Muy buenas tardes a todos y a todas; señor Coordinador, ex presidente de Costa Rica; señor Presidente de la República de Portugal; señor ex presidente de la República de Perú; señor titular de la CEPAL y hasta donde me alcanza la vista, empresarios y empresarias: yo quiero referirme a los tres puntos centrales que tocó nuestro coordinador, y que tuvo que ver el primero de ellos -he tomado rigurosa nota de su intervención- con el comportamiento de América latina frente a la crisis que, de acuerdo con sus propias palabras, habría sido explicitado por la titular de CEPAL en el día de la fecha.
En realidad, el comportamiento de nuestros países en la región frente al temporal, creo que sería demasiado generoso decir "temporal", diría terremoto nunca visto desde 1930 que sacudió la economía del mundo y que precisamente provino del mismo corazón del modelo que durante dos décadas se quiso instalar y, donde precisamente se construyó la idea y la imagen de que el Estado era casi un estorbo en la actividad económica y que el mercado, no solamente todo lo resolvía, sino que asignaba los recursos en forma correcta y que del mero crecimiento económico se desprendía la teoría del derrame o desborde, a medida que crecía la riqueza se iba desbordando, y llegaba así finalmente a todos los sectores de la sociedad; se conoció con el nombre de Consenso de Washington, para ser más explícitos.
La caída de Lehman Brothers marca dramática y estrepitosamente la muerte de ese modelo y también, al mismo tiempo, cómo comienzan a comportarse las economías frente a esta cuestión. En este sentido, y tal cual lo afirmó la señora titular de la CEPAL, América latina ha tenido un comportamiento diferente a otras regiones y Argentina no ha sido la excepción, sino que diría que además, Argentina ha tenido un plus en materia de crecimiento, de mantenimiento de su superávit fiscal y comercial, inclusive podríamos decir que el superávit comercial de la Argentina al mes de octubre es ya un 29 por ciento más importante que el superávit comercial del año pasado, que fue récord en materia de exportaciones, y de no tener más superávit en el último trimestre o en los últimos dos meses, igual estaríamos aún 15 por ciento por arriba del superávit del año pasado.
En materia de comportamiento fiscal, si bien obviamente no hemos tenido el mismo nivel de crecimiento en la recaudación, la recaudación ha crecido en términos interanuales casi un 20 por ciento, lo cual nos convierte casi en el único país de la región en el cual la recaudación no cayó en términos negativos y en materia de crecimiento de la actividad económica, llevamos al mes de octubre, un 0,3 de crecimiento positivo alejado por supuesto de las tasas chinas en las cuales crecimos a partir del año 2003, pero aún con crecimiento positivo y yo creo que vamos a finalizar el año con un crecimiento un poco más importante que ese 0,3.
En materia de desempleo, que es la cara humana de la tragedia, comparado interanualmente, el desempleo creció 1.3, teníamos 7.8 en el tercer trimestre del año pasado, batiendo récords después de décadas de desempleo de dos dígitos llegando a tener casi el 25 por ciento de nuestra población económicamente activa desocupada durante la década de los ´90 y llegando al récord de mínima de desempleo durante el último trimestre del mes de diciembre que también tiene un comportamiento estacional y que era del 7.3 pero en realidad este 0,3, si bien nos preocupa, realmente frente al comportamiento de otras economías, creemos que es una cosa que vamos a volver a repuntar en el último trimestre del año.
Igualmente hemos desarrollado políticas contra cíclicas muy fuertes, no solamente en materia de políticas económicas, sino también de políticas sociales. En los últimos días, el gobierno que me toca encabezar ha anunciado la instalación de la Asignación Básica Universal para todos los hijos menores de 18 años de sectores desocupados o de aquellos sectores que informalizados en el mercado laboral, están por abajo del salario mínimo, vital y móvil establecido por nuestro país y que, dicho sea de paso -aquí me mira muy fijamente el señor Secretario General de la CGT de mi país- es el salario mínimo, vital y móvil más importante de toda Latinoamérica.
También en materia de reservas hemos crecido en un 2.4 respecto de la misma situación que en octubre del año pasado, lo cual nos lleva a tener un fuerte back up en materia de seguridad y Argentina ha cumplido puntualmente con todos sus compromisos internacionales, siendo este año, precisamente, y el pasado uno de los más gravosos en términos de obligaciones contraídas en el exterior.
