Ya promediando la noche, muy buenas noches a todos y a todas: realmente cuando me invitaron a participar en este 50 aniversario de la industria avícola no dudé ni un solo instante en estar aquí presente. Tal vez sea esta una de las actividades más emblemáticas del modelo que se puso en marcha, en el año 2003 y déjenme explicarles el porqué.

Esta actividad está cruzada por lo que yo considero los cuatro vectores, los cuatro ejes fundamentales sobre los que pivotea este modelo, que es económico, social y político: el agregado de valor, la transformación de la materia prima y el agregado de valor, una frase que ustedes me habrán escuchado en reiteradas oportunidades, la necesidad de no ser un exportador de materia prima sin valor agregado, sino transformar esa materia prima y si hay una actividad donde se transforma esa materia prima es aquí, principal consumidor de maíz la industria avícola.

El valor de la tonelada de maíz adentro de los pollos es ocho veces el valor de la tonelada de trigo que se exporta; y el valor de esa tonelada de maíz en el huevo es cinco veces el valor. Esto podría hablar únicamente de un agregado económico pero no, junto a ese valor van los miles y miles de puestos de trabajo, que demanda la producción de ese pollo y de ese huevo. Esto sin contar, por supuesto, todo el valor agregado sobre el mismo pollo, en materia de vìscerado, de pechuguita, de muslo y todos los productos que uno ni pensaba que se podían consumir, hasta las garras, con uñas y todos que se consumen en los países asiáticos, como me tocó ver en la provincia de Entre Ríos, cuando visité una de las plantas modelos que tiene la República Argentina. No voy a decir la marca para que no haya competencia desleal con ninguna otra de las marcas que están presentes, muy importantes también y que las diviso desde aquí.

El segundo eje o vector: el apostar al mercado interno, el desarrollo que ha tenido - como bien lo señalaba el titular de la Cámara - el aumento en el consumo de proteína de pollo y de huevo, que pasó en el año 2003, de 18 kilos a 33 kilos, lo que sumado a los casi 70 kilos de carne vacuna nos convierte, sin lugar a dudas, en el pueblo que más proteína animal consume en el mundo entero. Este mercado interno también ha sido sostenido por una cuestión básica, el crecimiento del poder adquisitivo de nuestra sociedad.

Muchas veces hay discusiones acerca de pobreza  y de no pobreza y me pregunto si estamos en este nivel de consumo de proteína y de aumento de la actividad es claro que ha aumentado el poder adquisitivo de la sociedad y la calidad de vida de esta sociedad. Y precisamente esta actividad tiene aún su componente más importante en el desarrollo de ese mercado interno.

Tercer vector y que es el tema de la exportación, también con saldos exportables que hemos ido colocando y aumentando. El año pasado, 2008, fue el año de mayor faenamiento, de mayor producción y de mayor nivel de exportación.

Yo recuerdo cuando era legisladora, en los años 90, y colegas de bancada de la provincia de Entre Ríos lloraban acerca de la situación del sector por la importación y por la imposibilidad de competir. Porque también el crecimiento de la actividad se ha basado en lo que yo considero el modelo macroeconómico, que permite darle competitividad a aquellos que agregan valor a sus productos, una actividad como esta que demanda un alto consumo de electricidad, por ejemplo con tarifas absolutamente desacopladas de los precios internacionales; el sostenimiento de un tipo de cambio competitivo que torna también rentable la exportación y la inclusión social, que es la que retroalimenta precisamente el desarrollo de la actividad. Pero además nos dimos también conjuntamente en una articulación entre lo público y lo privado ese plan estratégico, del que hablaba Doménech, y en el cual cumplimos sobradamente las pautas que nos habíamos impuesto, que parecían muy ambiciosas, pero que el comportamiento, la articulación entre el sector público y privado con compensaciones también que se dan, desde la ONCCA, ayudaron a que toda la actividad adquiriera el desarrollo y la importancia que hoy tiene, con más de 7 mil granjas, con casi 100 mil puestos de trabajo, entre directos e indirectos, que genera la actividad en dos provincias tan importantes como Entre Ríos y la provincia de Buenos Aires.

Y es más también ya avanzando en la industria farmacéutica porque tenemos, en Entre Ríos, productores de huevos libres de patógenos, sobre lo que les adelanto estamos trabajando - no voy a decir el nombre del laboratorio, es un laboratorio internacional  y un importante empresario farmacéutico nacional - para ver si tenemos posibilidades de desarrollar aquí, en la República Argentina, la vacuna contra la Gripe A, estamos trabajando fuertemente y tenemos el productor de estos huevos libres de patógenos que son los imprescindible, tecnología que va a durar muchos años más, para la producción en esta materia.

