Queridos hermanos; querido Gobernador; querido Intendente de Margarita Belén; senadores; amigos y amigas, a todos aquellos que han colaborado: yo les pido que me permitan expresar los sentimientos que siento hoy que son muy profundos.
Vengo profundamente conmovido y honrado de ser el primer Presidente de la Argentina que participa de un acto en Margarita Belén, donde fusilaron a hermanos y hermanas argentinas por defender la democracia, la justicia y la equidad. (APLAUSOS)
Vengo también a decirles que esta Argentina que quiere salir del infierno, nos necesita a todos y especialmente a aquellos que, como todos ustedes, piensen como piensen, se han quedado a luchar por este Chaco hermoso, por este Chaco digno.
Pero si ustedes me permiten, quiero decirles: así como estamos hoy acá en Chaco, vengo de una provincia donde la pobreza es la más baja del país y acá todavía miren lo que tenemos que luchar que a pesar de todo lo que hemos hecho en forma conjunta en Chaco, los índices de pobreza todavía nos duelen tremendamente y los tenemos que bajar con esfuerzo, sacrificio y solidaridad entre todos. (APLAUSOS)
Este Norte Argentino lo conocí de la mano de muchos de ustedes. Me encontré con un país, parte de un país junto con el Conurbano que fue de los más agredidos por la crisis, pero nunca vi un chaqueño con los brazos abajo, siempre fuerte, adelante por una Argentina integrada, siempre vi a los chaqueños abrazados a la patria, siempre vi a los chaqueños con esperanza. (APLAUSOS)
Por eso, lo primero que quiero decir es que, más allá de las luchas electorales que son propias de la democracia, abrácense fuertes chaqueños, abrácense fuerte por esta tierra piensen como piensen, porque los que somos del interior sabemos que debemos estar unidos para hacer una Argentina equilibrada y terminar con las ventajas que a veces tiene la Argentina central, sobre aquellos que somos el patio trasero de la Argentina muchísimas veces. (APLAUSOS)
Hay algunos lugares de esta patria donde gracias a Dios se tiene todo, pero hay otros lugares, donde creyendo en Dios y en nosotros mismos hay que luchar para construir todo eso que otros tienen y está bien que lo tengan, pero queremos que lo tengan todos los argentinos.
Desde el primer día que me tocó asumir dije que no iba a bajar los brazos en la defensa de las convicciones, que no iba a buscar atajos demagógicos, que iba a pelear junto al pueblo por una Argentina con todos y para todos. Pero también sepamos, queridos argentinos, que durante décadas nos destruyeron, durante décadas se construyeron riquezas para pocos.
Todavía recuerdo, cuando cancelamos al Fondo Monetario Internacional, que los economistas liberales decían por qué gastaba las reservas pagándole al Fondo. Yo le respondía en ese momento que se quedaran tranquilos, que la Argentina empezaba a recuperar su soberanía, que terminaban las recetas que nos habían hundido y que los argentinos empezábamos a recuperar la potencialidad de nuestras fuerzas intelectuales, de nuestra capacidad de pensar y planificar.
También la recuperación y la discusión de la deuda interna privada; 70.000 millones de dólares que ahorramos; inversiones y viviendas en toda la Argentina bajando la indigencia, la pobreza, la desocupación, creyendo en la inclusión social.
Por eso yo nunca pido paciencia; lo que digo es que no podemos ir más rápido que el tiempo, y les puedo asegurar que de la mañana a la noche lucho por los que menos tienen y lucho por un país distinto. Pero, ojo con aquellos que hablan de lo que falta muchas veces, pero se olvidan que cuando estuvieron no fueron capaces de hacer ni lo que falta ni lo que debían hacer. (APLAUSOS)
Del acueducto, obra reclamada por toda la sociedad chaqueña, hoy se lanza la licitación de su primera parte; es un triunfo de los chaqueños, es un triunfo de la conciencia chaqueña, es un triunfo de la identidad chaqueña que nos ha permitido entender la necesidad de esa obra como de tantas otras.