Si esta crisis mundial hubiera tomado a la Argentina durante los años ´90, el efecto hubiera sido francamente devastador. De hecho crisis regionales como fueron las del Tequila o el "Efecto Caipirinha", más tarde, causaron verdaderos estragos haciendo disparar los índices de desempleos y quiebras de nuestras empresas. Con lo cual el modelo que planteamos, fundamentalmente desde el año 2003 que fue un modelo de acumulación con matriz diversificada no solamente basada en la exportación y en el valor agregado a nuestros productos, sino también en el fuerte desarrollo de un mercado interno que se traduce además, en generación de empleo y en salarios de alto poder adquisitivo, de manera tal de que se sostenga, porque siempre hubo una contradicción en mi país entre mercado interno y posibilidades de exportación.
Parecía ser que los argentinos teníamos que morirnos de hambre para tener saldos exportables y ser rentables o viceversa, ser derrochadores en el mercado interno y clausurar las posibilidades de exportación. Creo que uno de los méritos más importantes del modelo ha sido precisamente comprender que un fuerte mercado interno, además de mejorar la calidad de vida de todos nuestros trabajadores, permitir capacitarlos más y agregar recursos, también sostiene a una economía cuando precisamente, desde el sector externo, se plantea la crisis. Y es así que, habiendo caído en volumen y en precio nuestras materias primas, hemos podido desarrollar una política inteligente que nos ha permitido mantener dos de las columnas fundamentales en estos años de crecimiento que han sido superávit comercial y superávit fiscal y nuestra cuenta corriente de capital de signo positivo, también una de las pocas de la región.
Voy a pasar a la segunda parte de la intervención del señor coordinador que fue la que realmente es mucho más movilizante y que significa la innovación, la tecnología, el desarrollo de nuevas actividades, de nuevas industrias que, atravesando transversalmente todas las cadenas de valor de todos los actores, puedan agregarle valor al Producto Bruto Interno de un país y, en este sentido, él mencionó precisamente la tecnología de la información, entre otras.
En estos años de crecimiento en nuestro país, el sector que más ha crecido precisamente en términos proporcionales, obviamente, ha sido el del desarrollo de las tecnologías del software y la informática, es el sector que más ha exportado, el que más empresas ha generado y el de más alta rentabilidad por inversión.
Podemos también mencionar en un sector de altísima tecnología, y todos ustedes lo saben, todo nuestro sector también agroexportador en virtud de la biotecnología, en virtud del altísimo grado de inversión tecnológica en materia de siembra que nos ha convertido, precisamente, en uno de los modelos a seguir en el mundo.
Habla también de la articulación entre lo público y lo privado. En el curso de esta última semana antes de venir aquí, precisamente, participé de cuatro encuentros en mi país con grupos empresarios.
Uno, precisamente, con la Cámara de Industria del Software y de Tecnologías de la Información, en el cual su titular manifestaba que una de las claves del desarrollo del sector había sido, precisamente, la articulación que habíamos logrado entre el Estado y la parte privada a través de leyes promocionales y, en este sentido, el último proyecto de ley me tocó entregarlo también esta semana, y que ha permitido un fuerte desarrollo del sector; el sector de autopartes que firmamos la ley reglamentaria también en esta semana, lo mismo en materia de la construcción, la infraestructura, como bien lo señalaba también el titular de la CAF, uno de los puntales en el crecimiento y en el desarrollo de las economías en Latinoamérica y también en el crecimiento de Argentina. La infraestructura pública, el financiamiento que también se ha obtenido en términos internacionales a través de la CAF, del Banco Interamericano de Desarrollo, del Banco Mundial y del propio financiamiento hecho con nuestro superávit, nos ha permitido también crecimiento en puntos del PBI en materia de infraestructura.
Hablaba también el señor coordinador del cambio climático y este es un desafío a todos los dirigentes mundiales por la responsabilidad que tienen en él e hizo mención al Upsala, un lugar muy caro porque tal vez usted no sepa que yo vivo en El Calafate, donde está el Upsala, y donde también está el Perito Moreno.
