En un acto realizado en el salón de las Mujeres Argentinas del Bicentenario de Casa Rosada, la presidenta Cristina Fernández promulgó la Ley 24.044 de Regulación de Publicidad y Consumo de Tabaco que fue aprobada por unanimidad el 1 de junio último, en el Congreso de la Nación.
Acompañaron a la jefa de Estado, el ministro de Salud, Juan Manzur, el senador y autor del proyecto de ley, Daniel Filmus, y dirigentes de organizaciones no gubernamentales que tuvieron activa participación en el diseño de la norma.
También estuvieron presentes en el acto el jefe de gabinete Aníbal Fernández, el ministro de Economía, Amado Boudou, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, el ministro de Educación, Alberto Sileoni, el secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli, y el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini.
La Presidenta de la Nación destacó que con la sanción de la norma, el país está "ante un hecho histórico". Sostuvo que "como ex legisladora, me imagino lo que habrá costado en el Senado" la aprobación por unanimidad de la ley. "Hay provincias que tienen una fuerte producción tabacalera, y tienen una fuerza proporcional más importante en el Senado", indicó. Y agregó que "pudo convencerse que no iba a haber una afectación económica. La mayor parte de la producción de tabaco es para exportación, no se pierde ningún puesto de trabajo en ninguna provincia argentina".
A continuación, Cristina Fernández recordó durante muchos años fumó "dos atados por día. Mi compañero, cuatro. Alicia, tres. La familia venía mal". "Yo dejé de fumar un 31 de diciembre de 1988, a las 12 de la noche. Fumé ese mismo día, uno atrás de otro. Y apagué mi último cigarrillo ese día y nunca más volví a fumar", apuntó. "Esto fue unos meses antes de mi primera candidatura como legisladora, todos apostaban que no aguantaba. Aguanté: siempre que me he propuesto un objetivo, nunca me he desviado. Aguanté y acá estamos", agregó.
Respecto a los problemas adicionales que el tabaco provoca en la salud reproductiva, la jefa de estado comentó: "Durante el embarazo de Máximo, jamás toqué un cigarrillo. Yo perdí un embarazo en 1984 a los seis meses, un varón. Intenté durante cinco años quedar embarazada y no quedaba embarazada. Dejé de fumar el 31 de diciembre de 1988 y en 1989 quedé embarazada de mi hija Florencia".
La Presidenta destacó que con la ley se buca "el respeto al otro, de no hacerlo fumar si no quiere. Es una norma de respeto a los demás, al prójimo. Cualquiera puede fumar, pero no hay derecho que lo hagan en un ambiente en el que hay otros que no lo hacen". "Es respetar la voluntad del otro y no involucrarlo en una actitud nociva para su propia salud", subrayó.
Y concluyó que la sanción de la ley "nos coloca un pasito más adelante, en un país más saludable, en un país mejor".
Por su parte, el ministro de Salud afirmó que con la promulgación de la norma "los argentinos estamos ganando calidad de vida, estamos generando condiciones saludables para las futuras generaciones". Aseguró que el objetivo pasa por "evitar que 40 mil argentinos mueran al año por consumo de tabaco, y que otros 6 mil anualmente fallezcan por aspirar el humo del cigarrillo ajeno".
Manzur sostuvo que "hacía 25 años que en Argentina no se sancionaba una ley de estas características. El salto que estamos dando, nos pone a la altura de las naciones más avanzadas en el mundo". "Estamos plenamente convencidos que esta ley abre las puertas a una vida más saludable a todos los argentinos", enfatizó.
Ley de Regulación de Publicidad y Consumo de Tabaco
La norma actual es rigurosa y establece ambientes de trabajo y espacios de uso público libres de humo; prohibición de publicidad, promoción y patrocinio de las tabacaleras. Además, prohibe la venta de cigarrillos sueltos y por máquinas expendedoras y a menores de edad, entre otras cuestiones.
La ley obligará a las fábricas de cigarrillos a incluir en cada paquete mensajes que alerten sobre los efectos que causa el tabaco y éstos deberán ocupar el 50 por ciento de las cajas. También prohíbe la publicidad de cigarrillos, cuestión que era ampliamente demandada por las organizaciones civiles que luchan contra el hábito de fumar.
Según la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo, realizada en 2009, el 26 por ciento de las mujeres en edad fértil son fumadoras y tienen un consumo promedio de 9,4 cigarrillos por día.
Asimismo, un 34 por ciento está expuesta al humo de tabaco ajeno. Diversos estudios muestran que entre un 15 y 20 por ciento de las embarazadas en Argentina son fumadoras, siendo éste uno de los porcentajes más altos de América y del mundo.
A pesar de estos datos, el período del embarazo es una oportunidad para que los equipos de salud introduzcan en la consulta los costos-beneficios para la madre y el niño de una vida libre de tabaco.
Por ello, la cartera habilitó recientemente un espacio para atender sólo a embarazadas que quieran dejar de fumar en el marco de la línea telefónica gratuita 0800 222 1002.
