Señor vicepresidente de la Nación; señor presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario; miembros del Consejo Directivo; señor intendente municipal de Rosario; señores representantes del Poder Ejecutivo Nacional y Provincial; señores representantes del Poder Legislativo Nacional y Provincial; señores intendentes municipales; señores empresarios; señoras y señores: para mí realmente estar aquí hoy me causa una profunda alegría porque creo que es el ámbito ideal para poder comunicarnos, para poder intercambiar ideas, para poder contarnos las realizaciones y las asignaturas pendientes y en un día muy especial, como es el Día de la Bandera Nacional que significa no sólo la creación de la Bandera Nacional, sino fundamentalmente el sentimiento de Nación, de Patria, de país, de filosofía y de concepción que tenemos para la Argentina.
Desafíos grandes fueron los que nos tocaron emprender a partir del 25 de mayo de 2003 y la verdad que si nos ponemos a pensar aquella Argentina que teníamos en el año 2002 cuando me tocó visitar Rosario, cuando estaba en campaña electoral y todos ustedes recuerdan qué Rosario teníamos, qué Argentina teníamos, parecía un sueño inalcanzable pensar en el 2002 el 2007 que tenemos hoy.
Porque los argentinos después de la explosión que tuvimos creo que hemos realizado un acto y acciones que nos determinan un proceso de maduración permanente. Creo que siempre nos acostumbramos a que nos vaya un tiempo bien y un tiempo mal, como si fuera imposible construir entre todos nosotros una Argentina que crezca permanentemente, una Argentina que se desarrolle en todos sus aspectos institucionales, políticos, sociales y culturales permanentemente.
Yo lo digo y suena a metáfora a veces: espero poder decirle al pueblo argentino el 10 de diciembre de 2007 que estamos saliendo del infierno o que hemos salido del infierno. No tengo ninguna duda que en el período 2007-2011 la Argentina va a poder discutir, debatir y construir definitivamente una Argentina donde el común denominador sea encontrar los marcos estratégicos del perfil de país que queremos construir.
Hay países en el mundo, siempre nombro España como un ejemplo claro y concreto, que vivieron procesos parecidos al argentino, que lograron pasar la transición, que lograron salir del infierno y que lograron construir procesos económicos, sociales e institucionales exitosos, independientemente de quien tenga la iniciativa política en cada tiempo y período de la historia, porque lo fueron construyendo en bases absolutamente sólidas y entendiendo cuál era el perfil y el rumbo de país que se necesitaba.
Es verdad, la Argentina hoy puede decir que ha entrado a avanzar sobre problemas muy difíciles, como el de la desocupación, en el que estamos en un 8,3 después de haber estado casi en un 30, como el de la indigencia que bajamos del 28 al 8, y como el de la pobreza, que hemos bajado del 60 al 26,9 y sabemos que el problema de la pobreza que es tan claro que creíamos nosotros que nos íbamos a encontrar en el 30 por ciento del núcleo duro y gracias a Dios el crecimiento sigue avanzando sobre la pobreza, pero cuando lleguemos al núcleo duro de la pobreza habrá que aplicar políticas activas, claras y concretas que definitivamente nos permitan quebrar ese 16 histórico de pobreza que tiene la Argentina, porque la Argentina tiene las condiciones para hacerlo.
Hay datos que están marcando el mejoramiento de la distribución del ingreso en forma importante; la brecha entre ricos y pobres era de 39 puntos en el 2005, 36 en el 2006 y en datos para anunciar en los próximos días va a estar en el 30; es decir, hay un mejoramiento claro y concreto y somos el país en América Latina que mejor ha avanzado en este problema de la distribución del ingreso, independientemente que todavía sigue siendo un problema grave, (APLAUSOS) porque cuando hablamos de pobreza y decimos que tenemos el 26,9 a nosotros nos llena todavía de dolor el nivel de pobreza que tenemos, porque la Argentina no tendría que tener ese nivel de pobreza pero lamentablemente hay que ver de dónde partimos y dónde estamos.
Consideramos que es fundamental mantener dos pilares centrales en la construcción de la Argentina: el superávit primario, que es muy importante y que en las próximas horas yo creo que vamos a estar anunciando para el mes de mayo un superávit primario récord, importante, a pesar de las inversiones que estamos haciendo que son muchas y el superávit comercial. Cada vez que la Argentina descuidó el superávit comercial tuvimos problemas.
Nosotros consideramos que el superávit comercial, es decir la diferencia entre las importaciones y las exportaciones, va a ser muy importante este año también, pero en el marco de las importaciones creemos que hay que colocar acento – son muy importantes todas las importaciones de bienes de capital que podamos hacer - pero tenemos que tener cuidado con el otro tipo de importaciones que perjudican a la industria nacional y al desarrollo nacional y para eso necesitamos un trabajo mancomunado con la industria nacional y con los productores y empresarios nacionales para que los costos nos permitan generar políticas claras respecto a este tipo de importaciones que nos hacen disminuir el superávit comercial pero también nos genera problemas en la producción interna y en la elaboración industrial que el país tiene que llevar adelante. El superávit primario y el superávit comercial son centrales.
