Querido amigo Gobernador de nuestra hermosa y querida “República de Tucumán”; queridos amigos intendentes; intendentas; distintos funcionarios presentes; amigos, amigas: en primer lugar les quiero decir que es un profundo honor recibir a los representantes del pueblo tucumano aquí en el Salón Sur de esta casa, que es vuestra casa. Y es un profundo honor para todos los argentinos y para el Estado argentino que estén aquí los representantes del pueblo tucumano firmando convenios que por derecho, por sentido federal, por sentido de integración, por sentido de solidaridad, tienen que existir permanentemente entre el Estado Nacional y Provincial y los Estados municipales, como un andamiaje de funcionamiento institucional que es fundamental y central.
El pueblo de Tucumán, como otros pueblos en estos últimos 20 días, como el caso de Mendoza que también estuvimos con el gobernador Cobos, sufrió las inclemencias del tiempo. Pero esto estaba preparado más allá de la dura situación que les tocó vivir a los tucumanos por las lluvias y las inclemencias propias no esperadas que tuvieron en esta etapa, nosotros desde el primer día que nos tocó gobernar la Nación y desde el primer día que le tocó gobernar Tucumán a Alperovich, nos propusimos que poco a poco el país y Tucumán puedan salir del infierno, y también el deseo de todos los argentinos de que en el tiempo -no se logra de un día para el otro- Tucumán vuelva a ser el Jardín de la República. (Aplausos)
Esto se hace con trabajo, quien con buena intención quiera ir a Tucumán puede ver tres cuestiones fundamentales. Primero, la recuperación productiva y económica del Estado provincial tucumano. Segundo, el mejoramiento absoluto de las finanzas y de la administración de Tucumán, clara, cristalina, su recuperación, su superávit, el salir de 4 ó 5 monedas que tenía Tucumán en su momento y que los tucumanos sufrían casi en soledad, a pesar de que toda la Argentina estaba llena de papeles y monedas que no tenían nada que ver. Muchos se olvidan los miles de millones de monedas que tuvimos que salir a rescatar porque se dedicaban a emitir; aquellos que aún hoy hablan, como no podían hacer producir al país y como no lo sabían administrar emitían papeles y le querían dar papeles para que la gente viva. Este era el país que teníamos hace muy poco tiempo, 4 ó 5 años atrás, y a algunos los escuchamos hablar aún hoy como si fueran relevantes dirigentes o economistas. Hay que tener muy buena memoria porque estas cosas nos pasaron a veces por no tener todo lo aceitada que hay que tener la memoria. Pero Tucumán era casi un ejemplo, a uno le tocaba ver desde cheques diferidos a papeles de todo tipo.
Tercero, la cantidad de obras públicas y viviendas dignas que se están construyendo en Tucumán. Claro que hay muchas viviendas indignas todavía y está bien que las muestren porque ningún argentino tiene que vivir así, pero busquen un tiempo histórico en que se hayan construido tantas viviendas en Tucumán dignas para los tucumanos como este tiempo histórico que nos está tocando vivir a los argentinos. No lo van a encontrar por lo menos en varias décadas hacia atrás.
Hoy lo estamos haciendo entre todos y lo vamos a seguir haciendo. El gobernador de Tucumán está terminando de adjudicar las 4.000 viviendas y vienen 3.000 y 3.000 más. (Aplausos) Después en el Plan Nacional seguiremos profundizando este tema, como las inversiones que se están haciendo en los hospitales y la construcción de los mimos. Como las construcciones que se están haciendo en los centros integradores, en la política de desarrollo social y el apoyo del Ministerio de Desarrollo Social permanente y directo hacia todo Tucumán de una punta a la otra, trabajando fuertemente para que Tucumán siga este proceso de recuperación.
Porque hay que ver de dónde viene y dónde está Tucumán. Y claro, para algunos esto es política electoralista, vienen los grandes analistas y empiezan a escribir “esto es política electoralista”. Yo digo una cosa, si cada vez que entramos en un año electoral, que cada dos años hay elecciones, paramos de hacer las cosas, ¿qué le va a pasar a nuestro pueblo, a la Argentina y a los argentinos? ¿Por qué no piensan con grandeza de espíritu, por qué no salen de esa mezquindad que cuando fueron gobierno los ha llevado a cometer los errores y a la incapacidad para gobernar que tuvieron que fue tan grande? Uno a veces tiene caridad cristiana con quienes cometieron tantos errores, por incapacidad, por falta de responsabilidad o por tantas otras cosas.
