Señor gobernador de la provincia de Chubut, querido amigo Mario Das Neves; señor intendente municipal de Trelew, querido amigo Gustavo Mac Karthy; señores ministros del Poder Ejecutivo nacional y provincial; autoridades nacionales, provinciales y municipales; señores legisladores; señores intendentes, pueblo de esta hermosa, querida y amada ciudad de Trelew: para mí poder estar aquí, en esta gran provincia de Chubut, por cuarta vez desde que me tocó asumir la responsabilidad de conducir la patria, es un profundo honor, pero también –se lo comentaba a Mario- es una profunda alegría poder estar acompañando, más allá de cualquier cuestión partidaria, la asunción de un joven patagónico, de un joven chubutense, de un joven nacido y criado aquí en Trelew, a la responsabilidad de conducir la Intendencia de esta gran ciudad de Trelew. (Aplausos)
Hay un claro compromiso de nuestra parte de recuperar, como bien decía Cristina en el Congreso de la Lengua hace algunos días, el valor de la palabra empeñada: voy a apoyar tanto al Gobernador como al nuevo Intendente con todas las fuerzas que tengo. (Aplausos)
También quería llegar a horario, porque hay algunos que se viven quejando de que no cumplo con el protocolo o llego tarde. Puede ser, porque yo no llegué ni para dejar las convicciones ni para andar de cóctel en cóctel, vine a esta responsabilidad de conducir el país para trabajar junto al pueblo argentino. (Aplausos)
Y si algunos amigos me tienen que esperar un poquito es porque estoy escuchando o agradeciendo el cariño del pueblo argentino, les pido disculpas y que sepan esperar, pero siempre va a estar primero el pueblo argentino porque esa es mi responsabilidad mayor. (Aplausos)
No vinimos para repetir conceptos y modelos frustrados en la Argentina, no vinimos a tratar de quedar bien, a decir que todo da lo mismo; con eso de que todo da lo mismo, con eso de resignar lo argentino al segundo lugar, esta Argentina se llenó de pobres, de indigencia, de gente sin empleo, de empresarios nacionales quebrados, bajando todas las grandes banderas del desarrollo nacional. (Aplausos) Vinimos a defender el trabajo genuino, vinimos a dar la batalla contra la indigencia, el desempleo y la pobreza, vinimos a consolidar al empresariado nacional, a la industria y a la producción.
Se lo digo desde Trelew al país: estén tranquilos aquellos que tienen por allí alguna angustia de que acá no va a pasar lo que ocurrió en la década pasada cuando fue quebrada la industria nacional, el Gobierno va a estar al frente de los empresarios, de los productores, de la industria argentina como corresponde, integrándonos al mundo pero defendiendo lo nuestro, porque consideramos que los argentinos, hermanas y hermanos, tenemos que recuperar nuestra autoestima. Durante años nos dijeron que lo nuestro siempre era lo mediocre o lo peor, que nuestros profesionales no servían, que nuestros trabajadores no entendían la modernización, que nuestros empresarios no sabían el mundo globalizado en que vivían; claro que sabíamos, lo sabíamos aquellos que levantábamos la voz porque veíamos que nos estaban llevando el país, porque nosotros queríamos un país que nos contenga y no un país que nos sepulte, como ocurrió en la década pasada en la Argentina. (Aplausos)
Por eso llegó la hora de premiar al más honesto, al más decente, al que más trabaja, al que más estudia, al que más investiga, al intelecto y a las manos argentinas que trabajan por construir un nuevo país, ese intelecto y esas manos argentinas que son los trabajadores de la patria que van a edificar el país que todos necesitamos. Esa debe ser nuestra referencia y nuestra meta. (Aplausos)
También durante años compartí muchas veces, con muchos de ustedes que están acá, que sentíamos a la Patagonia sur como el patio trasero del país, como ese lugar que todos decían que era el futuro de la patria pero quedaba en el baúl de los recuerdos. Durante toda mi campaña electoral, compartiendo con ustedes y con tantos argentinos del norte al sur, así como dije que el norte argentino había sido dejado de la mano de Dios y que tiene que llegar la mano reparadora y solidaria de todos los argentinos para devolverle el lugar que merece en esta querida Argentina, también dije que nunca más la Patagonia va a ser el patrio trasero del país sino la llama viva del corazón de la nueva patria que se construye. (Aplausos)
