Si ustedes me permiten me gustaría que le demos un fuerte aplauso a Daniel Filmus. (APLAUSOS). Gracias Daniel, gracias por defender las ideas, el trabajo, el esfuerzo, el sacrificio, gracias por vertebrar con fuerza las convicciones.
Yo le escuchaba recién al señor Intendente de Pilar y realmente me daba gusto escucharlo porque hemos charlado muchísimas veces acerca de cuáles eran las necesidades que Pilar tenía y como las vamos cumplimentando.
Pero quería empezar saludando a Daniel y también saludando a todos los porteños, que viven aquí, en Capital Federal, que participaron en la elección de ayer porque a uno que ama la democracia, nosotros que hemos sufrido el imperio del terror, las dictaduras, esas complicidades durísimas que llevaba a que muchos de nosotros sufran mucho y muchos no estén, amamos actos como el de ayer, donde la gente se pueda expresar con se expresó. Y Daniel, en nombre tuyo, quería felicitar a los porteños por la brillante demostración que hicieron ayer y que pudimos percibir todos, que fue un verdadero día de consolidación democrática, esto es central. (APLAUSOS).
La obra, que une Moreno con Pilar, es fundamental, es central. Querido Intendente de Moreno, señor Andrés Arregui; Zúccaro, palabra cumplida, esto es fundamental. Hemos cumplido la palabra, de ahora en adelante a seguir profundizando el cambio en la Argentina.
Hace un rato estuvo con el Doctor Stiglitz, es un verdadero placer conversar con alguien que entiende tanto el proceso argentino, que nos felicitaba a los argentinos por los avances que hemos logrados, impensados, decía él. Y escuchando atentamente cómo, a su juicio, debía ser la próxima etapa de la Argentina y la verdad es que uno escucha con mucha vocación porque hay mucha capacidad de elaboración, mucha capacidad de construir nuevas ideas, que nos aleje de los viejos modelos y nos permita construir con autonomía en la globalización. Fue una charla realmente muy buena, fue una charla bárbara.
También creo que si algo me gustó y me gusta de la gran tarea que estamos en la Argentina es que todos los que estamos construyendo este espacio, esta nueva síntesis en la Argentina tenemos en claro y compartimos algo, que en su momento yo expresé cuando me tocó asumir como Presidente, que algunos dicen que los canso cuando lo repito, pero es tan importante y Daniel ayer lo demostró que es ser fieles a las convicciones.
Creo que en la vida para poder gobernar, transformar y poder cambiar no hay que disfrazarse. Uno es lo que es, como es, con sus fallas y contradicciones. Y nosotros lo hicimos: fuimos y defendimos nuestras convicciones, con el margen de error que puede tener cualquiera, con el margen de la verdad relativa, con la capacidad de entender y comprender que nosotros queremos un país integrado, queremos un país que esté comprendiendo globalmente. Los argentinos tenemos, con distintas particularidades, las mismas necesidades. Pasamos crisis muy duras, hubo algunos pocos en el 90’ que les fue bien, pero a las mayorías nos fue muy mal y yo quiero que los argentinos siempre le recuerden. Nos fue muy mal, que recuerden el quedarse sin empleo, que recuerden las políticas de concentración económica, que recuerden las políticas prebendarías de los 90’, que recuerden las políticas de exclusión, que recuerden ese modelo que nos llevó al 60 por ciento de pobreza, al 30 por ciento de indigencia, 30 por ciento de desocupación. Ese modelo que destruyó la industria nacional, que no desaparecen, siempre lo digo, siguen trabajando. Hoy se tratan de disfrazar de otra forma y cuando se están discutiendo dos modelos en el país nos quieren venir a hablar de las plazas. Sabemos que todo buen intendente tiene que cuidar las plazas, pavimentar las cuadras, generar los servicios, esto es central.
Pero fundamentalmente lo que está en discusión en la Argentina y todos los argentinos lo tengan en claro son dos modelos de país: el modelo del trabajo, del esfuerzo, el modelo de la inclusión social, el modelo de la solidaridad, el modelo de la recuperación de la clase trabajadora, aquella que nadie de aquellos que hoy dicen ocuparse se ocupaban en ese momento, la recuperación de nuestra clase media con movilidad social ascendente, la recuperación del empresariado nacional, el cuidado de nuestros jubilados.
Yo Daniel escucho al señor que va a competir contigo – lo digo con todo respeto porque ahora dicen que van a hacer campaña sucia porque si uno no tiene nada que ocultar qué miedo se tiene, qué campaña sucia se va a hacer – pero el señor que compite con Daniel representa los intereses del modelo neoliberal, es la verdad. Hoy lo pueden llamar Mauricio, pero siempre es Macri. Acuérdense: Mauricio es Macri. (APLAUSOS).Acuérdense bien de esto. Y entonces habla de los jubilados y nosotros mandamos la Ley Opción Previsional – señor Macri – al Congreso y usted la votó en contra. Por ahí nuestros jubilados, a veces, no están informados. Sepan – queridos jubilados – nosotros hemos luchado, junto a ustedes, que Macri votó en contra la Ley de Reforma Previsional. Obviamente porque está ligado a otros intereses y no es malo que lo haya hecho, lo importante es que cada uno represente los intereses que dice representar. Esa es la vida, ser claro. Yo represento con orgullo los intereses que represento, que son los intereses de la clase trabajadora, de la clase media, de la construcción de un proyecto nacional en la Argentina.
