Buenas noches, gracias por estar aquí.

Estoy acompañado por el secretario de Políticas Universitarias, por representantes de CONADU, FEDUM y CTERA, tres de los sindicatos que han firmado hoy, junto con el Consejo de Rectores y el Ministerio de Educación, un acta acuerdo que define una parte de las condiciones salariales para los profesores universitarios durante este año.

El acta fija una serie de puntos y los principales son impulsar el tratamiento en la Cámara de Diputados de la Ley 24.016, que ya está sancionada por Senadores y que tiene que ver con incluir a los docentes universitarios en los beneficios de esa ley, continuar con la implementación del programa de capacitación gratuita para docentes universitarios y se crea un adicional remunerativo por el título de doctorado.

Además y, fundamentalmente, define las pautas del aumento salarial de este año fijado en el 19,5 por ciento en dos etapas: 10 por ciento inicial, a partir de abril, y 9,5 por ciento a partir de agosto acumulativo y un reajuste o una adecuación del nomenclador escalafonario de los profesores universitarios, de manera tal que se pretende alcanzar la diferencia del 1,6 entre cargos de la misma dedicación y antigüedad, es decir, entre el cargo de profesor titular y el de ayudante de primera que implican, desde el punto de vista de mejoramiento de las condiciones salariales de los docentes, un aumento significativo que, si uno lo mira en el mediano plazo de los últimos cinco años, supone un aumento casi del 400 por ciento.

Esto ratifica la voluntad política del Gobierno argentino de darle a la educación un carácter prioritario en materia de inversiones y asignar a las universidades también una prioridad en esas inversiones, de manera tal de colocarlas en condiciones que hagan de la universidad un verdadero agente del desarrollo y de la equidad social teniendo condiciones dignas de trabajo de sus profesores, condiciones edilicias y de equipamiento de laboratorios también dignas que permitan, insisto, que se brinde una educación de buena calidad en las universidades y que permitan articular esta calidad con el desarrollo productivo del país.

Sabemos todos que el desarrollo de una sociedad justa, implica crecimiento económico, distribución equitativa de la riqueza e incorporación cada vez más intensiva de progreso técnico en la producción. Para eso, el trabajo de las universidades es fundamental y creo que este acuerdo lo muestra de una manera concreta.

De manera que queremos compartir esto con ustedes y agradecerles la presencia hoy aquí.

Gracias.