El tema de financiamiento, que abordaba el señor titular de la Cámara, y que hoy tiene un fuerte componente en el Banco Nación y también esperamos que el BICE adquiera una mayor relevancia, porque la idea es transformar el BICE en una suerte de BNDES, modelo parecido al del Brasil, para precisamente darle mayor densidad al financiamiento para ser sostén de la actividad agroindustrial y en general de toda la actividad de producción en la República Argentina.

Hay también un entrerriano que hemos designado al frente, que fue funcionario de la provincia, Mauro Alem, que retornó del Banco Interamericano de Desarrollo para hacerse cargo del BICE y precisamente participar en la transformación del BICE en un instrumento más potente, más denso precisamente para lo que es una clave en toda la actividad y que es obtener financiamiento. (APLAUSOS).

La conquista de nuevos mercados, recientemente se ha viajado, la  Secretaría de Agricultura y Ganadería, a Angola y Sudáfrica en una importante misión; el otro día el señor Presidente de la Cámara mencionaba nuestra presencia en Venezuela, en la cual se cerraron negocios en distintas actividades por más de 1.100 millones de dólares, en donde la presencia de la industria avícola también es muy fuerte y la otra cuestión, la que planteaba: la necesidad de lograr una mayor apertura frente al proteccionismo europeo, vamos a decirlo con todas las letras porque en realidad en una vieja historia que es la del proteccionismo en la Unión Europea, que vamos a trabajar fuertemente también para llegar a las metas que necesitamos y conquistar en ese mercado mayores cuotas de participación.

Creo que también me parece que Oriente es, a mi criterio, el lugar clave en el desarrollo de lo que usted mencionaba, un pollo más pequeño y en lo que necesitamos en materia de inversión para conquistar ese mercado que por una cuestión numérica es el mercado del futuro y del presente, no tengan duda. En ese sentido, quiero comprometer, como Presidenta, y como lo he hecho el anterior Gobierno y como lo he hecho ahora acompañando a todas las misiones - yo no hago misiones sociales y políticas a los países - hago misiones comerciales fundamentalmente acompañado por productores de toda naturaleza porque lo que me interesa fundamentalmente es ser una embajadora de los productos argentinos, una representante de los intereses de nuestras empresas, de nuestros trabajadores también porque en definitiva cuando representamos y acompañamos a las misiones comerciales a las empresas estamos también acompañando a nuestros trabajadores. No hay empresas sin trabajadores, ni hay trabajadores sin empresarios dispuestos a seguir produciendo e invirtiendo en la Argentina y conquistando mercados en el exterior. Y tengan la certeza que va a estar todo el esfuerzo de esta Presidenta y de todo su Gobierno y de aquellos funcionarios que no cumplan los objetivos porque no han tenido la suficiente eficiencia al hacerlo me gustaría que lo charlemos juntos y podamos diseñar estrategias conjuntas para revertir esta situación, y revertir también al funcionario que no haya cumplido eficientemente su tarea. Porque me parece que esta pelea, esta tarea de conquistar nuevos mercados, debe ser vista como una tarea que se desempeña en todos los frentes, en todo el tiempo, en todas las instituciones, llámese Cancillería, Ministerio de la Producción, Secretaría de Industria, Presidencia de la Nación.

Yo quiero decirles que todos y cada uno de nosotros nos sentimos responsables de que la Argentina siga creciendo como lo ha venido haciendo. Recién charlábamos, antes de comenzar el discurso, que el año pasado que fue récord de producción, ya estamos hoy igualando esta producción en medio de la más formidable crisis mundial de la que se tenga memoria. Esto revela dos cosas: la solidez del sector, pero al solidez también de un modelo que ha podido aguantar un vendaval que en otro momento nos hubiera tumbado definitivamente.

Quiero contarles que en el último mes de julio hemos vuelto a tener superávit comercial del orden de los 1.301 millones de pesos en materia de exportaciones contra importaciones, lo cual revela un 35 por ciento contra el mes de julio del año pasado, que fue un importante mes porque fue el mes que luego del episodio de la 125 comenzaron a exportar nuevamente, con lo cual estamos un 35 por ciento más contra aquel mes de julio que había sido muy importante en materia de exportaciones; y acumulando ya un saldo favorable en la balanza comercial de 11.162 millones al 31 de julio. Téngase en cuenta que el año pasado, que fue un auténtico récord en materia de superávit comercial, habíamos llegado a 13.100 millones aproximadamente; ya al mes de julio, faltando 5 meses de lo que se entiende va a ser un repunte a nivel local, regional y ojalá mundial, estamos en 11.162 millones de superávit comercial. Esto habla de la fortaleza y también de una política inteligente desde Producción, desde Economía, para defender el trabajo nacional y la producción nacional, compromisos indelegables e irrenunciables de quien pretende ser presidente de todos los argentinos (Aplausos). Por eso vamos a seguir defendiendo con mucha fuerza una política que nos ha permitido preservar ese trabajo y esa empresa argentina en un momento de crisis como la que no se recordaba desde el año 1930.

