaborar un intercambio, porque todos deberíamos saber que el 80 por ciento de la taquilla nacional es ocupada por distribuidoras y por películas extranjeras: Fox; Disney, Universal; bueno alguna otra que me olvido, pero que son muy importantes y nuestra misión como representantes del pueblo argentino, de su identidad y de su cultura es precisamente lograr que también nuestras películas, nuestra identidad, nuestra cultura, nuestros actores puedan también ser exportados, así como nos importan actores y horas de trabajo, que nosotros tambièn exportemos películas, contenidos porque estamos tambièn generando miles y miles de puestos de trabajos a actores, a maquilladores, – se dieron cuenta que enseguida dije maquilladores ¿no?-, a sonidistas, a técnicos.
En fin, la industria de los contenidos culturales porque en definitiva es esto, es una industria que genera un altísimo contenido de mano de obra muy intensivo, muy diversificado. Porque no solamente está el que hace la película en sí con todos los técnicos, los actores, los maquilladores, sino todos lo que rodean ese mundo, desde los catering, desde los lugares en que se alquila, o sea da trabajo y es precisamente uno de los ingresos más importantes que – por ejemplo – tiene la Ciudad de Buenos Aires, todo lo que se filma, en la Ciudad de Buenos Aires.
Por eso cuando propusimos hacer esta ronda de negocios, donde le decimos a los importadores que van a tener que exportar contenidos argentinos porque de esto se trata el objetivo de la política, que estamos llevando adelante como país y para nosotros es importante exportar granos, es importante exportar maquinaría agrícola, valor agregado, cosas industriales, tecnología de software pero tambièn es muy importante exportar nuestra identidad, nuestra cultura, nuestros saberes, que se expresan en el cine y en los contenidos televisivos.
Ustedes saben, hoy, que nuestro país es elegido por numerosas empresas que hacen contenidos culturales para tener su plataforma de negocios aquí y producir sus contenidos culturales para todo el mundo de habla hispana. Y la idea es ir no solamente al mundo de habla hispana, sino también queremos ir a Estados Unidos y queremos ir a todas partes. Así que vamos a impulsar este equilibrio entre los que importan y los que exportan. Y estamos produciendo mucho y para eso el Estado se ha involucrado muy fuerte en el financiamiento de contenidos culturales.
Ya llevamos más de 5 mil puestos de trabajo, 60 mil de cine y 5 mil de televisión. ¿Y cuántas horas de contenido televisivo ya? 500 horas de contenido televisivo. (APLAUSOS). Esto tambièn tiene que ver con que una o dos productoras no monopolicen toda la actividad y entonces todos los actores, todos los técnicos y todos los que quieran y tengan esa vocación maravillosa de actuar, de hacer reír y llorar a la gente queden presa de solamente de una o de dos opciones. (APLAUSOS). Por eso impulsamos fuertemente a todas aquellas productoras para que surjan productoras independientes, que tengan financiamiento. Y hoy estamos viendo por televisión magníficos contenidos culturales, desde Aluvión, que vi uno o dos capítulos, porque más no tengo tiempo; también “La primera vez”, que vi uno con Jorge Ferro buenísimo, que era un hombre que descubría su verdadera identidad sexual, una actuación extraordinaria. Y bueno no tengo mucho tiempo para mirar televisión, pero por ahí cuando hago un zappineo y veo y la verdad que estoy muy orgullosa de lo que estamos produciendo los argentinos. Ni que hablar – bueno ahí veo a Pablo Echarri, del éxito que protagonizaste con “El elegido”, y que te miraba todo el mundo, te quiero felicitar porque fue un verdadero éxito realmente. (APLAUSOS).
Y la verdad que vamos a seguir trabajando en ese sentido y con esta orientación, que tiene que ver con lo comercial y que tiene que ver con lo cultural y que una cosa no está reñida con la otra, al contrario tenemos que sacarnos pruritos y prejuicios y saber que necesitamos vender nuestros productos porque estamos generando trabajos, oportunidades para que las vocaciones se desarrollen y además porque somos talentosos. Tenemos talento y si no miren – no puedo dejar de mencionarlo, este magnífico corto metraje “Luminaris”, un dejo francés tenés, si un dejo francés – para ser presentado al Oscar y que realmente es muy, pero muy bueno por lo original, por la fotografía, que es muy buena y también el argumento. Hay que hacer un cortometraje, darle un significado en seis minutos, hay que hacer un cortometraje de seis minutos sin hablar, que se entienda, que sea bueno, que te haga reír, que tenga un significado y además sea bueno. Es por ahí más difícil que hacer una película dialogada, durante una hora, que te puede salir mejor o peor, pero tenés más posibilidades de acertarla que con un cortometraje de esto.
Así que bueno, le pedí a Liliana que me de una copia para llevarle una a mi hija, porque seguramente le va a encantar verlo. Ustedes saben que ella también se dedica a esto y ama esto. Así que bueno estamos muy contentos por todas las gestiones que ha hecho la secretaría de Comercio Interior, que como siempre, busca el equilibrio entre exportación e importación y está muy bien que así sea porque debemos cuidar los intereses del país, cuidando los intereses del país cuidamos los intereses de todos los argentinos. (APLAUSOS). Y es cierto que cuando uno por ahí tiene que cuidar determinados intereses, resulta antipático para otros intereses.