El crecimiento industrial ya se anunció hace pocas horas, llevamos un acumulado del 6,6, en lo que va del año, a pesar de los problemas que hemos tenido en cuanto a la lluvia y algunos paros de trabajadores que hubieron en industrias especificas importantes, que afectaron en cierta manera, aunque podía haber sido un poquito más alto. Pero 6,6 fue el crecimiento industrial que tuvimos que fue muy importante.
En las próximas horas, si Dios quiere, espero que la ministra de Economía pueda anunciar ya el crecimiento del mes de abril de la actividad económica argentina, que creo que va a volver, a pesar de los analistas, a rondar el 8 por ciento o va a ser el 8 por ciento, que fue lo del primer trimestre de este año. Es decir, que seguimos creciendo a ritmos intensos. Esto, ayudado al crecimiento de la recaudación, que en junio va a volver a ser importante y fue récord en el mes de mayo y también ayudado por una cosecha récord que vamos a tener en la Argentina gracias al esfuerzo mancomunado de todos nuestros productores, nuestros empresarios, los que tienen que ver con la actividad agrícola-industrial, agrícola en general, que va a estar rondando entre los 95 millones de toneladas y los 100 mil millones de toneladas.
Claro son noticias hermosas y muy buenas, pero que también nos van trayendo problemas y no hay que acostumbrarse a los problemas. Yo creo que los problemas cuando la Argentina decrecía o estaba paralizada eran realmente preocupantes. Estos también son preocupantes pero la Argentina está creciendo y la Argentina está haciendo inversiones, en el área energética, que son muy importantes y que estamos dando respuestas muy importantes, a pesar de la temporada, el frío y el crecimiento industrial.
Estamos por poner en marcha dos usinas muy importantes, en los próximos 16 meses. Si estamos haciendo inversiones fundamentales en transporte de gas en la Argentina, donde también las empresas de transporte de gas se tienen que poner a tono. La empresa TGS y TGN tienen que estar a la altura de las circunstancias porque en estos días ellos tenían gas suficiente y si tuvimos algún problema fue por culpa del transporte. Entonces, evidentemente el Estado va a actuar y va a ejercer el poder de policía como corresponde porque ellos obtienen rentabilidades interesantes en la Argentina y tienen que prestarnos un servicio como el que corresponde.
También vamos a seguir invirtiendo fuertemente y tenemos todas nuestras miras en la ampliación 2006-2008, del Gasoducto del Norte y del Sur y la licitación de la obra del Gasoducto del Noreste, que esperamos terminar de acordar con Bolivia, que va a ser 27 millones de metros cúbicos más. Esto es central y esto es fundamental para generar y consolidar el crecimiento argentino, pero obviamente también la fuerte actividad, el fuerte crecimiento que tenemos – como charlábamos con el señor Presidente de la Bolsa – nos va generando cuellos de botellas muy importantes.
En el 2002 teníamos capacidad ociosa; nosotros nos encontramos que Rosario, por dar un ejemplo, pero pasa en todo el país, tiene una verdadera saturación de sus rutas, puertos. Lo que sobraba en el 2002, nos falta en el 2007.
Hemos emprendido con el Gobernador y el Intendente la obra de la Circunvalar. Ahora ya está resuelto el crédito de los 300 millones de dólares, que son muy importantes para la construcción de una obra que se tendría que haber hecho, pero en esta Argentina enunciamos las obras y nunca estaban los proyectos listos.
Cuando fuimos a buscar el proyecto, en el año 2004, con el Intendente y el Gobernador, no estaba por ningún lado. Así que hubo que hacer todo el proyecto, toda la tarea que hay que llevar adelante en estos temas y creo que la obra ya está pronto a comenzar con todas sus fuerzas, más la ruta 9 que se viene construyendo con todas las fuerzas.
El problema se va a seguir agravando en cuanto a la saturación de rutas y de puerto porque en el día de ayer, ya solamente falta un dictamen, pero ya se hizo el acta entre la empresa de la hidrovìa y la UNIREN para enviar al Congreso de la Nación la aprobación del nuevo contrato de la hidrovìa, que va a permitir ir a una profundidad de 37 pies, lo que va a llevar a que toda la actividad nacional e internacional de la región se vuelque hacia los puertos de Rosario, hacia toda la provincia de Rosario y parte de la provincia de Buenos Aires. Entonces la actividad – señores ustedes que son conocedores del tema - saben que se va a multiplicar y vamos a estar ante problemas realmente graves. Esperemos que el Congreso de la Nación lo apruebe rápidamente (APLAUSOS), pero por un lado vamos a estar felices por la actividad, por la inversión y por el trabajo y por otro lado nos vamos a dar cuenta cuántas cosas nos faltan.
