Señores gobernadores; señores ministros y secretarios del Poder Ejecutivo Nacional; autoridades nacionales, provinciales; señor secretario general de la Unión Obrera de la Construcción; compañeros; señores empresarios; señoras, señores: nosotros, en forma conjunta con las provincias argentinas, la Unión Obrera de la Construcción y los señores empresarios del sector, estamos tratando de instrumentar políticas claras y concretas que nos permitan generar, por un lado, la consolidación de un proceso de dinamización de la economía y reactivación económica, acompañando esto por supuesto a la inversión, a la generación de trabajo y a la solución del problema habitacional, que tal cual lo mostraba el secretario de Obras Públicas es absolutamente grave en la Argentina.
La Argentina va mejorando paulatinamente en sus números en cuanto al consumo, al crecimiento económico; siempre estando bajo tierra, es decir, donde estamos, de donde estamos partiendo, a donde nos llevaron, a donde nos dejaron. Nosotros tenemos que saber que este proceso de crisis dejó un profundo daño en el tejido social argentino y lo principal que debemos hacer todos los que tenemos responsabilidades es no enamorarnos a ciegas de los números, ver que en esta Argentina ha quedado gente, hermanos y hermanas absolutamente quebrados y dañados por el terrible proceso económico que nos tocó vivir fundamentalmente durante la última década en la Argentina, los últimos 15 años. Hay sectores que han quedado fuertemente vulnerables.
A mí me tocó vivir ayer en Tucumán una experiencia muy fuerte. Estamos tratando de repotenciar y poner en marcha los Ferrocarriles Argentinos, tarea difícil. Se imaginan ustedes al desguace, a la tarea de destrucción que fueron sometidos para que realmente estos ferrocarriles no existan; bajo la excusa de que eran deficitarios, en vez de corregir el déficit se utilizó la excusa para rematar nuestros ferrocarriles en la Argentina, y hay responsables políticos e institucionales de ese remate que se ha hecho en la Argentina. De esto hay que tener una gran memoria, porque yo escucho hablar a veces con una gran amnesia sobre todas estas cosas que han pasado en nuestro querido país. Yo no vivo con la cuestión del pasado, parece que a algunos les molesta, pero tenemos que ver lo que ocurrió en el pasado para saber las cosas que nos sucedieron.
Ahora tenemos que rearmar este sistema, darles vida a pueblos que han quedado absolutamente excluidos de la vida institucional argentina. Como digo: “lo tenemos que hacer con hierros viejos para hacer sueños nuevos, paulatinamente”. Nos va a llevar seguramente una década recuperar la potencialidad de los ferrocarriles en la Argentina, pero estamos empezando a conectar nuevamente el país. Estoy seguro de que los señores empresarios se van a interesar, van a hacer inversiones, vamos a poder bajar absolutamente todos los costos de transportes, fletes. La unión institucional, geográfica y geopolítica en la Argentina va a ser realmente espectacular. Ayer empezamos con un símbolo que eran los talleres de Tafí Viejo, pero la cantidad de hermanos y hermanas que quedaron desocupados, el hambre circundante, todos los brazos caídos de argentinas y argentinos que han perdido la fe de poder volver a ser, es fruto de esa política de demolición que nos tocó vivir en la Argentina.
Ahora, el tema de las viviendas va acompañando. Ayer anunciamos 2.600 viviendas en Tucumán como hoy estamos anunciando en las 8 provincias argentinas que consideramos más dañadas por la crisis. En general todo el país fue terriblemente dañado pero nos referimos a aquellas donde se ha profundizado esta situación. Sabemos que trabajando solidaria y juntamente con las provincias, vamos a lograr ir avanzando sobre esta situación realmente gravísima.
Pero es evidente que este proceso requiere mucha inversión, mucho esfuerzo y también mucha prioridad en el destino que tenemos que darle. Por eso es fundamental que pongamos cuanto antes en marcha estas viviendas, ocupemos a la gente, que vean que se puede construir un país absolutamente diferente y apuntemos a las situaciones que realmente hay que resolver en esta Argentina; porque muchas veces las situaciones de hambre, desnutrición, marginación, pobreza e indigencia que hay en la Argentina, es muy fácil diagnosticarlas y presentarlas, pero hay que encontrar los elementos para superarlas y para ello necesitamos acciones e inversión; no solamente políticas sociales y de salud, que son fundamentales, también tiene que haber una política de integración al excluido social e institucionalmente. Eso es lo que nosotros queremos empezar a hacer humildemente desde ahora. Es lo que esperamos que se pueda lograr y es lo que esperamos con los señores gobernadores que podamos llevar adelante. Es la gran batalla por una Argentina diferente. Teniendo en claro desde dónde partimos, dónde estamos, adónde llegamos, porque esto es muy importante para saber cómo se va a llevar adelante este proceso de la construcción de la nueva Argentina que queremos hacer en forma conjunta y solidaria con todos. La lucha contra la pobreza, la lucha por el trabajo, la lucha contra la indigencia, debe ser una prioridad de todo el pueblo argentino.
