Muy buenos días a todos y a todas.
Señores gobernadores de las provincias argentinas; señor presidente de YPF Argentina, ingeniero Enrique Eskenazi; señor CEO de YPF Argentina, Sebastián Eskenazi; señor embajador del gobierno de España, y a los que no puedo divisar los saludo a todos y a todas: realmente ha sido muy importante lo que ha desarrollado Sebastián Eskenazi, no solamente la segunda parte que hace ya concretamente lo que constituye el Plan Estratégico 2010-2014, sino también a su visión como un joven empresario argentino al frente de la más grande e importante en términos de volumen económico y de aportes contributivos al Estado que es YPF, que no es solamente una empresa importante para los argentinos porque sea grande y pague muchos impuestos, YPF tiene que ver con el corazón, con la historia de los argentinos, tiene que ver con los sueños de una Argentina que pudo ser y no fue y que ahora estamos intentando precisamente retomar ese camino.
Yo creo que el Bicentenario es una excelente oportunidad para todos los argentinos, cualquiera sea el lugar que estos ocupen, pero fundamentalmente para quienes tenemos responsabilidades institucionales, sociales, empresariales, y realmente observar estos 200 años no para lamentarnos pero sí para aprender y no volver a cometer los mismos errores. Esos 17.000 millones, Sebastián, no son un mes del presupuesto, es un poquito menos de la mitad pero es mucha plata, es mucha plata igual y la aporta precisamente esta importante empresa.
Ahora, el desarrollo del mercado energético en la Argentina ha tenido que ver directamente también con un modelo económico, porque la energía requiere necesariamente consumo y no sólo un consumo que tenga que ver únicamente con lo residencial o domiciliario, sino fundamentalmente un consumo que tiene que ver con la producción industrial, con la agroindustria y con todos aquellos sectores que agregan valor a nuestros productos y generan puestos de trabajo.
Yo me acuerdo que había gente contenta porque se exportaba energía en otras épocas; en realidad en los países serios, en los países desarrollados, exportar energía casi es un pecado. El gran valor es consumirla adentro del país porque significa que somos un país que tiene producción, que tiene fábricas, que tiene trabajadores y que, por lo tanto, necesita ese consumo de la energía.
Junto a ello hubo también una política muy importante por parte del gobierno en apoyar a través de políticas puntuales como pueden ser Petróleo Plus, Gas Plus y, al mismo tiempo, mantener muchas veces con críticas, es cierto, un determinado nivel interno en el precio de los combustibles, que también ha sido -y es bueno señalarlo- una de las causas de la competitividad argentina y que muchos argentinos puedan acceder a sus beneficios.
No ha sido tampoco menos importante el aumento del combustible en lo que ha crecido en términos numéricos el parque automotor, que significa nada más ni nada menos que más argentinos han podido acceder a un automóvil.
Podría seguir enumerando las causas del crecimiento, pero además también obviamente la política que se está llevando adelante en materia de inversión y que a partir de este plan estratégico va a ser muy superior todavía a la que se ha venido realizando.
Me parece realmente algo muy federal, algo muy nacional, la decisión de explorar el conjunto del país, porque esto va a dar una gran oportunidad a muchas provincias en las cuales tal vez hoy no tengan este elemento y pueda encontrarse precisamente.
Pero creo que también es bueno decir que ayer, así como hoy estoy aquí en esta importante empresa argentina, me he reunido con importantes empresarios de otras actividades que me han anunciado importantes inversiones, por ejemplo en el NEA-NOA. El titular del grupo Ledesma, el doctor Pedro Carlos Blaquier, estuvo reunido conmigo para anunciarme 212 millones de dólares de inversión entre el 2010 y el 2011 para todo el NEA y NOA argentino.
También en materia de biocombustibles, todos sabemos que a partir del año 2010 vamos a tener que cortar nuestras naftas de origen fósil y agregar combustible no de origen fósil, y esto también significa generación de puestos de trabajo en todo el NEA y NOA argentino.
En estos días hemos abierto la licitación que en un principio era para 1.000 megavatios en energías alternativas, no de origen fósil, y realmente hemos tenido un éxito, porque se ha llegado a casi 1.500 megas, casi 500 megas más sobre lo que había sido el llamado a licitación.