Pero bueno, todos tienen que acostumbrarse a que hay un mundo diferente, que cada país está defendiendo su producción, está defendiendo sus industrias y no hay ninguna duda que esta es una de las industrias que, además, ha caracterizado a la Argentina desde muchísimo tiempo. La época del cine de oro…
No quiero tener un tono partidista en esto, pero la verdad, que todo lo que fue el desarrollo industrial hasta lo cinematográfico, tuvo lugar durante el primer y segundo gobierno de Perón en la década de los 50, donde fue la edad de oro de la cinematografía argentina. Argentina Sono Film, con películas memorables que reflejaban momentos culturales, comedias inolvidables, actrices increíbles, actores inolvidables, títulos impresionantes, desde “Las aguas bajan turbias”, después toda la generación que vino de los 60 y los 70, Leopoldo Torre Nilsson, Fernando Ayala, con “Paula cautiva”, por ejemplo, que es una de mis preferidas.
Cuando digo “Paula cautiva” todo el mundo me mira y me dice “de qué está hablando esta mujer”. Pero, no importa, las viejas que vimos la película, es una muy buena película que refleja un momento político de la vida del país y también la decadencia de un sector social y un Ayala que era…
Un Rodolfo Khun, también extraordinario, Mentasti y tantísimos directores, productores, Luis César Amadori, el marido de Zully Moreno, divina, me encantaba.
La verdad que la Coca Sarli forma parte del surrealismo argentino. Estoy absolutamente de acuerdo. Es surrealismo y muy buen surrealismo, sí, señor.
Estamos preparando en otra parte de la Casa Rosada, con esta vocación de arquitecta egipcia que tengo, yo digo que en otra vida debo de haber sido una gran arquitecta egipcia, porque me encanta, donde hay una escalera del primer piso que falta arreglar y que la estamos arreglando, les comento que estamos haciendo la Galería de los Grandes Ídolos Populares. Allí van a estar ídolos artistas, deportistas y la Coca Sarli está entre los ídolos argentinos porque, además, fue muy censurada y fue muy censurada durante las dictaduras, realmente, con un dejo de hipocresía muy grande. Así que, yo de acá le rindo mi homenaje a ella y a Armando Bó, el gran director.
No eran las películas que yo más miraba, también voy a decir la verdad, seguro que las miraba usted más que yo. Me da la impresión que usted era el que las miraba.
A Néstor, por ejemplo, se van a reír, pero le encantaba Lolita Torres, amaba las películas de Lolita Torres –un romántico, siempre lo fue- y me cuenta la madre que siempre le pedía que lo llevara al cine a ver a Lolita Torres. Es famosa esa anécdota en la familia de Néstor que le gustaban las películas de Lolita Torres, que también era otro clásico, Paulina Singerman, Niní Marshall, que también va a estar en ese lugar de los ídolos populares.
Agradecerles a todos los productores, a todas las productoras independientes que se están generando y trabajando, a los actores, a los técnicos, a todos los que participan de este maravilloso y fantástico mundo que es el cine y que es la imagen, sea el cine, sea la televisión.
La imagen es algo que a mí me fascina y no es una cuestión de frivolidad. Si uno se remonta a la época del nacimiento de nuestra cultura de país grecorromana, la imagen y la estética formaban parte muy fuerte de la cultura y las imágenes que creo que son muy fuertes y pueden expresar más que mil palabras o mil discursos y la verdad que tenemos unos artistas muy talentosos y tenemos que seguir apoyándolos.
Así que, vamos a seguir trabajando, ahora vamos a destinar más producción, con lo cual vamos a seguir con esto también aplicando la Ley de Medios. Porque esto que estamos haciendo, es también en la práctica la aplicación de la Ley de Medios. Porque por más que yo tenga, por ejemplo, una de las cosas que más incentivó durante su discusión fue, por ejemplo, los contenidos nacionales, con actores nacionales, contenidos nacionales, pero si no hay quién invierta en eso, la letra de la Ley está muy linda, pero se necesitan recursos para que la Ley se convierta en realidad. Y yo creo que lo que estamos haciendo desde el Gobierno es también es dando cumplimiento a este aspecto de la Ley de Medios y Servicios Audiovisuales que, precisamente, entre los tantísimos objetivos que tenía, no aquellos que decían algunos que tenía, sino los verdaderos objetivos, era, precisamente, generar trabajo nacional, contenido local, producción local, porque hace a la identidad y que también sea obligatorio pasar durante un determinado tiempo en todas nuestras televisoras, en todas nuestras radios, contenido nacional, como pasa en todos los países del mundo.
El otro día cuando estaba no sé en qué país, vi una película norteamericana fantástica pero traducida a un español perfecto –estaba en España creo-, sin nada de subtítulos ni nada que se le parezca, para dar lugar, por supuesto, a los que traducen e interpretan las voces.
Bueno, nada, seguir trabajando para dar cumplimiento a estos grandes objetivos, que son el arte, la cultura, la identidad, la pluralidad de voces, en definitiva, la democracia que tiene que llegar a todos los rincones, a todos los sectores, a todas las actividades y a todos los lugares de la República.
En eso estamos, en eso andamos y en eso vamos a seguir porque esos son los objetivos y seguirán siendo los objetivos de nuestro Gobierno.
Muchas gracias y felicitaciones a todos y a todas. (APLAUSOS)