Palabras de la Presidenta en el acto de inauguración de la Escuela Néstor Kirchner

PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, CRISTINA FERNÁNDEZ, EN EL ACTO DE INAUGURACIÓN DE LA ESCUELA PRESIDENTE NÉSTOR CARLOS KIRCHNER, EN LA PROVINCIA DE SAN JUAN

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Gracias, muchas gracias. Muchas gracias San Juan. (Aplausos)

Querido amigo y compañero Gobernador de San Juan; querida Intendente; alumnos; docentes; amigos, amigas; compañeros; alumnos de la Escuela Presidente Néstor Carlos Kirchner (Aplausos): la verdad que inaugurar hoy aquí, en San Juan, la Escuela Nº 1.000 que en realidad ya no es más la Nº 1.000, esta es la Nº 1.000 pero es la 1.001, 1.002, 1.003, 1.004, porque son 1.047 escuelas que ya están abiertas en el país, pero la Nº 1.000, la Presidente Néstor Carlos Kirchner está aquí, como decía Gioja, en la tierra de San Juan, en la tierra de Sarmiento. (Aplausos)

Ustedes saben que tengo mis diferencias políticas, pero que no puedo dejar de reconocerle el rol estructural y fundamental que tuvo en la construcción de un proyecto educativo para la República Argentina sin lugar a dudas. (Aplausos) Fue un gran literato también, (Aplausos) lo tenemos en la Sala de Pensadores y Escritores del Bicentenario en la Casa Rosada, porque es necesario hacer síntesis finalmente de estos 200 años de historia.

Yo me acordaba, José Luis, que en el año 2003, cuando como vos le decís "el flaco" asumió la presidenciam y a pura voluntad imaginó ese plan de 700 primeras escuelas. ¿Y por qué digo a plena voluntad? Porque no había nada; no había proyectos, no había recursos en el Estado. Recién por allá, por octubre del año 2003 empezamos a gestionar, a negociar con el Banco Interamericano de Desarrollo, un préstamo que recién el primer desembolso vino en noviembre del año 2004, pero la primera licitación con una administración mejor de los recursos, la lanzamos en enero del 2004. Ahí fue la primera licitación de ese plan de escuelas; 874 licitaciones y proyectos se hicieron durante su gestión como presidente, casi 500 escuelas se inauguraron, 474 alcanzó a inaugurar en su presidencia.

Estamos inaugurando 500 y pico desde el 2007, fines del 2007 a ahora y vamos por más, porque al 2011 vamos a tener terminadas y en proceso de licitación 1.876 escuelas para todos los argentinos. (Aplausos)

Hasta ahora hemos construido, como recién decía José Luis, una escuela cada dos días y medio, parece mentira si tan sólo remontáramos aquel 2003. Pero no fue solamente eso, como también mencionaba el ministro de Economía, en la Argentina del 2002 principios del 2003, se destinaba un 5 por ciento de todo lo que producíamos los argentinos, a pagar la deuda y solamente un 2 por ciento a educación.

Terminamos este año 2010 destinando solamente un 2 por ciento a la deuda y un 6,47 por ciento a la educación, a la verdadera inversión que tenemos que hacer los argentinos. (Aplausos) Ni qué hablar de la educación técnica: 6 millones 700 mil pesos en el año 2003 para escuelas técnicas; llegamos a casi 600 millones de pesos en escuelas técnicas que es formar argentinos para el trabajo, para la producción, para seguir creciendo. (Aplausos) Más de 90.000 millones de pesos de inversión educativa con las netbooks para que todos los estudiantes secundarios de todas las escuelas públicas de nuestro país, tengan su computadora y puedan así proveerse de los nuevos y modernos instrumentos de la educación. Ni qué hablar también, porque me gusta hacerlo, del salario docente. Flaco, cuando llegamos al país, muchos docentes cobraban en papelitos. Recuerdo cuando Kirchner tuvo que ir con su ministro de Educación a una provincia argentina, no importa cuál, aquí y a Entre Ríos también, a levantar huelgas que venían, docentes que cobraban en papelitos, salarios de 385 pesos. Hoy estamos garantizándole a la Nación 2.039 pesos de salario mínimo para todos los docentes, 430 por ciento de variación salarial, más de 30 millones de libros, de textos de literatura que no solamente sirven para que nuestros chicos aprendan, sino para que también todo el sector de la producción, de impresión, de editoras de papel, hayan reverdecido en una Argentina que antes importaba los libros, porque era más barato importarlos que producirlos en el país. Hoy los producimos en el país generando también trabajo para miles y miles de argentinos. (Aplausos)

Ni qué hablar de las universidades, lo decía recién el Gobernador de la provincia de Buenos Aires, donde se han creado 5 nuevas universidades y lo que es más curioso, la matrícula de nuestras universidades tradicionales, como la de La Plata donde me recibí yo y él, o la UBA, o la de Córdoba, u otras más tradicionales han mantenido su matrícula, pero las que las han aumentado exponencialmente han sido estas nuevas universidades. Quiere decir que esos chicos si no hubieran tenido la universidad en su lugar, no hubieran podido acceder a la educación superior. Democratizar también el acceso a la educación superior, es parte de un proceso de transformación y cambio indetenible en la República Argentina, que nadie lo dude. (Aplausos)