Hay también inversiones importantes que se están realizando en Tierra del Fuego. Estamos atravesando el estrecho para incorporar, para inyectar a la red, al San Martín, 7 millones de metros cúbicos día que luego de otras obras pueden llegar hasta un máximo entre 18 y 21 millones de metros cúbicos. Y todo va a ser poco, porque realmente, si recuperamos el nivel de actividad como sabemos que lo vamos a hacer en el 2010, vamos a tener mucha demanda.
Hace pocos días también me tocó visitar la provincia de Santiago del Estero, desde aquí diviso a su gobernador, doctor Gerardo Zamora, allí inauguramos una importante planta de crashing de soja, valor agregado a un producto primario. Y para que ustedes tengan una idea de la demanda energética, el pueblo de Frías en su totalidad consume 6 megavatios, la empresa que inauguré, que no solamente va a abastecer el mercado interno sino fundamentalmente la exportación, consume 8 megavatios, 2 megavatios más que todo el pueblo y 100.000 metros cúbicos-día de gas.
Ese mismo día fuimos también al pueblo de Forres de 4.500 habitantes a inaugurar un frigorífico con capacidad de faena para 2.000 animales por día. El pueblo de Forres consume 0,5 megavatios; el frigorífico solo consume 2 megavatios. Y así podría seguir enumerando para que podamos dimensionar la necesidad de seguir adelante y profundizar lo que constituye, a mi criterio, el plan estratégico no solamente de YPF´, que es de lo que venimos a hablar aquí, sino también el plan estratégico de energía en crecimiento que hemos tenido en extensión de redes. Lo charlábamos con el gobernador Zamora el otro día, siempre se dijo en la Argentina para qué vamos a poner o a hacer infraestructura si todavía no están las industrias; es exactamente al revés, primero tiene que estar la infraestructura en materia energética, en materia vial y recién después se radican las industrias.
Lo charlábamos con el importante grupo económico tucumano, primer exportador mundial de limones que es el que hace la inversión de más de 90 millones de dólares en esta planta de crashing. Ellos empezaron como productores agropecuarios primarios, sin ningún tipo de valor agregado; son propietarios de 40.000 hectáreas de soja, pero han decidido agregarle valor porque la retención también le da competitividad para agregar valor y salir vía Pacífico o vía Rosario, también merced al ferrocarril que restituimos, merced a las rutas que construimos y a la energía que se provee.
Esto es muy importante porque los planes de infraestructura habían sido abandonados en nuestro país; es más, la obra pública era considerada un gasto público y no una inversión. Y yo creo que este plan que hoy presenta YPF reafirma por sobre todas las cosas un optimismo y una esperanza en el presente y en el futuro. Esto que estamos viendo lo vemos en casi todos los empresarios argentinos, porque también ayer recibíamos, por ejemplo, a los productores de electrónica de Tierra del Fuego que entraron en crisis, me acuerdo, y tuvimos que intervenir desde el Estado precisamente para evitar el despido de miles de trabajadores en Tierra del Fuego y merced a la ley que envió el Poder Ejecutivo y que aprobó el Parlamento argentino, vamos a poder producir la mitad de los celulares que se compran en la Argentina en nuestro país.
Para que ustedes tengan una idea de la importancia de estas cuestiones, en el 2008 la Argentina importó electrodomésticos y celulares también por el valor de 6.000 millones de dólares. No estamos hablando solamente en términos de cómo afecta esto la balanza comercial, si no imaginemos lo que son 6.000 millones de dólares producidos en la Argentina en términos de generación de puestos de trabajo y además con un grado de calificación, lo que también exige un determinado nivel salarial. Creo que la ecuación mayor calificación, mayor salario es tan evidente que no es necesario explicarla, pero como siempre digo, en la Argentina también tenemos que explicar las cosas obvias.
Por eso estamos tan empeñados en generar no solamente trabajo, no solamente valor agregado a nuestros recursos primarios, sino también hacerlo en excelencia, en tecnología, en innovación, de modo tal que también pueda llegar ese crecimiento a toda la sociedad.
