Queridos amigos y amigas: tanto he escuchado hablar de trabajo, de dignidad, de justicia, en algunos lugares donde gracias a Dios ya todo está hecho, que realmente en primer lugar quiero felicitar a la comisión del barrio, porque estos departamentos -y miren que he recorrido departamentos en mi tarea de construcción como intendente, gobernador y Presidente- son de una dignidad bárbara. Recién una chica periodista me decía: qué lindo, quiero venir acá. Le dije: pero te tenés que casar con uno del barrio para venir acá. (Aplausos). ¡Ojo, me dijo que la presente, y es linda, muy linda! Pero así fue, les estoy diciendo nada más que la verdad; por ahora no les digo el nombre. (Aplausos)
Realmente me siento feliz de ver otra vez los gorros amarillos. Cuando vino la crisis de aquellos que quieren volver, que se encubren, los Olivera..., todos esos que se van reciclando y que son los que llevaron al país al desastre total, estos gorros amarillos habían desaparecido y de 70 mil libretas que había, hay actualmente 400 mil libretas de trabajo que están en marcha en todo el país, más otros 100 mil cuentapropistas; hay 500 mil trabajadores de la construcción. Eso significa que el país se va revitalizando, ello significa que estamos empezando a vivir. (Aplausos)
Yo les pido sinceramente con humildad; no voy a hacer esos discursos grandilocuentes, ni con ese sentido de prócer que tienen los dirigentes a veces de creer que arriba de una tarima arreglan todo, sino decirles a ustedes que acá somos todos trabajadores dispuestos a trabajar y a corregir errores pero a trabajar junto al pueblo. Realmente como a cada lugar que voy les pido a todos los capitalinos que por favor me ayuden, que por favor me acompañen.
¡Cómo me gustaría ver -y sé que la voy a ver- a la Capital abrazada junto al resto del país en la construcción de un país distinto! La Capital es parte del corazón vivo de la Argentina y tiene que estar con todos los argentinos desde Jujuy a Tierra del Fuego.
Sé que nos van a acompañar. Yo les pido que me ayuden; la Capital está creciendo mucho, las empresas crecen, esto es muy importante. Y a decirles que sí, que no especulo y estoy convencido de que esta es la dirigencia que le hace falta a Capital, pero aparte para seguir haciendo las cosas que hay que hacer en la Argentina, si no los tengo a ellos me van a extorsionar y a llenar de trabas con tal de conseguir algo o alguna prebenda, ustedes lo saben. Por eso es muy importante que voten a los diputados del Frente para la Victoria de la Capital Federal, vótenlos por favor, ayúdenlos, ayúdennos. (Aplausos)
Fíjense ustedes que hay varios dirigentes de los principales candidatos de la Capital Federal que dicen que soy mal educado con el Fondo, así que se dan cuenta ustedes que es lo que tienen que hacer rápidamente.
Queridos hermanos y hermanas: les agradezco el acompañamiento, les agradezco de corazón, a los pibes, a los viejos, a los de mi edad, a todos aquellos que están soñando que otro país puede ser y se puede construir, a los que podemos construir y bajar la indigencia a un dígito, el desempleo a un dígito, llevar la pobreza a la mitad, cambiar definitivamente la distribución del ingreso, les pido que me tomen de la mano, que tomen de la mano a nuestros diputados y nos lleven a la victoria para dar definitivamente la bisagra que le falta a este país.
Muchas gracias, muchas gracias por todo el cariño, muchas gracias por todo el afecto y les digo que con este calor hay algunos medios y algunos de esos periodistas que ya se sienten en el trono de la historia, que se enojan y me desprestigian diciendo: “ahí va el pingüino”. Sí, la verdad es que con este calor me siento más pingüino que nunca, pero me siento feliz de estar con ustedes. (Aplausos)
Muchísimas gracias, gracias a todos ustedes, un abrazo. Bielsa está transpirando, se está volviendo pingüino y eso es bueno. Muchísimas gracias y fuerza.
Realmente me siento feliz de ver otra vez los gorros amarillos. Cuando vino la crisis de aquellos que quieren volver, que se encubren, los Olivera..., todos esos que se van reciclando y que son los que llevaron al país al desastre total, estos gorros amarillos habían desaparecido y de 70 mil libretas que había, hay actualmente 400 mil libretas de trabajo que están en marcha en todo el país, más otros 100 mil cuentapropistas; hay 500 mil trabajadores de la construcción. Eso significa que el país se va revitalizando, ello significa que estamos empezando a vivir. (Aplausos)
Yo les pido sinceramente con humildad; no voy a hacer esos discursos grandilocuentes, ni con ese sentido de prócer que tienen los dirigentes a veces de creer que arriba de una tarima arreglan todo, sino decirles a ustedes que acá somos todos trabajadores dispuestos a trabajar y a corregir errores pero a trabajar junto al pueblo. Realmente como a cada lugar que voy les pido a todos los capitalinos que por favor me ayuden, que por favor me acompañen.
¡Cómo me gustaría ver -y sé que la voy a ver- a la Capital abrazada junto al resto del país en la construcción de un país distinto! La Capital es parte del corazón vivo de la Argentina y tiene que estar con todos los argentinos desde Jujuy a Tierra del Fuego.
Sé que nos van a acompañar. Yo les pido que me ayuden; la Capital está creciendo mucho, las empresas crecen, esto es muy importante. Y a decirles que sí, que no especulo y estoy convencido de que esta es la dirigencia que le hace falta a Capital, pero aparte para seguir haciendo las cosas que hay que hacer en la Argentina, si no los tengo a ellos me van a extorsionar y a llenar de trabas con tal de conseguir algo o alguna prebenda, ustedes lo saben. Por eso es muy importante que voten a los diputados del Frente para la Victoria de la Capital Federal, vótenlos por favor, ayúdenlos, ayúdennos. (Aplausos)
Fíjense ustedes que hay varios dirigentes de los principales candidatos de la Capital Federal que dicen que soy mal educado con el Fondo, así que se dan cuenta ustedes que es lo que tienen que hacer rápidamente.
Queridos hermanos y hermanas: les agradezco el acompañamiento, les agradezco de corazón, a los pibes, a los viejos, a los de mi edad, a todos aquellos que están soñando que otro país puede ser y se puede construir, a los que podemos construir y bajar la indigencia a un dígito, el desempleo a un dígito, llevar la pobreza a la mitad, cambiar definitivamente la distribución del ingreso, les pido que me tomen de la mano, que tomen de la mano a nuestros diputados y nos lleven a la victoria para dar definitivamente la bisagra que le falta a este país.
Muchas gracias, muchas gracias por todo el cariño, muchas gracias por todo el afecto y les digo que con este calor hay algunos medios y algunos de esos periodistas que ya se sienten en el trono de la historia, que se enojan y me desprestigian diciendo: “ahí va el pingüino”. Sí, la verdad es que con este calor me siento más pingüino que nunca, pero me siento feliz de estar con ustedes. (Aplausos)
Muchísimas gracias, gracias a todos ustedes, un abrazo. Bielsa está transpirando, se está volviendo pingüino y eso es bueno. Muchísimas gracias y fuerza.