Palabras de la Presidenta y videoconferencia Día Internacional de la Mujer

PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, CRISTINA FERNÁNDEZ, DURANTE  EL ACTO Y  VIDEONFERENCIA EN CONMEMORACIÓN DEL DIA INTERNACIONAL DE LA MUJER, EN EL SALÓN DE LAS MUJERES ARGENTINAS DEL BICENTENARIO, CASA DE GOBIERNO.

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MAYOR MEDICA ALEJANDRA FREITES.- Buenas tardes señora Presidente y buenas tardes a todas las allí presente, soy la mayor médica del Batallón Conjunto Argentino, "Haití 11", en Gonaives, presente tambièn en Puerto Príncipe, a partir del 12 de enero, cuando ocurrió el terrible terremoto.

 

PRESIDENTA.- Hola Alejandra, qué tal, cómo están, ahí las estamos viendo a las dos, ustedes a lo mejor tambièn nos están viendo a nosotras. Estamos rindiéndoles homenajes a ustedes que están allí y en nombre de ustedes tambièn a otras cascos blancos y cascos azules, que están aquí, y a todas las mujeres, y también - aunque sea el Día Internacional de la Mujer - a todos los hombres que están cumpliendo allí una tarea humanitaria que realmente es algo muy importantes y debe ser muy fuerte en la vida de todos porque no todos están preparados para soportar muchas veces tanto dolor y tanto sufrimiento y al mismo tiempo ayudar. Ello requiere una preparación y una actitud especial de la vida. Así que saludarlas a ambas y tambièn escuchar a Lucia.

 

ENFERMERA LUCIA LEONOR NUÑEZ.- Buenas tardes, soy Lucia Leonor Núñez, presto servicio en el Hospital de la Fuerza Aérea, aquí en Puerto Príncipe.

 

PRESIDENTA.- Hay algunos problemas de incomunicación naturales porque estamos en situaciones muy difíciles pero de cualquier manera las estamos viendo a las dos, muy sonrientes, de muy buen semblante y realmente queremos abrazarlas muy fuertes y darles un gran aplausos, en nombre de todos y de todas. (APLAUSOS).

 

MAYOR MEDICA ALEJANDRA FREITES.- Señora Presidenta le quería comentar que el Batallón Conjunto Argentino cuenta entre sus filas con 13 mujeres, de las cuales 4 somos oficiales; 7 suboficiales y 2 soldados voluntarias. Las actividades que hemos llevado a cabo han sido amplias y variadas, desde sanidad, intendencia, desde puestos de cocina a lavaderos y últimamente en la distribución de alimentos en Puerto Príncipe y también escoltando y dando seguridad a las muchas organizaciones de ayuda humanitaria, que se hicieron presente en Haití, a partir del 12 de enero.

 

PRESIDENTA.- Sí bueno, ya sabemos las mujeres estamos para todo, desde barrer el piso, seguridad, medicinas, somos múltiples, estamos preparadas para todas las tareas, estamos preparadas culturalmente digo yo para hacer todas esas cosas que los hombres no pueden hacer al mismo tiempo, nosotras sí la podemos hacer al mismo tiempo. No me mire así, canciller Taiana, me mira muy fijo me mira el canciller Taiana, que lo tengo sentado a mi derecha, pero quiero - en serio- agradecerle a ambas la excelente predisposición y el rol que yo personalmente vi están cumpliendo nuestras fuerzas armadas y los cascos blancos allí en el hospital. No pude llegar a Gonaives, pero sí estuve en Puerto Príncipe y estuve recorriendo el hospital y también sé que fue nuestra misión la primera que llegó y acudió en ayuda, cuando sucedió este terremoto. Eso ha sido reconocido por el propio Presidente de los Estados Unidos que llegamos antes que ellos, aunque sea una vez llegamos antes que ellos y es bueno que lo hayamos hecho para ayudar, y llegáramos antes que ellos. Así que muchas gracias y felicitaciones a Puerto Príncipe, a Gonaives y también a las 13 mujeres y a los hombres que se desempeñan allí, junto a ustedes. Muchas gracias. (APLAUSOS).

 

PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÒN CRISTINA FERNANDEZ, EN EL ACTO EN EL SALÒN DE LAS MUJERES ARGENTINAS DEL BICENTENARIO.

