Muy buenos días a todos y a todas.
Señor Gobernador de la provincia de Buenos Aires; señor Intendente de Escobar; familia Sigman, porque sé que hubo uno sólo; familia Bagó; todos, en definitiva somos familia, estas son empresas también familiares que han sido capaces de convertir a la industria farmacéutica argentina en un modelo muy importante y con una participación importante en el mercado mundial.
La verdad que hoy me encuentro muy orgullosa de estar aquí; primero, porque hemos inaugurado una Planta que va a significar, a aportar una vez más desde la biotecnología a la economía nacional; a la economía nacional porque lo que produce la Planta que hemos inaugurado hoy, precisamente atiende a un sector clave también de nuestra economía como es la ganadería. Estuve leyendo las cifras con las cuales podemos llegar a suprimir el destete del 58 por ciento que fue en los últimos años con un promedio anterior del 63 para llegar al 75.
Qué significaría esto para traducirlo. Cuatro millones de terneros más por año que no morirían, producto de que serían tratados con vacunas de alta calidad que produce la Planta que acabamos de inaugurar hoy, Planta que comenzó a hacerse hace 2 ó 3 años y que hoy inauguramos.
Y hoy ponemos en marcha otro sueño, otro sueño mío que nació en medio de una pesadilla -es increíble la contradicción- pero los sueños nacen también a veces en medio de las pesadillas, la pesadilla que vivimos durante el año 2009, pesadilla mundial, debemos decirlo; hasta eso nos trajeron de afuera, la gripe A, porque acá no la teníamos, también eso nos importaron. Allí nació el sueño con nuestro ministro Manzur cuando me trajo a los empresarios de producir en nuestro país una vacuna contra la gripe A, ser uno de los 9 ó 10 países en el mundo que vamos a producir este insumo básico para la seguridad sanitaria de nuestro pueblo.
Hoy estamos aquí dando el puntapie definitivo con la preparación del terreno y el pronto inicio de las obras para esto que va a significar, sin lugar a dudas, seguir escalando posiciones a nivel nacional en nuestra industria farmacéutica.
Quiero también recordar la anécdota de la vacuna aftosa en Brasil, agradecer también al presidente Lula, gran compañero, gran latinoamericano, que escuchó mis llamados, llamados que eran gritos como uno acostumbra a hacer cuando no lo escuchan demasiado y que se comportó de una manera extraordinaria y debemos reconocerlo también, luego de 10 años pudimos ingresar precisamente al mercado brasilero afortunadamente.
También quiero decirles que ayer también en Córdoba presentando un nuevo modelo de auto, una nueva plataforma, siento que la industria vuela en el país, siento que la economía está creciendo, estamos batiendo récords de reservas.
Ayer no la llamé a Mercedes cuando vine de Córdoba porque no tuve tiempo, pero hasta antes de ayer habíamos llegado a 52.011 millones de dólares, record en toda nuestra historia, crecimiento de la industria por arriba de la actividad económica que también registra índices sin precedentes, generación de nuevos puestos de trabajo como en el caso de estos laboratorios que obviamente no es cualquier trabajo, son trabajos altamente calificados y por lo tanto muy bien remunerados.
Por eso, quiero decirles que me siento muy orgullosa de poder contribuir desde el lugar en que la gente me puso con su voto, a construir un país más industrializado, con mayor valor agregado, que figuremos en los primeros países del mundo en áreas en donde tenemos una capacidad increíble por nuestros recursos humanos, por nuestra experiencia. Y agradecerles a los señores empresarios esta idea de Hugo Sigman, de lograr por allí tener la ayuda del Estado, pero que esto no signifique la prebenda de por eso tener que anquilosarse o atrasar el desarrollo científico del país o pagar con mayores precios nuestra gente.
El gran desafío es articular entre el Estado y los empresarios, para que con las políticas activas que se tienen en todos los estados nacionales, sean aprovechados por nuestro empresariado para luego también salir a conquistar mercados. Necesitamos mercado interno, pero imperiosamente necesitamos conquistar mercados externos por una cuestión simple, somos un país de 40 millones y por lo tanto con esta capacidad formidable de producción necesitamos la escala global para ser exitosos y por ella vamos, por esa escala global.
Por eso estamos hoy aquí esta mañana y por eso de esta manera estamos rindiendo homenaje a quién creyó que este es el modelo de país que va a llevar a la felicidad de todos los argentinos.
Muchas gracias y muy buenos días a todos y a todas. (Aplausos)