Queridos hermanos y hermanas de esta querida localidad de Florencio Varela que nos vuelve a recibir con sus distintas expresiones, las expresiones de la fe, las expresiones del trabajo, como los hermanos de la construcción; las expresiones de la juventud; las expresiones de las organizaciones sociales como el MTD y Barrios de Pie; las organizaciones de las distintas comunidades que representan a Florencia Varela; señor Gobernador; señor Intendente; queridos amigos y amigas: lo primero que les quiero decir es que en la primera semana de octubre estaremos cumpliendo la palabra empeñada, se firmará el contrato para iniciar la obra del hospital que Florencio Varela merece. (Aplausos)
En segundo lugar, estamos cumpliendo con la palabra empeñada: en el hospital Mi Pueblo está el tomógrafo que dijimos que iba a estar para Florencio Varela. (Aplausos).
En tercer lugar, quiero también decirles que cuando vine la última vez a Florencio Varela había centenares de jubilados con haberes mínimos que decían:” Presidente, acuérdese de los jubilados”, y así pasaba en todo el país. Acabamos de dar el octavo aumento consecutivo llevando a 390 pesos y 420 con lo del PAMI a nuestros jubilados, cumpliendo la palabra empeñada de ayudar a los que menos tienen; ocho aumentos en dos años cuando estuvieron 15 años sin darles un solo peso a nuestros jubilados. (Aplausos)
Dijimos que íbamos a bajar la indigencia y la hemos bajado diez puntos; dijimos que íbamos a bajar la desocupación, la última vez que vine a Florencio Varela era del 18, hoy es de 12,1 y en el mes de junio fue del 11; dijimos que íbamos a bajar la pobreza y la bajamos del 54 al 38; dijimos que íbamos a bajar la mortalidad infantil y tenemos la tasa más baja de los últimos 35 años, hemos llegado al 14,4 por mil. Es que vamos cumpliendo día tras día la palabra empeñada. Pero no se puede cambiar todo un país en solamente 2 años y 3 meses; no soy Mandraque el mago, pero pongo todo lo que tengo, acierto y me equivoco y trato de corregir los errores que están a mi alcance. (Aplausos)
También, el gobernador Solá habló de la educación y hay un 15 por ciento de argentinos que no pueden conseguir trabajo, por más que las empresas lo demandan, porque no tienen oficio, porque algunos iluminados nos dejaron a los argentinos en la década del ´90 sin escuelas técnicas; hemos vuelto a llevar adelante y promulgado la Ley de Educación Técnica para que todos nuestros chicos tengan el oficio que merecen. (Aplausos)
Igualmente hemos resuelto encarar a fondo la ley de Financiamiento Educativo y pasamos de 4 puntos del producto del país a 6 puntos en el 2010 para que nuestra educación y nuestros gobernadores tengan financiamiento para dar una educación de calidad a nuestro pueblo, a nuestros chicos y que llegue a todos los hogares.
Queridos hermanos y hermanas: tercer año consecutivo de crecimiento del Producto Bruto Interno, este año la Argentina está creciendo al 9,1, la industria crece al 7,6; crece el consumo interno, crecen las exportaciones; los argentinos y las argentinas, desde el propio infierno, estamos poniendo de pie nuevamente a nuestra nación con esfuerzo y dignidad, y esto es lo que vale.
También, por cosas que se vienen diciendo estos días y acá en un lugar de pueblo, en un lugar donde se respira dignidad, honestidad y justicia, búsqueda de justicia permanente, les quiero decir a todos los argentinos, acá en Florencio Varela donde hoy se firmaron contratos para aguas por la empresa de la provincia de Buenos Aires, escúchenme bien, que le quede claro a esa empresa Suez que dice que si no subimos las tarifas y si no hacemos lo que ellos quieren que hagamos se van a ir, el Presidente de la Argentina, el Presidente de los argentinos que hoy les está hablando a ustedes, les quiere dejar tres cosas en claro: primero, que no he recibido presión de ningún presidente y si la hubiera recibido no la habría aceptado, que quede claro. (Aplausos). Segundo, que la empresa Suez por más plata que gaste en los medios para tratar de victimizarse, durante muchos años ha llevado a la Argentina a una desinversión total y este Presidente no va a permitir que esa empresa siga dejando sin cloacas y sin agua al pueblo argentino y encima quiera aumentar sus tarifas. (Aplausos) Por lo tanto, desde acá, desde Florencio Varela, al pueblo argentino todo le digo: si se quieren ir que se vayan, el pueblo va a saber lo que tiene que hacer. Vamos a tomar las medidas correspondientes para no tener ningún tipo de problemas. (Aplausos)
Queremos que en la Argentina vengan muchas inversiones, queremos que vengan muchos capitales, pero que vengan a trabajar con los argentinos. No vamos a permitir que nos extorsionen más, es hora de que esta Patria se vaya poniendo de pie como corresponde. (Aplausos)
También les pido a todos los hermanos que me ayuden. Ustedes ven como soy, un hombre común. Algunos me tratan de descalificar diciendo “ahí va el pingüino”, y me siento honrado de ser el pingüino, porque representa el amor y el cariño de los argentinos. (Aplausos)
Algunos dicen que a veces me enojo. Pero escúchenme, haber llegado a la conducción del país y haber visto lo que han hecho con esta Argentina, cómo no nos va a dar dolor y bronca y no nos vamos a enojar cuando vemos que hay tantos hermanos todavía que están necesitando, a pesar del esfuerzo que hacemos. No es para estar riéndose, a uno le duele el corazón cuando otros sufren. Por eso estoy tratando de dejar todo para que esta Argentina pueda ir adelante.