Bueno, que los otros representen con orgullo el modelo neoliberal. Es decir, esto es central y fundamental, porque es muy importante tener estas cosas y estas pautas absolutamente claras. Hablan de que la defensa de la escuela pública. Yo nunca los vi defender la escuela pública. Daniel Filmus trabajó en la Ley de Educación, única en el país, con todos los sectores de la Argentina y se puso en marcha una ley transformadora; Daniel Filmus fue el que llevó el proyecto de 6 puntos del Producto Bruto Interno, hacia el año 2010, para financiar la educación; Daniel Filmus fue el que trabajó, junto a nosotros, en la construcción de la Educación Técnica, tan importante para transformar y dar tantas posibilidades a todos.
Esto no es hacer campaña sucia, señores. Yo vi hoy que decían: “nos van a hacer una campaña sucia”. Siempre que nosotros hablamos o decimos algo comentan, nosotros decimos nuestras verdades, fundadas, con absoluto respeto porque respetamos a todo el mundo. Nuestra intención no es agredir a nadie. Lo que decimos es que cada uno asuma el proyecto que le corresponde, que cada uno asuma con responsabilidad el camino que tiene que seguir. Por eso es fundamental hablar de todos estos temas con absoluta claridad.
La Ley de Reforma Previsional no fue votada, la Ley de Educación tampoco fue votada, cuando nosotros dijimos, cuando hablan de los servicios en la Capital Federal y terminamos decididamente con las políticas de la empresa privada de Aguas, que había en la Argentina, para construir una empresa que garantice los intereses de los porteños y de los bonaerenses, también votó en contra Mauricio, que es Macri. También votó en contra. Cuando tuvimos que generar el marco transformador y asumir con responsabilidad y dijimos terminemos con el Fondo Monetario Internacional, porteños, también nos criticó porque dijeron que estábamos gastando las reservas; cuando renunciamos a la deuda privada también nos criticó porque estábamos renegociando la deuda privada y ahorrando 70 mil millones para la Argentina, pero decía que no estábamos honrando nuestro compromiso con el mundo. Le importaba más lo que decían afuera que adentro; cuando recibí críticas de todos lados – Daniel – con el tema de las tarifas, porteños, Mauricio, que es Macri qué decía. Hablaba de que hay que subir las tarifas porque tenemos que cumplir con los contratos, con los convenios de las empresas. Claro teníamos a todos nuestros hermanos en una situación límite y nosotros pusimos todos nuestro esfuerzo y dijimos: primero los argentinos, primero los porteños, después esta situación de querer determinar las tarifas sobre las necesidades globales que tenían los argentinos. ¿Qué política de tarifas van a tener ahora?
Si fueran Gobierno, yo me pregunto qué política de tarifa van a tener en el transporte urbano, si fueran Gobierno. Porque no les hablan de estas cosas a los porteños, porque no les hablan de la subvención desde el Gobierno Nacional, que subvencionamos muchas veces y la mayoría de las veces desde el Gobierno Nacional. Entonces creo que es muy importante lo que se ha dado porque está dada la oportunidad – porteños y argentinos, pero porteños en este caso específico - de discutir dos modelos, totalmente diferentes: el modelo de inclusión social, de consolidación, de autonomía en la globalización, de combate a la indigencia, a la desocupación, de la creación de los empresarios nacionales, de la consolidación de la clase trabajadora, de la consolidación de la clase media con movilidad ascendente, de un país que de oportunidades a todos los argentinos, de la construcción con fuerzas de un sistema educacional que nos contenga, de la recuperación de capacidad de la investigación, la consolidación de un Estado promocional fuerte.
Más fácil sería decir otras cosas, pero yo quiero hablar honestamente, argentinos, los que me están mirando en su casa o mis hermanos y hermanas de Villa Lugano creen, que si el otro proyecto fuera Gobierno en la Ciudad los van a ir a buscar, se van a acordar del sur. Cuando haya viento se van a acordar del sur, vientos del sur. Pero después no se van a acordar del sur, porque se acuerdan en el discurso, se acuerdan de ir a pasear por el sur, pero lo importante es llegar con políticas al sur.
Mis hermanos y hermanas de Villa Lugano saben perfectamente las políticas de inclusión, los trabajos que han conseguido, el esfuerzo, cómo hemos ido levantando a la Argentina. Conversábamos recién con Daniel Scioli, lo conversábamos con muchos amigos, es decir qué es lo que se está discutiendo en la Argentina. Y esto es lo que hay que discutir con absoluta claridad en el marco que hoy nos toca, en esta coyuntura, en la Capital Federal, en el marco de la decisión de los porteños.
Algunos decían: “no, no hay que ir a segunda vuelta”. ¿Por qué no? Para qué están las normas democráticas. Sé que muchas veces no las respetaron, pero las normas democráticas y constitucionales existen. Entonces en la Argentina democrática de hoy se tienen que respetar, se tienen que llevar adelante porque si no es burlar la voluntad de los porteños. Sé que en otros tiempos por ahí a alguna gente perteneciente a ese espacio le importaba bastante poco la Constitución. Tampoco le importaba que Mauricio, que es Macri, votara contra la derogación de las Leyes de Obediencia Debida y Punto Final, qué le van a importar los derechos humanos. No importa, todos lo sabemos. Todos aquellos argentinos a los que les tocó vivir situaciones totalmente difíciles, votaron en contra. Hay que ir a ver durante el poco tiempo que ha ido a trabajar a la Cámara de Diputados.
Esto no es campaña sucia, mis queridos amigos, no es agresión, no es descalificación, es poner los dos modelos que la Argentina tiene en disputa y cada argentino puede optar por el camino que quiera porque eso es lo bueno de la democracia. Pero yo los llamo a tener muy buena memoria.