Bueno hoy, solamente por hoy, permítanme decirles buenas tardes a todas, buenas tardes a todas y a todos: en principio, pensábamos hablar por cadena nacional porque era el Día Internacional de la Mujer, y pensábamos hacerlo para todas las mujeres, pero el Secretario General de la Presidencia olvidó que había partido de fútbol y la verdad que esta Presidenta está dispuesta a enfrentarse con las hordas de opositores más salvajes, que uno pueda reconocer, pero nunca con un hincha de fútbol. ¿Por qué? Porque tengo un hincha en la casa, nací de una hincha de fútbol y son personajes que suelen ser normales y adorables, hasta el momento en que comienza el partido de fútbol. ¿Vieron? Ahí es como que se transforman y yo me imaginaba poniendo cadena nacional, por ejemplo, cuando el hincha de San Lorenzo estaba mirando si le iban a hacer el gol y dije, no, vamos a tener miles de militantes contra el voto de la mujer, así que dije: "hablá no más así, sin cadena nacional, pero con el corazón para homenajear en este Día a todas las mujeres".

 

¿Ustedes quieren que les cuente algo? Yo siempre fui un poquito reacia a esto del Día de la Mujer porque decía: ¿Por qué el Día de la Mujer? Me sonaba a Día del Animal, que era un solo día, pero después me di cuenta que siempre es bueno, aunque sea un día, reafirmar la condición de mujer en todos los ámbitos.

 

Y hoy aquí hay artistas muy importantes, hay mujeres cascos blancos que han ido solidarias a Haití, nuestras mujeres oficiales y suboficiales y voluntarias de las fuerzas armadas, nuestras Abuelas y Madres de la Plaza de Mayo, hay intelectuales, trabajadoras, mujeres políticas. En fin creo que está representado todo lo que la mujer puede hacer, pero fundamentalmente siempre nuestra condición de madre nos hermana y  nos aúna a todas, independientemente de cuál sea el rol que cumplimos.

 

Tambièn quiero decirles que esta declaración de Eva Perón como la Mujer del Bicentenario y el reacondicionamiento de lo que va a ser este monumento histórico, que es el viejo Ministerio de Obras Públicas, hoy Ministerio de Desarrollo y Salud Social tiene también un valor emblemático. Ustedes saben que allí se desarrolló el Cabildo Abierto, el 22 de agosto de 1951, donde el pueblo quiso llevar a Eva Perón de vicepresidenta de la República y finalmente la historia dispuso otra cosa y el 31 de agosto ella el renunciamiento.

 

Pero quisimos restaurar ese edificio y vamos a llamar a licitación pública, durante el curso ya de esta semana, restaurar este viejo edificio, que alguna vez quisieron sacarlo, tirarlo como si la historia pudiera correrse en rueditas o derrumbarse de un plumazo. Pero la historia siempre está ahí y aparece firme y erguida, como está este monumento y con la idea que nos trajo, me olvido del nombre porque está colaborando con nosotros, con Daniel Santoro, pero que lo veo allí: Maimo, que fue el que nos trajo la idea, y  que conjuntamente con Daniel Santoro, que seguramente luego va explicar ante los periodistas los que son las líneas de esto, que va a estar emplazado en la cara norte del edificio, la que mira al río, y la otra Evita, que fue la primera Evita que vi, esa que estaba en la razón de mi vida, que es la Evita con una inmensa rosa, un vestido muy importante, una sonrisa y una belleza maravillosas y su collar y aros de rubíes. Esa fue la primera Evita que vi, un día revolviendo los cajones del placard de mi abuelo, que tenía escondido lo que estaba prohibido en aquellos tiempos, el tema de "La Razón de mi Vida". Y allí vi por primera vez la foto de esa Evita.

 

Esta Evita, frente al micrófono es una Evita más de mi juventud, es una Evita más del reclamo, de la demanda, es la Evita que está aquí también, es la Evita que se está dirigiendo, interpelando a la sociedad. En el otro, en "La Razón de mi Vida" es la Evita que ayudaba, la que tendía la mano, pero esta interpelaba a una sociedad que era muy injusta, muy inequitativa y a la que ella le demandaba mayor justicia y mayor equidad. Por eso creo que declarar a esta mujer la Mujer del Bicentenario está lejos de cualquier connotación partidaria o ideológica y estoy segura que identifica como la Mujer del Bicentenario a todas las mujeres argentinas, inclusive a aquellas que no la quisieron o todavía siguen sin quererla pero nadie puede dejar de reconocer el rol histórico que esta mujer ha cumplido en nuestro país y en la historia del mundo.

 

También quiero, en el día de la fecha, hacer homenaje no solamente a una mujer que ya no está, sino también a un colectivo femenino, como son las mujeres que trabajan en las casas particulares, lo que comúnmente todavía se conocen con el nombre de personal doméstico y enviar un proyecto de ley, a la Cámara que deroga el estatuto, establecido por un decreto ley, luego del golpe del 55, Y porque yo escucho por allí hablar mucho de DNUs y a todo el mundo hacerse los rulos con los DNUs que, en realidad, los DNUs son instrumentos que están dentro de la Constitución y que cuando los firma, los firma un presidente democrático.

