La presidenta Cristina Fernández ofreció un discurso en el acto por el Día de la Lealtad organizado por la CGT en el estadio de River Plate. "Siento que este acto maravilloso y multitudinario refleja, como pocas cosas, la profunda transformación política, social y económica que ha tenido la Patria en estos años", dijo la Presidenta.
"Por un instante nomás, por un segundo, piensen si hace 10 años atrás podríamos haber reunido a esta cantidad de trabajadores. No se podía porque había un país sin trabajo, sin producción, un país donde habíamos perdido la esperanza y la ilusión", sostuvo Cristina Fernández en el inicio de su alocución.
Luego, Cristina Fernández afirmó que "a la lealtad tenemos que agregarle la solidaridad de los trabajadores", y agregó que "tenemos que seguir redoblando el esfuerzo".Y que "tenemos un país en crecimiento, que progresa, que va para adelante por los comerciantes, los empresarios, los docentes, por los jubilados, por las amas de casa".
Para la Presidenta, "cuando los trabajadores no están, cuando las organizaciones sindicales desaparecen, es porque ha caído la actividad económica de un país". "Y cuando esto sucede, más tarde o más temprano la malaria les llega a todos", sostuvo la Presidenta.
Cristina Fernández agregó a continuación que su presencia en el acto por el Día de la Lealtad es "como una compañera más", para agradecer la lealtad de los trabajadores, precisamente porque conoce lo que es "la traición", y "de las más profundas".
"Vengo acá a hablar como una compañera más, que tal vez tiene más responsabilidades que otro. Quiero agradecerles a ustedes la lealtad, y cuando les hablo de lealtad sé de qué se trata porque también he conocido traiciones, y de las más profundas", dijo la Jefa de Estado.
Y agregó que "todos los argentinos tenemos que tener la visión, la comprensión y la inteligencia de ver que los trabajadores y sus organizaciones son aliados estratégicos de las empresas para poder seguir creciendo y generando riqueza y, desde el Estado, garantizar esa redistribución del ingreso".
La Presidenta aseguró que "la lealtad siempre es a dos puntas" y por eso, además de agradecer la lealtad de los trabajadores, quiso asumir "un compromiso inquebrantable" frente a ellos.
"La lealtad es siempre a dos puntas, por eso quiero traerles mi compromiso inquebrantable frente a ustedes de seguir trabajando luchando por una patria más justa y un país más equitativo, aunque esto me cueste enfrentarme a intereses muy poderosos", dijo la Mandataria.
Cristina Fernández también hizo una mención especial "a todas las compañeras" por el Día de la Madre y les hizo un reconocimiento porque "a las mujeres todo nos cuesta el doble".
Palabras de Hugo Moyano
Por su parte, el titular de la CGT, Hugo Moyano, aseguró en su discurso que la conducción de la central obrera seguirá "luchando para que nunca más en nuestro país se apliquen políticas de hambre a nuestro pueblo".
"Somos coherentes porque a partir de 2003, cuando se empezó a recuperar nuestro país y se llevaron políticas tendientes a la recuperación de los puestos de trabajo perdidos, lo primero que hizo este gobierno fue anular la ley vergonzosa y bochornosa, la
ley Banelco de explotación de los trabajadores, y también la apertura de las paritarias", destacó el líder sindical.
Moyano aseguró luego que los trabajadores "no son obsecuentes" con este gobierno sino "consecuentes", porque "nadie puede dudar de que a partir de la discusión paritaria todos los trabajadores recuperaron la posibilidad de mejorar su poder adquisitivo".
"Hemos demostrado que somos consecuentes con los gobiernos que llevan adelante una politica que permite recuperar la dignidad de los trabajadores, no somos obsecuentes, de ninguna manera, somos consecuentes porque nadie puede dudar de que a partir de la discusión paritaria se nos dio a todos los trabajadores la oportunidad de mejorar el poder adquisitivo de los salarios", dijo.
Y agregó que "no es un acto politico ni una demostración de fuerza" porque "todos los trabajadores sabemos del poder y la fuerza que tenemos", y es necesario que "ese poder y esa fuerza deje de ser un instrumento de presión para pasar a ser un instrumento de poder".