Gracias, muchas gracias.
Quiero decirles que estoy muy contenta de estar hoy aquí en Villa Jardín, en Lanús, pero que además estoy muy orgullosa del trabajo que están haciendo nuestras cooperativas de "Argentina Trabaja" (APLAUSOS); 35 cooperativas, más de 2.500 hombres y mujeres que están trabajando y recién pude verlo, recorriendo la ribera del Riachuelo y viendo la obra transformadora que han hecho, han transformado un basural lleno de ratas en un lugar digno que merece nuestra sociedad. (APLAUSOS)
Ahora aquí, en Villa Jardín, Lanús, la ribera del Riachuelo es más linda y más prolija que del otro lado de la Capital. Los felicito a todos. (APLAUSOS) Esos árboles plantados, este lugar donde ustedes se están capacitando también, el contralor que hacemos de nuestros chicos en materia sanitaria es parte de este formidable Plan de "Argentina Trabaja" que lanzamos hace meses y que hemos implementado con una esperanza y un esfuerzo no solamente por lograr que la gente tenga trabajo, sino que además se organice junto a otros en cooperativas que les permitan llevar adelante obras transformadoras y al mismo tiempo ganarse un sustento. Es también parte de un modelo de país que ha centrado en el trabajo, en el trabajo digno para sus habitantes, la forma de recuperación.
Por eso, lanzamos los planes de Obra Pública más importantes que se tenga memoria, por eso los planes de Vivienda, por eso también la Asignación Básica Universal para aquellos chicos que todavía sus padres no tienen trabajo. (APLAUSOS)
Déjenme contarles que hoy más de 3 millones y medio de chicos que antes sus padres no recibían nada, porque son trabajadores en negro, hoy tienen su Asignación Familiar. Y déjenme contarles también que, como Presidenta, hemos atravesado este año 2009, el año más difícil en la historia económica del mundo, con un éxito que otros no han podido lograr. Y no solamente ha sido gestión; ha sido un modelo económico, social, político y cultural que instalado desde el año 2003 ha priorizado la defensa de los intereses de los argentinos, por sobre todas las cosas.
Y hablando de intereses, de los intereses de los argentinos, alguien me decía que habían limpiado de ratas el Riachuelo, y me hizo acordar a los buitres, a esos que una vez más acechan desde afuera a los argentinos para interrumpir un proceso político y económico que no solamente ha reconocido en el trabajo y en la generación de riqueza, sino también en el desendeudamiento de la Argentina para que nunca más vuelvan a acogotarnos como lo habían hecho antes cuando explotamos en el año 2001. (APLAUSOS)
En el año 2001, argentinos, moría una Argentina que había vivido debiendo, pagaba y cada vez pagaba más, porque cada vez la endeudaban más; no había superávit fiscal, no había superávit comercial, era deuda, más deuda, más deuda, más deuda y finalmente explotó como no podía ser de ninguna manera. Los argentinos en el suelo, pero afuera hicieron muy buenos negocios los que se llevaron el dinero de los argentinos. Son los mismos, son los mismos fondos. (APLAUSOS)
¿Ustedes saben qué es un fondo buitre? Yo les voy a explicar. Vieron los buitres, esos pájaros de alas negras que comen carroña, que comen carne muerta. A estos fondos externos se los llama buitres, porque están esperando que los países caigan en desgracia, que no puedan pagar su deuda, que caigan en default como caímos nosotros en el 2001; van, compran esos títulos por monedas, por centavos y después pretenden que se les devuelva el valor nominal. Por eso se los llama fondos buitres, porque van sobre países al borde del abismo y de la muerte, como estuvimos en el año 2001.
Y hoy, que tenemos reservas por más de 48.000 millones de dólares, como nunca las tuvimos, en realidad si contáramos los 10.000 millones que le pagáramos al Fondo, estaríamos en 58.000 millones de dólares. Esto lo han acumulado los argentinos; ustedes trabajando, los empresarios produciendo, unos para el mercado internos otros exportando; es por eso que vienen, porque quieren nuevamente apoderarse de los fondos de los argentinos.
Por eso, nosotros hemos llamado y hemos abierto la deuda en el año 2005 y hemos logrado un canje exitoso y estábamos abriendo otro canje para salir definitivamente del default. A algunos no les interesa esto; quieren una Argentina que pague lo que ellos dicen y no lo que los bonos realmente valen. Por eso, duele mucho, duele mucho como argentina, ver como políticos u otros sectores mediáticos, hacen el juego a esos sectores. Realmente siento muchas veces que no han entendido lo que es definitivamente representar los intereses del país.