A mí no me importa que me digan esas cosas, se los digo tucumanos y transmítanselo los tucumanos que me están viendo y todos los argentinos. Siempre, en cada momento que me toca el ejercicio cotidiano de la conducción del Estado, a mí no me van a correr con estas cosas, yo tengo que trabajar para la gente, voy a trabajar para la gente, digan las cosas que me digan a mí no me importa, porque lo que me importa es que las cosas lleguen a la gente para que mis hermanos todos los días estén un poco mejor. (Aplausos)
Por eso, amigos intendentes, José, no importa, pongamos la espalda y este corazón de argentinos por la patria, que es lo que hay que hacer permanentemente. Y corrijamos por supuesto todos los errores que podamos cometer.
Después aquellos que viven tan bien, que se dedican a hacer este tipo de análisis, tendrían que ponerse las botas, a veces, no sólo para ir a ver cuál es el lugar que está más inundado para decir “miren qué inundación, cuántas obras que faltan”. Claro, si hace casi 50 años que la Argentina está a la deriva, ¿cómo no van a faltar las cosas que están faltando? Pero 50 años que la Argentina está a la deriva por muchos de los que a veces se promocionan como supuestas alternativas de la política argentina. 50 años de falta de inversión, 50 años de olvido, 50 años que resignaron a la pobreza a la Argentina, 50 años trabajando al lado de los que concentraron la riqueza y olvidaron a los que necesitaban el apoyo cotidiano de gobiernos integrados a sus pueblos.
Los tucumanos están dando un verdadero ejemplo de recuperación, no importa de qué partido son, lo fundamental es la construcción de un Tucumán para todos los tucumanos, con todas las cosas que le han tocado pasar en todos los aspectos institucionales.
Por eso para mí, señoras y señores intendentes, señor Gobernador, es un profundo honor recibirlos aquí y hoy tengo la conciencia un poco más tranquila porque sé que esta plata, que no es de un presidente, que no es de un gobierno sino del Estado argentino, que quede claro, les pertenece, está llegando, como tiene que llegar en todo el país, a cada una de las intendencias en el sentido más federal que deba ser.
Un abrazo muy fuerte, mucha fuerza, adelante, arriba Tucumán, arriba la Argentina. (Aplausos)
El pueblo de Tucumán, como otros pueblos en estos últimos 20 días, como el caso de Mendoza que también estuvimos con el gobernador Cobos, sufrió las inclemencias del tiempo. Pero esto estaba preparado más allá de la dura situación que les tocó vivir a los tucumanos por las lluvias y las inclemencias propias no esperadas que tuvieron en esta etapa, nosotros desde el primer día que nos tocó gobernar la Nación y desde el primer día que le tocó gobernar Tucumán a Alperovich, nos propusimos que poco a poco el país y Tucumán puedan salir del infierno, y también el deseo de todos los argentinos de que en el tiempo -no se logra de un día para el otro- Tucumán vuelva a ser el Jardín de la República. (Aplausos)
Esto se hace con trabajo, quien con buena intención quiera ir a Tucumán puede ver tres cuestiones fundamentales. Primero, la recuperación productiva y económica del Estado provincial tucumano. Segundo, el mejoramiento absoluto de las finanzas y de la administración de Tucumán, clara, cristalina, su recuperación, su superávit, el salir de 4 ó 5 monedas que tenía Tucumán en su momento y que los tucumanos sufrían casi en soledad, a pesar de que toda la Argentina estaba llena de papeles y monedas que no tenían nada que ver. Muchos se olvidan los miles de millones de monedas que tuvimos que salir a rescatar porque se dedicaban a emitir; aquellos que aún hoy hablan, como no podían hacer producir al país y como no lo sabían administrar emitían papeles y le querían dar papeles para que la gente viva. Este era el país que teníamos hace muy poco tiempo, 4 ó 5 años atrás, y a algunos los escuchamos hablar aún hoy como si fueran relevantes dirigentes o economistas. Hay que tener muy buena memoria porque estas cosas nos pasaron a veces por no tener todo lo aceitada que hay que tener la memoria. Pero Tucumán era casi un ejemplo, a uno le tocaba ver desde cheques diferidos a papeles de todo tipo.