Sabemos que la educación es el gran instrumento de la movilidad social, donde el hijo de un trabajador puede llegar a soñar ser presidente de la República. Esa es la Argentina en la que yo crecí y esa es la Argentina en la que quiero que crezcan todos nuestros pibes y también los hijos de mis hijos. (Aplausos)

El mejor homenaje que le podemos hacer, es continuar y profundizar esa Argentina que él soñó, por la que combatió, por la que luchó, por la que fue atacado, por la que fue agraviado. (Aplausos) Yo quiero rendirle homenaje aquí, junto a ustedes. (Aplausos)

Es cierto, uno puede equivocarse, uno puede tener errores, por ahí no tan buenos modos, pero lo importante son los objetivos y como ama uno a su patria, para militar todos los días, para levantarse pensando en qué cosa nueva podemos hacer, qué obra nueva, qué beneficio social para nuestros viejos, para nuestros trabajadores, él pensaba en todo eso. (Aplausos) Él creyó siempre desde muy joven, que era posible un país deferente, no el país de las utopías, porque cuando éramos jóvenes teníamos utopías pero nos dimos cuenta que más importante que tener utopías es tener objetivos y alcanzarlos, concretarlos para que no solamente nos digan que somos jóvenes ilusionados y utópicos que nunca podemos llegar a nada. (Aplausos)

Les demostramos que teníamos sueños que eran realizables, que eran posibles, que solamente había que poner voluntad y algunas otras cosas que también hay que poner cuando se gobierna una provincia, un municipio y sobre todo un país donde se conjugan y se enfrentan, muchas veces, intereses muy poderosos que tienden a frustrar procesos de cambio.

Yo quiero desde la escuela número 1.000, desde aquí, desde San Juan, desde esta escuela que lleva su nombre, convocar a todos los argentinos, a todos, a los más de 40 millones que somos, a trabajar como lo hacía él todo el día sin descanso, sin pensar en su salud, sin pensar en lo que le hacía bien a él, sino pensando en lo que podía realizar. (Aplausos)

Él siempre vivía pensando en que más se podía hacer; cuando ya había hecho algo era como que se aburría y quería comenzar con otra cosa nueva, y así fue en su vida personal. De lo único que nunca se aburrió fue de mí, afortunadamente, al contrario, él siempre me decía: "de lo que nunca me aburrí en la vida es de vos". (Aplausos)

Después cuando él tenía el objetivo iba por más, había que lograr más cosas, más beneficios, más casas, más producción, más trabajo, más reservas, más exportación, siempre fue así y este es el ejemplo que tenemos que tomar todos los argentinos.

El otro día alguien me decía que en el único lugar donde la palabra éxito está antes que la palabra trabajo, es en el diccionario, después, siempre, en todos lados, primero está el trabajo y después el éxito, no hay magia. (Aplausos)

Esto que hemos hecho, estas netbooks, este barrio que hemos entregado hoy, estas escuelas, este plan para seguir con las cooperativas y 156 viviendas más, los 300.000 pesos para el parque industrial donde se han instalado tres metal-mecánicas y se van a seguir instalando más, esto es ayudar. (Aplausos)

Esto que decía el flaco Gioja, la coparticipación, que por primera vez en 200 años de historia, la nación comparte derechos de exportación con las provincias argentinas, cuántas obras con la exportación de la soja que perciben los municipios, las provincias. (Aplausos)

Todo esto ha sido hecho con gestión, con administración inteligente de los recursos, en un mundo que se ha derrumbado, en un mundo que se sigue derrumbando, podemos seguir haciendo cosas como esta escuela, como las que se están licitando, como las viviendas, como las netbooks, como los beneficios para los más de 4 millones de jubilados, de todo lo que hemos incorporado, de la asignación universal por hijo que ha dignificado el rol social del Estado, desvinculando por primera vez una política social del aparato político. (Aplausos)

Esto es lo más importante, no solamente los 220 pesos que cobra cada madre por cada hijo, cada madre que no tiene trabajo, cada padre que no tiene trabajo o tiene trabajo informal, lo más importante es que no se lo debe a nadie más que al país, a la Argentina. (Aplausos)

Por eso pido el compromiso de todos, no conmigo ni con el Gobierno, sino con el país, con la Argentina, esa Argentina 2011 a la que nos debe movilizar a todos los argentinos, es el país, es vivir cada día mejor, lograr ser más solidarios y seguir con este proyecto de profunda inclusión social con todos, con todos los que sigan creyendo que vale la pena seguir militando y creyendo en las cosas que siempre creímos y por las que tantos argentinos dieron su vida.

En nombre de todos ellos, en nombre de todas ellas, quiero convocarlos a todos, sin odios ni rencores, con los brazos abiertos para seguir trabajando, construyendo esta Argentina que nos merecemos todos, para ser cada día mejores nosotros mismos, que es la mejor manera de ofrecer un homenaje a todos lo que ya no están. (Aplausos)

Gracias San Juan, gracias, muchas gracias porque cada vez que vengo siento este inmenso cariño del pueblo y yo quiero retribuirlo con más trabajo, con más compromiso y con la voluntad inquebrantable de seguir sirviendo a la patria. (Aplausos)

Muchas gracias, gracias San Juan, hasta siempre. (Aplausos)