Es un triunfo de los chaqueños, de la conciencia chaqueña, de la identidad chaqueña, que nos ha permitido entender la necesidad de esa obra como de tantas otras.
Yo les vengo a pedir que me ayuden, que me acompañen con amor y pasión, serán muchas las trabas que pongan en la construcción de la nueva Argentina, pero sepan que estamos dispuestos a dejar todo, todo nuestro esfuerzo. Por eso le agradezco Gobernador sus palabras, por hacer una patria distinta, una patria de todos. Siempre, con mi compañera de todos los tiempos, junto con Cristina, pensamos, soñamos y sufrimos, esta patria que nos duele. (APLAUSOS)
Nosotros, que amamos a la Argentina toda, estamos dispuestos a seguir trabajando, para seguir industrializando la Argentina, para que vuelva con fuerza la industria nacional, para que aparezcan los empresarios nacionales con fuerza, para recuperar nuestra producción de los grandes y los chicos que explotan la tierra con la misma fuerza y las mismas posibilidades.
Nosotros creemos fuertemente en la construcción como elemento transformador neokeynesiano de la movilidad de nuestra economía, las posibilidades de trabajo. Nosotros creemos que la obra pública no es un gasto público como dicen los economistas neoliberales, sino que la obra pública es el elemento de reivindicación que permite construir un país distinto.
Ustedes lo decían recién y lo escuché también en el acto de Margarita Belén, lugar donde estuvimos anteriormente, específicamente hablar de los comedores comunitarios. ¿Saben qué Argentina soñamos todos y la soñamos con Cristina permanentemente cuando se van construyendo las viviendas? Que los pibes y los viejos vuelvan a comer juntos en la mesa de su casa, porque han adquirido el derecho, el derecho noble de estar donde tienen que estar. (APLAUSOS)
Porque creo en la movilidad social ascendente, porque creo en la clase media argentina, porque creo en los universitarios argentinos, porque creo en los intelectuales, en los actores, en los artistas que quieren una patria distinta; porque creo en los gorritos amarillos de la construcción que aparecieron por miles, gracias a Dios, en todo el país; porque creo en los metalúrgicos que van levantando la industria, porque creo en los trabajadores de SMATA, en los trabajadores rurales; porque creo en los trabajadores de comercio, porque creo en todos los argentinos que piensan y elaboran para llevar un país distinto; porque creo en aquellos docentes que trabajan, estudian, investigan y ponen todo para hacer una patria distinta; porque creo en la convivencia, porque creo en un país plural, porque creo realmente y creemos todos los argentinos en saber superar las divergencias con amor y con cariño; porque como dijo recién el Gobernador, Dios quiera que nuestro pueblo lo pueda acompañar, Dios quiera que tengamos muy buena memoria para saber de dónde partimos y dónde estamos, será pingüino o pingüina, cuando llegue el tiempo lo dirá. (APLAUSOS)
Pero no tengan duda que confío en la memoria del pueblo argentino, confío que se acuerde de dónde partimos y sueño con un 28 de octubre, que cuándo se abran las urnas en la Argentina estén llenas de buena memoria, porque si están llenas de buena memoria la Argentina continuará el cambio en forma profunda.
Gracias Gobernador, gracias Intendente, chaqueños: abrazados a la bandera, abrazados a la patria, abrazados a la solidaridad y a nuestros héroes, abrazados a los trabajadores, abrazados a esta patria del Norte, de Chaco, de Formosa, de Santiago del Estero, de Jujuy, de Tucumán, de Salta, para integrarlos definitivamente a Corrientes y a Entre Ríos a la patria que nosotros queremos y soñamos. Creamos fundamentalmente y con toda nuestra fuerza, con toda nuestra solidaridad, con las manos extendidas y tomándonos unos a los otros, que nos vea el mundo entero que los argentinos entramos a caminar las grandes avenidas de la patria, diciendo que estamos reconstruyendo la justicia, la equidad, la moral, la igualdad de una patria para todos.