Tercero, la cantidad de obras públicas y viviendas dignas que se están construyendo en Tucumán. Claro que hay muchas viviendas indignas todavía y está bien que las muestren porque ningún argentino tiene que vivir así, pero busquen un tiempo histórico en que se hayan construido tantas viviendas en Tucumán dignas para los tucumanos como este tiempo histórico que nos está tocando vivir a los argentinos. No lo van a encontrar por lo menos en varias décadas hacia atrás.
Hoy lo estamos haciendo entre todos y lo vamos a seguir haciendo. El gobernador de Tucumán está terminando de adjudicar las 4.000 viviendas y vienen 3.000 y 3.000 más. (Aplausos) Después en el Plan Nacional seguiremos profundizando este tema, como las inversiones que se están haciendo en los hospitales y la construcción de los mimos. Como las construcciones que se están haciendo en los centros integradores, en la política de desarrollo social y el apoyo del Ministerio de Desarrollo Social permanente y directo hacia todo Tucumán de una punta a la otra, trabajando fuertemente para que Tucumán siga este proceso de recuperación.
Porque hay que ver de dónde viene y dónde está Tucumán. Y claro, para algunos esto es política electoralista, vienen los grandes analistas y empiezan a escribir “esto es política electoralista”. Yo digo una cosa, si cada vez que entramos en un año electoral, que cada dos años hay elecciones, paramos de hacer las cosas, ¿qué le va a pasar a nuestro pueblo, a la Argentina y a los argentinos? ¿Por qué no piensan con grandeza de espíritu, por qué no salen de esa mezquindad que cuando fueron gobierno los ha llevado a cometer los errores y a la incapacidad para gobernar que tuvieron que fue tan grande? Uno a veces tiene caridad cristiana con quienes cometieron tantos errores, por incapacidad, por falta de responsabilidad o por tantas otras cosas.
A mí no me importa que me digan esas cosas, se los digo tucumanos y transmítanselo los tucumanos que me están viendo y todos los argentinos. Siempre, en cada momento que me toca el ejercicio cotidiano de la conducción del Estado, a mí no me van a correr con estas cosas, yo tengo que trabajar para la gente, voy a trabajar para la gente, digan las cosas que me digan a mí no me importa, porque lo que me importa es que las cosas lleguen a la gente para que mis hermanos todos los días estén un poco mejor. (Aplausos)
Por eso, amigos intendentes, José, no importa, pongamos la espalda y este corazón de argentinos por la patria, que es lo que hay que hacer permanentemente. Y corrijamos por supuesto todos los errores que podamos cometer.
Después aquellos que viven tan bien, que se dedican a hacer este tipo de análisis, tendrían que ponerse las botas, a veces, no sólo para ir a ver cuál es el lugar que está más inundado para decir “miren qué inundación, cuántas obras que faltan”. Claro, si hace casi 50 años que la Argentina está a la deriva, ¿cómo no van a faltar las cosas que están faltando? Pero 50 años que la Argentina está a la deriva por muchos de los que a veces se promocionan como supuestas alternativas de la política argentina. 50 años de falta de inversión, 50 años de olvido, 50 años que resignaron a la pobreza a la Argentina, 50 años trabajando al lado de los que concentraron la riqueza y olvidaron a los que necesitaban el apoyo cotidiano de gobiernos integrados a sus pueblos.
Los tucumanos están dando un verdadero ejemplo de recuperación, no importa de qué partido son, lo fundamental es la construcción de un Tucumán para todos los tucumanos, con todas las cosas que le han tocado pasar en todos los aspectos institucionales.
Por eso para mí, señoras y señores intendentes, señor Gobernador, es un profundo honor recibirlos aquí y hoy tengo la conciencia un poco más tranquila porque sé que esta plata, que no es de un presidente, que no es de un gobierno sino del Estado argentino, que quede claro, les pertenece, está llegando, como tiene que llegar en todo el país, a cada una de las intendencias en el sentido más federal que deba ser.
Un abrazo muy fuerte, mucha fuerza, adelante, arriba Tucumán, arriba la Argentina. (Aplausos)