Señor gobernador de la provincia de Buenos Aires; señor intendente municipal de Tigre; señores intendentes municipales de localidades vecinas; señor presidente de la ANSéS; señores concejales; amigos, amigas; compañeros, compañeras; argentinos, argentinas, muchas gracias por permitirme estar con aquí: ustedes saben que venimos de una crisis casi terminal en la Argentina y también saben que muchos, durante largo tiempo, que aún hoy los escuchan hablar en cuanto lugar pueden, trataron de construir una Argentina donde haya muchos pobres y algunos favorecidos, una Argentina llena de injusticias, llena de olvidos, y hoy cuando queremos ponerle un punto de inflexión histórico hablan y tratan de frustrar este proceso de cambio en la Argentina. Que lo tengan claro, con la ayuda del pueblo argentino y con la absoluta voluntad de cambio que tiene el Gobierno vamos a profundizar la justicia, la equidad, la inclusión, la lucha contra la indigencia, la lucha contra la pobreza y la lucha contra el desempleo en la Argentina. (Aplausos)
Yo no estoy con un pie acá y otro pie allá, no le hago un discurso a un sector y otro discurso a otro sector; queridos hermanos y hermanas, estoy absolutamente jugado con los trabajadores, la clase media argentina y los empresarios nacionales para construir la Argentina que todos nosotros necesitamos. (Aplausos)
Es justo y digno decir -lo quiero agradecer públicamente ante todos ustedes-, que cuando yo recién empezaba a caminar el país con esta idea de ver si el pueblo me acompañaba para poder ser presidente de los argentinos, el señor intendente de Tigre me fue a ver a la Casa Santa Cruz y me dio su apoyo incondicional para acompañarme en esta tarea. Yo le quiero agradecer al señor Intendente la voluntad y el acompañamiento que tuvo. (Aplausos)
También les quiero decir que las obras que se firmaron hoy en menos de 20 o 25 días tienen que estar en marcha. Vengo a cumplir con la palabra empeñada, cuando me reuní en la Casa Rosada con el señor Intendente me dijo: “señor Presidente necesito estas obras”. Nos pusimos de acuerdo y acá estamos juntos para la comunidad, para el pueblo de Tigre, por arriba de cualquier fracción partidaria, esto es lo importante y lo fundamental (Aplausos)
Estoy tremendamente agradecido de compartir este palco con los señores intendentes y con todos ustedes este momento y les quiero decir que a mí me guía la voluntad concreta de trabajar y trabajar, hacer, hacer y cambiar esta realidad en la Argentina. Estoy abierto a los señores intendentes para hacer todas las obras que podamos y que sean necesarias, porque las obras traen respuestas, soluciones y trabajo al pueblo que está esperando que los gobernantes estemos a la altura de la historia.
También les quiero decir de la voluntad indomable de cambiar la lógica de análisis de esta Argentina, que se vuelva a premiar al que más trabaja, al que más estudia, al que más investiga, que castiguemos la corrupción y a aquellos que violan las normas que impiden el crecimiento de la Argentina; que haya la vereda del trabajo, la vereda de la honestidad, la vereda de premiar los valores que nuestra sociedad necesita. Porque muchas cosas que nos pasan no nos pasan por casualidad, más allá de los fracasos de los gobiernos, más allá de los actos de corrupción, más allá de olvidar lo que se dijo en las campañas permanentemente, también el haber construido una sociedad tan injusta, una sociedad donde la riqueza se concentró en unos pocos y la mayoría de los argentinos sufrieron tanto, fue creando hechos lamentables que hoy nos toca vivir.
Por eso nosotros, a los que nos toca gobernar en este tiempo de la historia, tenemos que estar al lado de nuestro pueblo, tenemos que trabajar junto a nuestro pueblo y tenemos que dar el paso adelante en el cambio sin tener miedo, con el solo compromiso de buscar una sociedad con equidad, con justicia, con esperanza, donde todos nosotros recuperemos la autoestima de sentirnos argentinos. Terminar con ese discurso de que todo lo argentino es malo que nos hicieron creer durante la década del ’90, tenemos los mejores profesionales, los mejores estudiantes, los mejores trabajadores, los mejores empresarios, empecemos a valorar y a premiar lo que tenemos en la Argentina. Comencemos a sentirnos argentinos en serio, a valorar con fuerza nuestra bandera, nuestra patria, que van a ser los símbolos que nos van a guiar. Creo en la Argentina, creo en los argentinos profundamente y creo que los argentinos no merecemos ser castigados por tres ó cuatro sinvergüenzas para manchar esta historia de trabajo y gloria que tiene nuestro pueblo. (Aplausos)
Estamos afrontando temas difíciles, yo no endeudé a la Argentina, hermanos y hermanas, en miles y miles de millones de dólares; me toca tomar la mochila y la tomo, pero no para seguir arrodillándonos o claudicando en la defensa de lo argentino sino para volver a poner de pie a la patria y a los argentinos con dignidad. (Aplausos)
Vamos a poner todo nuestro esfuerzo por superar los problemas del endeudamiento externo que tanto asfixia a la Argentina, pero no a costa de la espalda de los argentinos sino negociando con dignidad, responsabilidad y que esto no signifique un nuevo ajuste para el pueblo argentino. Basta que las espaldas del pueblo argentino paguen los errores sucesivos de aquellos que no supieron defender como corresponde la integridad global del desempeño de la nación.