Bueno, acostumbrémonos a tratar de llegar a alcanzar al crecimiento que tiene la Argentina, pero como yo digo estos son problemas que valen la pena porque la Argentina está creciendo en más empleo, en más inversión, es más creación de capital argentino, es más creación de empresarios nacionales, es más ilusión, es más sueño para crear el país que todos deseamos. Y todos sabemos que cuando Rosario crece, crece el país porque Rosario también cuando decrece donde primero se nota es acá, en Rosario, y ustedes también lo saben muy bien.
Estamos también, y ya con la preadjudicación, y faltan cuestiones financieras a resolver, con otro sueño que para algunos es un proyecto faraónico, para otros obviamente que creyeron que los trenes en la Argentina no eran necesarios y vieron la situación en que nos dejaron y lo que nos cuesta ahora levantar el sistema ferroviario, hasta el urbano que prácticamente ha sido muy golpeado el sistema que intercomunica a todas nuestras provincias con las provincias que tenían trenes, por la falta de inversión y por la decisión de hacer desaparecer el servicio.
Nosotros creemos que hay que empezar con dos trenes fundamentales, que son independientemente de los urbanos: la conexión Capital- Buenos Aires- Rosario- Córdoba y Buenos Aires- Mar del Plata, que son centrales y ya tenemos preadjudicado, es una obra que sale en 1.360 millones de dólares el tren. Hoy se ha hecho la preadjudicación, hace algunas horas del que va desde Capital Federal a Buenos Aires, a Rosario, a Córdoba. Vamos a estar desde la Capital a Rosario en 85 minutos, es decir que esto también va a acelerar el dinamismo de Rosario de forma espectacular y de la Argentina toda porque nos va a permitir intercomunicarnos con una rapidez y con un transporte que evidentemente la Argentina merece y no tiene.
Puede ser que para algunos la obra sea muy cara, pero si la Argentina no hace las obras de infraestructura que tiene que hacer, si la Argentina no hace las rutas que tiene que hacer, si la Argentina no hace los hospitales que tiene que hacer, si la Argentina no hace necesariamente las autovías que tiene que hacer evidentemente la Argentina se va a chocar a sí misma.
Tenemos que hacer todas las obras de infraestructura que necesitamos para poder construir un país moderno, un país inclusivo, un país que se desarrolle fuertemente. Para poder seguir creciendo, no dos, tres, cuatro o cinco años, como es ahora, que es prácticamente histórico y hacerlo de forma sucesiva, sino para tener un horizonte que nos permita un crecimiento, como hoy tiene España de 14, 15 años en forma consecutiva, que es central, que es esencial, que esto nos va a permitir proyectar inversiones con otro tipo de seguridad.
También estamos combinando el crecimiento de las exportaciones con el consumo interno, y siempre acá se dijo que las exportaciones y el consumo interno eran contradictorios. Nosotros siempre dijimos que no, que pueden mejorar nuestra inserción en los mercados del mundo y se puede mejorar la posibilidad de consumo de los argentinos, se puede reconstruir la movilidad ascendente de nuestra clase media, se puede reconstruir la clase trabajadora y se puede reconstruir el empresariado nacional que tanto necesitamos.
Lo digo acá, los argentinos tenemos que asumir que necesitamos un empresariado al que le vaya bien, un empresariado que tenga éxito, un empresariado que tenga rentabilidad, necesitamos empresarios que sean triunfadores, porque eso va a ayudar a aumentar la capacidad de gerenciamiento y de inversión de la Argentina, como hacen otros países, y vamos a poder consolidar esa burguesía nacional, tanto industrial, agropecuaria y demás que necesita este país para poder consolidarse definitivamente.
Yo apuesto a que les vaya muy bien a los empresarios argentinos, que tengan muy buenos niveles de rentabilidad. (Aplausos). Tenemos que aprender a dejar las envidias cortas de lado si a alguien le va bien.
Todo esto tiene que ir acompañado por un fuerte proceso de inversión en la educación y en la investigación, es una tarea central. En la educación hemos avanzado muchísimo, tenemos la nueva Ley de Educación y tenemos la inversión garantizada con seis puntos del PBI, y hemos avanzado en el campo de la educación técnica.
En el tema de la investigación, en los distintos ámbitos, CONICET y demás, estamos recuperando nuestros becarios, estamos recuperando las posibilidad de que los pibes jóvenes puedan transformarse en investigadores más jóvenes tenían 50 años, hoy tenemos chicos de 26, 27 años, que se quedan en la Argentina, que los estamos capacitando, estamos cada día mejorando sus ingresos para estimularlos con fuerza, porque la Argentina necesitas una tecnología de punta para consolidarse.
Lo que pasó con el reactor en Australia que fue construido con manos argentinas, por intelecto argentino y por empresas argentinas, como el IMBAP, en este caso se tiene que dar en todas las áreas, como se está dando, de generar una tecnología de punta que nos permita una inserción competitiva.