Quiero realmente felicitar el ingeniero Enrique Eskenazi, a quien conozco desde hace muchos años cuando ganaron la licitación del Banco de la Provincia de Santa Cruz, para que nadie diga nada ha ganado varias licitaciones también, en Santa Fe, en San Juan, para que sirva la aclaración y no se piense que me conoce solamente a mí. Parece que algunos empresarios sólo conocieran a los Kirchner y otros empresarios conocieran a otros.
Realmente quiero agradecerle a él, más allá de YPF, porque ha sido un hombre que siempre ha creído profundamente en el país y siempre lamentó las cosas que sucedían en el país y que implicaban frustraciones muy grandes. En ese sentido formó a sus hijos, a Sebastián, a Matías que no lo veo pero por ahí debe estar, y me parece muy importante que hombres empresarios, hombres y mujeres argentinos, hombres que han tenido la inmensa suerte, que por ahí no han tenido otros argentinos, de tener éxito en su vida, éxito comercial, éxito empresarial, lo vuelquen en más inversiones, en agradecimiento y en reconocimiento a su país.
Yo creo que si todos los que hemos logrado cosas en la vida en este bendito país de la educación pública y gratuita, de la salud pública y gratuita, de la posibilidad de la movilidad social ascendente gracias a sindicatos que pelean por los derechos de sus trabajadores, y que muchas veces hay conflictividad, es cierto, pero es parte de la democracia. En el único momento que no hay conflicto, que solamente hay silencio, como decía Sebastián, es cuando no hay democracia. Prefiero el conflicto y el ruido de la democracia al silencio de otros períodos trágicos que ha vivido el país. Por eso no le tengan miedo al ruido, en tanto no sea tan ensordecedor que no podamos escucharnos.
Pero lo importante es entender la necesidad del diálogo, muchas veces también el tema de que hay intereses contrapuestos y hay que discutir y debatir, y alguno va a tener que ceder de un lado o del otro, o ambos, porque esto también es el arte de la negociación. El arte de la negociación no es hacer todo lo que uno quiere o llevarse todo lo que uno pide, y si de eso alguien sabe son nuestros sindicatos. El arte de la negociación es saber qué parte podemos demanda, para que esa parte finalmente no termine rompiendo el todo que es lo necesario para conservar y para seguir funcionando como empresa y como país.
Por eso felicitaciones en el día de hoy, agradezco la presencia de todos los gobernadores y agradezco también a los trabajadores que están aquí presentes, sus dirigentes sindicales, al señor Secretario General de la CGT que también nos acompaña. Por ahí tenemos momentos duros que no solamente son compartidos por los empresarios cuando hay discusiones fuertes, sino también son compartidos por el Gobierno porque muchas veces puede haber problemas con el gas o con el suministro de combustible, pero siempre hemos podido llegar a un acuerdo que nos permitió seguir haciendo crecer a la Argentina.
Los convoco a todos para este Bicentenario, para este 2010, a seguir trabajando para recuperar lo que nos quitaron de afuera en términos de crecimiento y que hemos sabido sortear también, bueno es decirlo, tal vez como nadie esperaba que pudiera ser sorteado. Ayer charlaba con el ministro de Economía, Amado, y releíamos algunas de las cosas que se escribían en enero, febrero, marzo de este año, no estoy hablando de hace dos siglos, hubiéramos estado para el suicidio directamente, y sin embargo no. Nos pusimos a trabajar en planes que asistían a las empresas a través de Repros, en planes que pudieran trabajar y salvar empresas a través de la intervención de funcionarios para no perder las fuentes de trabajo, nos pusimos a hacer un fuerte impulso de todo el consumo. Y la verdad que cuando uno examina el uso de la capacidad instalada de los 12 bloques industriales, ha vuelto a crecer el bloque industrial que era uno de los más retrasados en materia de refinación, éste ha vuelto a crecer y a superar los niveles que tenía en noviembre del año pasado, lo cual revela la recuperación de la refinación de petróleo, que es energía, la recuperación del sector metálico base, fundamentalmente aluminio y acero, insumos básicos, y esto nos está revelando que la demanda se está reactivando y estamos nuevamente en un período de crecimiento.