Por eso les pido a ustedes una sola cosa, no les voy a pedir que me sigan porque ya sabemos los que nos pasó, les vengo a pedir que me ayuden, que me acompañen, que me den fuerza, que me hagan sentir su amor y su cariño para darme cuenta de que no estoy solo en esta lucha por la construcción de la nueva Argentina. (Aplausos).
Sé que ustedes lo van a hacer porque sé que con la ayuda y el cariño de ustedes vamos a poder darle el rumbo definitivo a la Argentina. No me encuentro atado a nada ni vengo a buscar armar ni estructurar las viejas roscas de la política, lo que me interesa es cumplir en este tiempo de la historia para ver si de a poco podemos recuperar la sonrisa y la esperanza en la Argentina, para ver si de a poco podemos ir construyendo un país distinto. Claro que no se va a recuperar de un día para otro, los que se suben a la tarima a decir eso no hacen más que mentir, pero sí lo vamos a recuperar día a día, sí vamos a tener una Argentina mejor hora tras hora, trabajando con esfuerzo y decisión. (Aplausos)
Les agradezco, les puedo asegurar que cada mano extendida de ustedes, cada gesto cariñoso, cada beso y cada chico que toco me da una fuerza espiritual tremenda y una gran responsabilidad. Los quiero seguir mirando como los miré en la campaña, como los miré cuando asumí, como los puedo mirar hoy a los ojos, de frente, porque jamás los he traicionado. Siempre me he puesto al frente y a la defensa de los intereses del pueblo argentino. (Aplausos)
Me puedo equivocar, quién no se equivoca, pero si me equivoco corrijo rápidamente, nadie es perfecto y ustedes lo saben bien. Pero tenemos un tiempo, tenemos una posibilidad y la vamos a construir, no tengan ninguna duda.
Señor Intendente, señores intendentes: a seguir administrando en serio, a seguir dando gestión, a seguir trabajando con fuerza, a seguir dándole el destino a los fondos del pueblo como corresponde. Quiero trabajar solidariamente con todos ustedes, no pregunto de qué ficha ni de qué partido, son de mi patria, son de la Argentina, juntos pondremos de pie esta tierra que amamos y queremos tanto.
Muchas gracias Tigre, muchas gracias por recibirme así. Señor Gobernador, muchas gracias por brindarme la posibilidad de estar junto a usted y su provincia. Gracias hermanos y hermanas de Tigre, con fe, con cariño, la Argentina puede, los argentinos podemos, vamos a defender los valores que nos merecemos. Muchísimas gracias a todos ustedes. (Aplausos)
Yo no estoy con un pie acá y otro pie allá, no le hago un discurso a un sector y otro discurso a otro sector; queridos hermanos y hermanas, estoy absolutamente jugado con los trabajadores, la clase media argentina y los empresarios nacionales para construir la Argentina que todos nosotros necesitamos. (Aplausos)
Es justo y digno decir -lo quiero agradecer públicamente ante todos ustedes-, que cuando yo recién empezaba a caminar el país con esta idea de ver si el pueblo me acompañaba para poder ser presidente de los argentinos, el señor intendente de Tigre me fue a ver a la Casa Santa Cruz y me dio su apoyo incondicional para acompañarme en esta tarea. Yo le quiero agradecer al señor Intendente la voluntad y el acompañamiento que tuvo. (Aplausos)
También les quiero decir que las obras que se firmaron hoy en menos de 20 o 25 días tienen que estar en marcha. Vengo a cumplir con la palabra empeñada, cuando me reuní en la Casa Rosada con el señor Intendente me dijo: “señor Presidente necesito estas obras”. Nos pusimos de acuerdo y acá estamos juntos para la comunidad, para el pueblo de Tigre, por arriba de cualquier fracción partidaria, esto es lo importante y lo fundamental (Aplausos)
Estoy tremendamente agradecido de compartir este palco con los señores intendentes y con todos ustedes este momento y les quiero decir que a mí me guía la voluntad concreta de trabajar y trabajar, hacer, hacer y cambiar esta realidad en la Argentina. Estoy abierto a los señores intendentes para hacer todas las obras que podamos y que sean necesarias, porque las obras traen respuestas, soluciones y trabajo al pueblo que está esperando que los gobernantes estemos a la altura de la historia.
