Este vehículo - la Amarok - es el primer vehículo que se fábrica fuera de Alemania, de la Volskwagen, para vender a escala global. Esto es una prueba de confianza de la empresa, que debo reconocerlo tal vez no lo hubiéramos logrado sin el concurso e este gran amigo de la Argentina, que es el Doctor Viktor Klima, y a quien en nombre de todos los ciudadanos le agradezco la confianza y la valorización que hace de nuestro país y de sus recursos humanos: necesitamos muchos Viktor Klima en el país, en el sector empresario, que apuesten por la inversión aquí y que nos consideren, no al Gobierno, sino a ustedes, a nosotros, a los argentinos como un sujeto digno en quien confiar, eso ha elevado la autoestima y querido amigo quiero agradecédselo, sobre todo en un año que ha sido tal vez más difícil, no sólo aquí en la Argentina sino como todos sabemos en el mundo entero. (APLAUSOS).
Esta vez no fue con en el 2000, cuando usted llegó a la Argentina, donde la crisis la incubamos, la produjimos y la sufrimos aquí; esta vez la crisis vino de afuera, pero lejos de amilanarnos, lejos de asustarnos lo que hicimos fue poner manos a la obra y neuronas en funcionamiento para ver cómo podíamos contrarrestar esa ola que se venía y que auguraba que la industria automotriz, por ejemplo, iba a tener un 50 por ciento de caída, con respecto a la producción del año anterior, del 2008, que había sido de 597.000 autos, la mejor de toda la serie y de toda la historia en nuestro país. Y la verdad que recuerdo esos meses de enero, febrero, marzo, cuando junto a Débora, nos pusimos a vender, Olivos parecía casi una sucursal del "compre ya", vendíamos planes de autos, de bicicletas, de lo que fuera porque lo que era necesario era volver a instalar la necesidad del consumo precisamente que es lo que moviliza la producción.
Y en aquel momento, y ustedes lo saben trabajadores de la SMATA, mejor que yo, en enero y febrero nuestras fábricas automotrices, terminales autopartistas llegaron a estar en un 22 por ciento, 23, 24 por ciento de uso de sus capacidades instaladas, turnos enteros con licencia o con media jornada, automotrices y terminales con planes REPRO para que no hubiera despidos, la ayuda que dimos desde el Ministerio de Trabajo a todo el sector industrial para que precisamente no se cayeran las fuentes de trabajo, los planes que desde la ANSES lanzamos para compra de autos 0 kilómetros o directamente para ayudar a la terminación de determinadas plataformas en las distintas automotrices.
Y hoy vengo aquí -en diciembre- a decirle que hemos vendido más de medio millón de autos y de aquel 50 por ciento que parecía que íbamos a caer solamente hemos disminuido las ventas en un 7 por ciento, respecto del año pasado que fue record en la historia. Esto no fue viento de cola, al contrario, esto hubo que hacerlo contra el viento, contra la marea, contra los que no creían, contra los que desconfiaban, contra los que decían que era imposible sustraerse a los efectos de la crisis. Lo hicimos porque sabemos que no hay peor cosa frente a una crisis que cruzarse de brazos, hablar o criticar. Lo que hay que hacer frente a una crisis es poner trabajo, sacrificio y ganas de superarla y por eso hoy podemos decir que hemos vendido más de 550.000 unidades y que además, en este último mes de noviembre, uno de los 12 bloques industriales que más se ha recuperado es precisamente el de la industria automotriz; de aquel 22 por ciento de capacidad instalada de los primeros meses del año a más del 70 por ciento del uso de la capacidad instalada actualmente. Esto ha sido, porque nos sentamos en una misma mesa y de un mismo lado el Estado, los trabajadores y la empresa. Es la única manera de poder articular el esfuerzo de producción y seguir adelante con el crecimiento que veníamos sosteniendo desde el año 2003.