Porque sé que así como están las historias y las tradiciones, el trabajo, la dignidad y el orgullo de los hombres del norte de la patria, también está la capacidad del trabajo, de lucharle al frío, al viento, a la nieve, a la soledad y al olvido que tienen los hombres y mujeres de esta tierra patagónica que pueden volver a edificar la dignidad perdida de esta patria adorada por todos nosotros. (Aplausos)
Aquí están las inversiones que hoy traemos, los intendentes de Chubut, sean del partido que sean, y el señor Gobernador, ahora las tienen que gestionar para que lleguen rápidamente. Allá hay un presidente que es servidor de los intereses de esta tierra, trabajen mucho que yo los acompaño, luchemos y venzamos a la burocracia. (Aplausos)
No tengan dudas de que la Argentina va a recuperar su dignidad, lo fuimos haciendo en la recuperación de la Justicia y la lucha contra la impunidad por los derechos humanos, lo fuimos haciendo en la recuperación de la dignidad, el respeto y el recuerdo eterno para nuestros héroes de Malvinas que les triplicamos los salarios que tuvieron olvidados durante tanto tiempo. Lo fuimos haciendo en la recuperación del salario mínimo que lo doblamos desde que iniciamos nuestra gestión, y más del doble; lo hicimos en la recuperación que con esfuerzo estamos haciendo de los haberes de aquellos que dieron todo por la patria, nuestros jubilados, que cada vez que podemos va una gotita más para ellos que lo merecen todo y que estuvieron olvidados durante tanto tiempo; lo estamos haciendo con aquellos que se quedaron sin trabajo, bajamos casi 10 puntos la desocupación en un año y medio, y va a seguir bajando porque estamos creando trabajo argentino, industria argentina y producción argentina para movilizar nuestra economía. (Aplausos)
Y claro -les digo a todos los argentinos desde Trelew- claro que estamos dando la batalla del endeudamiento externo que tiene la patria. Algunos quisieran que nos volviéramos a arrodillar y que aceptemos todas las condiciones, algunos quisieran para seguir engrosando sus ganancias y concentrando la economía que aceptemos cualquier tipo de acuerdo, se terminaron los acuerdos de la indignidad, la Argentina no se arrodilla más, vamos a arreglar pero defendiendo como corresponde los intereses de la patria, vamos a defender como corresponde a los intereses de la Argentina. (Aplausos)
Es por eso que estamos dando esta batalla por reestructurar la deuda externa con los acreedores privados. Es claro que aquellos que se aprovecharon de gobiernos que no supieron representar los intereses de la Argentina, que nos entregaron atados de pies y manos y que todavía hablan, aquellos que se aprovecharon se quieren seguir aprovechando y se terminó, vamos a hacer la quita más importante de la historia de la deuda que corresponde para recuperar lo que corresponda a los argentinos. No tengo ninguna duda que más allá de estas pequeñas dificultades administrativas que tuvimos en estos días, que a veces lógicamente toman mayor o menor trascendencia, pero desde Trelew les digo que más allá de esta demora administrativa que tenemos, que se están superando plenamente, no tengan ninguna duda los argentinos de que vamos a llevar a buen puerto la reestructuración de la deuda argentina, defendiendo y recuperando el interés argentino para que definitivamente cerremos la etapa de la historia que nos ha tocado vivir. (Aplausos)
También, en cuanto al Fondo Monetario Internacional, cuando discutimos profundamente con ellos -hay algunos matutinos que dicen a veces que hay que escuchar los consejos del Fondo- yo digo: es verdad que Argentina ha tenido conducciones lamentables y nadie los quiere defender porque el pueblo los ha sufrido y los conoce perfectamente, pero estos señores del Fondo que ahora se hacen graciosas autocríticas, paseaban a algunos de nuestros gobernantes por los salones del mundo elogiando el proyecto económico que había en la Argentina, y ahora miran al costado y se hacen la autocrítica. Claro, a la Argentina le dejaron miles y millones de pobres e indigentes, ellos media hora de café y autocrítica. Se terminó esto de que se juegue con los pobres, los indigentes en la Argentina, tendrán que asumir la responsabilidad que corresponde. (Aplausos)