Muchísimas gracias. (Aplausos)
La Argentina va mejorando paulatinamente en sus números en cuanto al consumo, al crecimiento económico; siempre estando bajo tierra, es decir, donde estamos, de donde estamos partiendo, a donde nos llevaron, a donde nos dejaron. Nosotros tenemos que saber que este proceso de crisis dejó un profundo daño en el tejido social argentino y lo principal que debemos hacer todos los que tenemos responsabilidades es no enamorarnos a ciegas de los números, ver que en esta Argentina ha quedado gente, hermanos y hermanas absolutamente quebrados y dañados por el terrible proceso económico que nos tocó vivir fundamentalmente durante la última década en la Argentina, los últimos 15 años. Hay sectores que han quedado fuertemente vulnerables.
A mí me tocó vivir ayer en Tucumán una experiencia muy fuerte. Estamos tratando de repotenciar y poner en marcha los Ferrocarriles Argentinos, tarea difícil. Se imaginan ustedes al desguace, a la tarea de destrucción que fueron sometidos para que realmente estos ferrocarriles no existan; bajo la excusa de que eran deficitarios, en vez de corregir el déficit se utilizó la excusa para rematar nuestros ferrocarriles en la Argentina, y hay responsables políticos e institucionales de ese remate que se ha hecho en la Argentina. De esto hay que tener una gran memoria, porque yo escucho hablar a veces con una gran amnesia sobre todas estas cosas que han pasado en nuestro querido país. Yo no vivo con la cuestión del pasado, parece que a algunos les molesta, pero tenemos que ver lo que ocurrió en el pasado para saber las cosas que nos sucedieron.
Ahora tenemos que rearmar este sistema, darles vida a pueblos que han quedado absolutamente excluidos de la vida institucional argentina. Como digo: “lo tenemos que hacer con hierros viejos para hacer sueños nuevos, paulatinamente”. Nos va a llevar seguramente una década recuperar la potencialidad de los ferrocarriles en la Argentina, pero estamos empezando a conectar nuevamente el país. Estoy seguro de que los señores empresarios se van a interesar, van a hacer inversiones, vamos a poder bajar absolutamente todos los costos de transportes, fletes. La unión institucional, geográfica y geopolítica en la Argentina va a ser realmente espectacular. Ayer empezamos con un símbolo que eran los talleres de Tafí Viejo, pero la cantidad de hermanos y hermanas que quedaron desocupados, el hambre circundante, todos los brazos caídos de argentinas y argentinos que han perdido la fe de poder volver a ser, es fruto de esa política de demolición que nos tocó vivir en la Argentina.
Ahora, el tema de las viviendas va acompañando. Ayer anunciamos 2.600 viviendas en Tucumán como hoy estamos anunciando en las 8 provincias argentinas que consideramos más dañadas por la crisis. En general todo el país fue terriblemente dañado pero nos referimos a aquellas donde se ha profundizado esta situación. Sabemos que trabajando solidaria y juntamente con las provincias, vamos a lograr ir avanzando sobre esta situación realmente gravísima.
Pero es evidente que este proceso requiere mucha inversión, mucho esfuerzo y también mucha prioridad en el destino que tenemos que darle. Por eso es fundamental que pongamos cuanto antes en marcha estas viviendas, ocupemos a la gente, que vean que se puede construir un país absolutamente diferente y apuntemos a las situaciones que realmente hay que resolver en esta Argentina; porque muchas veces las situaciones de hambre, desnutrición, marginación, pobreza e indigencia que hay en la Argentina, es muy fácil diagnosticarlas y presentarlas, pero hay que encontrar los elementos para superarlas y para ello necesitamos acciones e inversión; no solamente políticas sociales y de salud, que son fundamentales, también tiene que haber una política de integración al excluido social e institucionalmente. Eso es lo que nosotros queremos empezar a hacer humildemente desde ahora. Es lo que esperamos que se pueda lograr y es lo que esperamos con los señores gobernadores que podamos llevar adelante. Es la gran batalla por una Argentina diferente. Teniendo en claro desde dónde partimos, dónde estamos, adónde llegamos, porque esto es muy importante para saber cómo se va a llevar adelante este proceso de la construcción de la nueva Argentina que queremos hacer en forma conjunta y solidaria con todos. La lucha contra la pobreza, la lucha por el trabajo, la lucha contra la indigencia, debe ser una prioridad de todo el pueblo argentino.
Muchísimas gracias. (Aplausos)