Les quiero agradecer profundamente en primer lugar a todos los vecinos presentes, a mis amigos intendentes, Gustavo, Ubieto, Amieiro, a todos los que están presentes acá, a todos aquellos que realmente nos fueron entusiasmando con la idea cuando vine a ver esta obra que es fundamental. (Aplausos)
¿Pero saben lo más importante que tiene esta obra? Que es la derrota de la Argentina del no se puede. Todos estos vecinos que viven por acá, que sufrieron tanto, que vieron levantar carteles y que las obras no se hagan, hoy se dan cuenta que con aciertos, con errores -como somos todos los cristianos, acertamos y nos equivocamos, nadie es perfecto- esta obra el primer trimestre del año 2006 la vamos a estar inaugurando entre todos los vecinos de todos estos municipios; esto es muy importante. (Aplausos)
Yo les quiero agradecer profundamente porque esta Argentina debe tener en nosotros, en los dirigentes fundamentalmente, la responsabilidad de entender que vivimos un momento de construcción nacional, de identidad nacional. A mí me toca pasar temporariamente por la Presidencia, pero se los digo de corazón en esta lucha que estamos llevando por reconstruir la credibilidad pública, las instituciones, por terminar con el bastardeo que algunos hacen de las instituciones y la política porque les sirve por ahí para vender algo: es fundamental reconstruir el diálogo entre el pueblo y la gente y que definitivamente tengamos en claro que las banderas que deben unir a los argentinos en esta etapa son la bandera de la patria, la escarapela, el escudo nacional, que es lo que estamos necesitando todos; es tarea central. (Aplausos)
También quiero decirles que les puedo asegurar que vamos a seguir haciendo más y más obras, que vamos a seguir construyendo el campo de la Nación sin sectarismos.
Claro que hay algunos que quieren que la Argentina no crezca, que la Argentina tenga problemas; claro que algunos quieren que crezca para algunos pocos; claro que ya sabemos cuáles son los intereses que siempre se agolpan; no importa queridos hermanos, si nosotros somos capaces, sin distinción de banderías, de tomarnos de la mano y defender los intereses del pueblo, los pícaros se terminan rápidamente. (Aplausos)
Por eso yo los insto a tomarse de la mano, a amarse, a abrazarse, a soñar y a construir un país absolutamente diferente. (Aplausos)
Argentinos y argentinas, en serio se los digo, aunque algunos me lo dicen para desprestigiarme pero para mí es un honor, como pingüino que estoy sintiendo este sol, se los digo con fuerza, se los digo con corazón: es fundamental que todos los argentinos estemos atentos, porque si los argentinos estamos atentos le vamos a poner una bisagra a la historia y vamos a construir el nuevo tiempo; vamos a poder mirar a las generaciones de atrás diciendo que estamos cumpliendo con lo que a nosotros nos corresponde, pero es fundamental trabajar, ser muy ordenado.
Es verdad, siempre me critican porque soy medio desordenado para vestirme...bueno... Cristina también me reta, yo trato siempre de aprender, pero lo que les digo a mis hermanos es que soy bastante desprolijo, salgo apurado a las 6, 6 y media y me dice: Néstor no te lustraste los zapatos. Podré ser medio desprolijo a veces, desprolijo pero limpito y prolijo con los dineros del pueblo, que esto es lo importante para todos los argentinos. (Aplausos)
Querido Gustavo, muchas gracias, gracias chicos, muchas gracias a todos. Yo les pediría de corazón que con la terminación de esta obra que deja de ser el símbolo del retraso, cerremos este hermoso acto dando un ejemplo cívico cantando el Himno Nacional todos juntos, que esto es lo importante que tenemos que hacer. (Aplausos)
Muchísimas gracias, a vuestras órdenes y cantemos el Himno, yo no tengo muy buena voz pero los acompaño con toda la fuerza. (Aplausos)
¿Pero saben lo más importante que tiene esta obra? Que es la derrota de la Argentina del no se puede. Todos estos vecinos que viven por acá, que sufrieron tanto, que vieron levantar carteles y que las obras no se hagan, hoy se dan cuenta que con aciertos, con errores -como somos todos los cristianos, acertamos y nos equivocamos, nadie es perfecto- esta obra el primer trimestre del año 2006 la vamos a estar inaugurando entre todos los vecinos de todos estos municipios; esto es muy importante. (Aplausos)
Yo les quiero agradecer profundamente porque esta Argentina debe tener en nosotros, en los dirigentes fundamentalmente, la responsabilidad de entender que vivimos un momento de construcción nacional, de identidad nacional. A mí me toca pasar temporariamente por la Presidencia, pero se los digo de corazón en esta lucha que estamos llevando por reconstruir la credibilidad pública, las instituciones, por terminar con el bastardeo que algunos hacen de las instituciones y la política porque les sirve por ahí para vender algo: es fundamental reconstruir el diálogo entre el pueblo y la gente y que definitivamente tengamos en claro que las banderas que deben unir a los argentinos en esta etapa son la bandera de la patria, la escarapela, el escudo nacional, que es lo que estamos necesitando todos; es tarea central. (Aplausos)
También quiero decirles que les puedo asegurar que vamos a seguir haciendo más y más obras, que vamos a seguir construyendo el campo de la Nación sin sectarismos.
Claro que hay algunos que quieren que la Argentina no crezca, que la Argentina tenga problemas; claro que algunos quieren que crezca para algunos pocos; claro que ya sabemos cuáles son los intereses que siempre se agolpan; no importa queridos hermanos, si nosotros somos capaces, sin distinción de banderías, de tomarnos de la mano y defender los intereses del pueblo, los pícaros se terminan rápidamente. (Aplausos)
Por eso yo los insto a tomarse de la mano, a amarse, a abrazarse, a soñar y a construir un país absolutamente diferente. (Aplausos)
Argentinos y argentinas, en serio se los digo, aunque algunos me lo dicen para desprestigiarme pero para mí es un honor, como pingüino que estoy sintiendo este sol, se los digo con fuerza, se los digo con corazón: es fundamental que todos los argentinos estemos atentos, porque si los argentinos estamos atentos le vamos a poner una bisagra a la historia y vamos a construir el nuevo tiempo; vamos a poder mirar a las generaciones de atrás diciendo que estamos cumpliendo con lo que a nosotros nos corresponde, pero es fundamental trabajar, ser muy ordenado.
Es verdad, siempre me critican porque soy medio desordenado para vestirme...bueno... Cristina también me reta, yo trato siempre de aprender, pero lo que les digo a mis hermanos es que soy bastante desprolijo, salgo apurado a las 6, 6 y media y me dice: Néstor no te lustraste los zapatos. Podré ser medio desprolijo a veces, desprolijo pero limpito y prolijo con los dineros del pueblo, que esto es lo importante para todos los argentinos. (Aplausos)
Querido Gustavo, muchas gracias, gracias chicos, muchas gracias a todos. Yo les pediría de corazón que con la terminación de esta obra que deja de ser el símbolo del retraso, cerremos este hermoso acto dando un ejemplo cívico cantando el Himno Nacional todos juntos, que esto es lo importante que tenemos que hacer. (Aplausos)
Muchísimas gracias, a vuestras órdenes y cantemos el Himno, yo no tengo muy buena voz pero los acompaño con toda la fuerza. (Aplausos)