Nosotros estamos apuntando y tenemos que consolidar, ahora, en la etapa que viene, cuatro o cinco temas que son fundamentales. Pero hay uno que para mí es central, nosotros apoyamos fuertemente el MERCOSUR, pero nosotros sabemos que la Argentina y Brasil, por las propias asimetrías de la economía de la región, generan la estructura fundamental del desarrollo y las posibilidades del MERCOSUR. A su vez, incorporado México, que es muy importante para el desarrollo de los mercados, tanto de Argentina como de Brasil, del MERCOSUR y de la región de América, es fundamental generar no solamente un cambio sostenido y alto como el que hemos tenido hasta ahora, sino que tenemos que tener políticas de incentivo a las exportaciones que nos den nivel competitivo en el marco internacional.
Entonces, si nosotros somos capaces de mantener el superávit fiscal primario, si nosotros avanzamos en el financiamiento de nuestras obras, los futuros presupuestos de la Argentina tendrán que tener dos cuestiones fundamentales: una, dinero destinado a la investigación, y otra que todos los argentinos tienen que entender, que tenemos que tener también superávit que nos permita tener el dinero necesario para generar el sistema que pueda incentivar todas las exportaciones, nuestras exportaciones de carácter industrial, que son de fundamentales, con valor agregado para poder salir a competir al mundo cada día con mayores posibilidades cada día. La Argentina si administra bien su presupuesto, está en condiciones de hacerlo, eso nos va a dar crecimiento industrial muy fuerte y, fundamentalmente, va a consolidar las Pymes.
Otro tema que es de larga discusión, que solemos trabajarlo fuertemente con Cristina, que es central y esencial, que es cómo definitivamente la Argentina deja algunos complejos de lado por lo que nos pasó - y esto lo charlamos con la ministro de Economía el otro día - es fundamental entrar a pesar en el período 2007-2011 que se nos viene, es la creación –en un nombre que va a causar discusiones, no importa el nombre, sino lo que importa es la filosofía de lo que se quiere lograr con este instrumento, yo creo que aparte de una buena ley de Pymes también hace falta una Banca Nacional de Desarrollo que definitivamente consolide las posibilidades de los industriales y los productores argentinos. (Aplausos)
Tenemos varios proyectos en mano, uno de ellos es la transformación del BICE en este instrumento, pero lo que no tenemos que hacer es repetir los vicios y los errores del pasado. Esa banca, cuando nació, fue una banca muy positiva, después lamentablemente las distintas crisis argentinas, las distintas cosas que nos pasaron, que no vale la pena recordarlas ahora..., como si el problema hubiera sido el nombre, lo importante era no perder la filosofía para la cual había sido creada y nosotros la dejamos de lado.
Después están estas múltiples inversiones que hay cada tanto en Santa Fe y Rosario, que son más de mil millones de pesos, lo sabe el Gobernador, lo sabe el Intendente. Hay una obra que yo ansío mucho inaugurar, La Picasa, en la Ruta 7, cerca de Rufino, que está terminada y también el Puente de Reconquista, cuando esté terminado el proyecto para poder ir a anunciarlo al pueblo de Reconquista, que también va a tener un movimiento y un gran desarrollo y nuevos problemas. El crecimiento trae nuevos problemas, no tenemos que dramatizarlo, desdramaticemos, afrontemos las responsabilidades, afrontemos con fuerza cómo vamos rindiendo todos los exámenes que se tienen.
Yo siempre digo, cuando uno va a la Universidad cada año va rindiendo materias distintas, es natural que cuando se le va dando mayor complejidad en los problemas, cada vez las materias sean más difíciles y más complicadas. Está en nosotros, los que aspiramos y buscamos la voluntad pública de tener la capacidad de responder a esos exámenes que tenemos por delante. Cada vez que uno se pone nuevos desafíos, éstos son más difíciles.
La Argentina vive una etapa donde va a tener que rendir exámenes más serios, más profundos, más importantes, es la etapa de la Argentina estratégica, que es la que soñamos todos y la que tenemos que llevar adelante.
Así que desdramatizando, con fuerza, con decisión, administrando en serio el país, sabiendo que se avanza todos los días un poco, sabiendo que nadie cambia en un día una situación, sabiendo que es muy importante conservar y fundamentar las ilusiones con realidades y cumplimentar los sueños.
Amigos y amigas, empresarios, industriales de Santa Fe y de Rosario, les agradezco profundamente la posibilidad de poder comunicarme con ustedes aquí en la Bolsa de Comercio, de volver a compartir un día de trabajo con ustedes, y si me extendí un poco discúlpenme, pero es muy importante que ustedes puedan tener de nuestros propios enunciados cuál es la filosofía que llevamos adelante, con plena pluralidad en le marco del consenso, pero realizando, haciendo, transformado.
Yo creo que la Argentina ha tenido muchas veces clases de dirigentes intelectualmente muy capaces, pero muchas veces también nos quedamos en el debate improductivo. Nosotros tenemos que tener formación, debate productivo y capacidad de realización, si los argentinos logramos eso, yo siempre digo, se discutirá quién tiene la alternancias, pero nadie estará preocupado en el rumbo fundamental que tiene que llevar la Argentina adelante.
