Los dirigentes de la AMIA estuvieron acompañados por el canciller Héctor Timerman
Al cabo de la reunión, el presidente de la AMIA, Guillermo Borger, informó que le agradecieron a la Presidenta "sus gestiones ante las Naciones Unidas" en el reclamo de justicia por el atentado a la mutual israelita y el pedido de extradición de ciudadanos iraníes.
Además, los dirigentes entregaron a la jefa de Estado una remera con la inscripción "Esta remera es un atentado al olvido", en conmemoración del atentado a la AMIA, perpetrado el 18 de julio de 1994.