También les quiero decir de la voluntad indomable de cambiar la lógica de análisis de esta Argentina, que se vuelva a premiar al que más trabaja, al que más estudia, al que más investiga, que castiguemos la corrupción y a aquellos que violan las normas que impiden el crecimiento de la Argentina; que haya la vereda del trabajo, la vereda de la honestidad, la vereda de premiar los valores que nuestra sociedad necesita. Porque muchas cosas que nos pasan no nos pasan por casualidad, más allá de los fracasos de los gobiernos, más allá de los actos de corrupción, más allá de olvidar lo que se dijo en las campañas permanentemente, también el haber construido una sociedad tan injusta, una sociedad donde la riqueza se concentró en unos pocos y la mayoría de los argentinos sufrieron tanto, fue creando hechos lamentables que hoy nos toca vivir.
Por eso nosotros, a los que nos toca gobernar en este tiempo de la historia, tenemos que estar al lado de nuestro pueblo, tenemos que trabajar junto a nuestro pueblo y tenemos que dar el paso adelante en el cambio sin tener miedo, con el solo compromiso de buscar una sociedad con equidad, con justicia, con esperanza, donde todos nosotros recuperemos la autoestima de sentirnos argentinos. Terminar con ese discurso de que todo lo argentino es malo que nos hicieron creer durante la década del ’90, tenemos los mejores profesionales, los mejores estudiantes, los mejores trabajadores, los mejores empresarios, empecemos a valorar y a premiar lo que tenemos en la Argentina. Comencemos a sentirnos argentinos en serio, a valorar con fuerza nuestra bandera, nuestra patria, que van a ser los símbolos que nos van a guiar. Creo en la Argentina, creo en los argentinos profundamente y creo que los argentinos no merecemos ser castigados por tres ó cuatro sinvergüenzas para manchar esta historia de trabajo y gloria que tiene nuestro pueblo. (Aplausos)
Estamos afrontando temas difíciles, yo no endeudé a la Argentina, hermanos y hermanas, en miles y miles de millones de dólares; me toca tomar la mochila y la tomo, pero no para seguir arrodillándonos o claudicando en la defensa de lo argentino sino para volver a poner de pie a la patria y a los argentinos con dignidad. (Aplausos)
Vamos a poner todo nuestro esfuerzo por superar los problemas del endeudamiento externo que tanto asfixia a la Argentina, pero no a costa de la espalda de los argentinos sino negociando con dignidad, responsabilidad y que esto no signifique un nuevo ajuste para el pueblo argentino. Basta que las espaldas del pueblo argentino paguen los errores sucesivos de aquellos que no supieron defender como corresponde la integridad global del desempeño de la nación.
Por eso les pido a ustedes una sola cosa, no les voy a pedir que me sigan porque ya sabemos los que nos pasó, les vengo a pedir que me ayuden, que me acompañen, que me den fuerza, que me hagan sentir su amor y su cariño para darme cuenta de que no estoy solo en esta lucha por la construcción de la nueva Argentina. (Aplausos).
Sé que ustedes lo van a hacer porque sé que con la ayuda y el cariño de ustedes vamos a poder darle el rumbo definitivo a la Argentina. No me encuentro atado a nada ni vengo a buscar armar ni estructurar las viejas roscas de la política, lo que me interesa es cumplir en este tiempo de la historia para ver si de a poco podemos recuperar la sonrisa y la esperanza en la Argentina, para ver si de a poco podemos ir construyendo un país distinto. Claro que no se va a recuperar de un día para otro, los que se suben a la tarima a decir eso no hacen más que mentir, pero sí lo vamos a recuperar día a día, sí vamos a tener una Argentina mejor hora tras hora, trabajando con esfuerzo y decisión. (Aplausos)
Les agradezco, les puedo asegurar que cada mano extendida de ustedes, cada gesto cariñoso, cada beso y cada chico que toco me da una fuerza espiritual tremenda y una gran responsabilidad. Los quiero seguir mirando como los miré en la campaña, como los miré cuando asumí, como los puedo mirar hoy a los ojos, de frente, porque jamás los he traicionado. Siempre me he puesto al frente y a la defensa de los intereses del pueblo argentino. (Aplausos)
Me puedo equivocar, quién no se equivoca, pero si me equivoco corrijo rápidamente, nadie es perfecto y ustedes lo saben bien. Pero tenemos un tiempo, tenemos una posibilidad y la vamos a construir, no tengan ninguna duda.
Señor Intendente, señores intendentes: a seguir administrando en serio, a seguir dando gestión, a seguir trabajando con fuerza, a seguir dándole el destino a los fondos del pueblo como corresponde. Quiero trabajar solidariamente con todos ustedes, no pregunto de qué ficha ni de qué partido, son de mi patria, son de la Argentina, juntos pondremos de pie esta tierra que amamos y queremos tanto.
Muchas gracias Tigre, muchas gracias por recibirme así. Señor Gobernador, muchas gracias por brindarme la posibilidad de estar junto a usted y su provincia. Gracias hermanos y hermanas de Tigre, con fe, con cariño, la Argentina puede, los argentinos podemos, vamos a defender los valores que nos merecemos. Muchísimas gracias a todos ustedes. (Aplausos)