Muchísimas gracias a todos, y reiterarle al pueblo de Rosario nuestro agradecimiento por el cariño, el trato recibido y este día tan importante que hemos compartido, que es el Día de nuestra Bandera, que es la síntesis de todas nuestras aspiraciones. Muchas gracias.
Desafíos grandes fueron los que nos tocaron emprender a partir del 25 de mayo de 2003 y la verdad que si nos ponemos a pensar aquella Argentina que teníamos en el año 2002 cuando me tocó visitar Rosario, cuando estaba en campaña electoral y todos ustedes recuerdan qué Rosario teníamos, qué Argentina teníamos, parecía un sueño inalcanzable pensar en el 2002 el 2007 que tenemos hoy.
Porque los argentinos después de la explosión que tuvimos creo que hemos realizado un acto y acciones que nos determinan un proceso de maduración permanente. Creo que siempre nos acostumbramos a que nos vaya un tiempo bien y un tiempo mal, como si fuera imposible construir entre todos nosotros una Argentina que crezca permanentemente, una Argentina que se desarrolle en todos sus aspectos institucionales, políticos, sociales y culturales permanentemente.
Yo lo digo y suena a metáfora a veces: espero poder decirle al pueblo argentino el 10 de diciembre de 2007 que estamos saliendo del infierno o que hemos salido del infierno. No tengo ninguna duda que en el período 2007-2011 la Argentina va a poder discutir, debatir y construir definitivamente una Argentina donde el común denominador sea encontrar los marcos estratégicos del perfil de país que queremos construir.
Hay países en el mundo, siempre nombro España como un ejemplo claro y concreto, que vivieron procesos parecidos al argentino, que lograron pasar la transición, que lograron salir del infierno y que lograron construir procesos económicos, sociales e institucionales exitosos, independientemente de quien tenga la iniciativa política en cada tiempo y período de la historia, porque lo fueron construyendo en bases absolutamente sólidas y entendiendo cuál era el perfil y el rumbo de país que se necesitaba.
Es verdad, la Argentina hoy puede decir que ha entrado a avanzar sobre problemas muy difíciles, como el de la desocupación, en el que estamos en un 8,3 después de haber estado casi en un 30, como el de la indigencia que bajamos del 28 al 8, y como el de la pobreza, que hemos bajado del 60 al 26,9 y sabemos que el problema de la pobreza que es tan claro que creíamos nosotros que nos íbamos a encontrar en el 30 por ciento del núcleo duro y gracias a Dios el crecimiento sigue avanzando sobre la pobreza, pero cuando lleguemos al núcleo duro de la pobreza habrá que aplicar políticas activas, claras y concretas que definitivamente nos permitan quebrar ese 16 histórico de pobreza que tiene la Argentina, porque la Argentina tiene las condiciones para hacerlo.
Hay datos que están marcando el mejoramiento de la distribución del ingreso en forma importante; la brecha entre ricos y pobres era de 39 puntos en el 2005, 36 en el 2006 y en datos para anunciar en los próximos días va a estar en el 30; es decir, hay un mejoramiento claro y concreto y somos el país en América Latina que mejor ha avanzado en este problema de la distribución del ingreso, independientemente que todavía sigue siendo un problema grave, (APLAUSOS) porque cuando hablamos de pobreza y decimos que tenemos el 26,9 a nosotros nos llena todavía de dolor el nivel de pobreza que tenemos, porque la Argentina no tendría que tener ese nivel de pobreza pero lamentablemente hay que ver de dónde partimos y dónde estamos.
Consideramos que es fundamental mantener dos pilares centrales en la construcción de la Argentina: el superávit primario, que es muy importante y que en las próximas horas yo creo que vamos a estar anunciando para el mes de mayo un superávit primario récord, importante, a pesar de las inversiones que estamos haciendo que son muchas y el superávit comercial. Cada vez que la Argentina descuidó el superávit comercial tuvimos problemas.
Nosotros consideramos que el superávit comercial, es decir la diferencia entre las importaciones y las exportaciones, va a ser muy importante este año también, pero en el marco de las importaciones creemos que hay que colocar acento – son muy importantes todas las importaciones de bienes de capital que podamos hacer - pero tenemos que tener cuidado con el otro tipo de importaciones que perjudican a la industria nacional y al desarrollo nacional y para eso necesitamos un trabajo mancomunado con la industria nacional y con los productores y empresarios nacionales para que los costos nos permitan generar políticas claras respecto a este tipo de importaciones que nos hacen disminuir el superávit comercial pero también nos genera problemas en la producción interna y en la elaboración industrial que el país tiene que llevar adelante. El superávit primario y el superávit comercial son centrales.
El crecimiento industrial ya se anunció hace pocas horas, llevamos un acumulado del 6,6, en lo que va del año, a pesar de los problemas que hemos tenido en cuanto a la lluvia y algunos paros de trabajadores que hubieron en industrias especificas importantes, que afectaron en cierta manera, aunque podía haber sido un poquito más alto. Pero 6,6 fue el crecimiento industrial que tuvimos que fue muy importante.