 

Yo quiero recordarles que en este país hubo decretos-leyes que todas las Cortes Supremas de Justicia desde 1930 en adelante reconocieron y que aún siguen vigentes como este, que es el 326/56 y que habla del Estatuto del Personal Doméstico.

 

Por lo pronto, nuestro proyecto de ley cambia este nombre; estamos hablando de un colectivo donde el 95 por ciento son mujeres y más de 1 millón de personas. Quiero eliminar esta palabra de "personal doméstico" porque domesticar hace mención a los animales, se domestica a los animales, era el zorro que le pedía al principito de Saint Exupery "domésticame" y yo creo que en el siglo XXI seguir hablando de personal doméstico es una afrenta a la condición humana, sea hombre o mujer, pero aún, en este colectivo femenino queremos por empezar decir que va a ser la Ley del Personal de Casa Particulares y, además, darle todos los derechos que le corresponden a un trabajador y de los que hoy carecen. (APLAUSOS)

 

Cuando lo mirábamos con Carlos Tomada, disposiciones tan anacrónicas como, por ejemplo, solamente tenía derecho a pedir despido alguien que tenía que trabajar 4 veces a la semana y más de 4 horas y sino, no tenía derecho...

 

Yo decía "pero, cuál es la razón, por qué 4 días, 4 horas, por qué no 5 días y 3 horas". Y después nos pusimos a pensar con Tomada y en aquel momento debe haber habido, en ese decreto-ley, alguien que a lo mejor tenía una empleada que trabajaba 4 horas y 4 días y entonces...Así se hacían muchas cosas cuando la hacían entre 1 o 2 nada más en momentos difíciles de nuestra historia y de nuestro país.

 

También reconocer la obligación de terminalidad de estudios para las chicas de 16 a 18 años, también dar la obligación de terminalidad de estudios para ayudar a todas aquellas que cumplen tareas en casas particulares y no han podido terminar sus estudios, los derechos a la registración, a la asistencia. (APLAUSOS) En fin, los derechos que hoy tiene un trabajador en la Argentina del siglo XXI y que aunque parezca mentira, todavía hay sectores que ni siquiera estaban contemplados por la legislación vigente como el caso de este decreto-ley.

 

Así que, en el Día Internacional de la Mujer, he firmado, la verdad que con mucho orgullo y con mucha fuerza, este proyecto de ley para ser enviado al Parlamento.

 

Y decirles, finalmente, en este Día de la Mujer, tal cual lo dije el mismo día que asumí, el día 10 de diciembre de 2007, que si recuerdan dije que sabía que iba a ser mucho más difícil para mí que para cualquier otro por el solo hecho de ser mujer. Algunos lo deben de haber escuchado con cierta displicencia, bueno, un discursito medio feminista esto de que iba a ser más difícil porque es mujer.

 

Bueno, los hechos sucedidos desde el 10 de diciembre de 2007 a la fecha, realmente nos dicen que también cuando es presidente es mucho más difícil cuando es mujer que cuando es hombre. (APLAUSOS)

 

Pero también que tenemos mucha entereza, que tenemos mucha fuerza, que vamos a seguir defendiendo los intereses del país, que vamos a seguir tratando de convencer a aquellos que creen que entorpeciendo la gestión de gobierno van a lograr victorias -que esto no es así-, que la historia nos ha demostrado que normalmente la historia termina condenando a todos aquellos que han contribuido a que a los argentinos las cosas le vayan mal y no les vayan bien y yo estoy aquí para que a los argentinos las cosas les vayan bien. Yo quiero estar en este lugar. (APLAUSOS)

 

Quiero dejarles ese lugar a otros que, tal vez, no han comprendido todo lo que ha pasado la sociedad argentina, el pueblo argentino; lo que realmente necesitamos es una dirigencia muy responsable y muy racional.

 

Por eso, vamos a seguir defendiendo con mucha firmeza esta vocación de seguir en el sendero de desendeudamiento del país, de crecimiento económico, de no políticas de ajuste que han causado tanta desolación, tanto dolor en la República Argentina y que, finalmente, han terminado también entorpeciendo la institucionalidad del país.