Algunos analistas podrían decir que el Presidente tendría que correrse un poco, no hablar de esto. No, no, yo no vine a quedarme acá ni vine a especular si saco un voto más o un voto menos, sino que vine a luchar con fuerza por las convicciones que tengo por todos los argentinos, por todos los que estaban excluidos, por ese país que estaba destruido y que lo estamos levantando. Yo quiero estar comprometido con la buena historia de esta patria y con la construcción de una Argentina donde la bandera nos abrace a todos.
Evidentemente, es muy fácil, como podríamos hacer en el 99 por ciento de los lugares del país donde nos va bien y tenemos encuestas muy buenas, pero acá, también la Capital y los porteños son hermanos y son argentinos y es mi obligación como Presidente decirles a los porteños qué es lo que uno piensa porque esto es fundamental. Porque después que pasen los espejismos, vienen los dolores de cabeza. (APLAUSOS) Es fundamental que tengamos memoria, mucha memoria.
Pobres abuelos, pero él voto contra la Ley de Opción Previsional, voto contra toda la Ley de la estabilización del sistema previsional, pero pobres abuelos. El doble discurso, la doble moral.
Por los derechos de todos los argentinos, la seguridad y demás, pero para garantizar la seguridad que estamos de acuerdo y que hay que trabajar muchísimo por la seguridad, yo no sé cuál es el plan de seguridad que tienen más que decir o enunciar los problemas de seguridad que obviamente hay y que hay que resolver en la Argentina y que hay que resolver en la Justicia y que todos estamos trabajando con mucho esfuerzo.
Ahora, si yo estoy queriendo garantizar indultos y ley de obediencia debida y seguridad, estoy premiando a los delincuentes, no entiendo. Salvo que esos delincuentes a él le hayan gustado porque atacaron a luchadores sociales que querían construir un país diferente. Si no, tengamos cuidado, porque la ley debe ser para todos, para aquellos que fueron contra aquellos que fueron capaces de levantar sus idas contra las dictaduras, como aquellos que violan permanentemente derechos durante el andar de la democracia. Es decir, la ley es la ley, la Justicia es la Justicia y la memoria es la memoria y son cosas que tienen que mejorar y que tienen que funcionar. La ley también es fundamental en el marco de las empresas de servicios, es decir, en el marco de tarifas. También siempre recuerdo al Correo Argentino que la memoria no olvida.
Mi viejo fue tesorero del Correo Argentino, falleció el pobre ya, vio como prácticamente lo destruyeron, el querido Correo Argentino. Claro, seguro que Mauricio no sabe lo que pasó en el Correo Argentino, pero Mauricio es Macri. (APLAUSOS)
Es el tema central y los trabajadores del Correo Argentino lo saben y logramos levantarlo y llevarlo con hidalguía y con responsabilidad faltándole muchísimas cosas, pero recuperamos el Correo Argentino también.
Entonces, coloquemos las cosas en su lugar y dejemos todas las hipocresías de lado, porque las elecciones se ganan y se pierden, lo que no se gana y se pierde son las ideas.
Si algunos se disfrazan para tratar de ganar esta elección, allá ellos y mucho cuidado, mis queridos porteños y ciudadanía en general, estén atentos. Yo no me voy a disfrazar ni Daniel tampoco, no nos vamos a disfrazar para ganar esta elección. Ustedes saben que vamos con las convicciones que tenemos, somos cristalinos con nuestros aciertos y errores, somos como nos ven, pero vamos a defender un proyecto de nación, un proyecto de país al cual estamos profundamente abrazados y profundamente decididos a llevarlo adelante. Esto es lo importante, lo otro es circunstancial.
Por eso, Daniel, hoy está en la segunda vuelta, porque se abrazó a las convicciones y a las ideas que durante horas y días defendimos desde que estamos gobernando, desde que estamos ejerciendo la primera magistratura en este país y estamos contentos y felices por el resultado logrado. Nosotros respetamos a todo el mundo, no tengan ninguna duda que respetamos a todo el mundo, pero nuestra obligación es predicar en la construcción de un proyecto que queremos llevar adelante en todo el país y, por supuesto, nos encantaría que los porteños también nos acompañen y tienen motivos para acompañarnos. Yo sé que tienen motivos porque basta ver no más lo que sucedió en la Argentina hace cuatro años atrás y lo que sucede ahora.
Así que, vamos a este ballottage –digo vamos, Daniel- primero, porque somos demócratas plenos y así lo indica la Constitución; segundo, vamos con la convicción de que vamos a poner todo nuestro esfuerzo para que los porteños nos premien; vamos con la fuerza de las ideas y con la amplitud plural y democrática de discutir todo a fondo; no tenemos asesores mediáticos que nos van a decir “conviene decir esto, conviene decir aquello”, nosotros vamos a decir la verdad, porque si para ganar un voto tenemos que disfrazarnos y mentir, ¡Dios, cuál será el desastre!. Ya pasó en la Argentina, ya tuvimos un Fernando, por favor no lo vayamos a repetir, “estoy a 10 cuadras, que estoy a 7, que estoy a 4, a 10 pasos, 4, 3, 2, 1” ¡chau!, perdimos todo después. (APLAUSOS) Así que, no repitamos esa historia.
Realmente, queridos intendentes, queridos amigos, muchas gracias por compartir este momento; vuelvo a felicitar a todos los ciudadanos porteños, la verdad es que fue una verdadera fiesta democrática, me encantó y ahora viene el segundo paso fundamental que es la segunda vuelta donde se va a debatir con toda claridad los dos modelos de país; hay que hacerlo, hay que defenderlo con toda convicción y, evidentemente, los argentinos tendrán que ir optando, por la memoria, en qué país quieren vivir. Porque cuando no se tiene memoria, después los dolores de cabeza son grandes y yo creo que la memoria es fundamental.
