En su alocución, la Mandataria destacó el buen momento que atraviesa el sector agropecuario debido, por un lado, a los excelentes precios internacionales derivados de la actual coyuntura global, y por otro, a las políticas internas de apoyo al este segmento de la economía. También expresó que el país alcanzará este año una producción granaría de 100 millones de toneladas, por lo cual "no vamos a tener que importar ni granos". También recordó que el gobierno nacional liberó la exportación 3 millones de toneladas de trigo por adelantado.
"En este bicentenario llegamos con una situación en el sector muy buena, y estamos muy contentos de que a los sectores más dinámicos de la economía, a los grandes sectores, les vaya muy bien", manifestó la Presidenta.
Seguidamente, informó que la actividad económica nacional, medida desde junio de 2009 hasta junio de 2010, ha crecido 11.1 dígitos, en tanto que en los últimos 12 meses se incrementó en 9 puntos. "Eso refleja la vitalidad del crecimiento", aseguró.
En ese marco, sostuvo que "no fue fácil sostener" al crecimiento debido a la crisis de los mercados globales iniciada a finales de 2008. "Fue la intervención estatal, a través de medidas fiscales muy fuertes, la que nos ha permitido darle sustentabilidad a este crecimiento que hoy tenemos".
"Es impensable tener estos números en la economía, estos precios y esta rentabilidad si el año pasado no hubiéramos intervenido muy fuerte", remarcó Cristina Fernández.
Por otra parte, recordó que el país está atravesando "el período de crecimiento continuo sostenido a altas tasas más largo de nuestra historia", y que se está haciendo "con una fuerte sustentabilidad social", merced al descenso de la tasa de desocupación, la fijación del salario mínimo vital y móvil "más importante de toda Latinoamérica", y la cobertura social más destacada de la región. "Este bicentenario nos encuentra con un país en crecimiento y al mismo tiempo con un pueblo que participa de ese crecimiento", indicó la Jefa de Estado.
Asimismo, Cristina Fernández recordó la fuerte inversión que realiza el gobierno central en obras de infraestructura que benefician a las economías regionales, como el dragado de la Hidrovía, la construcción de la Autovía 9, o la ampliación de la red ferroviaria, y en el mantenimiento de tarifas competitivas.
También destacó la política de desendeudamiento como vital a la hora de mantener el modelo productivo vigente, como así también el fuerte crecimiento de las reservas del Banco Central - que a la fecha superan los 50.200 millones de dólares - y el mantenimiento de un tipo de cambio competitivo.
Luego, defendió la potestad del gobierno nacional de fijar derechos a las exportaciones, y recordó que esta carga tributaria no es pagada únicamente por el sector agropecuario, sino por "toda la actividad económica argentina". "Los derechos de exportación no son el castigo a un sector, sino que son un instrumento de política económica contemplado en la propia Constitución", indicó. E inmediatamente explicó que "estos derechos de exportación, que algunos creen que son un instrumento de ingreso fiscal, constituyen una política económica que permiten que se fomente agregar valor a los productos y al mismo tiempo tener un dólar diferencial que permite sostener el modelo".
"Tenemos que aprovechar esta oportunidad inédita en términos de intercambio para poder acumular mayor valor agregado y capacidad tecnológica para, no solamente ser exportadores de productos primarios, sino de productos con alto valor agregado", sostuvo la Presidenta.
Por otra parte, exhortó a los productores a abandonar las prácticas de evasión tributaria para poder bajar "el altísimo grado de informalidad que todavía tiene la República Argentina". Y recordó que "la cohesión social es básica para poder desarrollarse económicamente".
"Tenemos que discutir con firmeza, serenidad y respeto, pero con los números sobre la mesa", exhortó la Mandataria, quien concluyó su discurso afirmando: "Estoy convencida de que somos capaces de construir un país diferente".
En tanto, el gobernador Hermes Binner se manifestó "convencido" de que el proceso productivo de Santa Fe depende de "poder seguir construyendo cadenas de valor" con "desarrollo sustentable". En ese marco, expresó que estamos "en un tiempo extraordinario para pensar en la nación, creer en nuestros valores, en nuestra cultura y trabajar juntos para lograr el bienestar que soñaron los héroes de ayer".
Por su parte, el presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, Cristián Amuchástegui, sostuvo que "las circunstancias que acompañan al país han cambiado favorablemente con respecto al año anterior", y que por eso el sector agropecuario "está en condiciones, en el corto plazo, de alcanzar la producción de 150 millones de toneladas de granos" con "sustentabilidad ambiental y social, con valor agregado y sin poner en riesgo la provisión alimentaria".
También destacó las gestiones del gobierno nacional ante los mercados de China e India, de gran importancia para la colocación de la producción local.
Acompañaron a la Presidenta en el acto los ministros de Economía, Amado Boudou; de agricultura, Julián Domínguez, e invitados especiales.