El Fondo Monetario tiene que entender que la Argentina va a hacer frente como país que es a lo que pueda corresponder, pero nunca más va aceptar imposiciones ni modelos que no tienen nada que ver con nuestra patria. Decía recién el intendente de Trelew con toda certeza refiriéndose a su ciudad, definiéndose con tanta fuerza y con tanta pasión, y creo que es la certera visión que se extiende al país: la Argentina ya no quiere recetas que no sean las recetas de los argentinos, los argentinos confiamos en nuestras propias ideas, en nuestros propios análisis, en nuestras propias decisiones. (Aplausos)
También desde Trelew llamo a todos los argentinos a construir las bases y la fortaleza de un nuevo país, pero que cada uno tenga memoria. No me gusta cultivar la hipocresía, porque por allí, cuando escucho a algún ex ministro de Economía que se tuvo que ir por el feroz ajuste que quería poner sobre el pueblo argentino -y ni hablar sobre la Patagonia- hablar de las cosas que hay que hacer en la Argentina, pero cuando la tierra temblaba se subieron a un helicóptero y se escaparon a espaldas de la Casa Rosada dejando al pueblo argentino solo, digo que este pueblo tiene memoria, que queremos escuchar sus ideas pero les pedimos que abandonen la soberbia, que recuperen la humildad y que también tengan la capacidad de hacerse la autocrítica de lo que hicieron con la Argentina, porque esta pobre Argentina explotó en el 2001 y resulta que ahora nadie es responsable. No importa, nosotros la ponemos en nuestra espalda, la llevamos adelante con toda nuestra fuerza y cabalgamos las calles y las rutas de la Patria para poner la Argentina de pie. (Aplausos)
Por eso hermanos y hermanas yo no les vengo a pedir que me sigan porque ya vimos lo que nos pasó por seguir y seguir, les vengo a pedir que me ayuden a equivocarme menos, que me ayuden a acertar más, que me extiendan las manos, que nos tomemos las manos del sur al norte de la Patria y caminemos las avenidas de la Argentina para decir que la bandera de la Patria vuelve a cobijar a todos los argentinos, para que volvamos a estar orgullosos de ser argentinos, que hay una Patria que va renaciendo, que hay una Patria que recupera sus valores, que nos volvemos a sentir con orgullo de estar en esta tierra, en esta Argentina y que le volvemos a decir al mundo que una nueva y gloriosa Nación se pone de pie con el orgullo de sus próceres y sus pioneros.
Muchas gracias Trelew, mucha suerte, yo sé lo que ustedes sufrieron. Por eso los voy a acompañar fuertemente, sé lo que le pasó a Trelew, por eso uno mis dos manos con el Gobernador y el Intendente. Muchas gracias argentinos, muchas gracias Argentina. Gracias por compartir con ustedes. (Aplausos)
Hay un claro compromiso de nuestra parte de recuperar, como bien decía Cristina en el Congreso de la Lengua hace algunos días, el valor de la palabra empeñada: voy a apoyar tanto al Gobernador como al nuevo Intendente con todas las fuerzas que tengo. (Aplausos)
También quería llegar a horario, porque hay algunos que se viven quejando de que no cumplo con el protocolo o llego tarde. Puede ser, porque yo no llegué ni para dejar las convicciones ni para andar de cóctel en cóctel, vine a esta responsabilidad de conducir el país para trabajar junto al pueblo argentino. (Aplausos)
Y si algunos amigos me tienen que esperar un poquito es porque estoy escuchando o agradeciendo el cariño del pueblo argentino, les pido disculpas y que sepan esperar, pero siempre va a estar primero el pueblo argentino porque esa es mi responsabilidad mayor. (Aplausos)
No vinimos para repetir conceptos y modelos frustrados en la Argentina, no vinimos a tratar de quedar bien, a decir que todo da lo mismo; con eso de que todo da lo mismo, con eso de resignar lo argentino al segundo lugar, esta Argentina se llenó de pobres, de indigencia, de gente sin empleo, de empresarios nacionales quebrados, bajando todas las grandes banderas del desarrollo nacional. (Aplausos) Vinimos a defender el trabajo genuino, vinimos a dar la batalla contra la indigencia, el desempleo y la pobreza, vinimos a consolidar al empresariado nacional, a la industria y a la producción.