Por eso, apelo a la memoria de los porteños, a todas las cosas que nos tocaron vivir, a las que fuimos construyendo, a todas las cosas que nosotros también tenemos que corregir indudablemente, tenemos que corregir muchísimas cosas, pero siempre acordémonos qué es lo que representamos cada uno de nosotros, qué intereses se representan y que con la gente hay que hablar con total sinceridad.
Yo, Daniel, con una gran admiración te digo: me gustó que apelaste a esa palabra que te ha dado tu profesión, tu historia y demás de decir permanentemente la verdad y eso tiene un valor incalculable y es el camino por el cual nosotros tenemos que ir.
Todos vamos a debatir con mucha fuerza, porque es la Capital de todos los argentinos, deciden nuestros hermanos porteños, pero estamos todos orgullosos de esta Capital la cual queremos que sea la mejor Capital de las capitales porque la amamos y también tenemos un gran cariño y respeto por todos los porteños.
Pero éstas son las cosas que se van a discutir. Pero además, tener clarito qué es lo que es cada uno ante cada tema, acuérdense cómo se fue resolviendo cada tema.
El que a mí me impactó tanto fue el tema de la Ley del sistema previsional. Ustedes saben que con la Ley de opción hemos garantizado la posibilidad de salvar el sistema previsional argentino pero, a parte, con la Ley de inclusión previsional, que obviamente tampoco apoyó este grupo político y ese señor, hay un millón de argentinos que en la década del 90 quedaron fuera de la estructura productiva por las políticas que también apoya este señor y sus amigos, un millón de argentinos –acuérdense lo que eran los ’90, ustedes se acuerdan todos y los que están en sus casas también- que quedaron sin posibilidad de jubilarse y nosotros con ese plan de inclusión jubilatoria le dimos la posibilidad de que vuelvan a tener la esperanza y la posibilidad de jubilarse. Eso es cuidar a nuestros hermanos, a nuestros abuelos, a nuestros padres, a nuestros tíos.
Por eso, hoy en cada acción de cada uno tiene que ir giradas con las acciones que hace y en ese caso, Daniel, yo sé que en la provincia de Buenos Aires Scioli también está trabajando fuertemente en este tema para profundizar las tareas que han llevado adelante Felipe, los intendentes y demás para seguir construyendo esa gran provincia de Buenos Aires que nos honra y a la que queremos tanto. Con mucha fuerza, con muchas ganas, porque también la provincia de Buenos Aires es el corazón batiente de la transformación argentina. La verdad es que es otro lugar que da para amarlo con mucha fuerza.
Mañana me voy a otra provincia que también la vi luchar. La primera vez que me tocó llegar a la provincia de San Juan estaba llena de papelitos, de bonos, ningún empleado público ni docente cobraba y tuvimos que ir allí.
Vamos a ir a inaugurar una obra que es el Centro Cívico de San Juan que tiene años y años de retraso y que la terminamos junto con el gobernador sanjuanino y el pueblo sanjuanino en su conjunto. Vamos a ir con toda alegría, porque son las asignaturas pendientes que se van rindiendo y son las cosas que quedan y que valen.
Por eso, con toda la fuerza y con toda la solidaridad, a seguir trabajando con mucha potencia por la Argentina, a seguir consolidando los temas, a seguir administrando correctamente, a seguir siendo solidarios, a seguir colocando la otra mejilla, a seguir amando las cosas con pasión, con fuerza, pero, fundamentalmente, ser muy fieles a nuestras convicciones.
Yo los puedo mirar a los ojos, me podrán decir que me he equivocado muchas veces y van a tener razón, pero yo los puedo mirar a los ojos y ustedes pueden mirarme a los míos y saben qué es lo que pienso. Ustedes saben que con mis aciertos y errores siempre pensé igual y que nunca traté de ir acomodándome al andar o a una circunstancia o a una coyuntura.
Creo que en la vida lo que vale es la conducta, aferrarse fuertemente a los principios y a las convicciones y ser como uno es, porque a la larga, cuando somos como somos, nos va muy bien, cuando los argentinos somos auténticos, pero cuando entramos en toda una concepción de disfrazarnos de lo que no somos, nos va muy mal.
Así que, los porteños tendrán la oportunidad el día 24 de votar acá por dos proyectos de país que son diferentes, pero a parte de estar votando por la conducción de la ciudad, seguramente los planes de fondo de la conducción de la ciudad en muchas cosas no se va a disentir, a parte, cuando uno nunca gestionó nada puede hablar de muchos temas que uno no se si los puede llegar a gestionar bien, mal y demás, que decir son planes, son proyectos y están bien. Seguramente la mayoría de los candidatos en muchos temas en cuanto a los planes instrumentales y estructurales, en cuanto a la construcción del tránsito, en cuanto al transporte, la seguridad y demás, uno se va a encontrar que hay muchos proyectos que son muy parecidos, lo que acá está en discusión son otras cuestiones de fondo, no las maquillemos, discutámoslas, y cada uno tiene que hacerse responsable de en qué país quiere vivir y esto es muy importante.
Yo les agradezco profundamente a todos ustedes y les agradezco profundamente a todos los porteños su gran participación democrática en el día de ayer y me parece bárbaro que cumplamos a fondo con todas las normas constitucionales. Hay una segunda vuelta, vamos con alegría por la segunda vuelta, con la misma fuerza que fuimos en la primera, con la misma vocación, con la misma decisión y con el mismo optimismo.