La verdad que ayer también presentábamos en Pacheco, Tigre, en la planta de Volkswagen, un hecho también a resaltar. La primera vez que Volkswagen Internacional presenta un auto para vender en el mundo fuera de Alemania es en la República Argentina. Volkswagen eligió a nuestro país como plataforma de lanzamiento y de construcción obviamente, de su primera pick up para vender en todo el mundo. Los alemanes son gente exigente, son gente que no toma decisiones a tontas y a locas, ni por lo que le dicen ni por lo que escuchen en algún comentario de radio, televisión o algún diario; las decisiones a ese nivel y en ese nivel de empresa se toman afortunadamente con parámetros que hacen a la seriedad y a la responsabilidad de la economía.
Y realmente pude ver la alegría de miles operarios jóvenes de la industria automotriz, que los teníamos licenciados en el mes de enero y febrero, a muchos con un 80, 60 por ciento de su salario y con el fantasma de que si no mejoraba la situación podía llegar finalmente el telegrama de despido. Yo veía ayer en la cara de esos chicos la alegría de los que le han visto la cara al diablo y que hoy afortunadamente han podido recuperar la certeza porque ese mercado, el automotriz, que también nos pronosticaron que caía al 50 por ciento, solamente ha tenido una reducción respecto del mejor año de toda su historia, que fue el 2008, de un 7 por ciento; 550.000 autos se patentaron este año, más de medio millón, contra los 592.000 del año pasado que habían sido un record.
Esto fue también una política muy fuerte y lo decía ayer Víctor Klima, un austriaco que parece argentino -hay argentinos que parecen austriacos- la política de articulación nuevamente entre el sindicato, en este caso SMATA, la empresa y el Estado, a través de políticas que hicimos, ya sean Repros, a través de ayudas directa por ejemplo a GM para poder presentar el nuevo vehículo que presentó; a través del financiamiento de la ANSES, a ACARA, la cámara que agrupa precisamente a todas las concesionarias de autos, nos agradecía a través de nota todo lo que había sido el impulso al consumo. Porque lo que hacíamos en aquellos meses del estío de este año, con Débora y otros funcionarios en Olivos, que parecía una sucursal de Compre Ya, era fundamentalmente generar expectativas para el consumo, porque ante toda crisis lo primero que hace la sociedad es retraer el consumo. Y precisamente lo que constituye a prima facie una defensa, retracción de consumo, termina constituyendo paradojalmente la tumba de la sociedad en términos económicos, porque si no hay consumo obviamente termina afectado hasta el propio que no consume.
Estas son las cosas que hay que hacer cuando se está al frente de un país o de una provincia o de un municipio, no sentarse a lamentar sobre las cosas que nos pasan sino a trabajar para revertirlas. Y me parece que es la decisión que tenemos que tener todos los argentinos en todos los momentos y en todas las cosas, sentir mucha pasión por las cosas que uno hace, esa es la clave.
Esa es otra cosa que siempre charlamos con Enrique Eskenazi, él tiene pasión por la Argentina igual que yo, pasión y ponerse la camiseta, la camiseta del país, no del Gobierno, los gobiernos son circunstanciales y los elige la gente. Lo que es importante es ponerse la camiseta del país y los intereses del país. Y saber que si nos va mal nos va a ir mal a todos, tal vez a unos les vaya mal antes que a otros, los más vulnerables, los más débiles, pero cuando le comienza a ir mal a una sociedad, finalmente termina más tarde o más temprano llegándole a todos.
Por eso digo que el esfuerzo conjunto, convocar al trabajo y la articulación entre el Estado, el sector privado, el sector público, los trabajadores, es clave para abordar el Bicentenario, pero no en términos, como decía Sebastián también, de uno o dos años, sino en términos de pensamiento y de actuación estratégica. Pensar una Argentina a largo plazo, esta es la obligación de todos, funcionarios, empresarios, trabajadores, dirigentes sociales y todos los argentinos.
Muchas gracias y muy buenos días a todos y a todas. (Aplausos)