En las próximas horas, si Dios quiere, espero que la ministra de Economía pueda anunciar ya el crecimiento del mes de abril de la actividad económica argentina, que creo que va a volver, a pesar de los analistas, a rondar el 8 por ciento o va a ser el 8 por ciento, que fue lo del primer trimestre de este año. Es decir, que seguimos creciendo a ritmos intensos. Esto, ayudado al crecimiento de la recaudación, que en junio va a volver a ser importante y fue récord en el mes de mayo y también ayudado por una cosecha récord que vamos a tener en la Argentina gracias al esfuerzo mancomunado de todos nuestros productores, nuestros empresarios, los que tienen que ver con la actividad agrícola-industrial, agrícola en general, que va a estar rondando entre los 95 millones de toneladas y los 100 mil millones de toneladas.
Claro son noticias hermosas y muy buenas, pero que también nos van trayendo problemas y no hay que acostumbrarse a los problemas. Yo creo que los problemas cuando la Argentina decrecía o estaba paralizada eran realmente preocupantes. Estos también son preocupantes pero la Argentina está creciendo y la Argentina está haciendo inversiones, en el área energética, que son muy importantes y que estamos dando respuestas muy importantes, a pesar de la temporada, el frío y el crecimiento industrial.
Estamos por poner en marcha dos usinas muy importantes, en los próximos 16 meses. Si estamos haciendo inversiones fundamentales en transporte de gas en la Argentina, donde también las empresas de transporte de gas se tienen que poner a tono. La empresa TGS y TGN tienen que estar a la altura de las circunstancias porque en estos días ellos tenían gas suficiente y si tuvimos algún problema fue por culpa del transporte. Entonces, evidentemente el Estado va a actuar y va a ejercer el poder de policía como corresponde porque ellos obtienen rentabilidades interesantes en la Argentina y tienen que prestarnos un servicio como el que corresponde.
También vamos a seguir invirtiendo fuertemente y tenemos todas nuestras miras en la ampliación 2006-2008, del Gasoducto del Norte y del Sur y la licitación de la obra del Gasoducto del Noreste, que esperamos terminar de acordar con Bolivia, que va a ser 27 millones de metros cúbicos más. Esto es central y esto es fundamental para generar y consolidar el crecimiento argentino, pero obviamente también la fuerte actividad, el fuerte crecimiento que tenemos – como charlábamos con el señor Presidente de la Bolsa – nos va generando cuellos de botellas muy importantes.
En el 2002 teníamos capacidad ociosa; nosotros nos encontramos que Rosario, por dar un ejemplo, pero pasa en todo el país, tiene una verdadera saturación de sus rutas, puertos. Lo que sobraba en el 2002, nos falta en el 2007.
Hemos emprendido con el Gobernador y el Intendente la obra de la Circunvalar. Ahora ya está resuelto el crédito de los 300 millones de dólares, que son muy importantes para la construcción de una obra que se tendría que haber hecho, pero en esta Argentina enunciamos las obras y nunca estaban los proyectos listos.
Cuando fuimos a buscar el proyecto, en el año 2004, con el Intendente y el Gobernador, no estaba por ningún lado. Así que hubo que hacer todo el proyecto, toda la tarea que hay que llevar adelante en estos temas y creo que la obra ya está pronto a comenzar con todas sus fuerzas, más la ruta 9 que se viene construyendo con todas las fuerzas.
El problema se va a seguir agravando en cuanto a la saturación de rutas y de puerto porque en el día de ayer, ya solamente falta un dictamen, pero ya se hizo el acta entre la empresa de la hidrovìa y la UNIREN para enviar al Congreso de la Nación la aprobación del nuevo contrato de la hidrovìa, que va a permitir ir a una profundidad de 37 pies, lo que va a llevar a que toda la actividad nacional e internacional de la región se vuelque hacia los puertos de Rosario, hacia toda la provincia de Rosario y parte de la provincia de Buenos Aires. Entonces la actividad – señores ustedes que son conocedores del tema - saben que se va a multiplicar y vamos a estar ante problemas realmente graves. Esperemos que el Congreso de la Nación lo apruebe rápidamente (APLAUSOS), pero por un lado vamos a estar felices por la actividad, por la inversión y por el trabajo y por otro lado nos vamos a dar cuenta cuántas cosas nos faltan.
Bueno, acostumbrémonos a tratar de llegar a alcanzar al crecimiento que tiene la Argentina, pero como yo digo estos son problemas que valen la pena porque la Argentina está creciendo en más empleo, en más inversión, es más creación de capital argentino, es más creación de empresarios nacionales, es más ilusión, es más sueño para crear el país que todos deseamos. Y todos sabemos que cuando Rosario crece, crece el país porque Rosario también cuando decrece donde primero se nota es acá, en Rosario, y ustedes también lo saben muy bien.