Muchísimas gracias chaqueños, muchísimas gracias a todos. (APLAUSOS)
Vengo profundamente conmovido y honrado de ser el primer Presidente de la Argentina que participa de un acto en Margarita Belén, donde fusilaron a hermanos y hermanas argentinas por defender la democracia, la justicia y la equidad. (APLAUSOS)
Vengo también a decirles que esta Argentina que quiere salir del infierno, nos necesita a todos y especialmente a aquellos que, como todos ustedes, piensen como piensen, se han quedado a luchar por este Chaco hermoso, por este Chaco digno.
Pero si ustedes me permiten, quiero decirles: así como estamos hoy acá en Chaco, vengo de una provincia donde la pobreza es la más baja del país y acá todavía miren lo que tenemos que luchar que a pesar de todo lo que hemos hecho en forma conjunta en Chaco, los índices de pobreza todavía nos duelen tremendamente y los tenemos que bajar con esfuerzo, sacrificio y solidaridad entre todos. (APLAUSOS)
Este Norte Argentino lo conocí de la mano de muchos de ustedes. Me encontré con un país, parte de un país junto con el Conurbano que fue de los más agredidos por la crisis, pero nunca vi un chaqueño con los brazos abajo, siempre fuerte, adelante por una Argentina integrada, siempre vi a los chaqueños abrazados a la patria, siempre vi a los chaqueños con esperanza. (APLAUSOS)
Por eso, lo primero que quiero decir es que, más allá de las luchas electorales que son propias de la democracia, abrácense fuertes chaqueños, abrácense fuerte por esta tierra piensen como piensen, porque los que somos del interior sabemos que debemos estar unidos para hacer una Argentina equilibrada y terminar con las ventajas que a veces tiene la Argentina central, sobre aquellos que somos el patio trasero de la Argentina muchísimas veces. (APLAUSOS)
Hay algunos lugares de esta patria donde gracias a Dios se tiene todo, pero hay otros lugares, donde creyendo en Dios y en nosotros mismos hay que luchar para construir todo eso que otros tienen y está bien que lo tengan, pero queremos que lo tengan todos los argentinos.
Desde el primer día que me tocó asumir dije que no iba a bajar los brazos en la defensa de las convicciones, que no iba a buscar atajos demagógicos, que iba a pelear junto al pueblo por una Argentina con todos y para todos. Pero también sepamos, queridos argentinos, que durante décadas nos destruyeron, durante décadas se construyeron riquezas para pocos.
Todavía recuerdo, cuando cancelamos al Fondo Monetario Internacional, que los economistas liberales decían por qué gastaba las reservas pagándole al Fondo. Yo le respondía en ese momento que se quedaran tranquilos, que la Argentina empezaba a recuperar su soberanía, que terminaban las recetas que nos habían hundido y que los argentinos empezábamos a recuperar la potencialidad de nuestras fuerzas intelectuales, de nuestra capacidad de pensar y planificar.
También la recuperación y la discusión de la deuda interna privada; 70.000 millones de dólares que ahorramos; inversiones y viviendas en toda la Argentina bajando la indigencia, la pobreza, la desocupación, creyendo en la inclusión social.
Por eso yo nunca pido paciencia; lo que digo es que no podemos ir más rápido que el tiempo, y les puedo asegurar que de la mañana a la noche lucho por los que menos tienen y lucho por un país distinto. Pero, ojo con aquellos que hablan de lo que falta muchas veces, pero se olvidan que cuando estuvieron no fueron capaces de hacer ni lo que falta ni lo que debían hacer. (APLAUSOS)
Del acueducto, obra reclamada por toda la sociedad chaqueña, hoy se lanza la licitación de su primera parte; es un triunfo de los chaqueños, es un triunfo de la conciencia chaqueña, es un triunfo de la identidad chaqueña que nos ha permitido entender la necesidad de esa obra como de tantas otras.