Yo creo mucho en vos, Daniel, y sé que los porteños también.
Muchas gracias. (APLAUSOS)
Yo le escuchaba recién al señor Intendente de Pilar y realmente me daba gusto escucharlo porque hemos charlado muchísimas veces acerca de cuáles eran las necesidades que Pilar tenía y como las vamos cumplimentando.
Pero quería empezar saludando a Daniel y también saludando a todos los porteños, que viven aquí, en Capital Federal, que participaron en la elección de ayer porque a uno que ama la democracia, nosotros que hemos sufrido el imperio del terror, las dictaduras, esas complicidades durísimas que llevaba a que muchos de nosotros sufran mucho y muchos no estén, amamos actos como el de ayer, donde la gente se pueda expresar con se expresó. Y Daniel, en nombre tuyo, quería felicitar a los porteños por la brillante demostración que hicieron ayer y que pudimos percibir todos, que fue un verdadero día de consolidación democrática, esto es central. (APLAUSOS).
La obra, que une Moreno con Pilar, es fundamental, es central. Querido Intendente de Moreno, señor Andrés Arregui; Zúccaro, palabra cumplida, esto es fundamental. Hemos cumplido la palabra, de ahora en adelante a seguir profundizando el cambio en la Argentina.
Hace un rato estuvo con el Doctor Stiglitz, es un verdadero placer conversar con alguien que entiende tanto el proceso argentino, que nos felicitaba a los argentinos por los avances que hemos logrados, impensados, decía él. Y escuchando atentamente cómo, a su juicio, debía ser la próxima etapa de la Argentina y la verdad es que uno escucha con mucha vocación porque hay mucha capacidad de elaboración, mucha capacidad de construir nuevas ideas, que nos aleje de los viejos modelos y nos permita construir con autonomía en la globalización. Fue una charla realmente muy buena, fue una charla bárbara.
También creo que si algo me gustó y me gusta de la gran tarea que estamos en la Argentina es que todos los que estamos construyendo este espacio, esta nueva síntesis en la Argentina tenemos en claro y compartimos algo, que en su momento yo expresé cuando me tocó asumir como Presidente, que algunos dicen que los canso cuando lo repito, pero es tan importante y Daniel ayer lo demostró que es ser fieles a las convicciones.
Creo que en la vida para poder gobernar, transformar y poder cambiar no hay que disfrazarse. Uno es lo que es, como es, con sus fallas y contradicciones. Y nosotros lo hicimos: fuimos y defendimos nuestras convicciones, con el margen de error que puede tener cualquiera, con el margen de la verdad relativa, con la capacidad de entender y comprender que nosotros queremos un país integrado, queremos un país que esté comprendiendo globalmente. Los argentinos tenemos, con distintas particularidades, las mismas necesidades. Pasamos crisis muy duras, hubo algunos pocos en el 90’ que les fue bien, pero a las mayorías nos fue muy mal y yo quiero que los argentinos siempre le recuerden. Nos fue muy mal, que recuerden el quedarse sin empleo, que recuerden las políticas de concentración económica, que recuerden las políticas prebendarías de los 90’, que recuerden las políticas de exclusión, que recuerden ese modelo que nos llevó al 60 por ciento de pobreza, al 30 por ciento de indigencia, 30 por ciento de desocupación. Ese modelo que destruyó la industria nacional, que no desaparecen, siempre lo digo, siguen trabajando. Hoy se tratan de disfrazar de otra forma y cuando se están discutiendo dos modelos en el país nos quieren venir a hablar de las plazas. Sabemos que todo buen intendente tiene que cuidar las plazas, pavimentar las cuadras, generar los servicios, esto es central.
Pero fundamentalmente lo que está en discusión en la Argentina y todos los argentinos lo tengan en claro son dos modelos de país: el modelo del trabajo, del esfuerzo, el modelo de la inclusión social, el modelo de la solidaridad, el modelo de la recuperación de la clase trabajadora, aquella que nadie de aquellos que hoy dicen ocuparse se ocupaban en ese momento, la recuperación de nuestra clase media con movilidad social ascendente, la recuperación del empresariado nacional, el cuidado de nuestros jubilados.
Yo Daniel escucho al señor que va a competir contigo – lo digo con todo respeto porque ahora dicen que van a hacer campaña sucia porque si uno no tiene nada que ocultar qué miedo se tiene, qué campaña sucia se va a hacer – pero el señor que compite con Daniel representa los intereses del modelo neoliberal, es la verdad. Hoy lo pueden llamar Mauricio, pero siempre es Macri. Acuérdense: Mauricio es Macri. (APLAUSOS).Acuérdense bien de esto. Y entonces habla de los jubilados y nosotros mandamos la Ley Opción Previsional – señor Macri – al Congreso y usted la votó en contra. Por ahí nuestros jubilados, a veces, no están informados. Sepan – queridos jubilados – nosotros hemos luchado, junto a ustedes, que Macri votó en contra la Ley de Reforma Previsional. Obviamente porque está ligado a otros intereses y no es malo que lo haya hecho, lo importante es que cada uno represente los intereses que dice representar. Esa es la vida, ser claro. Yo represento con orgullo los intereses que represento, que son los intereses de la clase trabajadora, de la clase media, de la construcción de un proyecto nacional en la Argentina.