Estamos también, y ya con la preadjudicación, y faltan cuestiones financieras a resolver, con otro sueño que para algunos es un proyecto faraónico, para otros obviamente que creyeron que los trenes en la Argentina no eran necesarios y vieron la situación en que nos dejaron y lo que nos cuesta ahora levantar el sistema ferroviario, hasta el urbano que prácticamente ha sido muy golpeado el sistema que intercomunica a todas nuestras provincias con las provincias que tenían trenes, por la falta de inversión y por la decisión de hacer desaparecer el servicio.
Nosotros creemos que hay que empezar con dos trenes fundamentales, que son independientemente de los urbanos: la conexión Capital- Buenos Aires- Rosario- Córdoba y Buenos Aires- Mar del Plata, que son centrales y ya tenemos preadjudicado, es una obra que sale en 1.360 millones de dólares el tren. Hoy se ha hecho la preadjudicación, hace algunas horas del que va desde Capital Federal a Buenos Aires, a Rosario, a Córdoba. Vamos a estar desde la Capital a Rosario en 85 minutos, es decir que esto también va a acelerar el dinamismo de Rosario de forma espectacular y de la Argentina toda porque nos va a permitir intercomunicarnos con una rapidez y con un transporte que evidentemente la Argentina merece y no tiene.
Puede ser que para algunos la obra sea muy cara, pero si la Argentina no hace las obras de infraestructura que tiene que hacer, si la Argentina no hace las rutas que tiene que hacer, si la Argentina no hace los hospitales que tiene que hacer, si la Argentina no hace necesariamente las autovías que tiene que hacer evidentemente la Argentina se va a chocar a sí misma.
Tenemos que hacer todas las obras de infraestructura que necesitamos para poder construir un país moderno, un país inclusivo, un país que se desarrolle fuertemente. Para poder seguir creciendo, no dos, tres, cuatro o cinco años, como es ahora, que es prácticamente histórico y hacerlo de forma sucesiva, sino para tener un horizonte que nos permita un crecimiento, como hoy tiene España de 14, 15 años en forma consecutiva, que es central, que es esencial, que esto nos va a permitir proyectar inversiones con otro tipo de seguridad.
También estamos combinando el crecimiento de las exportaciones con el consumo interno, y siempre acá se dijo que las exportaciones y el consumo interno eran contradictorios. Nosotros siempre dijimos que no, que pueden mejorar nuestra inserción en los mercados del mundo y se puede mejorar la posibilidad de consumo de los argentinos, se puede reconstruir la movilidad ascendente de nuestra clase media, se puede reconstruir la clase trabajadora y se puede reconstruir el empresariado nacional que tanto necesitamos.
Lo digo acá, los argentinos tenemos que asumir que necesitamos un empresariado al que le vaya bien, un empresariado que tenga éxito, un empresariado que tenga rentabilidad, necesitamos empresarios que sean triunfadores, porque eso va a ayudar a aumentar la capacidad de gerenciamiento y de inversión de la Argentina, como hacen otros países, y vamos a poder consolidar esa burguesía nacional, tanto industrial, agropecuaria y demás que necesita este país para poder consolidarse definitivamente.
Yo apuesto a que les vaya muy bien a los empresarios argentinos, que tengan muy buenos niveles de rentabilidad. (Aplausos). Tenemos que aprender a dejar las envidias cortas de lado si a alguien le va bien.
Todo esto tiene que ir acompañado por un fuerte proceso de inversión en la educación y en la investigación, es una tarea central. En la educación hemos avanzado muchísimo, tenemos la nueva Ley de Educación y tenemos la inversión garantizada con seis puntos del PBI, y hemos avanzado en el campo de la educación técnica.
En el tema de la investigación, en los distintos ámbitos, CONICET y demás, estamos recuperando nuestros becarios, estamos recuperando las posibilidad de que los pibes jóvenes puedan transformarse en investigadores más jóvenes tenían 50 años, hoy tenemos chicos de 26, 27 años, que se quedan en la Argentina, que los estamos capacitando, estamos cada día mejorando sus ingresos para estimularlos con fuerza, porque la Argentina necesitas una tecnología de punta para consolidarse.
Lo que pasó con el reactor en Australia que fue construido con manos argentinas, por intelecto argentino y por empresas argentinas, como el IMBAP, en este caso se tiene que dar en todas las áreas, como se está dando, de generar una tecnología de punta que nos permita una inserción competitiva.
Nosotros estamos apuntando y tenemos que consolidar, ahora, en la etapa que viene, cuatro o cinco temas que son fundamentales. Pero hay uno que para mí es central, nosotros apoyamos fuertemente el MERCOSUR, pero nosotros sabemos que la Argentina y Brasil, por las propias asimetrías de la economía de la región, generan la estructura fundamental del desarrollo y las posibilidades del MERCOSUR. A su vez, incorporado México, que es muy importante para el desarrollo de los mercados, tanto de Argentina como de Brasil, del MERCOSUR y de la región de América, es fundamental generar no solamente un cambio sostenido y alto como el que hemos tenido hasta ahora, sino que tenemos que tener políticas de incentivo a las exportaciones que nos den nivel competitivo en el marco internacional.