Ya pasó lo peor y en este año 2010 que viene auguro que a lo mejor llegamos a las 700.000 unidades que debe ser el objetivo que nos debemos fijar trabajadores, empresarios y Estado para precisamente seguir sosteniendo como uno de los pilares del crecimiento a la industria automotriz y al sector autopartista, unidad indisoluble en la construcción de este sector.
También las cuentas se van recuperando. Luego de haber perdido casi recaudación por baja de consumo y por crisis en el sector externo de más de 34.000 millones de pesos de ingresos genuinos que no ingresaron obviamente a las arcas y que estaban presupuestados, este mes de noviembre vamos a superar en 46,2 por ciento el superávit fiscal primario del año pasado llegando a 2.800 millones de pesos y aumentando las transferencias en bienes de capital.
Tampoco es viento de cola, es un inmenso esfuerzo, es gestión, es administración que es en definitiva la obligación que tenemos todos quienes hemos sido sometidos a la voluntad popular desde un municipio, una gobernación o tal vez de la más alta magistratura.
También por esa gestión, por esa administración en este año 2009, el peor año en la historia económica del mundo, nosotros en la Argentina vamos a batir récord de superávit comercial, esto es la diferencia entre lo que importamos y lo que exportamos y lo vamos a hacer contra el mejor superávit comercial de nuestra historia que fue también el del año pasado 2008. Ya llevamos cerrado noviembre 15.727 millones de dólares contra 11.700 millones que teníamos a la misma altura el año pasado, también es gestión y administración.
Y ahora tenemos otro desafío, el desafío como decía Víctor de poder llevar adelante el año que viene el acuerdo luego de 23 años de construido el MERCOSUR y demás de 10 años de gestiones infructuosas, ver si podemos hacer el esfuerzo y llegar a un acuerdo entre la Unión Europea que va a estar presidida por el gobierno de España y América latina, países del Caribe y MERCOSUR que va a estar presidido por la República Argentina, es un gran desafío y que antes de llegar aquí yo le pedía a Víctor que me ayude porque el capítulo automotriz entre ambas regiones no es un capítulo menor y tenemos que cerrarlo exitosamente.
Y yo estoy convencida absolutamente de las posibilidades que tenemos como país, porque en otro momento una crisis de esta naturaleza hubiera sido devastadora, en nuestros trabajadores, en nuestras empresas, en nuestros comerciantes, en nuestras familias. Solamente la inmensa fortaleza que logramos acumular en el proceso de industrialización, iniciado en el año 2003, nos dio la fuerza para poder aguantar la crisis del sector externo, en materia también de exportaciones, un sólido y fuerte mercado interno fue el que permitió nadar contra la corriente y contra el viento y estamos avizorando la costa y vamos a llegar seguros y firmes de las posibilidades infinitas que tiene nuestro país en la necesaria diversificación de su producción y en el rol que ustedes, la industria automotriz, tiene para desempeñar como lo ha hecho en estos seis años y medio.
Por eso, no podía estar ausente en esta presentación, en este honor que le significa a la Argentina ser plataforma de la primera pick up Volskwagen para el mundo, hacerlo desde aquí, desde la provincia de Buenos Aires, desde el Partido de Tigre, junto a todos ustedes, trabajadores, empresarios, autopartistas, hombres y mujeres que apuestan a que la Argentina siga creciendo porque esta es nuestra casa, acá están nuestros hijos, acá tenemos nuestras empresas, nuestras casas, acá queremos que vivan y se desarrollen nuestros hijos y que tengan posibilidades. Y por eso vamos a redoblar el esfuerzo en gestión, en administración y en articulación entre los trabajadores, las empresas y el Estado para seguir construyendo la Argentina que todos nos merecemos.
Felicitaciones a los trabajadores, felicitaciones a usted Viktor y a sus colaboradores, gracias a Volskwagen, y por sobre todas las cosas, con el orgullo infinito de ser argentinos seguir poniéndole el hombro a nuestro país. Muchas gracias y a disfrutar, ahora sí, de la pick up Amarok que estoy segura va a ser fantástica. Muchas gracias. (APLAUSOS).