Les voy a hacer una sola pregunta: ¿ustedes se imaginan a legisladores norteamericanos apoyando el embargo de reservas de su país?, ¿ustedes se imaginan a dirigentes apoyando este tipo de maniobras contra su propio país? Realmente yo quiero convocar a todos a la reflexión, a que no volvamos a cometer los errores del pasado, sobre todo aquellos que tuvieron una inmensa responsabilidad en cómo terminó la Argentina en el año 2001. El default no lo declaró este Gobierno, la deuda que estamos pagando y vamos a seguir pagando no es la deuda que contrajo este Gobierno, al contrario, este Gobierno viene pagando y pagando desde el año 2003 todas las deudas, las sociales con el pueblo argentino, la deuda también. (APLAUSOS)
Y quiero decir algo; he escuchado a algunos hablar de deuda legítima o ilegítima. Señores y Señoras: el momento de analizar si la deuda dejada por la dictadura era legítima o ilegítima, era durante el primer gobierno democrático. Una vez que el primer gobierno democrático y los posteriores reconocieron la deuda, no hay manera de hablar de deuda ilegítima por más que suene lindo y algunos lo agiten como un slogan electoral; vamos a ser sensatos y serios. (APLAUSOS)
Hemos escuchado demasiado a muchos que nos prometían revoluciones, cambios y transformaciones y cuando llegaban solamente era falta de trabajo, miseria, palo y a la bolsa. No más, no más esa Argentina de falsos profetas. (APLAUSOS) Necesitamos otra clase de profetas; necesitamos los profetas del optimismo, de la esperanza, del trabajo, del esfuerzo, los profetas que relaten la verdadera historia que es la historia que hemos vivido en estos años de crecimiento sin igual donde batimos récord de exportaciones, donde generamos millones de puestos de trabajo, donde pagamos deuda y del 160 por ciento que debíamos, hoy debemos poco menos del 40 por ciento y vamos a seguir en ese camino, porque queremos ser un país serio en serio, un país que se hace cargo de sus cosas, porque las reservas son nuestras, de los argentinos, pero las deudas también son de los argentinos y tenemos que hacernos cargo con responsabilidad. (APLAUSOS)
¿Qué es lo que quiere esta Argentina de su Presidenta? Esta Argentina quiere con ese Fondo del Bicentenario pagar la menor tasa de interés posible para pagar la deuda. Por esos 48.000 millones de dólares, apenas nos pagan por año el 0,5 por ciento, nada más que eso. Por cada 100 millones de dólares que tenemos depositados en el exterior, nos pagan 500.000 dólares. Si tuviéramos hoy que acceder al mercado de capitales, deberíamos pagar por cada 100 millones de dólares el 14 ó el 15 por ciento.
Tienen que darse cuenta ustedes que todos los días cuentan los centavos uno a uno que saben tal vez de economía mucho más que otros que han ido a las universidades, porque ustedes tienen la universidad de la vida. (APLAUSOS) A ustedes no les enseñaron economía en Harvard ni en Yale; a ustedes les enseñó economía la República Argentina y su historia de sinsabores, frustraciones y fracasos. (APLAUSOS) Esa fue la escuela donde nuestro pueblo aprendió economía, a vivir el salto de mata, a juntar centavo tras centavo para comer o para pagar el estudio a sus hijos.
Ustedes saben de qué les estoy hablando y ustedes también saben la Argentina que vivimos hasta el año 2003 y la que logramos construir entre todos después. No es la Argentina, ni de un partido, ni de un presidente o de una presidenta. Esta Argentina es de ustedes, les pertenece y hay algunos que se las quieren venir a robar. (APLAUSOS)
No permitan que los mismos que dejaron el país al borde de la disolución, que nos dejaron en el Banco Central menos de 8.000 millones de dólares o en el '89 menos de 800 millones de dólares, o que hicieron un megacanje vergonzoso, que todavía la Justicia no ha terminado de investigar, que raro, cuando se pagan tasas del 15 o del 20 por ciento no hay juez que investigue, cuando se quiere pagar menos intereses allí intervienen para impedir que se constituyan esos fondos para pagar menos intereses. ¡Qué Argentina tan extraña la nuestra, qué Argentina tan extraña! (APLAUSOS)
Por eso, les digo que cuidar lo logrado no es defender al gobierno, yo no quiero que nadie me defienda, la verdad es que siempre me he sabido defender bastante bien solita. Yo quiero solamente el amor de ustedes, que me acompañen, que me den la fuerza que me dieron cuando recién llegué a la ribera y me decían: "no sabe lo que era esto y lo que hemos trabajado, gracias por poder hacer las cosas mejor para nuestros hijos, para nuestras familias, para nuestros padres" (APLAUSOS) Con eso me alcanza y me sobra. (APLAUSOS)
Quiero que sepan que cada vez que logro que un argentino pueda solucionar su problema, que un argentino pueda conseguir trabajo, que puedo inaugurar una escuela más, me siento feliz. Quiero decirles que en marzo vamos a empezar las clases del Bicentenario inaugurando en la República Argentina más de 100 escuelas. (APLAUSOS) Vamos a festejar este Bicentenario con más educación, como más trabajo, con más producción, con más exportación, con más mercado interno, como lo hemos venido haciendo y lo hemos logrado también en este año 2009, que hemos batido récords de superávit comercial.
Y lo vamos a hacer porque tenemos convicciones, tenemos fuerzas y fundamentalmente el coraje que todo argentino que se postula frente a ustedes para hacer su presidente o su presidenta, tiene que enfrentar todas las dificultades, todos los desafíos, enfrentar a todos los enemigos de afuera y de adentro del país, no míos. Yo no tengo enemigos, la que tiene enemigos es la Argentina. (APLAUSOS) Una Presidenta no tiene enemigos, los que tienen enemigos son los intereses del país, el que tiene enemigos es el modelo económico y social que ha permitido renacer a la Argentina. Esta Presidenta no tiene enemigos, porque, vamos, yo me voy en el 2011 y vendrá otro, pero les puedo asegurar que esos intereses están al acecho para volver a la vieja Argentina. De todos nosotros depende que el futuro sea nuestro y no de aquellos que nos hundieron una y mil veces en una Argentina que queremos olvidar.
Gracias, muchas gracias y mucha fuerza. (APLAUSOS)