Es cierto que el Upsala viene disminuyendo desde el año 1920 aproximadamente; el glaciar Moreno, en cambio, está no solamente estable, sino que sigue siendo el único glaciar en avance del mundo. Es lógica la responsabilidad de todos los dirigentes en encontrar un acuerdo en Copenhague, pero también creo que es importante que en ese Copenhague se determinen los grados de responsabilidad en la contaminación ambiental que tiene una directa vinculación con los países desarrollados que, obviamente, son los que más gases han emitido y que, por lo tanto, más pasivo ambiental tienen que cubrir y todos sabemos que la gran discusión es cómo se distribuye ese pasivo, si de ese pasivo se van a hacer cargo los que lo produjeron o si también, además de haber estado sometido durante décadas a un deficitario intercambio comercial, también vamos a tenernos que hacer cargo las economías emergentes de lo que no hemos producido.
En realidad, este el meollo, este es el nudo de la discusión que seguramente va a cruzar Copenhague.
Creo que, como conclusión, también me parece muy importante desarrollar el concepto de más Estado y más mercado que planteó el señor coordinador y me parece que esta es una de las claves: entender la necesidad de ambos y también entender los roles que ambos cumplen, que son diferentes, que no son antagónicos, pero que necesariamente desde el Estado muchas veces, a través de la regulación, hay que arbitrar y representar los intereses de la mayoría. Y en este Congreso, que ha sesionado bajo las formas de la innovación tecnológica, del agregado de valor a todas las cadenas, me parece que es importante incorporarle la noción de innovación tecnológica que ambos representan más rentabilidad pero al mismo tiempo más equidad.
Y me parece que unir los conceptos de rentabilidad y equidad, son dos actitudes claves para entender en serio lo que debe ser la confluencia de Estado y mercado. Porque todo parece muy lindo cuando hablamos de cómo articulamos entre Estado y mercado, pero bueno, llega un momento en que hay intereses y hay que decidir. Y me parece que la convergencia de la rentabilidad con la equidad es una buena fórmula, es una buena ecuación para poder superar, precisamente, una etapa en la cual todo estuvo signado por la supremacía del mercado y la rentabilidad a cualquier costo, sea el costo ambiental, sea el costo social y, finalmente, como no podía ser de otra manera, sea el costo económico de las empresas con los millones de puestos de trabajo que se han destruido, con las cientos de miles de empresas que han debido cerrar o han quebrado.
Por eso creo que estos dos conceptos de rentabilidad y equidad, deben ser los que deben signar la Cumbre que tendrá lugar en la Argentina el año próximo en la ciudad de Mar del Plata.
Yo quiero decirles que esto es posible hacerlo, que es posible crecer de esta manera, con dificultades, con conflictividades, siempre hay conflictos sociales, es imposible vivir en una sociedad sin conflictos porque, precisamente, de eso se trata la política, de la intervención en el conflicto, de la administración del conflicto y de la resolución en términos de supervivencia social y económica de empresarios y de trabajadores.
Quiero decirles, finalmente, que hace unos días, para ser más precisa el día viernes, cuando todavía estaba en Roma -saben que mantuvimos una reunión con la presidenta Bachelet, de Chile, para conmemorar junto a Su Santidad, los 25 años del Acuerdo entre Argentina y Chile- se comunicó conmigo el representante de un importante conglomerado industrial de mi país, conglomerado a escala global, es una multinacional de origen argentino, pero multinacional al fin, para anunciarme, por ejemplo, que iban a continuar con las inversiones en materia de acero por más de 1.500 millones de dólares que le permitirá a la Argentina pasar de una producción de 2 millones de toneladas de acero a 4 millones de toneladas.
¿Cómo ha sido posible esto? Creo que, fundamentalmente, hay una decisión empresaria que tiene que ver con la rentabilidad, nadie invierte si piensa que va a perder, pero al mismo tiempo, y sabemos que el tema de la energía ha sido uno de los temas que se han abordado en este Congreso, ha habido también en materia energética en la Argentina desde el año 2003 a la fecha, no solamente una gran inversión, sino una inversión planificada en pos de diversificar la matriz energética de la República Argentina. Y esta inversión de la que yo hablo, es posible, por ejemplo, porque estamos realizando un nuevo cruce del Estrecho de Magallanes, desde la provincia de la señora Gobernadora de Tierra del Fuego, que también nos acompaña, y que nos va a permitir incorporar 7 millones y medio más de metros cúbicos de gas -van a ser millones con carbono, pero déjenme que continúe con el cuento- y va a permitirnos llegar hasta 21 millones de metros cúbicos por día con más obras. Ustedes saben que los hornos de fundición, para que ustedes tengan una idea, demandan estos dos hornos el mismo consumo de gas que la ciudad de Córdoba, que es una de las principales ciudades de la República Argentina.