Por eso el compromiso es redoblar el esfuerzo, redoblar la articulación entre el sector público y el sector privado que aquí funcionó, porque funcionó a partir de concebir al diálogo.., hay una cuestión del diálogo en la Argentina que parece que el diálogo fuera decir que sí a todo lo que se plantea de un lado, eso no es  eso no es diálogo. Yo creo que diálogo es precisamente lo que hemos establecido con el sector en el cual íbamos articulando lo que podíamos hacer frente, lo que no se podía hacer frente, cómo solucionábamos las encrucijadas que muchas veces se plantean en cualquier actividad. Y lo fuimos logrando porque aquí están los resultados. El diálogo siempre significa concesiones mutuas. Un hombre, que fue el hombre que fundó mi partido, decía que alguien podría considerarse como que había logrado algo si cuando iba a una negociación obtenía al menos el 50% de las cosas por las que había ido; hay algunos que consideran que negociar y dialogar es ir por el cien por ciento, y esto es imposible en esta actividad y en cualquier otra.

Por eso, es importante que advirtamos la necesidad de que el modelo funciona, macroeconómicamente, pero articulando a todos los sectores. Por ejemplo en materia de maíz, promoviendo que produzcamos más maíz, pero al mismo tiempo manejando las herramientas económicas para que no sea exportado todo, y entonces la actividad tenga un incremento en los costos, como ha tenido fundamentalmente a partir de que ha crecido el precio de los granos; que fue lo que pasó por ejemplo en otra actividad que no es la avícola, y que fue lechera, y que nos obligó a subsidiar fuertemente al sector, porque fue un sector donde cayó el precio internacional y subió el nivel de los insumos, a diferencia de lo que pasó en materia de los granos, que bajaron los insumos básicos, fundamentalmente por la modificación en el precio del petróleo, y subió el precio de los granos. Esto lo que tienen que tener en cuenta los distintos sectores, para que todo pueda funcionar en armonía, todo tiene que estar articulado, porque si comenzamos a romper el equilibrio que se formó entre lo que eran los costos, los insumos, y entonces un sector quiere preeminencia sobre otro, finalmente se termina desarmando el conjunto. Es muy complejo, es muy difícil, porque naturalmente cuando uno conduce un país siempre hay pujas sectoriales, cada sector obviamente quiere los beneficios, y es típico de la actividad sectorial, para eso están los dirigentes del sector. Pero también es necesario comprender cómo se necesita armonizar los intereses de todos los sectores para que todos podamos seguir creciendo y, fundamentalmente, hacerlo con inclusión social. En un país donde no haya inclusión social, en un país donde no tengamos en cuenta a los sectores más vulnerables y no trabajemos todos los días para que haya menos vulnerabilidad social, es imposible sostener un modelo económico y político.

Por eso digo que parte del éxito de esta actividad se ha decidido en un fuerte sostenimiento del mercado interno. Hoy somos el país con mejor salario mínimo de todo el continente, esto tiene que ver también con ese mercado interno y con esa inclusión social. Y estoy segura que si seguimos en este camino, en este sendero, con dificultades, con discusiones, a las cuales no hay que tenerles temor, no se discute únicamente en los cementerios, después se discute normalmente en todos lados, yo prefiero una sociedad donde discutamos, donde muchas veces pongamos sobre la mesa los distintos intereses, los distintos contrapesos, que en lo que en definitiva tiene que hacer quien tiene la responsabilidad de conducir un país, y tomar las decisiones que finalmente puedan beneficiar al conjunto. De eso se trata gobernar.

Quiero agradecerles y felicitar a todos y cada uno de los productores, de los industriales, de los granjeros, de los trabajadores, de todos los hombres y mujeres que han hecho posible que esta actividad haya dado el salto cualitativo se dio a partir del año 2003, y que hoy la coloca como una de las actividades del complejo agroindustrial más importantes de la Argentina. Muchas gracias, felices 50 años, y vamos por 50 más.

Muchas gracias y buenas noches. (Aplausos)