Señor Intendente Municipal; señores ministros del Poder Ejecutivo Nacional; señor presidente de la planta Magalcuer; autoridades nacionales, provinciales y municipales; amigos intendentes de las localidades vecinas; amigos empresarios; señores directivos; trabajadoras y trabajadores de esta planta que nace hoy en Pilar para todos los argentinos y que nace generando producción argentina, ganando mercados para la argentina y trabajo argentino: ver a todos estos chicos recuperando la fe de que puede haber un futuro distinto, que puede haber trabajo argentino, que se pueden realizar y que puede haber empresarios como el señor presidente de Magalcuer, creo que es recobrar la esperanza.
Durante más de una década los supuestos empresarios argentinos se dedicaron a cerrar producción, a cerrar fábricas, a destruir trabajo argentino y prácticamente hacer filiales de acciones e inversiones que venían del exterior sin generar ningún tipo de producción ni trabajo interno, y ni hablar de productos de valor agregado como los que se van a generar en esta fábrica. Por eso hoy estoy presente, porque apostamos decididamente a la Argentina de la producción, del trabajo, al nacimiento y la consolidación de los trabajadores argentinos -que no tengo duda todos sabemos la calidad que tienen- y también a la constitución de los empresarios nacionales. Porque empresarios nacionales y trabajadores argentinos van a ganar los mercados internos y externos que el país necesita para crecer.
La Argentina, no tengan ninguna duda, va a seguir creciendo, más allá de aquellos que dijeron en su momento, cuando se salió de todo un proceso y de una década muy difícil, que nos esperaba una nueva hiperinflación y quedaron absolutamente equivocados en sus dichos, gracias a Dios. Parecía que querían un nuevo fracaso. Y muchas veces siguen trabajando en las sombras para que no se consolide la producción argentina, para que no se consolide el capital argentino, para que no haya trabajo argentino, como si lo argentino no fuera bueno. Por Dios, esto es argentino, las manos de los chicos y las chicas, y las paredes y las máquinas de esta fábrica que van a generar un verdadero ejemplo interno y externo para el mundo, del que realmente uno se enorgullece. (Aplausos)
Por eso esperemos que los señores legisladores en el Congreso aceleren el proyecto que hemos mandado sobre amortización acelerada y devolución del IVA para las nuevas inversiones como esta, de plantas industriales. (Aplausos) Es muy importante, inclusive nosotros creemos que esto va a generar y consolidar rápidamente muchas inversiones que están en cartera. También, cuente con nosotros permanentemente, señor presidente y amigo Norberto, igual que los trabajadores y el personal directivo.
Hoy nos vamos orgullosos de poder mostrarle a toda la Argentina lo que está pasando en este lugar, como gracias a Dios está pasando en muchos otros lados de una punta a la otra de la Argentina. Nos vamos bañados de inversión Argentina y nos vamos orgullosos de ver trabajo argentino y de sentir esas manos y esos corazones que han recuperado la esperanza de poder realizarse en nuestro país.
Sé que habrá muchas dificultades, sé que es difícil la tarea, sé que no hay que desmayar nunca; sé que los argentinos por fatalismo nos hemos acostumbrado a que las cosas nos tienen que fracasar. Pero yo les puedo asegurar que podemos ganar todos los argentinos si tenemos confianza en nosotros mismos, si no nos dejamos llevar muchas veces por la mala onda de que no lo vamos a poder hacer. ¡Cómo los argentinos no vamos a poder hacer este nuevo país! No tengo ninguna duda de que lo vamos a hacer y nos vamos a sentir orgullosos de él.
No tengan duda tampoco de que a este sureño, al que le toca ocupar la presidencia del país en este tiempo histórico, nunca lo van a ver con los brazos abajo; siempre luchando, a cada dificultad doble esfuerzo, porque sé que hay muchísimos hermanos y hermanas de esta tierra que no pueden apostar a un nuevo fracaso. Es fundamental consolidar el proceso que lleva la Argentina de crecimiento económico, de generación de trabajo, y desde luego también el mejoramiento de la distribución interna del ingreso, que es la gran tarea que tenemos que hacer. (Aplausos)
Hoy son 30.000 metros cuadrados, casi 10 millones de dólares de inversión, 700 trabajadores y trabajadoras; va a llegar a 2.000, 2.100, me dijo el señor presidente, el amigo Norberto. Esto alienta y da fuerza, retempla espiritualmente.