Entonces, si nosotros somos capaces de mantener el superávit fiscal primario, si nosotros avanzamos en el financiamiento de nuestras obras, los futuros presupuestos de la Argentina tendrán que tener dos cuestiones fundamentales: una, dinero destinado a la investigación, y otra que todos los argentinos tienen que entender, que tenemos que tener también superávit que nos permita tener el dinero necesario para generar el sistema que pueda incentivar todas las exportaciones, nuestras exportaciones de carácter industrial, que son de fundamentales, con valor agregado para poder salir a competir al mundo cada día con mayores posibilidades cada día. La Argentina si administra bien su presupuesto, está en condiciones de hacerlo, eso nos va a dar crecimiento industrial muy fuerte y, fundamentalmente, va a consolidar las Pymes.
Otro tema que es de larga discusión, que solemos trabajarlo fuertemente con Cristina, que es central y esencial, que es cómo definitivamente la Argentina deja algunos complejos de lado por lo que nos pasó - y esto lo charlamos con la ministro de Economía el otro día - es fundamental entrar a pesar en el período 2007-2011 que se nos viene, es la creación –en un nombre que va a causar discusiones, no importa el nombre, sino lo que importa es la filosofía de lo que se quiere lograr con este instrumento, yo creo que aparte de una buena ley de Pymes también hace falta una Banca Nacional de Desarrollo que definitivamente consolide las posibilidades de los industriales y los productores argentinos. (Aplausos)
Tenemos varios proyectos en mano, uno de ellos es la transformación del BICE en este instrumento, pero lo que no tenemos que hacer es repetir los vicios y los errores del pasado. Esa banca, cuando nació, fue una banca muy positiva, después lamentablemente las distintas crisis argentinas, las distintas cosas que nos pasaron, que no vale la pena recordarlas ahora..., como si el problema hubiera sido el nombre, lo importante era no perder la filosofía para la cual había sido creada y nosotros la dejamos de lado.
Después están estas múltiples inversiones que hay cada tanto en Santa Fe y Rosario, que son más de mil millones de pesos, lo sabe el Gobernador, lo sabe el Intendente. Hay una obra que yo ansío mucho inaugurar, La Picasa, en la Ruta 7, cerca de Rufino, que está terminada y también el Puente de Reconquista, cuando esté terminado el proyecto para poder ir a anunciarlo al pueblo de Reconquista, que también va a tener un movimiento y un gran desarrollo y nuevos problemas. El crecimiento trae nuevos problemas, no tenemos que dramatizarlo, desdramaticemos, afrontemos las responsabilidades, afrontemos con fuerza cómo vamos rindiendo todos los exámenes que se tienen.
Yo siempre digo, cuando uno va a la Universidad cada año va rindiendo materias distintas, es natural que cuando se le va dando mayor complejidad en los problemas, cada vez las materias sean más difíciles y más complicadas. Está en nosotros, los que aspiramos y buscamos la voluntad pública de tener la capacidad de responder a esos exámenes que tenemos por delante. Cada vez que uno se pone nuevos desafíos, éstos son más difíciles.
La Argentina vive una etapa donde va a tener que rendir exámenes más serios, más profundos, más importantes, es la etapa de la Argentina estratégica, que es la que soñamos todos y la que tenemos que llevar adelante.
Así que desdramatizando, con fuerza, con decisión, administrando en serio el país, sabiendo que se avanza todos los días un poco, sabiendo que nadie cambia en un día una situación, sabiendo que es muy importante conservar y fundamentar las ilusiones con realidades y cumplimentar los sueños.
Amigos y amigas, empresarios, industriales de Santa Fe y de Rosario, les agradezco profundamente la posibilidad de poder comunicarme con ustedes aquí en la Bolsa de Comercio, de volver a compartir un día de trabajo con ustedes, y si me extendí un poco discúlpenme, pero es muy importante que ustedes puedan tener de nuestros propios enunciados cuál es la filosofía que llevamos adelante, con plena pluralidad en le marco del consenso, pero realizando, haciendo, transformado.
Yo creo que la Argentina ha tenido muchas veces clases de dirigentes intelectualmente muy capaces, pero muchas veces también nos quedamos en el debate improductivo. Nosotros tenemos que tener formación, debate productivo y capacidad de realización, si los argentinos logramos eso, yo siempre digo, se discutirá quién tiene la alternancias, pero nadie estará preocupado en el rumbo fundamental que tiene que llevar la Argentina adelante.
Muchísimas gracias a todos, y reiterarle al pueblo de Rosario nuestro agradecimiento por el cariño, el trato recibido y este día tan importante que hemos compartido, que es el Día de nuestra Bandera, que es la síntesis de todas nuestras aspiraciones. Muchas gracias.