Es un triunfo de los chaqueños, de la conciencia chaqueña, de la identidad chaqueña, que nos ha permitido entender la necesidad de esa obra como de tantas otras.
Yo les vengo a pedir que me ayuden, que me acompañen con amor y pasión, serán muchas las trabas que pongan en la construcción de la nueva Argentina, pero sepan que estamos dispuestos a dejar todo, todo nuestro esfuerzo. Por eso le agradezco Gobernador sus palabras, por hacer una patria distinta, una patria de todos. Siempre, con mi compañera de todos los tiempos, junto con Cristina, pensamos, soñamos y sufrimos, esta patria que nos duele. (APLAUSOS)
Nosotros, que amamos a la Argentina toda, estamos dispuestos a seguir trabajando, para seguir industrializando la Argentina, para que vuelva con fuerza la industria nacional, para que aparezcan los empresarios nacionales con fuerza, para recuperar nuestra producción de los grandes y los chicos que explotan la tierra con la misma fuerza y las mismas posibilidades.
Nosotros creemos fuertemente en la construcción como elemento transformador neokeynesiano de la movilidad de nuestra economía, las posibilidades de trabajo. Nosotros creemos que la obra pública no es un gasto público como dicen los economistas neoliberales, sino que la obra pública es el elemento de reivindicación que permite construir un país distinto.
Ustedes lo decían recién y lo escuché también en el acto de Margarita Belén, lugar donde estuvimos anteriormente, específicamente hablar de los comedores comunitarios. ¿Saben qué Argentina soñamos todos y la soñamos con Cristina permanentemente cuando se van construyendo las viviendas? Que los pibes y los viejos vuelvan a comer juntos en la mesa de su casa, porque han adquirido el derecho, el derecho noble de estar donde tienen que estar. (APLAUSOS)
Porque creo en la movilidad social ascendente, porque creo en la clase media argentina, porque creo en los universitarios argentinos, porque creo en los intelectuales, en los actores, en los artistas que quieren una patria distinta; porque creo en los gorritos amarillos de la construcción que aparecieron por miles, gracias a Dios, en todo el país; porque creo en los metalúrgicos que van levantando la industria, porque creo en los trabajadores de SMATA, en los trabajadores rurales; porque creo en los trabajadores de comercio, porque creo en todos los argentinos que piensan y elaboran para llevar un país distinto; porque creo en aquellos docentes que trabajan, estudian, investigan y ponen todo para hacer una patria distinta; porque creo en la convivencia, porque creo en un país plural, porque creo realmente y creemos todos los argentinos en saber superar las divergencias con amor y con cariño; porque como dijo recién el Gobernador, Dios quiera que nuestro pueblo lo pueda acompañar, Dios quiera que tengamos muy buena memoria para saber de dónde partimos y dónde estamos, será pingüino o pingüina, cuando llegue el tiempo lo dirá. (APLAUSOS)
Pero no tengan duda que confío en la memoria del pueblo argentino, confío que se acuerde de dónde partimos y sueño con un 28 de octubre, que cuándo se abran las urnas en la Argentina estén llenas de buena memoria, porque si están llenas de buena memoria la Argentina continuará el cambio en forma profunda.
Gracias Gobernador, gracias Intendente, chaqueños: abrazados a la bandera, abrazados a la patria, abrazados a la solidaridad y a nuestros héroes, abrazados a los trabajadores, abrazados a esta patria del Norte, de Chaco, de Formosa, de Santiago del Estero, de Jujuy, de Tucumán, de Salta, para integrarlos definitivamente a Corrientes y a Entre Ríos a la patria que nosotros queremos y soñamos. Creamos fundamentalmente y con toda nuestra fuerza, con toda nuestra solidaridad, con las manos extendidas y tomándonos unos a los otros, que nos vea el mundo entero que los argentinos entramos a caminar las grandes avenidas de la patria, diciendo que estamos reconstruyendo la justicia, la equidad, la moral, la igualdad de una patria para todos.
Muchísimas gracias chaqueños, muchísimas gracias a todos. (APLAUSOS)