Bueno, que los otros representen con orgullo el modelo neoliberal. Es decir, esto es central y fundamental, porque es muy importante tener estas cosas y estas pautas absolutamente claras. Hablan de que la defensa de la escuela pública. Yo nunca los vi defender la escuela pública. Daniel Filmus trabajó en la Ley de Educación, única en el país, con todos los sectores de la Argentina y se puso en marcha una ley transformadora; Daniel Filmus fue el que llevó el proyecto de 6 puntos del Producto Bruto Interno, hacia el año 2010, para financiar la educación; Daniel Filmus fue el que trabajó, junto a nosotros, en la construcción de la Educación Técnica, tan importante para transformar y dar tantas posibilidades a todos.
Esto no es hacer campaña sucia, señores. Yo vi hoy que decían: “nos van a hacer una campaña sucia”. Siempre que nosotros hablamos o decimos algo comentan, nosotros decimos nuestras verdades, fundadas, con absoluto respeto porque respetamos a todo el mundo. Nuestra intención no es agredir a nadie. Lo que decimos es que cada uno asuma el proyecto que le corresponde, que cada uno asuma con responsabilidad el camino que tiene que seguir. Por eso es fundamental hablar de todos estos temas con absoluta claridad.
La Ley de Reforma Previsional no fue votada, la Ley de Educación tampoco fue votada, cuando nosotros dijimos, cuando hablan de los servicios en la Capital Federal y terminamos decididamente con las políticas de la empresa privada de Aguas, que había en la Argentina, para construir una empresa que garantice los intereses de los porteños y de los bonaerenses, también votó en contra Mauricio, que es Macri. También votó en contra. Cuando tuvimos que generar el marco transformador y asumir con responsabilidad y dijimos terminemos con el Fondo Monetario Internacional, porteños, también nos criticó porque dijeron que estábamos gastando las reservas; cuando renunciamos a la deuda privada también nos criticó porque estábamos renegociando la deuda privada y ahorrando 70 mil millones para la Argentina, pero decía que no estábamos honrando nuestro compromiso con el mundo. Le importaba más lo que decían afuera que adentro; cuando recibí críticas de todos lados – Daniel – con el tema de las tarifas, porteños, Mauricio, que es Macri qué decía. Hablaba de que hay que subir las tarifas porque tenemos que cumplir con los contratos, con los convenios de las empresas. Claro teníamos a todos nuestros hermanos en una situación límite y nosotros pusimos todos nuestro esfuerzo y dijimos: primero los argentinos, primero los porteños, después esta situación de querer determinar las tarifas sobre las necesidades globales que tenían los argentinos. ¿Qué política de tarifas van a tener ahora?
Si fueran Gobierno, yo me pregunto qué política de tarifa van a tener en el transporte urbano, si fueran Gobierno. Porque no les hablan de estas cosas a los porteños, porque no les hablan de la subvención desde el Gobierno Nacional, que subvencionamos muchas veces y la mayoría de las veces desde el Gobierno Nacional. Entonces creo que es muy importante lo que se ha dado porque está dada la oportunidad – porteños y argentinos, pero porteños en este caso específico - de discutir dos modelos, totalmente diferentes: el modelo de inclusión social, de consolidación, de autonomía en la globalización, de combate a la indigencia, a la desocupación, de la creación de los empresarios nacionales, de la consolidación de la clase trabajadora, de la consolidación de la clase media con movilidad ascendente, de un país que de oportunidades a todos los argentinos, de la construcción con fuerzas de un sistema educacional que nos contenga, de la recuperación de capacidad de la investigación, la consolidación de un Estado promocional fuerte.
Más fácil sería decir otras cosas, pero yo quiero hablar honestamente, argentinos, los que me están mirando en su casa o mis hermanos y hermanas de Villa Lugano creen, que si el otro proyecto fuera Gobierno en la Ciudad los van a ir a buscar, se van a acordar del sur. Cuando haya viento se van a acordar del sur, vientos del sur. Pero después no se van a acordar del sur, porque se acuerdan en el discurso, se acuerdan de ir a pasear por el sur, pero lo importante es llegar con políticas al sur.
Mis hermanos y hermanas de Villa Lugano saben perfectamente las políticas de inclusión, los trabajos que han conseguido, el esfuerzo, cómo hemos ido levantando a la Argentina. Conversábamos recién con Daniel Scioli, lo conversábamos con muchos amigos, es decir qué es lo que se está discutiendo en la Argentina. Y esto es lo que hay que discutir con absoluta claridad en el marco que hoy nos toca, en esta coyuntura, en la Capital Federal, en el marco de la decisión de los porteños.
Algunos decían: “no, no hay que ir a segunda vuelta”. ¿Por qué no? Para qué están las normas democráticas. Sé que muchas veces no las respetaron, pero las normas democráticas y constitucionales existen. Entonces en la Argentina democrática de hoy se tienen que respetar, se tienen que llevar adelante porque si no es burlar la voluntad de los porteños. Sé que en otros tiempos por ahí a alguna gente perteneciente a ese espacio le importaba bastante poco la Constitución. Tampoco le importaba que Mauricio, que es Macri, votara contra la derogación de las Leyes de Obediencia Debida y Punto Final, qué le van a importar los derechos humanos. No importa, todos lo sabemos. Todos aquellos argentinos a los que les tocó vivir situaciones totalmente difíciles, votaron en contra. Hay que ir a ver durante el poco tiempo que ha ido a trabajar a la Cámara de Diputados.
Esto no es campaña sucia, mis queridos amigos, no es agresión, no es descalificación, es poner los dos modelos que la Argentina tiene en disputa y cada argentino puede optar por el camino que quiera porque eso es lo bueno de la democracia. Pero yo los llamo a tener muy buena memoria.
