Señor Gobernador de la provincia de Buenos Aires; señores ministros del Poder Ejecutivo Nacional; señor presidente de la Federación de Municipios; amigos intendentes todos, un placer que estén aquí hoy en su casa, la Casa de Gobierno; legisladores, autoridades nacionales, provinciales; amigos presentes: estamos hablando de una Argentina que todavía está en el infierno. Nosotros estamos contentos por los logros, pero también nos angustia el tratar de avanzar lo más rápido que podamos, de acuerdo con la capacidad de respuesta y posibilidades que vamos dando y que nos vayamos dando, para ir solucionando los problemas. No queremos vivir conformándonos con lo que hicimos.
Ustedes, que representan en forma directa al pueblo, que representan esa vocación nacional, popular, independientemente del partido en el que puedan estar, y los que nos miran por televisión, saben perfectamente que en esta Argentina tuvimos muchos problemas, porque los que tenemos responsabilidades terminamos declinando de ellas ante los más poderosos o ante ese poder permanente que aparece y desaparece en la Argentina.
Cuesta creer que después de lo que pasó en este país, después los tristes días que nos tocaron vivir, de lo que le costó anónimamente al pueblo y en su conjunto a la sociedad empezar a remontar esa dura cuesta, cuando vemos que puede haber un nuevo amanecer en el país, nuevamente aparezca esa idea de apoderarse de la rentabilidad perdiendo todo marco de solidaridad, en el marco funcional que debe tener una sociedad.
Como les dije siempre, yo soy un hombre con aciertos, con errores, con pasiones, los que estamos, los que luchamos y los queremos una Argentina diferente somos gente apasionada, pero no somos ni lo soy un especulador del poder, no me interesa estar toda la vida sentado allí ni quedarme sentado allí tratando de conformar los intereses de los menos; vine acá por los intereses de los más y siempre dije que no iba a dejar las ideas en la puerta de la Casa de Gobierno. Me puedo equivocar, trato de corregir, hago autocrítica, como todos los seres humanos.
Realmente, cuando empezó a circular que se iban a juntar los intendentes de la provincia de Buenos Aires, algunos periodistas decían que iban a salir bandas a la calle a hacer el seguimiento de los precios, algunos en un diario de hoy, lamentable. Pero hay que ser muy precavido y lo digo en voz alta: les pido a las organizaciones sociales, a todas, que todo el esfuerzo se canalice institucionalmente a través de los municipios, porque van a tratar de desprestigiar esta tarea que se va a llevar adelante como es el seguimiento de precios en el país, que empieza en la provincia de Buenos Aires y esperamos convocar a todos los gobernadores e intendentes del país.
También les pido a todas las organizaciones que han tenido un compromiso, que se han creado en el propio barrio, por las propias necesidades, por la cuestión de la desocupación, porque la lucha que vamos a llevar adelante es muy grande y muy pura, que se acerquen a cada municipio, más allá de las diferencias que se puedan tener de tipo político o institucional, pero que tengan la bondad de acercarse a cada municipio y trabajar con las instituciones organizadas y votadas por el pueblo. Porque lo que nosotros queremos hacer es un seguimiento institucional, no queremos asustar a nadie, queremos cuidar los bolsillos del pueblo, porque cuando la gente vota a un intendente, a un gobernador y a un presidente los votan para que los representen, a todos. Y cuando hay un desequilibrio en esa comunidad de intereses, tenemos que tratar de buscar el equilibrio que permita que nuestros empresarios ganen, pero que nuestros hermanos y hermanas del pueblo argentino puedan vivir, no estén angustiados en el sentido de que hoy les vacían las góndolas o mañana les doblan los precios.
Es fundamental, como ya dije, que los señores de los supermercados lo entiendan, que no se cartelicen, vamos a trabajar y estamos trabajando en una ley de competencia que está en el Senado en este momento e invito a todos los señores intendentes que puedan colaborar a hacerlo para que sea clara y termine definitivamente con cualquier tipo de abuso.
Les pido a quienes tienen la suerte y la posibilidad de invertir, de crecer y que les vaya bien -y nos alegra que les vaya bien- que piensen que necesitamos gestos de solidaridad. Sería muy triste verlos marcar desesperadamente, acercándose las Fiestas, para ver cuánta rentabilidad se pueden llevar. Escúchenme bien ustedes y los que están en sus casas: cada hermano y hermana, cada ciudadano argentino, controlen las góndolas no sea que se vacíen en estos días para que cuando lleguen las Fiestas traten de obtener rentabilidades que no corresponden. La Argentina así no puede funcionar, pongámonos la mano en el corazón con firmeza, no puede funcionar.