Yo no les vengo a pedir que me sigan porque ya vimos lo que le pasó a la patria por seguir y seguir, ya vimos adónde fuimos; les vengo a pedir que me ayuden, les vengo a pedir que me abracen, les vengo a pedir que me tomen de la mano y me ayuden a llevar a la Argentina a la victoria, para todos los sectores de la patria piensen como piensen, para hacer una Argentina más feliz, para hacer una Argentina más justa, para hacer la Argentina de nuestros sueños, para que el amor vuelva a reinar a pleno en nuestra querida patria, para que la solidaridad y el pensamiento en Dios sea pleno, para que el pensamiento de Jorge Novak, ese gran obispo que luchó por los derechos humanos y la justicia también se pueda implementar.
Para mí es un tremendo honor poder recordar a Jorge Novak, que tantas vidas salvó, que tanto dejó por su pueblo, que tanto dejó por su patria. Los argentinos, querido Monseñor, de donde nos estés mirando, desde el cielo, te decimos gracias por haberte jugado cuando muchos se escondían, muchas gracias, la patria te lo agradece. (Aplausos)
Quiero decir algo que trato de expresar en todos lados y que lo hablamos con Cristina permanentemente. Uno quiere y a veces busca poner en marcha comedores, ¿pero saben cuál es mi sueño? Cuando veo todos estos gorros amarillos que muestran que vuelve el trabajo de la construcción, que tanto tiempo estuvo paralizado -como dice Gerardo Martínez, pasamos de 70.000 trabajadores con libreta a casi 370.000 y 420.000 abarcando toda la gama, que están trabajando en la construcción-, ¿saben lo que sueño? Que con todas las viviendas que se están haciendo algún día Dios nos dé la posibilidad que dentro de un tiempo no muy lejano ya no se tengan que juntar los chicos en los comedores sino que en las cocinas de la vivienda propia se vuelva a juntar la familia, el padre con sus hijos, que se vuelvan a encontrar. Es un sueño que tenemos que luchar por hacerlo realidad. Sueño con bajar la desocupación, cuando termine mi mandato el 10 de diciembre de 2007, a un dígito. Sueño con bajar la indigencia a un dígito el 10 de diciembre de 2007, y llevar la pobreza a la mitad. Y como me dice Cristina permanentemente, dándome fuerza para llevar esta lucha adelante, que seamos, y no tengamos vergüenza de serlo, fanáticamente argentinos, apasionadamente argentinos. Levantemos la bandera como sinónimo de patria, levantemos la bandera como sinónimo de un mundo nuevo; levantemos la bandera como sinónimo de una patria distinta. (Aplausos)
Querido Felipe, tenés una gran provincia, al igual que mi querido intendente de Florencio Varela y quienes nos acompañan. A confiar en nuestro pueblo, pedirle a nuestro pueblo que nos ayude. Yo les puedo asegurar que no hay nadie perfecto, hay algunos que nos hablaron de la perfección y ya sabemos adónde nos llevaron. Cada dirigente que gobierna se tiene que dar cuenta que se equivoca y cuando esto ocurre debe tener la grandeza de corregirse. Yo me puedo equivocar seguramente muchas veces por día pero trato de corregirme porque cuanto más me corrija menos daño y más favor puedo hacerle a mi pueblo, que es la tarea que tengo que llevar adelante. (Aplausos)
Muchas gracias Florencio Varela, muchas gracias de corazón. Los abrazo fuertemente, les pido seriamente que me ayuden, que me ayuden a soñar, que en esta gran avenida Novak podamos venir muchas veces a juntarnos y que dentro de algunos días, terminando octubre, se empiecen a levantar los ladrillos de ese gran hospital que merece Florencio Varela para dignidad de todos. Muchísimas gracias pueblo de Florencio Varela. (Aplausos)
En segundo lugar, estamos cumpliendo con la palabra empeñada: en el hospital Mi Pueblo está el tomógrafo que dijimos que iba a estar para Florencio Varela. (Aplausos).