Algunos analistas podrían decir que el Presidente tendría que correrse un poco, no hablar de esto. No, no, yo no vine a quedarme acá ni vine a especular si saco un voto más o un voto menos, sino que vine a luchar con fuerza por las convicciones que tengo por todos los argentinos, por todos los que estaban excluidos, por ese país que estaba destruido y que lo estamos levantando. Yo quiero estar comprometido con la buena historia de esta patria y con la construcción de una Argentina donde la bandera nos abrace a todos.
Evidentemente, es muy fácil, como podríamos hacer en el 99 por ciento de los lugares del país donde nos va bien y tenemos encuestas muy buenas, pero acá, también la Capital y los porteños son hermanos y son argentinos y es mi obligación como Presidente decirles a los porteños qué es lo que uno piensa porque esto es fundamental. Porque después que pasen los espejismos, vienen los dolores de cabeza. (APLAUSOS) Es fundamental que tengamos memoria, mucha memoria.
Pobres abuelos, pero él voto contra la Ley de Opción Previsional, voto contra toda la Ley de la estabilización del sistema previsional, pero pobres abuelos. El doble discurso, la doble moral.
Por los derechos de todos los argentinos, la seguridad y demás, pero para garantizar la seguridad que estamos de acuerdo y que hay que trabajar muchísimo por la seguridad, yo no sé cuál es el plan de seguridad que tienen más que decir o enunciar los problemas de seguridad que obviamente hay y que hay que resolver en la Argentina y que hay que resolver en la Justicia y que todos estamos trabajando con mucho esfuerzo.
Ahora, si yo estoy queriendo garantizar indultos y ley de obediencia debida y seguridad, estoy premiando a los delincuentes, no entiendo. Salvo que esos delincuentes a él le hayan gustado porque atacaron a luchadores sociales que querían construir un país diferente. Si no, tengamos cuidado, porque la ley debe ser para todos, para aquellos que fueron contra aquellos que fueron capaces de levantar sus idas contra las dictaduras, como aquellos que violan permanentemente derechos durante el andar de la democracia. Es decir, la ley es la ley, la Justicia es la Justicia y la memoria es la memoria y son cosas que tienen que mejorar y que tienen que funcionar. La ley también es fundamental en el marco de las empresas de servicios, es decir, en el marco de tarifas. También siempre recuerdo al Correo Argentino que la memoria no olvida.
Mi viejo fue tesorero del Correo Argentino, falleció el pobre ya, vio como prácticamente lo destruyeron, el querido Correo Argentino. Claro, seguro que Mauricio no sabe lo que pasó en el Correo Argentino, pero Mauricio es Macri. (APLAUSOS)
Es el tema central y los trabajadores del Correo Argentino lo saben y logramos levantarlo y llevarlo con hidalguía y con responsabilidad faltándole muchísimas cosas, pero recuperamos el Correo Argentino también.
Entonces, coloquemos las cosas en su lugar y dejemos todas las hipocresías de lado, porque las elecciones se ganan y se pierden, lo que no se gana y se pierde son las ideas.
Si algunos se disfrazan para tratar de ganar esta elección, allá ellos y mucho cuidado, mis queridos porteños y ciudadanía en general, estén atentos. Yo no me voy a disfrazar ni Daniel tampoco, no nos vamos a disfrazar para ganar esta elección. Ustedes saben que vamos con las convicciones que tenemos, somos cristalinos con nuestros aciertos y errores, somos como nos ven, pero vamos a defender un proyecto de nación, un proyecto de país al cual estamos profundamente abrazados y profundamente decididos a llevarlo adelante. Esto es lo importante, lo otro es circunstancial.
Por eso, Daniel, hoy está en la segunda vuelta, porque se abrazó a las convicciones y a las ideas que durante horas y días defendimos desde que estamos gobernando, desde que estamos ejerciendo la primera magistratura en este país y estamos contentos y felices por el resultado logrado. Nosotros respetamos a todo el mundo, no tengan ninguna duda que respetamos a todo el mundo, pero nuestra obligación es predicar en la construcción de un proyecto que queremos llevar adelante en todo el país y, por supuesto, nos encantaría que los porteños también nos acompañen y tienen motivos para acompañarnos. Yo sé que tienen motivos porque basta ver no más lo que sucedió en la Argentina hace cuatro años atrás y lo que sucede ahora.
Así que, vamos a este ballottage –digo vamos, Daniel- primero, porque somos demócratas plenos y así lo indica la Constitución; segundo, vamos con la convicción de que vamos a poner todo nuestro esfuerzo para que los porteños nos premien; vamos con la fuerza de las ideas y con la amplitud plural y democrática de discutir todo a fondo; no tenemos asesores mediáticos que nos van a decir “conviene decir esto, conviene decir aquello”, nosotros vamos a decir la verdad, porque si para ganar un voto tenemos que disfrazarnos y mentir, ¡Dios, cuál será el desastre!. Ya pasó en la Argentina, ya tuvimos un Fernando, por favor no lo vayamos a repetir, “estoy a 10 cuadras, que estoy a 7, que estoy a 4, a 10 pasos, 4, 3, 2, 1” ¡chau!, perdimos todo después. (APLAUSOS) Así que, no repitamos esa historia.
Realmente, queridos intendentes, queridos amigos, muchas gracias por compartir este momento; vuelvo a felicitar a todos los ciudadanos porteños, la verdad es que fue una verdadera fiesta democrática, me encantó y ahora viene el segundo paso fundamental que es la segunda vuelta donde se va a debatir con toda claridad los dos modelos de país; hay que hacerlo, hay que defenderlo con toda convicción y, evidentemente, los argentinos tendrán que ir optando, por la memoria, en qué país quieren vivir. Porque cuando no se tiene memoria, después los dolores de cabeza son grandes y yo creo que la memoria es fundamental.