Acá tenemos que responder con toda la fuerza democrática de las instituciones, con toda la capacidad que corresponda. Es fundamental señores y queridos amigos intendentes, que ustedes constituyan la Liga de Seguimiento de Precios y en el mayor de los respetos, ayudemos a hacerles comprender a quienes tienen distintas empresas en toda la escala de valor, que tienen que hacer un esfuerzo, que el país ha vuelto a funcionar, que en este país han crecido las exportaciones de bienes de capital el 41 por ciento, que a octubre estamos exportando al exterior 33 mil millones de dólares –faltan computar dos meses todavía, podemos estar en 38 ó 39 mil millones-, que es un país que tiene superávit fiscal, que crecieron sus reservas, que crece su recaudación, que creció en 3 millones el número de empleos, que crecieron las rentabilidades muy fuertemente de todos estos señores empresarios, a los que nosotros no les pedimos mendicidad, sino que ganen lo que corresponde, y tampoco les pedimos un gesto angelical, sino que les pedimos un gesto de responsabilidad y de racionalidad.
Pero sabemos y no vamos a cometer el error que cometieron otras dignas y respetadas personas de la política argentina, que les salieron a hablar con el corazón y les llenaron la espalda de piedras y cascotes. Esos señores que por ahí no entendieron un mensaje de alguien que creía que en algunos temas como estos se podía hablar con el corazón.
Nosotros venimos a hablar con responsabilidad y racionalidad, pero queridos hermanos y amigos intendentes, hay que conformar la Liga de Seguimiento de Precios, porque el pueblo tiene que ver en nosotros que somos capaces de representar sus intereses, que tenemos que custodiar la canasta familiar y que tenemos que darles a los precios el equilibrio que se merecen.
Este tema que han tomado como tarea de subir, subir y subir y adecuar los precios, es un tema que se tiene que terminar definitivamente y el Estado tiene que hacer sí o sí una ley de competencia que realmente tenga en claro el sistema monopólico de funcionamiento, de cartelización, con todas las sanciones severas que correspondan. Urgentemente los señores legisladores lo tienen que hacer para tener todos los instrumentos y en cada Concejo Deliberante y en cada Intendencia se tienen que implementar todas las normas que tengan a su alcance, como explicó la señora Secretaria, y empezar a aplicar esas medidas.
Lo hacemos porque creemos que es una tarea central y fundamental. Queremos que la Argentina crezca, queremos que les vaya bien a los señores empresarios, pero, fundamentalmente, queremos que nuestro pueblo tenga la garantía de que hay una clase dirigente que tiene responsabilidades funcionales en este tiempo de la historia y que quiere estar a la altura de la historia.
Entonces, tenemos que ser nosotros los que estemos al frente de la custodia de este tipo de valores, sin ningún tipo de abusos, sin ningún tipo de excesos y cuidando todas las formas. Porque aquellos intereses, como lo vimos en tiempo pasado cercano cuando pasó el problema del combustible, van a tratar de mancillar de cualquier forma la justa tarea que tenemos que llevar adelante.
Por eso, creo que la canalización a través de los municipios, de los gobiernos provinciales y del Gobierno nacional de representar institucionalmente como corresponde lo que tenemos que hacer, es la tarea fundamental. Esto no es contra nadie pero hablamos con claridad y lo tenemos que hacer con nombre propio y definirlo absolutamente.
Señores empresarios: hoy es 30 de noviembre, no vacíen sus góndolas, piensen que la Argentina debe ser para todos; deseamos que inviertan y que les vaya muy bien, ustedes ganan y ganan bien, nosotros sabemos que es así, no están haciendo donación de mercadería, les va bien, y tengan la responsabilidad de tener la rentabilidad que tienen que tener. Nadie les pide que no tengan rentabilidad pero, por favor, no atenten contra el bolsillo del pueblo argentino ni contra la posibilidad de todos los argentinos porque noa está costando mucho recuperar la Argentina, nos está costando demasiado y cada uno en la función que tiene lo sabe.
Entonces, es fundamental el equilibrio, la conciliación de intereses, la convivencia conjunta, la responsabilidad y yo les puedo asegurar y decir, desde este Salón y con el permiso de los señores intendentes, y también se lo digo al pueblo argentino y a todos aquellos que tienen que ver con la cadena de precios y de valor, que tengo las manos –como las ven ustedes- “limpitas”, no soy gerente de nadie, solamente soy representante de un pueblo que me ha dado la posibilidad de ser Presidente, no les quiero fallar y quiero estar a la altura de la historia y de las circunstancias.
Por eso, les agradezco señor Gobernador y señores intendentes, que ustedes hagan lo mismo. Vamos a poder mirar a nuestros vecinos de frente y a los ojos y eso es fundamental. Hagámoslo porque la Argentina lo necesita.
Dios quiera que entiendan, que podamos superar esta circunstancia y que la Argentina siga creciendo como lo está haciendo, con toda la fortaleza y con toda la potencialidad, porque queremos empresarios nacionales fuertes, una clase media con movilidad ascendente, con posibilidades fuertes y que se consolide el renacimiento de la clase trabajadora.
Este es nuestro sueño que lo queremos convertir en realidad.
Muchísimas gracias por estar presentes. (Aplausos)