En tercer lugar, quiero también decirles que cuando vine la última vez a Florencio Varela había centenares de jubilados con haberes mínimos que decían:” Presidente, acuérdese de los jubilados”, y así pasaba en todo el país. Acabamos de dar el octavo aumento consecutivo llevando a 390 pesos y 420 con lo del PAMI a nuestros jubilados, cumpliendo la palabra empeñada de ayudar a los que menos tienen; ocho aumentos en dos años cuando estuvieron 15 años sin darles un solo peso a nuestros jubilados. (Aplausos)
Dijimos que íbamos a bajar la indigencia y la hemos bajado diez puntos; dijimos que íbamos a bajar la desocupación, la última vez que vine a Florencio Varela era del 18, hoy es de 12,1 y en el mes de junio fue del 11; dijimos que íbamos a bajar la pobreza y la bajamos del 54 al 38; dijimos que íbamos a bajar la mortalidad infantil y tenemos la tasa más baja de los últimos 35 años, hemos llegado al 14,4 por mil. Es que vamos cumpliendo día tras día la palabra empeñada. Pero no se puede cambiar todo un país en solamente 2 años y 3 meses; no soy Mandraque el mago, pero pongo todo lo que tengo, acierto y me equivoco y trato de corregir los errores que están a mi alcance. (Aplausos)
También, el gobernador Solá habló de la educación y hay un 15 por ciento de argentinos que no pueden conseguir trabajo, por más que las empresas lo demandan, porque no tienen oficio, porque algunos iluminados nos dejaron a los argentinos en la década del ´90 sin escuelas técnicas; hemos vuelto a llevar adelante y promulgado la Ley de Educación Técnica para que todos nuestros chicos tengan el oficio que merecen. (Aplausos)
Igualmente hemos resuelto encarar a fondo la ley de Financiamiento Educativo y pasamos de 4 puntos del producto del país a 6 puntos en el 2010 para que nuestra educación y nuestros gobernadores tengan financiamiento para dar una educación de calidad a nuestro pueblo, a nuestros chicos y que llegue a todos los hogares.
Queridos hermanos y hermanas: tercer año consecutivo de crecimiento del Producto Bruto Interno, este año la Argentina está creciendo al 9,1, la industria crece al 7,6; crece el consumo interno, crecen las exportaciones; los argentinos y las argentinas, desde el propio infierno, estamos poniendo de pie nuevamente a nuestra nación con esfuerzo y dignidad, y esto es lo que vale.
También, por cosas que se vienen diciendo estos días y acá en un lugar de pueblo, en un lugar donde se respira dignidad, honestidad y justicia, búsqueda de justicia permanente, les quiero decir a todos los argentinos, acá en Florencio Varela donde hoy se firmaron contratos para aguas por la empresa de la provincia de Buenos Aires, escúchenme bien, que le quede claro a esa empresa Suez que dice que si no subimos las tarifas y si no hacemos lo que ellos quieren que hagamos se van a ir, el Presidente de la Argentina, el Presidente de los argentinos que hoy les está hablando a ustedes, les quiere dejar tres cosas en claro: primero, que no he recibido presión de ningún presidente y si la hubiera recibido no la habría aceptado, que quede claro. (Aplausos). Segundo, que la empresa Suez por más plata que gaste en los medios para tratar de victimizarse, durante muchos años ha llevado a la Argentina a una desinversión total y este Presidente no va a permitir que esa empresa siga dejando sin cloacas y sin agua al pueblo argentino y encima quiera aumentar sus tarifas. (Aplausos) Por lo tanto, desde acá, desde Florencio Varela, al pueblo argentino todo le digo: si se quieren ir que se vayan, el pueblo va a saber lo que tiene que hacer. Vamos a tomar las medidas correspondientes para no tener ningún tipo de problemas. (Aplausos)
Queremos que en la Argentina vengan muchas inversiones, queremos que vengan muchos capitales, pero que vengan a trabajar con los argentinos. No vamos a permitir que nos extorsionen más, es hora de que esta Patria se vaya poniendo de pie como corresponde. (Aplausos)
También les pido a todos los hermanos que me ayuden. Ustedes ven como soy, un hombre común. Algunos me tratan de descalificar diciendo “ahí va el pingüino”, y me siento honrado de ser el pingüino, porque representa el amor y el cariño de los argentinos. (Aplausos)
Algunos dicen que a veces me enojo. Pero escúchenme, haber llegado a la conducción del país y haber visto lo que han hecho con esta Argentina, cómo no nos va a dar dolor y bronca y no nos vamos a enojar cuando vemos que hay tantos hermanos todavía que están necesitando, a pesar del esfuerzo que hacemos. No es para estar riéndose, a uno le duele el corazón cuando otros sufren. Por eso estoy tratando de dejar todo para que esta Argentina pueda ir adelante.
