Quiero agradecer profundamente los momentos que hemos compartido aquí en la fabrica Peugeot, donde quería estar presente, acompañado por el compañero Intendente y por el señor Presidente de la firma, porque realmente quería estar junto a ustedes, los trabajadores argentinos. Les quiero asegurar desde lo más profundo de mi corazón, y lo digo permanentemente, que no hay que olvidar que me ha puesto el pueblo argentino y no he querido estar ni quiero estar para olvidar, tratando de hacer cualquier cosa y no las cosas que uno piensa.

Yo tengo como ustedes profundas convicciones, creo en la Argentina, creo en el trabajo argentino, creo en la inversión argentina y creo en los trabajadores argentinos. (Aplausos). Sé que con ustedes vamos a ir construyendo lo que nos dijeron que no se podía construir aquellos que nos decían que la Argentina tenía que vender todo, que tenía que dejar de ser ese gran país industrial, del trabajo nacional, que es lo que nosotros tenemos que volver a construir con todas nuestras fuerzas. Les puedo asegurar que se puede hacer y lo vamos a hacer, por eso aprovecho esta tarima que me dieron hoy no para decirles que me sigan, porque ya vieron los que nos pasó por seguir y seguir: yo les digo a los trabajadores argentinos, a ustedes, a los empresarios y a todos, que nos ayuden, que me ayuden, que no voy a dar un solo paso atrás, voy a seguir con todo para adelante para hacer una nueva Argentina donde se termine la corrupción, donde se premie el trabajo. (Aplausos).

De eso estoy totalmente convencido, por eso les agradezco el cariño y la solidaridad. Soy un argentino como ustedes, nací allá en la Patagonia y pienso, igual que todos los que me acompañan, que aquellos que vota el pueblo después se creen los grandes señores; nosotros somos hombres comunes trabajando por una Argentina distinta, muchachos. (Aplausos).

No tengan dudas, es muy difícil volver a creer, es muy difícil que volvamos a creer entre nosotros, pero no tengan dudas que entre nosotros fuertemente tomados de la mano y juntando nuestros corazones vamos a volver a creer en nosotros y vamos a volver a ser la Argentina que nuestros viejos soñaron, a ver si la podemos hacer, una partecita para nosotros y después para nuestros hijos. Muchas gracias, mucha fuerza, mucha polenta, y Argentina puede ser, que no nos hagan creer otra cosa.