En la ceremonia, además de recordarse la histórica marcha de trabajadores a Buenos Aires en reclamo de la liberación de Juan Domingo Perón, el dirigente Antonio Cafiero fue distinguido como ciudadano ilustre de la provincia de Buenos Aires.
Allí, Cafiero, en referencia a su homenaje, dijo que se lo dedicaba "no a mi persona, porque soy demasiado pequeño en la historia del Peronismo, quiero que sea un homenaje a todos los luchadores del peronismo de todos los tiempos". En ese marco, destacó especialmente "a los que dieron su vida para que el movimiento obrero viviera". "En 1945 no salimos a la calle a degradar o a bajar un gobierno, salimos a la calle detrás de un sueño", manifestó, para agregar enseguida que "aquel octubre del 45 fue un sueño compartido: el peronismo, que nace y brota del corazón de la gente", dijo el ex gobernador.
Más tarde, la Presidenta recordó que "en aquel 17 de octubre Perón significaba la recuperación de los beneficios sociales", mientras que "años más tarde miles de jóvenes que se incorporaban a la política veían al regreso de Perón como la lucha de los pueblos por la liberación, por la construcción de la dignidad nacional".
Luego, sostuvo que "la gran lucha que debemos llevar a delante es volver a instalar a la política, el debate de las ideas, como eje central de todos nosotros y de quienes militan en otros partidos políticos" porque "el neoliberalismo arrasó a la política y al sistema del partidos políticos. "Solo con la política y a través de la política se pueden hacer las grandes transformaciones", expresó la Mandataria.
Por otra parte, manifestó que los argentinos "aprendimos con letra de sangre y fuego" a "comprender que la democracia es un instrumento esencial para poder brindar bienestar a nuestra sociedad". "Por eso - dijo - tenemos que lograr una reforma política, donde los partidos se democraticen en serio y sea la sociedad la que se comprometa con estas instituciones básicas de la democracia". "Y lo tenemos que hacer a partir de ideas y de lograr la participación popular en la decisión de los partidos políticos", expresó, para agregar enseguida que "esto no es una cuestión de oficialismo y oposición, es entender si la sociedad va a ser gobernada por las corporaciones y si va a ser gobernada en democracia a través de los partidos políticos".
"Y esta discusión no es de ahora, viene desde el fondo de la historia, viene desde el 25 de Mayo", aseveró la Presidenta, y concluyó: "Desde ese día se debate entre dos modelos del país, el de los que miran desde afuera y el de los que creemos que tenemos que construir un modelo de país popular y democrático".
Antonio Cafiero comenzó a militar en el peronismo justamente el 17 de octubre de 1945, que dio origen al "Día de la Lealtad Peronista". Entre 1948 y 1951 fue designado como Consejero financiero en la embajada argentina en Washington, Estados Unidos. Entre 1951 y 1952, fue Director del Departamento Socioeconómico de la Cancillería. Fue luego Ministro de Comercio Exterior de la Nación, entre 1952 y 1955.
En 1955, después del golpe que derrocara al gobierno constitucional del General Juan Domingo Perón, fue privado de su libertad durante un año, y a partir de allí hasta 1973 militó activamente en la denominada "resistencia peronista". En ese período, Cafiero visitó en su exilio a Perón en varias oportunidades hasta su regreso a la Argentina.
En 1973 fue nombrado Presidente de la Caja Nacional de Ahorro y Seguro. Fue más tarde Secretario de Comercio de la Nación (1974), Interventor Federal de la Provincia de Mendoza entre agosto de 1974 y mayo de 1975, Ministro de Economía de la Nación (1975 - 1976) y finalmente Embajador ante la Santa Sede en 1976, cargo al que debió renunciar debido al golpe militar de ese año, regresando a su país donde fue privado de su libertad por segunda oportunidad.
En 1983, con la restauración democrática argentina, lideró el Movimiento Unidad, Solidaridad y Organización (MUSO), fue precandidato presidencial.
En 1983, fundó junto a otros dirigentes del peronismo, la "Renovación Peronista". En las elecciones legislativas de 1985, encabezó la lista de Diputados Nacionales de la Provincia de Buenos Aires por el Frente Renovador Justicialista.
Fue elegido Diputado Nacional hasta 1987, año el cual sería elegido gobernador de la provincia de Buenos Aires, teniendo como compañero de fórmula a Luis María Macaya. Asimismo, en ese año fue elegido Presidente del Consejo Nacional del Partido Justicialista. En 1988 fue precandidato a Presidente de la Nación por el Partido Justicialista con la fórmula Antonio Cafiero - José Manuel De La Sota. En dichas internas su fórmula resultó derrotada por la de Carlos Menem - Eduardo Duhalde.
En 1991 fue designado Embajador en la República de Chile, cargo que desempeñó hasta 1993, año en que ejerció como Senador Nacional hasta 2001. Durante el breve gobierno de Eduardo Camaño fue designado Jefe de Gabinete. El 2 de enero de 2002 volvió a ejercer como Senador Nacional, cargo que desempeñara hasta diciembre de 2005.
Además fue varias veces embajador argentino ante Bélgica, la Comunidad Económica Europea, la Santa Sede y Chile.
Cafiero, ejerce desde 2005 la Presidencia de la Conferencia Permanente de los Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPPAL).
Acompañaron a la Presidenta en el acto el dirigente justicialista Antonio Cafiero; el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli; el vicegobernador de la provincia de Buenos Aires, Alberto Balestrini; el titular de la CGT, Hugo Moyano; integrantes del gabinete nacional, e invitados especiales.