Se lo digo desde Trelew al país: estén tranquilos aquellos que tienen por allí alguna angustia de que acá no va a pasar lo que ocurrió en la década pasada cuando fue quebrada la industria nacional, el Gobierno va a estar al frente de los empresarios, de los productores, de la industria argentina como corresponde, integrándonos al mundo pero defendiendo lo nuestro, porque consideramos que los argentinos, hermanas y hermanos, tenemos que recuperar nuestra autoestima. Durante años nos dijeron que lo nuestro siempre era lo mediocre o lo peor, que nuestros profesionales no servían, que nuestros trabajadores no entendían la modernización, que nuestros empresarios no sabían el mundo globalizado en que vivían; claro que sabíamos, lo sabíamos aquellos que levantábamos la voz porque veíamos que nos estaban llevando el país, porque nosotros queríamos un país que nos contenga y no un país que nos sepulte, como ocurrió en la década pasada en la Argentina. (Aplausos)
Por eso llegó la hora de premiar al más honesto, al más decente, al que más trabaja, al que más estudia, al que más investiga, al intelecto y a las manos argentinas que trabajan por construir un nuevo país, ese intelecto y esas manos argentinas que son los trabajadores de la patria que van a edificar el país que todos necesitamos. Esa debe ser nuestra referencia y nuestra meta. (Aplausos)
También durante años compartí muchas veces, con muchos de ustedes que están acá, que sentíamos a la Patagonia sur como el patio trasero del país, como ese lugar que todos decían que era el futuro de la patria pero quedaba en el baúl de los recuerdos. Durante toda mi campaña electoral, compartiendo con ustedes y con tantos argentinos del norte al sur, así como dije que el norte argentino había sido dejado de la mano de Dios y que tiene que llegar la mano reparadora y solidaria de todos los argentinos para devolverle el lugar que merece en esta querida Argentina, también dije que nunca más la Patagonia va a ser el patrio trasero del país sino la llama viva del corazón de la nueva patria que se construye. (Aplausos)
Porque sé que así como están las historias y las tradiciones, el trabajo, la dignidad y el orgullo de los hombres del norte de la patria, también está la capacidad del trabajo, de lucharle al frío, al viento, a la nieve, a la soledad y al olvido que tienen los hombres y mujeres de esta tierra patagónica que pueden volver a edificar la dignidad perdida de esta patria adorada por todos nosotros. (Aplausos)
Aquí están las inversiones que hoy traemos, los intendentes de Chubut, sean del partido que sean, y el señor Gobernador, ahora las tienen que gestionar para que lleguen rápidamente. Allá hay un presidente que es servidor de los intereses de esta tierra, trabajen mucho que yo los acompaño, luchemos y venzamos a la burocracia. (Aplausos)
No tengan dudas de que la Argentina va a recuperar su dignidad, lo fuimos haciendo en la recuperación de la Justicia y la lucha contra la impunidad por los derechos humanos, lo fuimos haciendo en la recuperación de la dignidad, el respeto y el recuerdo eterno para nuestros héroes de Malvinas que les triplicamos los salarios que tuvieron olvidados durante tanto tiempo. Lo fuimos haciendo en la recuperación del salario mínimo que lo doblamos desde que iniciamos nuestra gestión, y más del doble; lo hicimos en la recuperación que con esfuerzo estamos haciendo de los haberes de aquellos que dieron todo por la patria, nuestros jubilados, que cada vez que podemos va una gotita más para ellos que lo merecen todo y que estuvieron olvidados durante tanto tiempo; lo estamos haciendo con aquellos que se quedaron sin trabajo, bajamos casi 10 puntos la desocupación en un año y medio, y va a seguir bajando porque estamos creando trabajo argentino, industria argentina y producción argentina para movilizar nuestra economía. (Aplausos)
Y claro -les digo a todos los argentinos desde Trelew- claro que estamos dando la batalla del endeudamiento externo que tiene la patria. Algunos quisieran que nos volviéramos a arrodillar y que aceptemos todas las condiciones, algunos quisieran para seguir engrosando sus ganancias y concentrando la economía que aceptemos cualquier tipo de acuerdo, se terminaron los acuerdos de la indignidad, la Argentina no se arrodilla más, vamos a arreglar pero defendiendo como corresponde los intereses de la patria, vamos a defender como corresponde a los intereses de la Argentina. (Aplausos)