Pero en unos días más estaremos abriendo la licitación de 1.015 megavatios de energías alternativas en las cuales se han presentado ya más de 22 empresas, 400 megas aproximadamente de energía eólica, también en materia de biodiesel y también en materia de energía solar contamos con abundantes cantidades de silicio en la provincia de San Juan que también ha comenzado a desarrollar proyectos en ese sentido.
Pero también, en este tema del cambio climático, tenemos que ser serios y sinceros, fundamentalmente, sabemos que más allá de todo el esfuerzo que estamos haciendo en materia de energías alternativas, la utilización de combustibles fósiles va a seguir durante unos años porque si no va a ser incompatible con el desarrollo de las energías alternativas y lo que necesitamos crecer para mantener el motor de la economía mundial y seguir generando puestos de trabajo, hacerlo en forma simultánea. Yo creo que también tenemos que ser sinceros y abordar el problema en su exacta dimensión.
Esto muchas veces no se dice frente a un micrófono porque no es políticamente correcto, pero bueno, por allí yo no soy políticamente correcta y me gusta decir la verdad, decirle a la gente que se van a eliminar por completo las emisiones de combustibles fósiles, todos sabemos que si al mismo tiempo tenemos que reactivar la economía mundial, con el grado de inversiones en economías alternativas en el corto y mediano plazo, todavía falta un trecho largo que cumplir.
Pero creo que lo importante es tener la convicción de que el problema existe, que hemos acelerado el problema. Usted decía recién algo y aquí tal vez algunos ambientalistas me acusen de hereje, pero usted decía que hace 10 mil años aproximadamente la Tierra se lo...y es cierto. Si algún visitan Calafate, el lugar donde yo vivo, podrán ver los cerros arañados por los glaciares en su retiro. Cuando los glaciares de retiran al fin de la época de glaciarización, arañan literalmente las montañas y se pueden ver como rayas que los cruzan. En ese momento no había emisiones, creo que el hombre andaba con un garrote y corría la piedra de la caverna y hubo un fenómeno que tuvo que ver con este fenómeno climatológico.
¿Qué quiero decir con esto? Que tengamos también conciencia de que hemos acelerado procesos que también deberíamos analizar ciertamente en el marco de, tal vez, criterios más científicos y más profundos aún que el tema de emisión de gases. Sin lugar a dudas son grandes aceleradores del problema del calentamiento global, pero me permito desde aquí decir, tal vez, no es la única causa que pueda conocer el hombre. El hombre siempre tiende a querer explicar todo y a querer saber todo, es esa suerte de omnipotencia que nos viene desde la Ilustración. Y es bueno tenerlo porque uno siempre quiere saber todo y la razón parece que primara sobre todo, pero por allí hay fenómenos que tienen que ver también con el desarrollo de ciclos evolutivos.
Finalmente, quiero decirles que el próximo año, en la República Argentina, en Mar del Plata, estamos convencidos de poder esperarlos a todos en un mundo más responsable del que fuimos hasta ahora; más responsable en todos los sentidos, más responsables en materia climática, más responsables en materia económica y financiera y, en términos generales, para definirlo en una sola palabra, más responsables en términos sociales. Porque empresarios, políticos, dirigentes económicos, dirigentes sociales tenemos la inmensa responsabilidad de hacernos cargo, más allá de las posturas que cada uno haya tenido frente a determinadas políticas, de que las tragedias y las equivocaciones o no equivocaciones, pueden calificarse de errores, pueden calificarse desde otro lado de políticas deliberadas, no son solamente fríos números de un balance o de la quiebra de una empresa, significan en la vida de millones de seres humanos la posibilidad de seguir teniendo una vida digna.
Porque tal vez un empresario que cierra una empresa pierde lo que ha sido la construcción de toda su vida; pero créanme que cuando un trabajador o cuando una trabajadora, recibe el telegrama de despido y se encuentra desvinculado de lo único que puede vivir dignamente que es de su trabajo, la crisis económica entonces alcanza una dimensión humana y el nivel de una tragedia que excede a cualquier teoría económica, ideológica, más allá del mercado o más acá del Estado. Y es responsabilidad de todos hacernos cargo de estas cosas.
Muchas gracias y los esperamos a todos y a todas el año que viene en la ciudad de Mar del Plata.
Muchas gracias. (APLAUSOS)