Palabras del Secretario de la Gestión Pública, Juan Manuel Abal Medina, en la entrega del Premio Nacional a la Calidad

PALABRAS DEL SECRETARIO DE LA GESTIÓN PÚBLICA, DR. JUAN MANUEL ABAL MEDINA, EN EL ACTO DE ENTREGA DEL PREMIO NACIONAL A LA CALIDAD, AÑO 2010, EN EL SALÓN DE LAS MUJERES ARGENTINAS DEL BICENTENARIO.

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Señora Presidenta de la Nación, Dra. Cristina Fernández de Kirchner; señora ministra de Industria; señor ministro de Trabajo; señor ministro de Salud; amigo y ya por cuarto año consecutivo corresponsable de esta entrega, señor presidente del Premio Nacional a la Calidad, miembro del Comité Permanente y de la Fundación del Premio Nacional; autoridades nacionales, directivos públicos; empresarios; amigos, amigas, evaluadores, jueces; a todos y a todas: siempre para mí es un verdadero orgullo participar de esta ceremonia en la cual la Presidenta de la Nación entrega a aquellos organismos públicos y privados esta distinción, que tienen que ver con la calidad, con el funcionamiento de los organismos y con la atención que se le presta a los ciudadanos.

 

Esto, en el caso del sector público, demuestra como con el firme compromiso de sus directivos y con el profundo acompañamiento de todos sus trabajadores en el Estado se puede gestionar cada día más y mejor en defensa de los que menos tienen y cuidando siempre los recursos, que son recursos de todos los argentinos.

 

Estoy plenamente convencido que las distinciones que hoy estamos haciendo, las prácticas que hoy estamos premiando pronto se difundirán por el conjunto de la Administración Pública que es precisamente - como ustedes bien lo saben - el resultado central, el objetivo central de este premio que hoy estamos otorgando.

 

En primer lugar, es un enorme honor, una enorme alegría haberle otorgado y que hayan conseguido el Premio Nacional a la Calidad el Hospital "Garrahan". Quiero profundamente pedirles un fuerte aplauso para Alberto Goldberg, el presidente del Consejo de Administración y  para Josefa Rodríguez, la directora médica ejecutiva. (APLAUSOS)

 

El Hospital "Garrahan" - no hay que decir demasiado-  es una institución que nos prestigia a todos los argentinos, que atiende de una manera eficaz, eficiente y con muchísima fuerza ya casi 40 años de historia a justamente nuestros niños. Esta institución, el año pasado, había obtenido el Diploma a la Calidad, lo cual demuestra también como hacer un compromiso firme y permanente y por lo tanto simplemente una enorme alegría poder estar hoy dándoles ese premio.

 

Recuerdo que, en su momento, cuando yo dije: "sigan trabajando que posiblemente lo van a lograr el próximo año", la Presidenta me retó porque dice que estaba hablando de prejuzgamiento o algo por el estilo, pero bueno en este caso no hubo ningún prejuzgamiento, realmente se lo merecen y es un orgullo.

 

Y lo mismo para el CECLO, el Servicio de Conciliación Laboral Obligatoria del Ministerio de Trabajo, una institución muy importante; muchos de los empresarios acá la conocen, que trabaja y defiende de manera absolutamente gratuita a los trabajadores con un aporte muy pequeño de los empresarios, logrando la conciliación laboral permanente y trabajando con profundidad para tener más y mejor Estado. En el caso del CECLO está recibiendo su diploma justamente por la medición de los estándares de calidad, una cuestión muy importante para nosotros y a la vez también quiero decirlo, que el amigo Patricio Conforti, que ha recibido el Premio tiene que ver también con que este organismo alcanza y supera largamente el cupo para personal de discapacidad, con lo cual también pido un fuerte aplauso para ellos. (APLAUSOS).

 

Quiero volver a felicitar a los ganadores del sector público, del sector privado y también - como corresponde - agradecer profundamente a los evaluadores, a los jueces del sector público que también de una manera absolutamente ad honorem con su trabajo sistemático, serio y sostenido son los que realmente mantienen la calidad de este Premio. Así que para ellos también pido un fuerte aplauso. (APLAUSOS).

 

Y para terminar, señora Presidenta, si me permite, no puedo dejar de compartir con ustedes la sensación paradojal que estoy sintiendo en este momento; estamos acá en esta Casa, que es la casa de todos los argentinos, hablando de estas cosas: de desarrollo, de desarrollo económico, de crecimiento; en el caso del Estado de calidad, de eficacia, de eficiencia, cuando las cosas que escuchamos del Estado, en el mundo, en países muy avanzados son bastante distintas hoy por hoy. Se escucha de escuelas que cierran, de recortes de jubilaciones, de recortes de subsidios, de recortes de derechos, de Estados en déficit y en crisis.

 

A la vez también hoy estamos distinguiendo y está ganando el Premio Nacional a la Calidad el Hospital "Garrahan", un hospital que también hoy está siendo amenazado con un recorte profundo de su presupuesto, de más de 100 millones de pesos, que la Administración del Gobierno de la Ciudad está diciendo que no le va a dar, contrariando la ley, que exige que sea mitad y mitad (Nación y la Ciudad de Buenos Aires), las que deben hacerlo; una institución como el "Garrahan", de la cual nuevamente no hay nada que decir, simplemente porque - supuestamente - atiende a muchos que no son porteños.

 

Esta doble situación, esta situación paradojal no deja de llamarme a la reflexión y simplemente porque no es el motivo de esta reunión, pero simplemente de sentirme muy orgulloso y creo que debemos estarlo todos los argentinos del camino que venimos emprendiendo, del año 2003 en adelante, cuando con Néstor Kirchner tomamos la decisión - colectivamente- de trabajar todos los días por más y mejor Estado, que no significa un Estado más grande o un Estado más chico, sino un Estado más eficiente, más inteligente, más moderno, enormemente cuidadoso de los recursos públicos, un Estado que pueda gestionar más y mejor todos los días. Ese es el rumbo que tomamos y ese es el rumbo que venimos, del año 2007, claramente profundizando y es el rumbo en el cual creo que nos permite mostrarle al conjunto del mundo, pero sobre todo a nosotros mismos, .los argentinos, que el camino que iniciamos fue el correcto, que pudimos superar la crisis, que seguimos creciendo, que seguimos generando trabajo, que seguimos gestionando eficientemente el Estado y es el camino que finalmente nos permitirá alcanzar esa sociedad más justa, más libre y más igualitaria, que creo que todos los argentinos nos merecemos.

 

Muchísimas gracias. (APLAUSOS).