Es por eso que estamos dando esta batalla por reestructurar la deuda externa con los acreedores privados. Es claro que aquellos que se aprovecharon de gobiernos que no supieron representar los intereses de la Argentina, que nos entregaron atados de pies y manos y que todavía hablan, aquellos que se aprovecharon se quieren seguir aprovechando y se terminó, vamos a hacer la quita más importante de la historia de la deuda que corresponde para recuperar lo que corresponda a los argentinos. No tengo ninguna duda que más allá de estas pequeñas dificultades administrativas que tuvimos en estos días, que a veces lógicamente toman mayor o menor trascendencia, pero desde Trelew les digo que más allá de esta demora administrativa que tenemos, que se están superando plenamente, no tengan ninguna duda los argentinos de que vamos a llevar a buen puerto la reestructuración de la deuda argentina, defendiendo y recuperando el interés argentino para que definitivamente cerremos la etapa de la historia que nos ha tocado vivir. (Aplausos)
También, en cuanto al Fondo Monetario Internacional, cuando discutimos profundamente con ellos -hay algunos matutinos que dicen a veces que hay que escuchar los consejos del Fondo- yo digo: es verdad que Argentina ha tenido conducciones lamentables y nadie los quiere defender porque el pueblo los ha sufrido y los conoce perfectamente, pero estos señores del Fondo que ahora se hacen graciosas autocríticas, paseaban a algunos de nuestros gobernantes por los salones del mundo elogiando el proyecto económico que había en la Argentina, y ahora miran al costado y se hacen la autocrítica. Claro, a la Argentina le dejaron miles y millones de pobres e indigentes, ellos media hora de café y autocrítica. Se terminó esto de que se juegue con los pobres, los indigentes en la Argentina, tendrán que asumir la responsabilidad que corresponde. (Aplausos)
El Fondo Monetario tiene que entender que la Argentina va a hacer frente como país que es a lo que pueda corresponder, pero nunca más va aceptar imposiciones ni modelos que no tienen nada que ver con nuestra patria. Decía recién el intendente de Trelew con toda certeza refiriéndose a su ciudad, definiéndose con tanta fuerza y con tanta pasión, y creo que es la certera visión que se extiende al país: la Argentina ya no quiere recetas que no sean las recetas de los argentinos, los argentinos confiamos en nuestras propias ideas, en nuestros propios análisis, en nuestras propias decisiones. (Aplausos)
También desde Trelew llamo a todos los argentinos a construir las bases y la fortaleza de un nuevo país, pero que cada uno tenga memoria. No me gusta cultivar la hipocresía, porque por allí, cuando escucho a algún ex ministro de Economía que se tuvo que ir por el feroz ajuste que quería poner sobre el pueblo argentino -y ni hablar sobre la Patagonia- hablar de las cosas que hay que hacer en la Argentina, pero cuando la tierra temblaba se subieron a un helicóptero y se escaparon a espaldas de la Casa Rosada dejando al pueblo argentino solo, digo que este pueblo tiene memoria, que queremos escuchar sus ideas pero les pedimos que abandonen la soberbia, que recuperen la humildad y que también tengan la capacidad de hacerse la autocrítica de lo que hicieron con la Argentina, porque esta pobre Argentina explotó en el 2001 y resulta que ahora nadie es responsable. No importa, nosotros la ponemos en nuestra espalda, la llevamos adelante con toda nuestra fuerza y cabalgamos las calles y las rutas de la Patria para poner la Argentina de pie. (Aplausos)
Por eso hermanos y hermanas yo no les vengo a pedir que me sigan porque ya vimos lo que nos pasó por seguir y seguir, les vengo a pedir que me ayuden a equivocarme menos, que me ayuden a acertar más, que me extiendan las manos, que nos tomemos las manos del sur al norte de la Patria y caminemos las avenidas de la Argentina para decir que la bandera de la Patria vuelve a cobijar a todos los argentinos, para que volvamos a estar orgullosos de ser argentinos, que hay una Patria que va renaciendo, que hay una Patria que recupera sus valores, que nos volvemos a sentir con orgullo de estar en esta tierra, en esta Argentina y que le volvemos a decir al mundo que una nueva y gloriosa Nación se pone de pie con el orgullo de sus próceres y sus pioneros.
Muchas gracias Trelew, mucha suerte, yo sé lo que ustedes sufrieron. Por eso los voy a acompañar fuertemente, sé lo que le pasó a Trelew, por eso uno mis dos manos con el Gobernador y el Intendente. Muchas gracias argentinos, muchas gracias Argentina. Gracias por compartir con ustedes. (Aplausos)