Por eso, apelo a la memoria de los porteños, a todas las cosas que nos tocaron vivir, a las que fuimos construyendo, a todas las cosas que nosotros también tenemos que corregir indudablemente, tenemos que corregir muchísimas cosas, pero siempre acordémonos qué es lo que representamos cada uno de nosotros, qué intereses se representan y que con la gente hay que hablar con total sinceridad.
Yo, Daniel, con una gran admiración te digo: me gustó que apelaste a esa palabra que te ha dado tu profesión, tu historia y demás de decir permanentemente la verdad y eso tiene un valor incalculable y es el camino por el cual nosotros tenemos que ir.
Todos vamos a debatir con mucha fuerza, porque es la Capital de todos los argentinos, deciden nuestros hermanos porteños, pero estamos todos orgullosos de esta Capital la cual queremos que sea la mejor Capital de las capitales porque la amamos y también tenemos un gran cariño y respeto por todos los porteños.
Pero éstas son las cosas que se van a discutir. Pero además, tener clarito qué es lo que es cada uno ante cada tema, acuérdense cómo se fue resolviendo cada tema.
El que a mí me impactó tanto fue el tema de la Ley del sistema previsional. Ustedes saben que con la Ley de opción hemos garantizado la posibilidad de salvar el sistema previsional argentino pero, a parte, con la Ley de inclusión previsional, que obviamente tampoco apoyó este grupo político y ese señor, hay un millón de argentinos que en la década del 90 quedaron fuera de la estructura productiva por las políticas que también apoya este señor y sus amigos, un millón de argentinos –acuérdense lo que eran los ’90, ustedes se acuerdan todos y los que están en sus casas también- que quedaron sin posibilidad de jubilarse y nosotros con ese plan de inclusión jubilatoria le dimos la posibilidad de que vuelvan a tener la esperanza y la posibilidad de jubilarse. Eso es cuidar a nuestros hermanos, a nuestros abuelos, a nuestros padres, a nuestros tíos.
Por eso, hoy en cada acción de cada uno tiene que ir giradas con las acciones que hace y en ese caso, Daniel, yo sé que en la provincia de Buenos Aires Scioli también está trabajando fuertemente en este tema para profundizar las tareas que han llevado adelante Felipe, los intendentes y demás para seguir construyendo esa gran provincia de Buenos Aires que nos honra y a la que queremos tanto. Con mucha fuerza, con muchas ganas, porque también la provincia de Buenos Aires es el corazón batiente de la transformación argentina. La verdad es que es otro lugar que da para amarlo con mucha fuerza.
Mañana me voy a otra provincia que también la vi luchar. La primera vez que me tocó llegar a la provincia de San Juan estaba llena de papelitos, de bonos, ningún empleado público ni docente cobraba y tuvimos que ir allí.
Vamos a ir a inaugurar una obra que es el Centro Cívico de San Juan que tiene años y años de retraso y que la terminamos junto con el gobernador sanjuanino y el pueblo sanjuanino en su conjunto. Vamos a ir con toda alegría, porque son las asignaturas pendientes que se van rindiendo y son las cosas que quedan y que valen.
Por eso, con toda la fuerza y con toda la solidaridad, a seguir trabajando con mucha potencia por la Argentina, a seguir consolidando los temas, a seguir administrando correctamente, a seguir siendo solidarios, a seguir colocando la otra mejilla, a seguir amando las cosas con pasión, con fuerza, pero, fundamentalmente, ser muy fieles a nuestras convicciones.
Yo los puedo mirar a los ojos, me podrán decir que me he equivocado muchas veces y van a tener razón, pero yo los puedo mirar a los ojos y ustedes pueden mirarme a los míos y saben qué es lo que pienso. Ustedes saben que con mis aciertos y errores siempre pensé igual y que nunca traté de ir acomodándome al andar o a una circunstancia o a una coyuntura.
Creo que en la vida lo que vale es la conducta, aferrarse fuertemente a los principios y a las convicciones y ser como uno es, porque a la larga, cuando somos como somos, nos va muy bien, cuando los argentinos somos auténticos, pero cuando entramos en toda una concepción de disfrazarnos de lo que no somos, nos va muy mal.
Así que, los porteños tendrán la oportunidad el día 24 de votar acá por dos proyectos de país que son diferentes, pero a parte de estar votando por la conducción de la ciudad, seguramente los planes de fondo de la conducción de la ciudad en muchas cosas no se va a disentir, a parte, cuando uno nunca gestionó nada puede hablar de muchos temas que uno no se si los puede llegar a gestionar bien, mal y demás, que decir son planes, son proyectos y están bien. Seguramente la mayoría de los candidatos en muchos temas en cuanto a los planes instrumentales y estructurales, en cuanto a la construcción del tránsito, en cuanto al transporte, la seguridad y demás, uno se va a encontrar que hay muchos proyectos que son muy parecidos, lo que acá está en discusión son otras cuestiones de fondo, no las maquillemos, discutámoslas, y cada uno tiene que hacerse responsable de en qué país quiere vivir y esto es muy importante.
Yo les agradezco profundamente a todos ustedes y les agradezco profundamente a todos los porteños su gran participación democrática en el día de ayer y me parece bárbaro que cumplamos a fondo con todas las normas constitucionales. Hay una segunda vuelta, vamos con alegría por la segunda vuelta, con la misma fuerza que fuimos en la primera, con la misma vocación, con la misma decisión y con el mismo optimismo.
Yo creo mucho en vos, Daniel, y sé que los porteños también.
Muchas gracias. (APLAUSOS)