Muchas gracias mucha fuerza y adelante. (Aplausos)
Durante más de una década los supuestos empresarios argentinos se dedicaron a cerrar producción, a cerrar fábricas, a destruir trabajo argentino y prácticamente hacer filiales de acciones e inversiones que venían del exterior sin generar ningún tipo de producción ni trabajo interno, y ni hablar de productos de valor agregado como los que se van a generar en esta fábrica. Por eso hoy estoy presente, porque apostamos decididamente a la Argentina de la producción, del trabajo, al nacimiento y la consolidación de los trabajadores argentinos -que no tengo duda todos sabemos la calidad que tienen- y también a la constitución de los empresarios nacionales. Porque empresarios nacionales y trabajadores argentinos van a ganar los mercados internos y externos que el país necesita para crecer.
La Argentina, no tengan ninguna duda, va a seguir creciendo, más allá de aquellos que dijeron en su momento, cuando se salió de todo un proceso y de una década muy difícil, que nos esperaba una nueva hiperinflación y quedaron absolutamente equivocados en sus dichos, gracias a Dios. Parecía que querían un nuevo fracaso. Y muchas veces siguen trabajando en las sombras para que no se consolide la producción argentina, para que no se consolide el capital argentino, para que no haya trabajo argentino, como si lo argentino no fuera bueno. Por Dios, esto es argentino, las manos de los chicos y las chicas, y las paredes y las máquinas de esta fábrica que van a generar un verdadero ejemplo interno y externo para el mundo, del que realmente uno se enorgullece. (Aplausos)
Por eso esperemos que los señores legisladores en el Congreso aceleren el proyecto que hemos mandado sobre amortización acelerada y devolución del IVA para las nuevas inversiones como esta, de plantas industriales. (Aplausos) Es muy importante, inclusive nosotros creemos que esto va a generar y consolidar rápidamente muchas inversiones que están en cartera. También, cuente con nosotros permanentemente, señor presidente y amigo Norberto, igual que los trabajadores y el personal directivo.
Hoy nos vamos orgullosos de poder mostrarle a toda la Argentina lo que está pasando en este lugar, como gracias a Dios está pasando en muchos otros lados de una punta a la otra de la Argentina. Nos vamos bañados de inversión Argentina y nos vamos orgullosos de ver trabajo argentino y de sentir esas manos y esos corazones que han recuperado la esperanza de poder realizarse en nuestro país.
Sé que habrá muchas dificultades, sé que es difícil la tarea, sé que no hay que desmayar nunca; sé que los argentinos por fatalismo nos hemos acostumbrado a que las cosas nos tienen que fracasar. Pero yo les puedo asegurar que podemos ganar todos los argentinos si tenemos confianza en nosotros mismos, si no nos dejamos llevar muchas veces por la mala onda de que no lo vamos a poder hacer. ¡Cómo los argentinos no vamos a poder hacer este nuevo país! No tengo ninguna duda de que lo vamos a hacer y nos vamos a sentir orgullosos de él.
No tengan duda tampoco de que a este sureño, al que le toca ocupar la presidencia del país en este tiempo histórico, nunca lo van a ver con los brazos abajo; siempre luchando, a cada dificultad doble esfuerzo, porque sé que hay muchísimos hermanos y hermanas de esta tierra que no pueden apostar a un nuevo fracaso. Es fundamental consolidar el proceso que lleva la Argentina de crecimiento económico, de generación de trabajo, y desde luego también el mejoramiento de la distribución interna del ingreso, que es la gran tarea que tenemos que hacer. (Aplausos)
Hoy son 30.000 metros cuadrados, casi 10 millones de dólares de inversión, 700 trabajadores y trabajadoras; va a llegar a 2.000, 2.100, me dijo el señor presidente, el amigo Norberto. Esto alienta y da fuerza, retempla espiritualmente.
Muchas gracias mucha fuerza y adelante. (Aplausos)