 

Por eso, quería hoy desde este Salón, rodeados de estas mujeres, ustedes, fundamentalmente, mujeres comprometidas cada una con lo que hace pero, fundamentalmente, comprometidas con la sociedad. En un día también muy especial porque estoy muy contenta -y lo voy a repetir-, lo dije hoy a la mañana ante el Canciller alemán, a quien también le ganamos a Alemania allá el Oscar, quiero también compartir con todas ustedes la alegría de haber obtenido un Oscar en esa película fantástica...Yo la verdad que tenía una fe bárbara, le desee mucha suerte pero la verdad que la película no es que tuvo suerte, la película tiene calidad, a ver si...(APLAUSOS)

 

Porque, a ver, parece ser que cuando a los argentinos nos va bien, es por suerte, por viento de cola o por lo que fuere. No, basta con los profetas del fracaso y de los quieren bajarnos el ánimo. La película ganó porque era mejor, porque era buena, porque era excelente su dirección. (APLAUSOS)

 

Hoy hablé a la tarde con Ricardo Darín y la verdad que una cosa que me gustó mucho cuando lo escuché a él y que había escuchado también a Soledad Villamil muy temprano por la mañana donde le daban todo el mérito a Juan José Campanella, su director, y yo le decía hoy a Ricardo Darín: obviamente, en una película tiene que ver mucho su director, pero un directo tiene que tener cantera de donde sacar material y la cantera de esa película son esos actores extraordinarios que son Ricardo Darín, Soledad Villamil, Pablo Rago, Guillermo Francella y todos los que trabajaron que hicieron un producto la verdad que me enorgullece como Presidenta de todos los argentinos y además como cinéfila que soy -la vi 2 veces- y la verdad que fue un triunfo importante.

 

Debe ser el primer Oscar que obtiene Racing, digo yo, porque se acuerdan que en la película está la cancha de Racing. (APLAUSOS) Cuando llegue a Olivos, sí, me van a pedir explicaciones de esto. Bueno, pero para los que no la vieron, la cancha de Racing y Racing tienen una impronta muy importante en toda la película. Pero bueno, era un Oscar para Racing que se lo merecía también. Así que, ¿por qué no?

 

Agradecerles infinitamente a todos, a todas y, bueno, y cuando pueda estar terminado este fantástico monumento que va a ser, no solamente para los argentinos, sino para todos los que vienen y quieren conocer acerca de Eva Perón en el mundo turístico que se acerca a la Plaza Francia a sacarse una foto en la estatua y esto que va a estar es una cosa bastante parecida a lo que tiene el Che Guevara en La Habana, para los que estuvieron en La Habana (APLAUSOS).

 

Quiero contarles una anécdota sobre este tema del Che Guevara y La Habana: resulta que un día esta con Hugo Moyano, el secretario general de la CGT, y empezó a hablar de este edificio y le dije: "Bueno, viste Hugo el edificio que está ahí, bueno, ¿viste como tiene el Che Guevara en La Habana?" Y yo vi que Moyano se empezó a poner pálido porque pensó -y después lo reconoció- "pensé que ibas a decirme que ibas a poner al Che Guevara en el edificio". Digo, "no, bueno no, y por ahí va a haber más problemas si la pongo a Eva", le digo.

 

En realidad me acuerdo de esa anécdota porque me dio mucha gracia porque me dice "por un momento pensé que ibas a decir que ibas a poner al Che Guevara en el edificio". No creo que tendría tampoco nada de malo porque es otro icono importante y un orgullo de los argentinos. (APLAUSOS)     

 

Siempre digo que la gente que se hace cargo de lo que piensa y pone su cuerpo de acuerdo con lo que piensa, "chapeau". Uno puede estar de acuerdo o en desacuerdo, pero en realidad, cuando uno pone su cuerpo para lo que está de acuerdo y sus ideales, me parece que es algo que merece respetarse, sobre todo, en tiempos donde la valentía no suele ser un atributo demasiado encontrable, si se me permite el neologismo.

 

Así que, bueno, acá estamos todas juntas compartiendo este momento y quiero, una vez más, agradecerles la presencia de todos ustedes y, además, pedirles, a los que no son mujeres, es decir, al otro género, que a ver si logramos que el Día Internacional de la Mujer sea todos los días para terminar con la violencia doméstica (APLAUSOS) y reconocer...Sueño con el día en que no seamos vistas más como una minoría, porque somos más de la mitad y, por lo tanto, tenemos derecho a ser exactamente iguales en los derecho y obligaciones con la otra mitad del planeta.

 

Eso es lo que queremos pero, mientras tanto, seguimos trabajando cada una en su lugar: yo de Presidenta, ustedes de artistas, de cantantes, de Cascos Blancos, de militares, de Madres, de Abuelas, de canillitas también, de todo chicas. (APLAUSOS) Las mujeres tenemos que hacer de todo.

 

Así que, nada, quería compartir este momento con todas ustedes. Gracias y feliz Día Internacional de la Mujer para todas.

 

Muchas gracias. (APLAUSOS)