El nuevo gasoducto se construirá en dos etapas: la primera, cuya finalización se estima para el invierno de 2024, conectará el parque industrial Tratayen, emplazado en el corazón de Vaca Muerta, con la ciudad bonaerense de Salliqueló, cubriendo una distancia de 558 kilómetros y expandiendo el suministro de gas en 22 millones de m3/día a usuarios y usinas de AMBA, además de reemplazar importaciones de combustibles.
Este tramo tendrá un costo aproximado de 1.500 millones de dólares que será financiado con fondos del Tesoro Nacional y del Aporte Solidario y Extraordinario para ayudar a morigerar los efectos de la pandemia (Ley 27.605), creado en diciembre de 2020 con el fin de aliviar los efectos de la pandemia del COVID-19 en el empleo y la producción.
Para el invierno de 2023, antes de la ejecución de las obras de compresión previstas para este segmento, el gasoducto ya aportará 11.000.000 m3/día de nueva capacidad.
Mediante una extensión de 467 kilómetros, la segunda etapa permitirá llegar con gas natural a San Jerónimo (sur de la provincia de Santa Fe), sumando otros 17 millones de m3/día y abriendo la posibilidad de abastecer a grandes ejes urbanos e industrias del centro y norte del país, como así también la oportunidad de exportar los excedentes a Brasil y Chile.