Yo no les vengo a pedir que me sigan porque ya vimos lo que le pasó a la patria por seguir y seguir, ya vimos adónde fuimos; les vengo a pedir que me ayuden, les vengo a pedir que me abracen, les vengo a pedir que me tomen de la mano y me ayuden a llevar a la Argentina a la victoria, para todos los sectores de la patria piensen como piensen, para hacer una Argentina más feliz, para hacer una Argentina más justa, para hacer la Argentina de nuestros sueños, para que el amor vuelva a reinar a pleno en nuestra querida patria, para que la solidaridad y el pensamiento en Dios sea pleno, para que el pensamiento de Jorge Novak, ese gran obispo que luchó por los derechos humanos y la justicia también se pueda implementar.
Para mí es un tremendo honor poder recordar a Jorge Novak, que tantas vidas salvó, que tanto dejó por su pueblo, que tanto dejó por su patria. Los argentinos, querido Monseñor, de donde nos estés mirando, desde el cielo, te decimos gracias por haberte jugado cuando muchos se escondían, muchas gracias, la patria te lo agradece. (Aplausos)
Quiero decir algo que trato de expresar en todos lados y que lo hablamos con Cristina permanentemente. Uno quiere y a veces busca poner en marcha comedores, ¿pero saben cuál es mi sueño? Cuando veo todos estos gorros amarillos que muestran que vuelve el trabajo de la construcción, que tanto tiempo estuvo paralizado -como dice Gerardo Martínez, pasamos de 70.000 trabajadores con libreta a casi 370.000 y 420.000 abarcando toda la gama, que están trabajando en la construcción-, ¿saben lo que sueño? Que con todas las viviendas que se están haciendo algún día Dios nos dé la posibilidad que dentro de un tiempo no muy lejano ya no se tengan que juntar los chicos en los comedores sino que en las cocinas de la vivienda propia se vuelva a juntar la familia, el padre con sus hijos, que se vuelvan a encontrar. Es un sueño que tenemos que luchar por hacerlo realidad. Sueño con bajar la desocupación, cuando termine mi mandato el 10 de diciembre de 2007, a un dígito. Sueño con bajar la indigencia a un dígito el 10 de diciembre de 2007, y llevar la pobreza a la mitad. Y como me dice Cristina permanentemente, dándome fuerza para llevar esta lucha adelante, que seamos, y no tengamos vergüenza de serlo, fanáticamente argentinos, apasionadamente argentinos. Levantemos la bandera como sinónimo de patria, levantemos la bandera como sinónimo de un mundo nuevo; levantemos la bandera como sinónimo de una patria distinta. (Aplausos)
Querido Felipe, tenés una gran provincia, al igual que mi querido intendente de Florencio Varela y quienes nos acompañan. A confiar en nuestro pueblo, pedirle a nuestro pueblo que nos ayude. Yo les puedo asegurar que no hay nadie perfecto, hay algunos que nos hablaron de la perfección y ya sabemos adónde nos llevaron. Cada dirigente que gobierna se tiene que dar cuenta que se equivoca y cuando esto ocurre debe tener la grandeza de corregirse. Yo me puedo equivocar seguramente muchas veces por día pero trato de corregirme porque cuanto más me corrija menos daño y más favor puedo hacerle a mi pueblo, que es la tarea que tengo que llevar adelante. (Aplausos)
Muchas gracias Florencio Varela, muchas gracias de corazón. Los abrazo fuertemente, les pido seriamente que me ayuden, que me ayuden a soñar, que en esta gran avenida Novak podamos venir muchas veces a juntarnos y que dentro de algunos días, terminando octubre, se empiecen a levantar los ladrillos de ese gran hospital que merece Florencio Varela para dignidad de todos. Muchísimas gracias pueblo de Florencio Varela. (Aplausos)